Al borde de lo impresionante – Capítulo 69: La vergüenza de un padre

Traducido por AlbaAVD

Editado por Sakuya

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Claire suspiró en silencio y sin abrir los ojos susurró con un toque de cansancio.

—Me arrepiento un poco de venir a verlo.

Entonces se calló, sin decir nada más.

¿Arrepentida? ¿Del erudito? ¿De ver a Camille? Jean estaba perplejo.

Y, a su vez, Claire se sintió algo depresiva. ¿Conocer todo realmente podría llegar a llamarlo suerte?

¿Por qué sentía que una red invisible se acercaba apretándolos lentamente?

—Claire, no estés tan inquieta. La situación definitivamente se resolverá. No lo olvides, el duque Gordan es capaz de mantener el clan Hill, él es naturalmente muy capaz. Tampoco se puede jugar con tu padre y tus hermanos mayores. —Walter consoló a Claire.

¿Padre? ¿Hermanos mayores? Claire pensó confundida, sintiendo que estas dos frases no le eran familiares. Ahora que Walter lo mencionaba, Claire recordó que, de hecho, ella realmente tenía un padre y dos hermanos mayores a quienes parecía no gustarles. Y, hasta ahora, no los había visto, excepto una vez en la competencia de los dos países, cuando vio a su segundo hermano, el hombre que se había convertido en el capitán del Equipo de Grifos Real a una edad tan joven.

Al día siguiente, Claire y Lashia fueron a clases juntas. Claire les dijo a las criadas que cuidaran bien de Summer y Ben, luego les advirtió repetidamente a los dos que no se metieran en problemas. Solo entonces, se fue.

Pero justo después de que Claire acabara de tener una mañana tranquila en la escuela, al mediodía, alguien llegó nervioso y le informó a Claire que había un contratiempo en el castillo del Duque, y quería que regresara rápidamente. Si no regresaba, el hombre vestido de negro que vino con ella, estaba a punto de destruir la mansión Hill.

— ¿Qué demonios está pasando? —Claire se sentó en el carruaje, con un leve rastro de ira en su voz. Antes de irse, había advertido repetidamente a ese dragón sin educación. ¿Quizás ese idiota lo había olvidado todo? No mucho después de que ella se fuera, él había hecho tal alboroto que estaba a punto de salirse de control.

—El… El Marqués regresó. —El criado respondió con cautela.

— ¿El Marqués? —Claire estaba confundida.

—Su padre, señorita. —El sirviente también estaba confundido cuando respondió.

—Oh. ¿Qué tiene que ver eso con que Ben haga un alboroto? —Claire no entendió. Si regresó, entonces solo regresó. Tenía la impresión de que al hombre no le caía bien Claire, tanto que podía decirse que la detestaba.

—Porque… porque el marqués dijo algunas palabras poco halagadoras sobre la señorita, así que los invitados que trajiste no les agrado lo que dijo. —dijo el criado, con extrema cautela.

—Oh… ¿Y qué dijo? —Claire levantó una ceja y rio fríamente. ¿Algunas palabras poco halagadoras? ¿Quizás no era tan simple como eso?

—Sé más minucioso sobre el asunto —dijo Jean fríamente a su lado.

—Sí, sí. —El sirviente tragó saliva y apresuradamente respondió. —El marqués regresó y su gracia el duque no estaba, así que sir Emery lo condujo. Le dijo al marqués que el señor Ben era amigo de la señorita. Entonces el marqués dijo, el dijo…

El criado no se atrevió a terminar lo que estaba diciendo.

—Dijo… que la idiota perseguidora de hombres ¿en realidad tiene amigos? —Una sonrisa fría apareció en su rostro cuando Claire completo por él.

El criado guardó silencio, su rostro palideció, revelando que su suposición era cierta.

—Y, entonces, ¿Ben estaba de mal humor? —Preguntó Claire.

—Señorita, el señor Ben todavía no había estallado cuando la señorita Summer respondió por primera vez. Entonces, entonces… —La voz del sirviente bajó. —Entonces las palabras del marqués comenzaron a ser poco halagadoras, y luego se desarrollaron sin control.

Claire cerró lentamente los ojos, sin decir una palabra.

— ¡Cochero, más rápido! —Jean le indicó al cochero que acelerara. Jean miró a la silenciosa Claire. No sabía por qué, pero un rastro de un sentimiento insoportable y desgarrador apareció en su corazón. La persona que había insultado a Claire era su familia y la persona que la defendió era una extraña.

Actualmente, una tormenta ya había comenzado en la mansión Hill.

— ¡Pide disculpas! Devuelve tus palabras. —Summer le gritó a Roger Hill, el padre de Claire, con toda la cara roja y sus manos en la cadera.

—Ella es mi propia hija, ¿qué le da a los extraños el derecho a hablar de ella? —Le respondió el marqués Roger con desprecio, pero sintió una angustia indescriptible creciendo dentro de él. ¿Desde cuándo esa hija inútil tenía amigos que la protegerían así? ¿Ella realmente podía tener amigos? Todos la evitaban. Él había escuchado recientemente que ella hizo algunas cosas, pero tal vez no fue por sus propias habilidades y, en su lugar, su Padre, el duque, movió algunas cuerdas detrás de escena.

— ¡Qué Claire tenga un padre así es una tragedia! Estaría bien si simplemente no la entendieras, pero en realidad, humillaste a tu propia hija. —Summer estaba tan enojada que estaba a punto de patear algo, cualquier cosa. Durante el ataque del dragón, Claire no los había abandonado y huyó sola, sino que los protegió ella misma. Si fuera otra persona deshonrando a Claire, ella no se molestaría mucho, ¡pero la persona que había deshonrado a Claire era en realidad su propio padre!

—Entiendo a mi hija más que nadie ¿desde cuándo ustedes tienen derecho a hablar? —Dijo el marqués Roger con impaciencia mientras miraba a la furiosa chica. Pero no se atrevió a tener una actitud más excesiva. Justo en ese momento, el amenazante Qi que el hombre vestido de negro emitía de todo su cuerpo, junto con las constantes y significativas miradas de Emery, le hicieron saber al Marqués Roger que el hombre de negro definitivamente no era alguien normal.

— ¡Eres un tipo vil, qué calificaciones tienes para deshonrar a Claire! —Summer todavía era completamente terca. —Debes retirar las palabras que dijiste en ese momento, debes disculparte.

— ¡Imprudente! —El marqués Roger finalmente se enojó. Era un marqués grandioso. ¡Desde cuándo fue el turno de esa niña de gritarle así, y también en su propia casa!

—Por lo que veo, es porque son amigos de Claire que ustedes discuten mucho, pero no pueden ser demasiados descorteses. Estas personas sin educación que están con Claire, ¿no son pájaros de mismas plumas? —El marqués Roger finalmente no pudo resistir su ira, a pesar de las miradas constantes y significativas que Emery le dirigió.

— ¡Tú, bastardo! ¿Quién crees que eres? ¿Eres realmente educado? Seguías repitiendo una y otra vez que tu hija es una cazadora idiota y qué bien le estaba serlo. —Summer también se enfureció, reprendió ruidosamente y con enojo al marqués Roger.

Ahora la cara del marqués Roger se volvió verde. Claire siempre había sido una espina en su corazón. Fue porque escuchó que ella tenía algunos pequeños logros que volvió para confirmarlos, pero nunca pensó que sería regañado y se opondría a él de esta manera.

— ¡Tú, en realidad te atreves a regañarme! —El marqués Roger también estaba furioso. Como un marqués majestuoso, en realidad fue deshonrado por un pequeño mocoso ¡e incluso en el castillo de su familia!

— ¿Y qué si te maldigo? Eres un bastardo. Nunca he conocido a un padre tan bastardo como tú. Algunas personas nacen sin un padre y no tienen el cuidado de un padre. ¡Claire tiene un padre, pero eso es aún peor para ella! —Parecía que algo había tocado el punto débil de Summer, con los ojos muy abiertos y llorosos.

— ¡Tú! —El marqués Roger estaba tan enojado que todo su cuerpo se sacudió. Señaló a Summer. —Llévensela lejos.

— ¡Sólo atrévete!

— ¡Sólo atrévete!

Sonaron dos voces al mismo tiempo.

Uno era Ben y la otro de Claire, quien acababa de llegar al salón.

El marqués Roger se volvió y vio a la fría Claire parada en la puerta. Aunque ella estaba parada ahí tranquilamente, emitió una indescriptible aura que hizo que la gente detrás del marqués Roger no se atreviera a tocar a Summer.

—Claire. —Una vez que Summer escuchó a Claire, ella corrió y agarró su mano. —Regresaste.

—Sí. —Claire miró a Summer con un rastro de una sonrisa apareciendo en su rostro. En voz baja, dijo —Escuché todo lo que dijiste. Gracias.

—Todo lo que dije era la verdad. —Simplemente pensando en la discusión, Summer se enojó y dijo — ¡En realidad tienes ese tipo de padre! Demasiado cruel.

— ¡Claire! ¿Qué tipo de amigos hiciste? ¡Tan incultos! —El Marqués le gritó enojado en el momento en que la vio. En sus vagos recuerdos sobre ella, cada vez que la regañaba enojado, Claire se asustaba por completo, y luego Katherine salía y protegía a esa niña inútil.

Pero la respuesta de Claire estaba completamente fuera de sus expectativas.

—No necesito que me preguntes qué tipo de amigos hago. Además, nunca has preguntado sobre mi vida. ¡No lo has hecho antes, y no necesitas hacerlo ahora, y no tienes permitido hacerlo en el futuro aún más! —Claire dijo fríamente, su voz resonando con poder. —Como un estimado Marqués, ¿no es una pelea, como esta, con una niña que ni siquiera tiene quince años, demasiado vergonzosa y humillante para el apellido de la familia Hill?

La expresión de Emery cambió ligeramente. Las palabras de Claire en este momento sólo exacerbarían el conflicto. Pensando en esto, le dio una mirada significativa a Claire, pero ella no le prestó atención. Naturalmente, ella tenía algo más planeado.

El marqués Roger estaba completamente conmocionado. ¿Esta era la Claire que la gente odiaba? ¿La Claire que actuaría como una rata que se encuentra con un gato cada vez que lo ve? ¿Estaba imaginando cosas? ¿Por qué sentía que ella tenía este tipo de audacia y agresividad?

— ¿Estás hablando conmigo? ¿Estás hablando con tu padre? —Preguntó el marqués Roger con frialdad, su expresión seria. Como su padre, no se permitía ser desafiado. No importa cuán capaz fuera su hijo, ¡todavía no estaba permitido!

— ¿Cuántos padres tengo? Si no te estoy hablando a ti, ¿entonces estoy hablando con otro padre? —Claire respondió cínicamente. Dentro de sus recuerdos, no parecía tener muchas impresiones de él, además de estarle gritando.

Las expresiones de todos cambiaron. ¡La señorita realmente se atrevió a ir contra el marqués así!

— ¡¡Tú!! ¡Eres una insolente! —La cara del marqués Roger se oscureció. Claire realmente se atrevió a decir palabras tan vergonzosas y poco filiales, ¡en realidad se atrevió a ir en contra de él de forma tan grosera!

— ¿Quién fue el primero que no me trató como a una hija y que ahora actúa como si fuera un padre? ¿No crees que es bastante divertido? —Claire miró al marqués Roger, burlándose burlonamente. —Ese día cuando me caí del caballo y casi me muero ¿me viste al menos una vez antes de salir por la puerta principal? Si no hubiera despertado en ese momento, ¿no me habrías visto sino hasta ahora? Para ti, no importaba si eso sucedía o no, porque hace mucho que me ignoraste como tu hija. ¿Qué estás haciendo? ¿Fingiendo ser mi padre ahora?