Traducido por Herijo
Editado por Ayanami
Una sombra a sus espaldas se puso de pie y dirigió una mirada fría hacia ellos.
—Ahh, este resultó ser el peor día. No puedo creer que el Demonio rojo bebió la sangre de Azusa. —Kyouya, rápidamente, puso a Azusa atrás de él, pero Tsukiharu hizo un gesto, indicando que ya no estaba interesado en luchar contra ellos.
—Tengo la ideología de no pelear batallas que no puedo ganar. No hay forma de que me compare, en mi estado actual, con el Demonio rojo después de beber tu sangre…no seré capaz de llevarte conmigo, así que me retiro por ahora y hasta que se me ocurra otro plan. —Tsukiharu levantó sus brazos haciendo evidente lo exhausto que estaba.
—Shiro —Murmuró, haciendo que una gigantesca serpiente se deslizara de su sombra. La serpiente, que era de color plateado, bajo toda la sangre que cubría sus escamas, tenía su ojo derecho aplastado de forma grotesca —Vamos a casa.
—Como desee maestro Tsukiharu —Habló con la voz de Shiro. Se envolvió, gradualmente, alrededor de Tsukiharu, llevando la parte inferior de su cuerpo hacia las sombras.
—Nos vemos luego Azusa. Vendré por ti en otra oportunidad. —Tsukiharu volteó hacia Azusa, con ligeros tonos de tristeza empañando su sonrisa, mientras era tragado por el suelo hasta desaparecer completamente.
Su ausencia causó que el bosque cayera en completo silencio. Lo único que se oía era el ulular de un Búho haciendo eco a través de la noche.
—¿Eso quiere decir que se acabó?
—Probablemente.
Azusa colapsó sobre sus rodillas, cuando el hilo de tensión que la mantenía de pie fue cortado.
—Vamos
—Estoy tan aliviada… —Había estado nerviosa sin parar, durante los últimos días, causando que esa sensación de tranquilidad la llevará hasta las lágrimas.
—¿Estás bien?
—Estoy feliz de que todos estén a salvo. Dijeron que Ichy estaba bien así que…espera ¿todos? —Algo le causaba incomodidad en su mente, cuando pensó en el bienestar de todos hasta que finalmente recordó la razón —¡Tsubaru!
Se había olvidado de él. No era algo irrazonable debido a la batalla que se había desatado frente a ella en el momento en que fue mandado a volar. Probablemente, era un poco tarde para que se preocupara, sin embargo, lo hizo de igual manera. Se puso de pie y buscó por los alrededores. Árboles aparecían en todas direcciones y todo lucía igual. No tenía idea de dónde venía o en donde podría estar Tsubaru.
—Me pregunto si Tsubaru está bien…
—¿Llamaste? —Alguien a su espalda dijo de forma juguetona. Azusa volteo para descubrir a dos personas que no estaban ahí antes.
—¡Tsubaru! ¿Ichy? ¿Por qué estás aquí?
—Lo lamento, te cause problemas debido a mi debilidad e incompetencia.
—¡No podría importarme menos! ¡¿Te encuentras bien?! ¡¿Estás herida?! ¿El veneno salió completamente de tu sistema?
—Sí, no hay ningún problema con mi salud.
—Gracias a dios…estoy tan feliz, Ichy —Azusa dijo con un tono que parecía estar a punto de llorar mientras abrazaba a Ichy, quien no pudo hacer otra cosa que permanecer mirándola y regresarle suavemente el abrazo.
—Realmente, lamento todo lo que sucedió en esta ocasión.
—¡Está bien! No te preocupes por eso. Después de todo, fue mi culpa que fueras tarjeteada. Yo debería ser quien se disculpe.
—Por favor, no lo hagas, no hay ni una sola cosa por la que debas arrepentirte o sentirte culpable, lo más importante es que estas bien.
—De alguna manera, siento que fui olvidado…considero que también hice un gran esfuerzo. Bueno, se escapó antes de que pudiera terminar el trabajo. —Tsubaru interrumpió la plática de las chicas.
—Mis disculpas, Tsubaru.
—Lo siento.
Tsubaru rio ante el par de disculpas y cambió su atención hacia Kyouya, congelándose ante la vista de sus vibrantes ojos rojos.
—¿Eh?
—¿Qué?
—Kyou, bebiste sangre, ¿no es así? ¿Sangre de Azusa?
—Sí.
La sangre se drenó del rostro de Tsubaru —No tengo idea de que tanta bebiste, pero estoy impresionado de que no te volvieras loco.
—Estaba a punto de morir.
—¿Lo estabas? —La sonrisa desapareció de su rostro.
—¿De qué están hablando? —Preguntó Ichy, a lo que Tsubaru solo pudo desviar la mirada.
—Para poder localizar la ubicación de Azusa, robamos la muestra de su sangre que tenían en el laboratorio…
—¿Robar?
—Bueno, es una muestra rara para los investigadores. No iban a dárnosla, así que decidimos tomar un enfoque agresivo. Tanto social, como físico. —Mostró una sonrisa retorcida que hizo retroceder a Azusa.
—Todo procedió sin problemas hasta que obtuvimos la sangre. Fue cuando Kyouya la bebió que surgieron problemas…en un principio se curó completamente y se sentía bien, pero, debido a la abundancia de poder se hizo un pequeño alboroto
—¿Alboroto?
—¡Lo detuve por la fuerza! ¡Físicamente, sólo en esta ocasión! El laboratorio fue medio destruido, estaba exhausto y Kyou en un estado similar al de un niño con un subidón de azúcar…o ¿debería decir un subidón de sangre? En serio, mi vida, probablemente, ha terminado…use el nombre de mi familia para entrar al laboratorio, así que probablemente ya los contactaron…ugh, desearía no haber recordado eso. Mi futuro es incierto.
—Ya he dicho que lo siento varias ve…
—¡Cállate! ¡Puedes ahorrarte esa disculpa!
—Lo siento…
—¡No parece una disculpa sincera! ¡Hazlo de nuevo!
—Eres demasiado quisquilloso.
—¡¿Eso es lo que entiendes por disculpa?!
—Tranquilo Tsubaru, por favor, cálmate un poco, cualquier intento de educar a este desabrido es en vano.
—¿Acaso el esfuerzo de toda mi vida acaba de ser desechado y etiquetado como inútil?
Azusa estalló en risas con el intercambio desarrollándose a su lado, haciendo que toda la atención se centrará en ella
—Oh, lo siento. Al verlos, no pude evitar pensar en que no hay mucha diferencia entre humanos y vampiros. ¡Me encanta la vibra de amigos de la infancia que desprenden ustedes tres! ¡En verdad los envidio!
—Entonces… ¿por qué no lo convertirnos en un grupo de cuatro? Aunque tenemos poco tiempo de conocernos, por lo que aún no podemos desprender esa aura de amigos de la infancia —Sugirió Tsubaru.
—¿Huh?
—¡Seamos buenos amigos, Azusa! —Exclamó Tsubaru.
—Me gusta ser tu amiga —Añadió Ichy.
—Yo también me apunto —Dijo Kyouya
Las mejillas de Azusa se sonrojaron ante las sonrisas de los demás. Respondió a su sonrisa llena de colmillos con una propia— ¡Espero que podamos convertirnos en buenos amigos!
—Oh cierto, Azusa, quería hablar de esto antes, pero oí que le diste tu sangre a Kyou cuando estaba a punto de morir —Tsubaru susurro al oído de Azusa.
—Sí, lo hice —Azusa respondió al momento, al no poder pensar en algo que decir. Pero Tsubaru estaba satisfecho con su respuesta, por lo que sonrió mientras palmeaba su cabeza.
—Gracias por salvar a mi mejor amigo.
—¿Disculpa?
—Ya sabes como es. La mayoría de las personas se hacen la idea equivocada…también es su culpa por aceptar todas esas estupideces como si tuvieran justificación. El hecho de que no niegue lo que dicen de él hace que se dejen llevar…al final, de hecho, es una persona más agradable que la mayoría
—Estoy de acuerdo
Azusa miró a Tsubaru quien, debido a la sorpresa, se había quedado en silencio con su rostro rígido. Después de una corta pausa, su expresión se suavizó.
—¿Ocurre algo?
—No es nada, solo que es un poco sorprendente que estuvieras de acuerdo conmigo tan fácilmente.
—¿Por qué?
—Es solo que muy pocas personas lo han hecho hasta ahora.
—¿En serio?
—Sí…así que espero que puedas seguir llevándote bien con él. Decidí, hace mucho tiempo, que cuidaría cualquier cosa que él considerara preciado.
—No entiendo a qué te refieres.
—Está bien…no es necesario que lo entiendas en este momento.
—¿Ok? —Azusa ladeo su cabeza en confusión. Kyouya volteo hacia atrás para observarlos desde donde estaba caminado junto a Ichy.
—Se van a quedar atrás —Tsubaru no pudo evitar reír ante la actitud de su mejor amigo.
—Para ponerlo en términos simples, lo que quería decir es que espero que puedas seguir a su lado y llevarte bien con él como su contratista —Dijo Tsubaru con la sonrisa más brillante del día.