La Tierra está en línea – Capítulo 121: El jefe de la torre negra, Tang Mo~

Se colocaron catorce elementos en el centro del reloj de la verdad. Un minuto después, Tang Mo eliminó doce y renunció a otros dos.

—Los artículos quince y dieciseis: los jugadores Tang Mo y el conejo negro —dijo el exbibliotecario luego de una breve pausa—. La verdad individual entre estos dos ítems es que son humanos. Seguí leyendo “La Tierra está en línea – Capítulo 121: El jefe de la torre negra, Tang Mo~”

La Tierra está en línea – Capítulo 120: ¿Juego injusto?

Se oyó un crujido y la manecilla de las horas se deslizó cuatro veces, en el sentido de las agujas del reloj, hasta la casilla veinticuatro. Tang Mo se dirigió a su lugar. En el otro extremo, el minutero se movió hacia atrás a la casilla sesenta, pero el conejo permaneció en su sitio.

Se oyó la voz del reloj de la verdad:

Jugador 0, entre en la casilla correcta. Seguí leyendo “La Tierra está en línea – Capítulo 120: ¿Juego injusto?”

La Tierra está en línea – Capítulo 119: Hay dos tipos de intenciones asesinas en el mundo. La de Fu Wenduo y la otra no es de Fu Wenduo

La suelo tembló tras el golpe de la cabeza del conejo negro contra la pared.

Tang Mo se sentó y lo observó al tiempo que analizaba los cuatro objetos  en el centro del reloj.

El bollo era del tamaño de la cabeza de una persona, se veía suave y dulce, desprendía un tenue calor. A su lado estaban un líquido escarlata, una galleta a medio comer y una bolsita rosa. Seguí leyendo “La Tierra está en línea – Capítulo 119: Hay dos tipos de intenciones asesinas en el mundo. La de Fu Wenduo y la otra no es de Fu Wenduo”

La Tierra está en línea – Capítulo 118: Un conejo violentamente enfadado

Habían pasado veinte minutos desde que comenzó el juego del reloj. El conejo negro acortó la distancia que lo separaba de Tang Mo para luego volver al punto inicial.

El reloj de la verdad era un círculo dividido en sesenta partes, conectadas en un bucle cerrado. Ir en el sentido de las agujas del reloj significaba retroceder. Seguí leyendo “La Tierra está en línea – Capítulo 118: Un conejo violentamente enfadado”

La Tierra está en línea – Capítulo 117: Retroceder y avanzar

Tang Mo bajó la cabeza y analizó sus respuestas. ¡Tenía que haber algo mal!

Confinado en un cuadrado de un metro, se recostó contra la pared invisible.

El televisor y la lámpara, la mesa y el arco largo. Entre estos dos pares de objetos, una de las verdades que encontró estaba equivocada.

Empezó a las 6 en punto y era el jugador 6. El conejo negro estaba en el 12 y era el jugador 0. Seguí leyendo “La Tierra está en línea – Capítulo 117: Retroceder y avanzar”

La Tierra está en línea – Capítulo 116: ¿Qué verdad podía existir entre un plato de sopa y un búho?

Hace un minuto, Tang Mo creyó que el conejo negro era un jefe de la torre negra porque conocía cómo iniciar el juego al mencionar: “es un jugador humano”.

Pensó que su respuesta era correcta, pero no. Necesitaba dar una verdad para entrar en el juego.

Tang Mo retorció con brusquedad la ropa e inspeccionó de arriba a abajo a su oponente, en el otro extremo del reloj. Soltó su ropa, sonrió y se sentó en el suelo. Seguí leyendo “La Tierra está en línea – Capítulo 116: ¿Qué verdad podía existir entre un plato de sopa y un búho?”

La Tierra está en línea – Capítulo 115: El juego del reloj de la verdad del señor conejo

Tang Mo se tensó en cuanto vio a la muñeca matrioska rusa de dos metros de altura. Tenía una cubierta de madera lisa de color blanco con un gracioso conejo negro pintado. Pequeños ojos de un siniestro rojo brillante y de su enorme boca, sobresalían afilados dientes triangulares de tiburón que contenían un rastro de carne y sangre.

—Globos oculares humanos con azúcar son lo mejor para comer… —murmuró el conejo negro de la cubierta, mientras babeaba como si muriera de hambre. Seguí leyendo “La Tierra está en línea – Capítulo 115: El juego del reloj de la verdad del señor conejo”

La Tierra está en línea – Capítulo 114: ¿Alicia en el País de las Maravillas?

Tang Mo se aferró con fuerza al cuerpo de la gran lombriz para evitar caer. Mientras excavaban, la tierra que arrojaban humedeció su cabello, cara y ropa.

Detrás de él, podía oír el ruido de los bichos al cavar, pero no eran tan rápidos como las lombrices. Entonces, decenas de escupitajos les fueron arrojados. Cubrió su cuerpo en la espalda de la lombriz de tierra, minimizando el área de su exposición. Seguí leyendo “La Tierra está en línea – Capítulo 114: ¿Alicia en el País de las Maravillas?”

La Tierra está en línea – Capítulo 113: Eh, es tan lindo~

Había llegado la primavera, todo se estaba recuperando y la Pradera de los Espíritus daba paso a una estación de crecimiento. El sol brillaba formando en la hierba verde, una capa dorada. Allí todo era pacífico y hermoso.

En la ladera, un pequeño canguro que comía hierba, levantó la cabeza y miró a lo lejos: un fuego monstruoso surgió, cubriendo la mitad del cielo. El animal abrió los ojos de horror y echó a correr. Seguí leyendo “La Tierra está en línea – Capítulo 113: Eh, es tan lindo~”

La Tierra está en línea – Capítulo 112: ¡Corre! ¡Mosaico está incendiando la pradera de nuevo! ¡Ayuda!

Tang Mo estuvo en Beijing hacía dos años, al graduarse de la universidad, cuando junto con el hermano Zi, visitaron al viejo Wang. De sus dos mejores amigos, uno se fue a Shanghai y el otro a Beijing.

El todoterreno negro circulaba lentamente por el camino desierto.

Tang Mo observó las vallas publicitarias y las tiendas a ambos lados de la carretera. Se devanaba los sesos para recordar todo lo que había visto dos años atrás. Su estado físico y memoria habían mejorado, pero hacía demasiado tiempo desde que estuvo en Beijing y no se había concentrado en aquel entonces. Seguí leyendo “La Tierra está en línea – Capítulo 112: ¡Corre! ¡Mosaico está incendiando la pradera de nuevo! ¡Ayuda!”

La Tierra está en línea – Capítulo 111: ¿Tienes novio?

Hace un año, tras la aparición de decenas de miles de torres negras en todo el planeta. Los países y organizaciones crearon grupos de investigación para estudiar los misteriosos objetos, en tanto, la población entró en pánico.

Durante medio año, las torres negras permanecieron inmóviles. Flotantes sobre la Tierra.

Los investigadores no lograron acercarse ni extraer nada de ellas. No encontraron pruebas para determinar su procedencia. Además, ni por medios ópticos ni sónicos lograron hacer contacto, eran solo como una proyección holográfica; podían verse, pero no tocarse. Seguí leyendo “La Tierra está en línea – Capítulo 111: ¿Tienes novio?”

La Tierra está en línea – Capítulo 110: El último jugador con esta habilidad

Tang Mo y Fu Wensheng se dirigieron a la gasolinera, Fu Wenduo se quedó atrás y el ex bibliotecario giró la cabeza hacia él, preguntándose por qué no los seguía. El polizón estaba quieto, en el pequeño almacén.

Su mirada bajó a sus pantalones y de inmediato Tang Mo tiró del niño hacia la gasolinera. El mayor debía resolver un problema personal. Seguí leyendo “La Tierra está en línea – Capítulo 110: El último jugador con esta habilidad”

La Tierra está en línea – Capítulo 109: Recombinación genética

En el oscuro y estrecho almacén, Fu Wenduo miró, con los ojos muy abiertos, al joven que tenía delante. La mano que le tocaba la mejilla derecha estaba fría. Una ráfaga de viento helado entró por la rendija de la puerta, agitando el pelo de Tang Mo.

El ex bibliotecario nunca había visto esa expresión en el rostro de su compañero. No solo se veía conmocionado, había algo más que no podía explicar. Lo hizo sentirse cohibido. Seguí leyendo “La Tierra está en línea – Capítulo 109: Recombinación genética”

La Tierra está en línea – Capítulo 108: Te tocaré la cara~

Terminaron de registrar los cadáveres. Aparte de los pocos accesorios y armas, solo encontraron la extraña nota con la palabra «pan, Tang Mo la guardó en su mochila.

Fu Wenduo encontró un bidón de gasolina en un rincón y repostó el coche. Seguí leyendo “La Tierra está en línea – Capítulo 108: Te tocaré la cara~”

La Tierra está en línea – Capítulo 107: Torre negra: ¡Tú eres el que está en el agujero!

Los cuatro jugadores no eran oponentes para Tang Mo y Fu Wenduo, de lo contrario, no habrían seguido invirtiendo el tiempo para matarlos.

Solo necesitaban proteger al compañero que podía usar la habilidad y los otros tres podrían sobrevivir. El hombre de mediana edad preparó una jugada: él y el hombre del cuchillo eran los más poderosos y atacarían en lugar de los otros dos que tenían un físico más débil. Seguí leyendo “La Tierra está en línea – Capítulo 107: Torre negra: ¡Tú eres el que está en el agujero!”

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