El Secreto de la Belleza – Capítulo 10: Presagio

Traducido por Akatsuki

Editado por Sharon

Corregido por Tulskas


—Señorito Julius, es casi la hora de cenar.

Luego de regresar de la fiesta de té, Julius pasó el tiempo en su habitación. Parla, la doncella principal, llamó a su puerta y le informó que ya era hora de cenar.

—Ah, bien. Iré ahora.

Colocando un marcador en el libro que leía, Julius lo deja sobre el escritorio y se pone de pie.

Dirigiéndose hacia la puerta, sale al pasillo y se inclina ante Parla, que lo está esperando.

—Por favor, diríjase al comedor. El maestro y la señora lo están esperando.

—¿Oh? ¿Mi padre estará presente en la cena? Es extraño.

Julius sintió que es algo sospechoso cuando escuchó a Parla.

La Familia Rosenberg no se reunía muy seguido a cenar. Especialmente en la temporada de socialización, cuando todos los miembros de la familia están ocupados. Ellos no se habían reunido para la cena en años.

Esto no solo se aplica a la Familia Rosenberg, es lo mismo para todas las familias nobles.

—Hoy el maestro fue al castillo real, pero regresó rápidamente. Al parecer algo sucedió allí. Se veía realmente preocupado.

—Hmm, no te preocupes por eso… Bueno, apresurémonos.

Ambos se dirigieron rápidamente al comedor.

♦ ♦ ♦

Julius llegó a su asiento y un camarero rápidamente le preparó un aperitivo.

Llevándose algo para beber a la boca le pregunta a su padre, el conde Rosenberg, acerca de lo que le preocupaba.

—Padre, regresaste antes de lo habitual, ¿sucedió algo?

El conde Rosenberg asiente con la cabeza mientras toma la guarnición con su tenedor.

—Si. Hoy fui al castillo real y escuché algo que me molesto. Tenía que decírselos, así que volví antes.

—¿Algo que te ha molestado?

—¿Qué es cariño?

Entendió por qué su padre había cancelado su agenda de hoy para volver a la mansión, pero no tenía idea de lo que podría haber sido. Sin embargo, Julius y su madre sabían que era serio por la forma en que Ernesto habla y por su postura.

De hecho, esta es la primera vez que dice algo como esto.

—Bueno, todavía no he recibido la información por completo, pero… una guerra estaría por comenzar.

Todos en el comedor quedaron perplejos.

Elizabeth se quedó sin aliento mientras come la sopa de frijoles ante el comentario de su esposo. Julius parece indiferente, pero está conmocionado.

—Guerra… ¿Con el reino Lakshurusu?

En la actual situación, el reino Lakshurusu es el único de los tres que comenzaría una guerra con el reino Aullène. Julius lo adivina de inmediato, y pregunta para confirmar su sospecha.

A cambio, el conde Rosenberg asiente.

—El reino Lakshurusu originalmente tenía disputas con el nuestro, y nosotros contra ellos. Sin embargo, hoy escuché que, según nuestros espías, el reino Lakshurusu está preparando equipo militar. Si es verdad, entonces seremos su objetivo principal.

—En efecto.

El reino Aullène estaba cerca al reino Lakshurusu, al Imperio Dioatol y al reino Einn.

El Imperio Dioatol estaba en una guerra civil y no interferiría con los otros, pero entre los cuatro, ellos eran los líderes en cuestión de territorios y fuerza militar. Nadie se atrevía a atacarlos. Era más favorable para ellos que el Imperio Dioatol no interfiriera, por el contrario sería arriesgado si lo hicieran.

El reino Einn tenía una buena relación con el reino Aullène y una no tan amigable con el reino Lakshurusu, pero dependían de su comercio con ellos, por lo que era difícil de imaginar que se uniera en este conflicto.

Debido a eso, saben que el reino Lakshurusu tiene como objetivo al reino Aullène.

—Hemos fortalecido la frontera, lo suficiente para ganar más tiempo. Organizaremos los refuerzos mientras la defensa está luchando, luego iremos a la  guerra.

—¿Ya hay personas enlistadas?

El Ejército de Aullène se dividía en dos: una armada permanente que protege la capital real y la frontera; y un ejército especial, compuesto por miembros reclutados de cada territorio en tiempos de emergencia.

No pueden asignar a todos los guardias que protegen la capital a defender las fronteras cuando los ya apostados allí no pueden hacer frente a una situación, por lo que reforzaban los números con el ejército especial.

Este está compuesto principalmente por soldados de cada territorio y sus ciudadanos, por lo que los controlan los Señores Feudales y sus familiares.

Si es así, entonces no hay duda que los nobles, que actualmente se encuentran reunidos en la capital por la temporada de socialización, estarán inquietos.

—Aunque la temporada de socialización está en marcha en este momento, podría cancelarse dependiendo del estado de las cosas. También deberías de tenerlo en cuenta —les informa el conde con una expresión grave sobre su rostro mientras corta el bistec sazonado con una rica salsa. Su familia responde con solemnidad.

—Lo entiendo, padre.

—De acuerdo, querido.

—Además, ni una sola palabra a nadie. ¿Me escuchan? Esto es solo una posibilidad, no es definitivo.

—Entendido.

♦ ♦ ♦

—Una guerra, ¿huh…?

Cuando Julius regresó a su habitación después de la cena, no tenía ganas de continuar el libro que estaba leyendo.

Se acostó sobre su cama con su ropa puesta y miró hacia el techo.

Está pensando en lo que su padre le informó en la cena: una guerra con el reino Lakshurusu.

El conde había dicho que no era definitivo, pero el hecho es que el reino Lakshurusu está preparando equipos militares.

Es difícil de imaginar que no tienen nada en mente para el equipo preparado. Es solo cuestión de tiempo antes de que la guerra comience.

El reino Aullène y el reino Lakshurusu han están en conflicto durante mucho tiempo y han peleado repetidamente. Sin embargo, en los últimos años los guardias fronterizos se ocuparon de ellos y nunca tuvieron que solicitar ayuda del ejército especial.

Por supuesto, los jóvenes nobles como Julius nunca habían experimentado algo como la guerra. El prestigio es importante para los nobles del reino Aullène, pero lo más importante es continuar la línea familiar.

Esas dos cosas entran en conflicto en tiempos de guerra, cuando sus vidas están en riesgo.

Si se trata de prestigio, entonces participarían en la guerra y obtendrían logros, pero si el jefe de la casa y el hijo mayor morían en batalla, entonces la continuación de la línea familiar se vería amenazada.

Por el contrario, si la línea familiar está asegurada, entonces participarán en la guerra para obtener prestigio.

Para la casa Rosenberg, mientras el jefe actual, el conde o su sucesor, Julius, sobreviviera, la línea familiar podría conservarse.

El conde Rosenberg aún está en la plenitud de su vida y puede producir más hijos. Además, mientras se pague un impuesto de exención, no todos los miembros de la familia debían participar en la guerra, aunque eso afectaría su prestigio.

—¿Será mi padre o seré yo? —se pregunta Julius sin abandonar la mirada del techo mientras piensa.

Está convencido de que él o su padre irían al frente.

Si piensan en continuar con la línea familiar, Julius, que es más joven, debería quedarse. Incluso si el conde todavía puede producir a otro hijo, tomaría tiempo criarlo hasta que pueda heredar la casa, por lo que es arriesgado.

Sin embargo, en términos de prestigio, es más significativo para Julius, el siguiente sucesor, dirigirse a las líneas fronterizas en lugar del jefe actual, que ya tiene un cierto nivel de reconocimiento.

Y hay otra razón por la cual Julius quería el prestigio.

—Señorita Emilyn…

La encantadora cara de su prometida aparece en su mente.

Ella ya estaba confundida con su género, por lo que quiere hacer algo para demostrarle su masculinidad.

Si logra obtener méritos en la guerra, podría contraer matrimonio con confianza.

Por supuesto, si perdiera su vida, todo estaría perdido. Pero, Julius sintió que valía la pena arriesgar su vida.

¿Supervivencia o prestigio?

Julius medita en conflicto hasta que deriva a la tierra de los sueños.

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