Beatrice – Capítulo 6: ¿Alguna vez volveré a ser feliz?

Traducido por Den

Editado por Sakuya

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—Te estaba mostrando misericordia con solo cortarte la cabeza.

Al escuchar estas palabras alarmantes, el miedo se apoderó de Alicia. Mientras negaba desesperadamente con la cabeza, Alexandro miró a los caballeros que los rodeaban. Todos los ojos estaban fijos en ellos dos en el centro, sin atreverse a dejar escapar un solo suspiro y perderse la diversión. La princesa Alicia inmediatamente entendió su destino.

— ¡No! ¡De ninguna manera!

Alicia soltó un grito desesperado, haciendo que Alexandro se volviera a mirarla. Se separó de los caballeros que la sujetaban por los brazos y se arrodilló ante sus pies.

—Por favor… Por favor…

Inclinando la cabeza mientras le suplicaba piedad, al final se abrazó a sí misma mientras las lágrimas comenzaban a deslizarse por su rostro, demasiado asustada para morir.

¡Oh, Dios mío! 

Chloe, que estaba mirando todo, no podía creer el estado al que habían sido reducidas. Nunca pensó que vería a la orgullosa y arrogante primera princesa Alicia derrumbarse en un caos como este.

—Parece que algo interesante ha aparecido después de mucho tiempo.

Un voz emocionada y fuerte exclamó desde dentro de la multitud de caballeros.

— ¡También déjenos probar a la princesa!

La voz repentina y frívola pertenecía al caballero Leo. Un escalofrío recorrió el cuerpo de Chloe debido a su repentina aparición.

Alicia también se alarmó por sus palabras, porque después de la exclamación de Leo, los otros caballeros comenzaron a murmurar, también de acuerdo.

Alexandro miró a los ojos húmedos y jóvenes de la princesa y la levantó del brazo. Le temblaban las piernas de miedo, pero Alexandro se las arregló para ponerla de pie, como si su cuerpo estuviera colgando del agarre de su brazo. Alicia cometió el error de levantar la mirada y sus ojos se encontraron con una innumerable cantidad de miradas lascivas que recorrían su cuerpo, haciendo que juntara las manos y suplicara piedad en un murmullo incoherente.

—Sólo mátame… Por favor, sálvame por favor. Por favor, ten piedad…

Incluso Alicia ya no podía reconocer lo que estaba diciendo.

—Es nuestro turno con la princesa, ¿no?

Cuando Leo la sujetó del brazo y tiró de ella, comenzó a gritar.

— ¡Aaah!

Alexandro soltó su agarre y cayó directamente en los brazos de Leo. Muy pronto, su cuerpo fue arrojado de un lado a otro entre las manos de los diferentes caballeros, lo que le hizo soltar un grito espeluznante.

Era un espectáculo horrible de ver, pero ni una sola persona sintió pena por ella. Los caballeros continuaron tratando a la princesa de la nación derrotada, que pronto moriría, como un mero trofeo.

— ¡Aaah!

Mientras jugaban con Alicia, de repente tiraron de ella con mucha fuerza. Al arrebatarles su juguete, hicieron una cara de decepción.

— ¡Ugh!

En un instante, Alexandro recorrió su cuerpo con su espada. Leo chasqueó los labios con desilusión mientras veía la vida desvanecerse de sus ojos.

—Cuélgala en la puerta.

Alexandro apartó la mirada de su cadáver y se alejó sin ningún remordimiento. Al darse cuenta de que este tipo de cosas también le pueden pasar a ella, Chloe deseó desmayarse ahí mismo. Sin embargo, de repente sintió un golpecito en el hombro.

— ¡Ah!

Sorprendida, se dio la vuelta y descubrió que era Lucy, que intentaba abrazar a Chloe mientras temblaba de miedo. Pero este movimiento repentino alertó a los demás.

Chloe sintió que su corazón estaba listo para saltar de su garganta mientras lentamente estiraba el cuello para mirar detrás de ella.

Sintió que una ola fría de temor la cubría cuando accidentalmente miró a Alexandro en la distancia. Fue solo por un momento, pero no se atrevió a respirar.

Afortunadamente, se dio la vuelta con un rostro indiferente. Probablemente no se dio cuenta de que sus ojos se encontraron.

¡Qué alivio! 

Una simple mirada suya en su dirección fue suficiente para asustarla. Salió de sus pensamientos cuando una de las otras doncellas la llamó.

Al final, Chloe y las otras doncellas fueron atadas, una por una, y fueron obligadas a seguir a los caballeros hasta la capital del Imperio, donde estaba el palacio imperial.

¿Alguna vez volveré a ser feliz? 

En su vida pasada, fue asesinada después de ser atropellada por un conductor ebrio cuando solo tenía 35 años. No estaba casada y estaba exhausta después de reprobar el examen de ingreso a la universidad y el examen de burócrata. Apenas había logrado convertirse en una farmacéutica oriental, pero terminó perdiendo la vida debido al descuido de un extraño.

Por eso decidió ser feliz todo lo posible después de renacer…

No hay nada que pueda hacer… Todavía quiero vivir. 

El viaje a la capital fue duro ya que los caballos tiraban de ellas con las manos atadas a la espalda y, de alguna manera, se dieron cuenta de que su futura vida como esclavas sería aún peor.

♦ ♦ ♦

El viaje duró una semana.

Es duro… 

Chloe generalmente tiene una perspectiva extremadamente positiva y brillante, pero el viaje drenó todo. Además de eso, estaba constantemente pendiente de Leo y Alexandro, sin saber cuándo vendría a jugar con su vida. Todavía no podía olvidar la miserable muerte de la princesa Alicia. Después de todo, la perseguía en sueños todas las noches.

¿Hemos llegado a la capital? 

La capital del Imperio era enorme y mucho más avanzada de lo que esperaba, Elpasa no tenía nada frente a eso. Chloe nunca había estado en otro país, así que las vistas extranjeras del imperio la inquietaban aún más.

Después de llegar a la capital, pasaron sin problemas por el procedimiento para convertirlos en esclavos. Como el imperio tenía la costumbre de conquistar varias naciones, las leyes para tratar con los esclavos de guerra estaban bien establecidas. Despojaron a las mujeres de sus posesiones y títulos. Chloe también fue tratada como “esclava”, nadie habló de su estatus anterior como “princesa”.

Supongo que ya no soy una princesa. 

Sin embargo, lo prefería así. Cuando pensó en el destino de la princesa Alicia, agradeció a las estrellas que no tuvo que sufrir el mismo destino. Pudo predecir fácilmente qué le habría pasado si hubiera sido tratada como una “esclava especial”. Apareció en su mente la repugnante mirada del caballero llamado Leo que la observaba y le guiñaba el ojo con lujuria todo el tiempo la semana pasada.

『Cuidaré muy bien de ti, princesa. Solo espera.』Chloe recordó su repugnante voz y tembló de miedo. Desde que llegaron al palacio, se sentía aliviada por el hecho de que no tenía que verlo.

Desearía no tener que volver a verlos nunca más, tanto al caballero loco como su capitán. Rezó sin cesar a Dios.