Barra de Progreso de la Muerte – Capítulo 61: Veneno contra veneno

Traducido por BeeMiracle

Editado por Ayanami


Shi Jin se tumbó en el sofá de la sala de estar y siguió suspirando, luciendo preocupado.

Xiao Si preguntó, preocupado, 【¿Qué pasa, JinJin?】

Estoy analizando los pros y los contras del romance en la oficina —respondió Shi Jin, dejando escapar un suspiro de nuevo.

Xiao Si estaba confundido: 【¿Oficina? ¿Quieres tener una oficina, JinJin?】

Técnicamente, soy un vagabundo desempleado, ¿para qué querría una oficina? —Shi Jin se dio la vuelta para acostarse boca abajo y miró hacia las ventanas mientras el repiqueteo de las gotas señalaba el comienzo de la lluvia. Dijo, angustiado. —Lian Jun solía ser mi jefe: trabajaba para él, él me pagaba por mi trabajo, era un intercambio claro, todos tenían un rol establecido. Ahora que nuestra relación personal cambió, si él todavía me paga, pero inconscientemente se niega a dejarme trabajar, ¿no significa que sólo me está manteniendo? Incluso si sé que eso no es lo que quiere hacer todavía me siento incómodo.

Xiao Si no pensó que su conclusión fuera correcta. Refutó: 【Pero trabajas, ¿no dijo Darling que tu trabajo es acompañarlo y protegerlo? Estás comiendo con él todos los días, le das un masaje, lo cuidas… Y, obviamente, haces un buen trabajo porque Darling finalmente está cogiendo algo de carne.】

Shi Jin estaba estupefacto. Las palabras de Xiao Si parecían tener sentido; cuando aceptó el puesto de “Gua Cuatro”, le dijeron que su tarea era acompañar a Lian Jun, ¿no es así? Desde ese punto de vista, era cierto que nunca había dejado de trabajar.

Pero todavía no se sentía del todo bien.

Frunció el ceño y se volvió para acostarse de espaldas de nuevo. Reflexionó por un momento, luego se sentó abruptamente y dijo:

No, eso está mal; hago todo esto porque lo amo, no porque sea mi deber. ¿Cómo podría ser un trabajo cuidar de él? 

Xiao Si respondió tímidamente: 【Pero antes de que tú y Darling se convirtieran en pareja, lo hiciste porque era tu trabajo. Um, JinJin, realmente no entiendo en qué estás enredado…】

Eso hizo callar a Shi Jin, ya que descubrió que no podía refutar las palabras de Xiao Si. Se sentó congelado durante mucho tiempo, sin palabras, luego se relajó y se reclinó en el sofá. Suspirando, dijo:

Antes, no estábamos en una relación, así que estaba bien. Ahora que somos amantes, que me pague por cuidarlo es… Y aparte de todo esto, solo quiero hacer más, ayudarlo más. Él trabaja en el bajo mundo, hay tantas cosas de las que tiene que preocuparse… 

Por ejemplo, actualmente, Lian Jun estaba inquieto porque Gua Dos y los demás emprendieron la tarea de destruir esas cuatro organizaciones. Inmediatamente después de la reunión, llamó a Gua Nueve y le pidió que organizara la información y ayudara a los cuatro a coordinar su trabajo. Estaba tan ocupado que ni siquiera fue a almorzar y, en su lugar, comió algo al azar en su escritorio.

Gua Dos y los otros tres también estaban con prisas, preparándose. Las cuatro organizaciones estaban ubicadas en cuatro direcciones completamente diferentes, una de ellas al otro lado de la frontera. Tuvieron que preparar todo el equipo y suministros necesarios lo antes posible, movilizar mano de obra, familiarizarse con la información del enemigo, correr a su ubicación, desarrollar un plan de combate… Y, a pesar de que todos estaban tan ocupados, Shi Jin no podía ayudarlos con nada; tenía tanto tiempo libre que podía dedicarlo a asuntos tan graves como reflexionar sobre su “romance de oficina”…

—Soy realmente un inútil —suspiró, accidentalmente, diciéndolo en voz alta.

—Resulta que tienes algo de conciencia de ti mismo —resopló Fei Yujing, habiendo aparecido en la sala de estar sin previo aviso.

Shi Jin lo miró, adivinando que acababa de regresar de afuera cuando vio su cabello ligeramente húmedo y las marcas de lluvia en su traje. También notó los círculos oscuros debajo de sus ojos y dijo sin pensar:

—Parece que no dormiste bien anoche, ¿tuviste una pesadilla?

Después de ver la escena en la villa, la calidad del sueño de cualquier persona común decaería, al menos por un tiempo. Los círculos bajo los ojos de Fei Yujing eran tan oscuros que no había forma de que hubiera tenido una buena noche de descanso.

El abogado se puso rígido y luego se burló:

—¿Crees que soy tú? —Después de decir esto, se volvió y se fue, caminando un poco más rápido de lo habitual.

Shi Jin lo vio irse, sin palabras por su terquedad. Volvió la cabeza para mirar por la ventana donde los subordinados de Gua Tres estaban organizando el convoy, ignorando la lluvia. Pensando en la tragedia en la villa, no pudo relajarse.

Ojo por ojo, está bien, muy emocionante, pero sería imposible que no hubiera heridos de su lado cuando Annihilation contraatacara, o incluso…

♦ ♦ ♦

Terminados los preparativos iniciales, Gua Dos y los demás tomaron a su gente y se fueron, rumbo a los respectivos destinos de sus misiones.

Lian Jun y Shi Jin los despidieron juntos, mirando uno al lado del otro, mientras los autos doblaban una curva en la carretera y desaparecían.

—Shi Jin, no he olvidado que no solo eres mi amante, sino también mi subordinado, y uno excelente. Nunca quise desperdiciar tus talentos, atraparte a mi lado y no dejarte crecer —dijo Lian Jun de la nada, tomando la mano de Shi Jin. Mirando hacia el final del camino, susurró: —No estoy listo para verte partir así, conmigo personalmente enviándote al campo de batalla. No tienes suficiente experiencia para lidiar con conflictos y batallas más grandes, y no estoy mentalmente preparado para eso. Por el momento, no puedo permitir que te pongas en más riesgo, todavía no estamos listos, ni tú ni yo… Shi Jin, ¿podrías darme un poco de tiempo?

Aturdido, Shi Jin miró a Lian Jun y le devolvió el agarre sin pensarlo, con fuerza.

—Lian Jun…

—Me gusta mucho cuando me llamas así. —Lian Jun lo miró y besó el dorso de su mano. —Si queremos que la relación dure, es absolutamente necesario aprender a trabajar juntos. Estoy demasiado ocupado y, a veces, puedo equivocarme u olvidar cosas, incluso las más importantes. Cuando lo haga, por favor dime: no quiero que sea infeliz.

Mientras escuchaba a Lian Jun, el corazón de Shi Jin se ablandó en un instante.

¿Cómo podía este hombre ser tan amable y atento? Shi Jin solo había preguntado una vez; después, aunque estaba un poco deprimido, evitó deliberadamente mencionar el problema, sin querer que Lian Jun se diera cuenta. Y, sin embargo, Lian Jun aún se enteró y le explicó con seriedad sus sentimientos a Shi Jin tan pronto como terminó de lidiar con los asuntos más urgentes.

No pudo evitar inclinarse para abrazar a su amante y decirle:

—Soy un poco infeliz, pero no por ti, sino por mí. Siento que no puedo hacer nada para ayudarte… lo siento. Ya estás tan ocupado y también hice que te preocuparas por mí.

—Preocuparme por ti es mi privilegio —lo tranquilizó Lian Jun, acariciando su cabello. —Quedarte a mi lado ya es la mayor ayuda para mí.

BeeMiracle
Ugh, quiero una relación así de sana T.T

Oh, que boquita tan llena de miel…

La arruga entre las cejas de Shi Jin se suavizó y su estado de ánimo abatido desapareció sin dejar rastro. Estaba atrapado entre el impulso de sonreír y la frustración; a pesar de ser muy consciente de que Lian Jun lo estaba apaciguando en este momento, todavía estaba completamente dispuesto a dejarse apaciguar.

Dicen que estar enamorado volvía estúpida a la gente; parecía que él no era una excepción.

O tal vez, no era que el amor volviera a las personas estúpidas, sino que no querían agregar más cargas a sus seres queridos, por lo que estaban dispuestos a ser tontos.

♦ ♦ ♦

Después de la cena, llegó el primer mensaje de los cuatro: Gua Dos informó que había llegado a las cercanías del cuartel general del enemigo y ahora estaba organizando sus tropas y su potencia de fuego.

Dos horas después, Gua Dos y Gua Cinco también informaron. Lian Jun preguntó sobre su situación. Después de confirmar que todo estaba bien, no hizo más preguntas y les dijo que se concentraran en desarrollar sus tácticas.

Aproximadamente a la medianoche, Gua Dos, que tenía el camino más largo por recorrer, finalmente envió noticias también: había llegado a su destino y estaba trabajando con la sucursal local de Annihilation para ajustar las tropas y prepararse para la acción.

Hasta el momento no hubo problemas. Después de intercambiar información, los cuatro eligieron tácitamente el mismo plan: lanzar un ataque directo tan pronto como sus tropas estuvieran en posición y tomar al enemigo por sorpresa.

Lian Jun no interfirió con sus arreglos tácticos, simplemente dijo que estaba esperando buenas noticias.

Ésta, estaba destinada a ser una noche de insomnio.

La fuerza de Annihilation estaba fuera de toda duda. Gua Dos fue el primero en hacer sonar el cuerno de batalla, poco después de la una de la mañana. Se mantuvo en contacto con Lian Jun todo el tiempo, dándole comentarios en vivo; por lo que dijo, sus fuerzas arrollaron a la organización enemiga, y no solo capturaron vivo a su líder, sino que incluso encontraron su caja fuerte oculta, que contenía libros de cuentas y demás. Fue una gran cosecha.

Poco tiempo después, Gua Tres y Gua Cinco también se movieron y aplastaron al enemigo de la misma manera. Sin embargo, Gua Tres no pudo atrapar al líder de la organización a la que estaba asignado; el hombre se quitó la vida después de estar seguro de que iba a perder.

Gua Uno fue el último en actuar, Gunfire concedía gran importancia a la organización de la que era responsable; El diseño de la base y la fuerza de sus defensas hicieron que fuera bastante difícil atacar. Gua Uno fue cauteloso: solo una vez que había traspasado el punto más débil de la defensa del enemigo y asegurado su posición, lanzó una ofensiva total.

Sin embargo, esto significaba que la batalla de Gua Uno tomó mucho más tiempo y apenas terminó antes del amanecer. Él también derrotó con éxito a la organización enemiga y logró evitar que el líder se suicidara, capturándolo vivo.

En ese momento, la misión emitida por Lian Jun se había cumplido. Tomó menos de un día, la eficiencia fue asombrosa.

Shi Jin acompañó a Lian Jun durante la noche y fue testigo de todo el proceso. Impresionado, tuvo que admitir que Lian Jun tenía toda la razón al no enviarlo esta vez; con su fuerza y ​​experiencia actuales, simplemente no podía hacer lo que hicieron Gua Dos y los demás.

La disparidad de fuerza entre un policía ordinario de bajo rango y los miembros del inframundo, cuya vida era una guerra sin fin, no era algo que pudiera superarse con un poco de entrenamiento y algunas pequeñas tareas.

—Retírense de una vez, no dejes que Gunfire te alcance. Enviaré a alguien para que cubra su retiro, pero tengan cuidado de todos modos. —Lian Jun emitió la orden final, luego se reclinó en su silla de ruedas y se masajeó el puente de la nariz.

Shi Jin se despertó de sus pensamientos y corrió a su lado.

—¿Quieres descansar? Has estado ocupado toda la noche —preguntó preocupado.

Lian Jun bajó la mano y lo miró, la fatiga en su rostro se disipó un poco.

—Y te quedaste conmigo todo el tiempo, aunque no tenías que hacerlo. Todavía necesito vigilar su retirada, pero puedes ir a dormir. Llamaré a Gua Nueve para reemplazarte —dijo, acariciando la mejilla del adolescente.

—Mi deber es acompañarte, así que solo estoy haciendo mi trabajo —lo corrigió Shi Jin de manera seria. Agarró la mano de Lian Jun y lo besó, luego sonrió. —Parece que vamos a estar despiertos un poco más. Dame un momento, te traeré algo de beber para mantenerte despierto.

Lian Jun no pudo evitar responder a esa sonrisa con la suya. Apretó su mano y asintió, sin insistir más a Shi Jin para que descansara.

En ese momento, los primeros vestigios del amanecer apenas habían comenzado a despuntar en el horizonte oriental y, naturalmente, todos seguían durmiendo. Shi Jin se quedó callado mientras se apresuraba a la cocina, calentó una olla de leche, tomó algo de comida y luego lo puso todo en una bandeja.

Cuando entró en la sala de estar, notó que alguien estaba reclinado en el único sofá cerca de la ventana. Sorprendido, se desvió en esa dirección para echar un vistazo más de cerca y lo miró dos veces: era Fei Yujing, sentado allí en pijama. Su rostro demacrado se veía peor que el día anterior. Sus ojos estaban cerrados y había un ceño profundo grabado en su rostro, los círculos oscuros debajo de sus ojos parecían aún más oscuros que antes. Al ver su estado, era fácil adivinar qué estaba pasando.

—¿Tuviste una pesadilla otra vez? —Preguntó Shi Jin.

Sorprendido por el repentino ruido, Fei Yujing abrió los ojos de golpe.

—No, me desperté temprano y salí a tomar un poco de aire fresco —dijo, todavía negándose a admitirlo.

Habría sido más convincente si hubieras tenido al menos una ventana abierta.

Pero Shi Jin no lo dijo en voz alta. Dejó la bandeja, tomó un vaso desechable de la mesa auxiliar y lo llenó de leche. Al compartir algunos de los bocadillos de la bandeja, dijo:

—Tratar de aguantar sin decir nada no lo mejorará, ya lo sabes. Si no puedes dormir, intenta beber una taza de leche tibia por la noche. El ejercicio y el entretenimiento ligero también pueden ayudar a relajarte, y antes de acostarte debes evitar el tipo de trabajo de alta intensidad que agota tu mente. Si nada de eso funciona, habla con un amigo, sácalo de tu pecho. Será mejor que tratar de resolverlo por tu cuenta. Continúa igual y casi puedo garantizar que terminarás con algún problema de salud mental.

—¿Me estás maldiciendo? —Preguntó Fei Yujing, con las cejas fruncidas.

Shi Jin sintió que nunca entendería cómo funciona el cerebro de su hermano. Lo miró como si fuera un idiota y recogió la bandeja.

—Sí, te estoy maldiciendo —dijo, y salió de la sala de estar, no estaba dispuesto a perder más tiempo con él.

La última mirada de Shi Jin hizo que Fei Yujing se ahogara. Miró la espalda del adolescente antes de ver la leche humeante y los pasteles perfumados en la mesa lateral, frunció el ceño con irritación y se reclinó en el sofá, cerrando los ojos una vez más.

♦ ♦ ♦

A las diez de la mañana, Gua Dos y los demás finalmente confirmaron que se habían retirado a un lugar seguro. Aliviado, Lian Jun llamó a Gua Nueve y le dijo que vigilara la siguiente parte de su retiro, luego tomó a Shi Jin y regresó a su habitación.

Shi Jin esperó hasta que Lian Jun terminó de lavarse, lo ayudó a acomodarse en la cama y se preparó para irse.

Antes de que pudiera, Lian Jun tomó su mano. —¿No vas a dormir?

—Lo haré, primero tengo que darme una ducha —respondió Shi Jin.

Lian Jun se movió al otro lado de la cama, dejando espacio para él.

—No me importa, entra.

Shi Jin abrió la boca, queriendo decir que planeaba dormir en su propia habitación, pero al ver los ojos de Lian Jun llenos de afecto y preocupación, se tragó las palabras. Obedientemente, se subió a la cama, los cubrió con la colcha y dijo: —Duerme.

Pero Lian Jun se inclinó y lo besó.

Shi Jin fue tomado por sorpresa. Sin embargo, cuando vislumbró la expresión seria de Lian Jun y sintió la seriedad del beso, cerró los ojos y levantó los brazos para abrazarlo.

♦ ♦ ♦

No se despertaron hasta la cena. Durante el día, Gua Dos y los demás habían regresado y ahora estaban aprovechando la oportunidad para recuperar el sueño perdido. Lian Jun llamó a Gua Nueve y le preguntó sobre sus heridas; tras ser informado de que ninguno de los cuatro había resultado herido, se puso manos a la obra, aliviado.

Gua Dos y los demás se despertaron alrededor de las 10 p.m., luego encontraron a Lian Jun para dar sus informes.

Los tres líderes que fueron capturados vivos habían sido separados y detenidos en diferentes bases pertenecientes a Annihilation, junto con sus subordinados más importantes. Toda la información que habían encontrado fue recuperada; Gua Nueve lo estaba recopilando.

Lian Jun confirmó algunos detalles, luego nombró varias otras organizaciones para que Gua Uno y los otros tres se ocuparan.

Shi Jin estaba desconcertado, no esperaba que hubiera una segunda ronda de limpieza de las organizaciones subordinadas de Gunfire. Los otros cuatro, sin embargo, parecían haber predicho esto y se fueron tan pronto como recibieron sus tareas.

Esta vez, Shi Jin no fue tan tonto como para pedir uno propio. Después de verlos irse, dijo:

—¿Entonces tienes la intención de seguir luchando?

—Naturalmente. Solo nos detendremos cuando Gunfire venga a nosotros para negociar —respondió Lian Jun. —Hasta entonces…

Con esas palabras, Shi Jin recordó lo que sucedió después de que terminó la conferencia: Zuo Yang quería usar a Long Shi para atraer a Lian Jun, pero su plan fracasó y cayó en la trampa de Lian Jun. Shi Jin pensó de repente que la situación con Gunfire era un poco similar a lo que sucedió entonces.

Sintió que entendía la forma de hacer las cosas de Lian Jun: ignorar cualquier influencia que tenga el enemigo y simplemente encontrar una manera de volver la iniciativa a su lado; mientras lo haga, habrá ganado la mitad de la batalla.

Ese ciclo continuó durante la semana siguiente: Gua Dos y los demás se marcharon, acabaron con las organizaciones que les habían asignado, se retiraron a la “sede”, tenían una nueva tarea, volvieron a salir. Se deshicieron de las organizaciones subordinadas de Gunfire en toda la región sureste a un ritmo constante, destruyendo su red comercial.

Después de unos días, Gunfire finalmente reaccionó y comenzó a contraatacar. En ese momento, Gua Dos y el resto simplemente abandonaron la parte de “retirada a la sede”; después de destruir una organización, recibieron nuevas órdenes en sus posiciones y se dirigieron directamente hacia el nuevo objetivo.

Debido a que el ritmo de los ataques se había acelerado, Lian Jun permanecía despierto durante la noche cada vez con más frecuencia. Su rostro estaba mucho más pálido y el peso que había logrado ganar había vuelto a desaparecer. Shi Jin estaba profundamente angustiado por esto; casi se pegó al lado de Lian Jun, haciéndolo comer y dormir siempre que era posible, haciendo todo lo posible para evitar que se agotara.

Debido a que el horario de sueño de Shi Jin era tan irregular durante ese período, comenzó a encontrarse con Fei Yujing en la sala de estar a varias horas distintas en la madrugada. El hombre se veía peor día a día. Temiendo que colapsara y retrasara el trabajo de todos, Shi Jin le daba un vaso de leche y un discurso de “cómo lidiar con el insomnio y las pesadillas” cada vez que se encontraba con él.

Fei Yujing parecía cansado de verlo. Su actitud cambió del desprecio inicial a la irritación y lo ignoró deliberadamente. Una vez, se molestó tanto que regresó directamente a su habitación.

Shi Jin lo vio irse y chasqueó los labios, satisfecho.

Solo lo hice enojar, ¿no? —Le preguntó a Xiao Si.

Xiao Si sintió un poco de pena por Fei Yujing. 【Sí, parecía bastante enojado. ¿Por qué sigues acosándolo, JinJin?】

Y realmente era acoso. Nadie más podía decirlo, pero Xiao Si sabía que Shi Jin estaba molestando intencionalmente a su hermano.

Shi Jin podría no siempre tener tacto cuando trata con los demás, pero nunca había sido tan obtuso y molesto.

¿Acosando? Solo estoy preocupado por él, ¿sabes? Siempre me trata con frialdad, pero le doy la otra mejilla para mostrarle preocupación, ¿acaso no soy una buena persona? —Shi Jin preguntó con una cara seria.

Xiao Si decidió que responder a esto disgustaría a su anfitrión o dañaría su conciencia, por lo que se mantuvo en silencio.

Las noches de insomnio transcurrieron una tras otra. A medida que el gobierno y Annihilation movilizaron todos sus recursos militares y la guerra económica del Viejo Fantasma contra Nueve Águilas se volvió cada vez más feroz, la situación en el sureste comenzó a tornarse turbulenta. Casi todas las organizaciones locales descubrieron que los vientos habían cambiado y también dirigieron su atención a Gunfire, listos para causar problemas.

♦ ♦ ♦

Después de otra ronda de limpiezas, en un raro día soleado en la temporada, Gua Dos y los demás regresaron. Se les había ordenado detener, por ahora, la purga de las organizaciones subordinadas de Gunfire.

—¿Gunfire pidió negociar con nosotros? —Se preguntó Shi Jin.

—No, fue Zuo Yang. Se puso en contacto con el Viejo Fantasma —dijo Gua Dos, bostezando y rascándose los bigotes que habían reemplazado su barba. —Oh, ha sido demasiado emocionante estos últimos días, necesito reducir la velocidad. Me voy a dormir, ¿te gustaría acompañarme, pequeño JinJin?

Shi Jin dio un paso atrás para mostrar que no, no le gustaría, y silenciosamente señaló detrás de la espalda de Gua Dos.

Gua Dos se congeló, un mal presentimiento se apoderó de él. Lentamente, se volvió y descubrió que Lian Jun había aparecido detrás de él en algún momento, y ahora lo estaba mirando con una expresión profunda. Sintiendo escalofríos recorriendo su espalda, inmediatamente explicó:

—Solo estaba bromeando, de verdad, esto era solo una broma —luego retrocedió y huyó.

Sin levantar la cabeza de su computadora portátil, Gua Nueve comentó:

—Lo juro, tiene la memoria de un pez dorado; cada vez que regresa de una misión larga, será castigado una y otra vez porque no puede mantener su boca cerrada. Se lo merece.

Shi Jin se echó a reír.

Inexpresivo, Lian Jun tiró de él y le pellizcó la boca. ¿Tú de todas las personas te atreves a reírte de esto?

♦ ♦ ♦

Esa noche, Lian Jun, una vez más, dejó que Shi Jin descansara en su habitación, de alguna manera, lo hizo parecer completamente natural. Shi Jin pensó en la habitación que le habían dado, pero en la que nunca durmió, fingió no darse cuenta de la estrategia de Lian Jun y se acostó a su lado sin protestar.

Como estaba descubriendo, era fácil meterse en algunas camas, pero bastante difícil salir de ellas.

Shi Jin había sido nocturno recientemente; esa noche se despertó en las primeras horas de la mañana y no pudo volver a conciliar el sueño. No queriendo molestar a Lian Jun, hizo el menor ruido posible cuando se levantó y se dirigió a la sala de estar por costumbre.

Como era de esperar, Fei Yujing estaba allí, apoyado en el sofá individual como de costumbre. Una sombra cayó sobre su rostro, oscureciendo su expresión.

—Esto sucede todas las noches, ¿sabes que realmente puedes morir por falta de sueño? —Shi Jin se detuvo frente a él, frunciendo el ceño.

Había pasado más de una semana. Si las cosas seguían así, era probable que Fei Yujing terminara en el hospital.

Fei Yujing no se movió, tan quieto como un cadáver.

Shi Jin lo examinó por un momento, luego se dio la vuelta y se fue.

Ante el sonido de pasos, los dedos de Fei Yujing se movieron, pero todavía no abrió los ojos.

Diez minutos después, Shi Jin regresó con leche caliente y bocadillos. Encendió las luces de la sala de estar, puso la bandeja en la mesa de café, arrastró la pequeña mesa lateral frente a Fei Yujing y tomó un segundo asiento. Con los arreglos terminados, movió la bandeja a la mesa auxiliar y se sentó frente a su hermano.

El hombre abrió los ojos y lo miró.

—Shi Jin, ¿qué diablos estás haciendo? —Su tono era realmente tranquilo, lo que se estaba volviendo cada vez más raro en estos días.

Shi Jin lo miró y sacó la tablet. —¿Qué quieres decir? Me acostumbré a pasar despierto toda la noche y ahora no puedo dormir. Entonces, decidí ver una película.

—Mírala en otro lugar. —Fei Yujing trató de expulsarlo.

Shi Jin jugueteó con la tablet, ignorándolo. —No, me gusta más este lugar. Si te molesta, vete. —Y tocó el icono de la película.

—¡¡¡Aaaahhhhhhhhhh-!!!

Un chillido penetrante salió del altavoz de la tablet, siendo más estridente en el silencio de la noche. Fei Yujing se estremeció en estado de shock. Con la cara oscura, pronunció con los dientes apretados,

—¿Qué diablos estás haciendo, Shi Jin?

—Te lo dije, viendo una película —respondió Shi Jin. Su expresión se volvió misteriosa y continuó: —No lo sabrías, pero cuando me acababa de unir a Annihilation, tenía miedo de todo, y el sonido de los disparos me hizo incapaz de dormir durante una semana. En ese entonces, el viejo médico de la organización me habló de un pequeño truco que podía probar. Funcionó, pude volver a dormir y ya no le tengo miedo a los disparos.

Fei Yujing realmente quería ignorarlo o burlarse de él y alejarlo, pero después de casi diez días de ser atormentado por el insomnio, las pesadillas casi lo habían vuelto loco. Pensó en todo el trabajo que le quedaba por hacer, luchó durante un tiempo y finalmente decidió ceder.

—¿Qué método? —Preguntó, con voz rígida e incómoda.

—Contrarrestar el veneno con veneno. —Shi Jin arrastró la silla a su lado y amplió la imagen en la tablet. —Míralo suficientes veces y deja de dar miedo. Hoy es una noche sin luna, ¿no crees que es perfecto para ver películas de terror?

Fei Yujing miró el rostro ensangrentado y haciendo muecas en la pantalla, y cerró los ojos con fuerza. Por primera vez, tomó el vaso de leche que le dio Shi Jin y lo bebió de una vez.

2 respuestas a “Barra de Progreso de la Muerte – Capítulo 61: Veneno contra veneno”

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

 

error: Contenido protegido