Al borde de lo impresionante – Capítulo 85

Traducido por Melin Ithil

Editado por Sakuya


Durante los siguientes días, el grupo vivió de forma extravagante. Si querían algo de comer, les traerían comida, si querían algo de ropa en particular, simplemente la pedían. 

Summer y Walter estaban embriagados de alegría. Solo Qiao Chuxin estaba ansiosa, le pagaban cien monedas de oro al año por trabajar, pero todavía no había hecho nada más que vivir lujosamente. No parecía correcto.

En ese día soleado, Claire y Jean habían estado entrenando en el campo de entrenamiento del patio. Al verlos, Ben también sintió la necesidad de luchar. Summer y Qiao Chuxin estaban acostadas en mecedoras, relajándose mientras los veían entrenar, Walter se había quedado adentro, cultivando en privado.

—Yo también quiero participar. —Ben estaba ansioso por intentarlo.

—¿Pelear contigo? No quiero perder un brazo o una pierna. —Claire se negó con un resoplido frío. ¿Quién no sabía que los dragones eran seres con una fuerza aterradora? Con un golpe de su garra, podrían aplastar a alguien, sería completamente injusto.

—Controlaré mi fuerza, tendré mucho cuidado. Si entrenas conmigo, definitivamente mejorarás rápidamente. Después de todo, somos los mejores en fuerza y también en controlarla. Vamos, vamos… Tendré mucho cuidado. —Ben trató de persuadir con paciencia. Estaba ansioso por intentarlo.

—Entonces, sólo puedes usar una mano, átate la otra. —Tras pensarlo había tenido una idea.

—Bien, bien, bien. —Ben asintió apresuradamente, frotándose las palmas de las manos con expectación, estaba ansioso por empezar.

Mientras tanto, la princesa divina y el príncipe divino, Liuxue Qing y Leng Lingyun, llegaron juntos de visita al mismo tiempo.

—Príncipe divino, princesa divina, estamos honrados con su presencia. —El duque Gordan no estaba ahí, así que, naturalmente, la persona que los saludó fue el marqués Roger.

—Disculpe la intromisión, espero no sea una molestia. —Liuxue Qing sonrió cálidamente. —Vinimos a buscar a la señorita Claire.

—¿A Claire? —El marqués Roger se quedó helado. ¿Estas dos personas de renombre habían venido especialmente a buscar a Claire? Tuvo una extraña sensación al respecto, así que sintió la necesidad de cuestionar el porqué—. ¿Es acaso que el asunto con el clan Roman no se ha resuelto correctamente? ¿Claire escondió información? 

—No es lo que piensa, milord. Ese asunto ya se ha abordado debidamente. Claire fue la víctima. —Leng Lingyun interrumpió al marqués Roger con indiferencia. El propio Leng Lingyun no sabía por qué, pero al ver al hombre frente a él, tener prejuicios contra Claire, lo hizo sentirse incómodo por dentro.

Liuxiu Qing permaneció tan sereno como antes, sonriendo con suavidad y elegancia, así que nadie notó el repentino destello de oscuridad en sus ojos.

—Entonces llamaré a Claire para que venga a saludar. —dijo rápidamente el marqués, tratando de calmarse.

—No es necesario, ¿habrá alguien que pueda llevarnos con ella? —Leng Lingyun se negó. 

—Oh, le llevaré ahí yo mismo. —El marqués Roger se levantó con ganas de decir algo, pero, aun así llevó a los dos al campo de entrenamiento en el patio.

Justo cuando entraron al patio, sin ninguna advertencia, vieron el cuerpo de Claire volar por el cielo como una cometa y chocar contra la barrera del campo de entrenamiento. Claire escupió sangre, luego se deslizó lentamente fuera de la barrera y se desmayó.

El fuerte estallido resonó en la mente de todos.

—¡Claire!

—¡Claire!

—¡Claire!

Varias voces sonaron a la vez.

Liuxue Qing sintió que una figura pasaba rápidamente por su campo visual, era la figura de Leng Lingyun, que se acercaba corriendo.

La barrera se abrió instantáneamente y todos corrieron al mismo tiempo para auxiliarla. Jean fue el más cercano y el primero en llegar. Para cuando todos se apresuraron hacia adelante, Jean ya la sostenía con fuerza. 

Ben se quedó paralizado, de pie desde lejos mientras extendía su mano mirándola intensamente. Había sido esa mano la que inconscientemente la golpeó tan fuerte que salió volando. Los ataques de la joven fueron demasiado astutos y feroces, tanto que, en respuesta, no pudo controlar su fuerza. ¡Joder, estaba acabado! Ben movió la boca y luego también se apresuró a acercarse.

—Claire, ¿estás bien? —Summer y Qiao Chuxin estaban claramente preocupadas. Sin embargo, ella no respondió sin importar cómo la llamaron.

Jean la levantó para llevarla adentro, pero Leng Lingyun le detuvo. 

—Déjame curarla.

Solo entonces todos volvieron a sus sentidos y vieron que el príncipe y la princesa divinos habían llegado al patio sin que ellos lo supieran. Roger, que estaba detrás de ellos, tenía una expresión confundida.

—Por favor alteza, rápido, ayúdela. —Jean bajó con cuidado a la inconsciente Claire. 

El príncipe divino era un sanador excepcional, todo el mundo en la capital lo sabía. Así que pronto la calma regresó a sus ojos. Fue un milagro que el príncipe divino estuviera ahí. Traducción de reinodekovel.com

Sin decir una palabra, Leng Lingyun agitó su mano, lanzando desesperadamente magia curativa. Una luz blanca envolvió instantáneamente el cuerpo de la joven.

Nadie notó que los labios de Liuxue Qing se apretaban cada vez más, sus ojos miraban intensamente a la inconsciente chica.

Gradualmente, la luz blanca alrededor de su cuerpo se disipó y todos vieron su rostro recuperándose, dejaron escapar un suspiro de alivio. Su rostro originalmente pálido, ahora se estaba volviendo de un tono rosado nuevamente.  

—Sus órganos internos están dañados. Todavía necesita descansar después de que la haya sanado. —Leng Lingyun instruyó después de curarla—. No puede hacer ningún movimiento extremo y necesita descansar bien.

Jean, quien todavía estaba frunciendo el ceño después de que el color de Claire volviera, se puso de pie y se inclinó hacia Leng Lingyun. —Muchas gracias, alteza.

—No fue nada en realidad. —Agitó su mano suavemente, indicando que no necesitaba ser cortés.

—Muchas gracias, alteza, por extendernos una mano. —Roger agregó en este momento. Traducción de reinodekovel.com

—No fue nada. —Respondió sin emoción—. Envíe a Claire a su habitación para que descanse.

En este momento, ella abrió lentamente los ojos y vio el grupo de caras preocupadas.

Summer y Qiao Chuxin gritaron felices en cuanto vieron a Claire despierta.

—¡Claire, has despertado! ¡Eso es genial!

—Yo… —Frunció el ceño ligeramente. Su cuerpo todavía estaba un poco fuera de lugar, solo podía recordar el poderoso y loco ataque de Ben que la había lanzado al aire.

Agachado a su lado, Leng Lingyun preguntó 

—¿Sientes algo mal en alguna parte?

—Su alteza, ¿fue usted quien me curó? —Acarició suavemente su columna vertebral. Bien, no se rompió. La colisión en ese momento fue realmente intensa. 

—Sí. Deberías entrar y descansar. —Extendió su mano, queriendo ayudarla a incorporarse.

Pero Jean rápidamente se acercó para cargarla, para después mirar a Leng Lingyun 

—Muchas gracias por extender una mano de ayuda, alteza, pero proteger a la señorita es mi responsabilidad y ya le he fallado.

Ahora Claire vio que detrás de Leng Lingyun estaba Liuxue Qing. 

—Altezas, ¿vinieron aquí a buscarme? —Preguntó débilmente.

Justo cuando Liuxue Qing estaba a punto de decir algo, Leng Lingyun habló primero.

—Sí. —Leng Lingyun asintió—. Pero, viendo la situación ahora, es mejor esperar a que te mejores primero.

—Muchas gracias por curarme, alteza. —Dio las gracias de nuevo, con una suave sonrisa en sus labios.

—No hay necesidad de ser tan cortés, deberías entrar ahora. —Leng Lingyun miró los brillantes rayos del sol, lo que indicaba que no era sensato que, estando gravemente herida, se quedara ahí.

El grupo escoltó a Jean y Claire al interior mientras que Ben se quedó ahí, congelado, sin atreverse a unirse, temeroso. Roger tuvo una expresión compleja todo el tiempo y también se quedó, arraigado en su lugar.

Liuxue Qing observó a Lingyun Leng desde atrás y todo tipo de sentimientos brotaban de su corazón, pero justo cuando iba a alcanzarlo, vio al incómodo Ben por el rabillo del ojo. Ropa negra, cabello negro, ojos negros, aspecto de otro mundo, tan llamativo. Frunció levemente el ceño y de repente, sintió algo extraño. ¡Ella era completamente incapaz de ver a través de la fuerza de este hombre vestido de negro! Además, ¿el hombre vestido de negro parecía tener un aura inhumana? Su sexto sentido hizo que comenzara a sospechar. La pequeña mascota de Claire era el animal que había aparecido en la espalda del dragón negro ese día, y ahora no podía ver a través de la fuerza de este hombre y tenía un aura inhumana. ¿Podría ser? ¡¿Podría ser que este hombre fuera ese dragón negro?!

Reprimió la emoción en su corazón y no siguió a todos al interior. En cambio, se apresuró a despedirse del marqués Roger y luego regresó directamente al templo. Necesitaba contarle este asunto al Papa. Solo si el Papa veía personalmente al hombre vestido de negro podría decirle la verdadera identidad del hombre. ¡Sólo el Papa tenía tal poder! Cuando abandonó apresuradamente la mansión Hill, nadie notó nada inusual.

Claire estaba rodeada por un grupo de personas, todas mirando preocupadas a la débil Claire en la cama. Ben se quedó fuera de la puerta, con la cabeza gacha, sin atreverse a entrar. De vez en cuando, recibía algunas miradas asesinas desde la cabecera.

—Muy bien, estoy bien ahora. No hay necesidad de culparlo. —Claire se apoyó en el poste de la cama. Naturalmente, había visto a todos mirar a Ben de vez en cuando.

—Él… —Justo cuando Summer estaba a punto de decir algo enojada, vio a Leng Lingyun e inmediatamente habló enojada—. Ya te había dicho que es demasiado violento, ahora mira, ha habido un accidente. Simplemente no puede controlar su fuerza. 

—¡Humph! Estás herida así. —Qiao Chuxin se volvió enojada para mirar hacia la puerta en dirección a Ben.

Este solo inclinó la cabeza, sin decir una palabra, permitiendo sus ataques.

Ahora Leng Lingyun notó a la persona con un rostro ceniciento en la puerta. En el momento en que lo vio, se sorprendió. Este hombre emitió un aura peligrosa de todo su cuerpo, terriblemente fuerte. ¡Parecía no ser humano! ¿Fue por él que Claire estaba tan herida?

—Ya estoy mucho mejor. Por suerte, su alteza apareció en el momento adecuado. —Dijo suavemente, sonriendo.

—¿Y si el príncipe divino no hubiera aparecido a tiempo? —Summer replicó enojada.

—Entonces habría estado inconsciente un poco más. —Sabía que era solo porque obligó a Ben a perder el control que él no pudo controlar su fuerza.

—Humph. —Summer resopló de mal humor.

—A todo esto, alteza, ¿a qué vino a buscarme? —Se volvió a mirar a Leng Lingyun.

—Deberíamos hablar otro día. Estás tan débil hoy, hablaremos una vez que te hayas recuperado. —Respondió en voz baja.

—Está bien, debes saber cuán poderosa es tu magia curativa, no me siento mal. —Claire sonrió.

Él vaciló, pero dijo su propósito para venir. 

—Vine a preguntarte sobre esa mañana.

Claire lo comprendió de repente y se volvió hacia todos los demás

—Deberían irse ahora, voy a hablar con su alteza en privado por un momento.

Tenían expresiones preocupadas y renuentes, pero se fueron bajo la mirada resuelta de Claire. Una vez que salieron por la puerta, vieron que el marqués Roger estaba a punto de entrar.

—Mi señor, la señorita tiene algunos asuntos que hablar con el príncipe divino en privado. —Jean impidió que entrara el marqués Roger.

El marqués Roger miró a Claire, que estaba apoyada en el poste de la cama y a Leng Lingyun sentado a un lado. Sus labios se movieron, queriendo decir algo, pero al final, no dijo una palabra, se volvió y se fue.

2 respuestas a “Al borde de lo impresionante – Capítulo 85”

  1. Siento que si el príncipe divino supiera lo del robo al templo lo mantendría en secreto. O tal vez la historia se desarrolle con un tremendo plot twist, aunque me gustaría tener la razón

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