El Secreto de la Belleza – Capítulo 4: Mejor Amigo

Traducido por Akatsuki

Editado por Sharon

Corregido por Tulskas


En el centro de la sala de banquetes, un par de amantes bailan mientras atraen las miradas de los espectadores.

La apariencia de la pareja es deslumbrante, aunque alguien los observa atentamente de manera dolorosa.

Ese es su mejor amigo, Maxian, quien charlaba con Julius hace unos momentos.

—Aaaah, Julius. Eres…

Para ser exactos, lo que ve no es a “la pareja”. Sólo su amigo está ante sus ojos. Naturalmente Emilyn se refleja en su vista, sin embargo no es consciente de ella.

Aun así, aparte de eso, no parece odiarla.

—Como de costumbre, eres tan hermosa…

Maxian alberga sentimientos por su amigo desde hace mucho tiempo.

Desde muy joven, la primera vez que lo vio aparecer fue cuando sus familias los presentaron para convertirse en amigos debido a su edad.

A diferencia de ahora, Julius solía ser pequeño, y cuando le veía desde lejos pensaba que era un niño. Pero cuando se acercó a la figura del muchacho, se dio cuenta de que desprendía un encanto que no podía ocultarse.

No, era precisamente porque estaba vestido como niño, que ese aspecto resaltaba tan vívidamente.

Para Maxian, la apariencia de Julius en ese entonces era la más hermosa en el mundo.

Él se había sentido atraído de un solo vistazo y se había vuelto loco.

Sin embargo, mientras conversaban, observó que “ella” se comportaba como hombre. Era demasiado inteligente y se dio cuenta de ello. Esperaba ser vista como un hombre, y si no le seguía el juego, sería imposible quedarse a su lado.

Por lo tanto, aunque pensaba en Julius, actuaba como un amigo masculino mientras ocultaba sus pensamientos.

Mientras nutría su amistad de ambos actuando como un hombre, el joven  secretamente hizo un juramento en su mente. Quería “rescatarla”, ya que estaba atada por la tragedia, habiéndose visto obligada a vivir como un hombre.

Sin embargo, a pesar de tener la esperanza de “salvarla”, era consciente del hecho que si no actuaba como si “ella” en realidad fuese un hombre, no podría permanecer cerca suyo. Debido a esto, Maxian vaciló en actuar agresivamente.

Mientras sufría el conflicto entre su juramento y la situación actual, siguió siendo su amigo íntimo.

—Algún día… seguramente algún día, te liberaré de esa maldición.

Sharon
¿Soy la única a quien le parece molesto? ¿O golpearlo muy fuerte?

A pesar de sus dudas, Maxian sueña con el día en que Julius se salve.

Y, ciertamente, si fuera él quien estuviera al lado de “ella” después de recuperar su vida como mujer, no tendría mayor alegría.

Como para reafirmar su propio juramento, lo murmuró con una voz pequeña, inaudible para todos.

Para Julius, quien en realidad es hombre, el deseo de su amigo es sólo una preocupación innecesaria.

Debido a que nadie le forzó a vivir como hombre, porque él era uno. Le era imposible “recuperar” una vida como mujer, y nunca se imaginó tales cosas.

Naturalmente, Julius nunca, ni en sus más salvajes sueños, había pensado de esta forma acerca de su mejor amigo.

Maxian lo veía, sin saber por qué el entorno lo consideraba una mujer, y lo valoraba correctamente como uno de sus amigos varones.

Si se diera cuenta de que él pensaba como aquellos a su alrededor, y además buscaba “volverlo una mujer”, si se diera cuenta de tales cosas, uno seguramente pensaría que la amistad entre los dos sin duda va a desarrollar una grieta.

En ese sentido, la idea de Maxian de que debía ocultar sus sentimientos o no podría permanecer cerca de Julius, era correcta.

Haciendo varias suposiciones equivocadas, no había salvación para nadie.

♦ ♦ ♦

—Maxian —lo saluda una persona de pie junto a la pared.

Quien le llama es una señorita con pelo verde que se extiende hasta su cintura.

Su nombre es Lilycia Sevulan. Es la única hija de la casa del Barón Sevulan y también una amiga cercana de Emilyn. Desarrolló una buena relación con Julius y Maxian a través de ella.

Ambas son de la misma edad y dos años más jóvenes que los chicos. Sin embargo, debido a su actitud tranquila y adulta, a menudo se ve como si tuviera más edad. Así, mientras habla con Maxian, parecen tener la misma edad, inclusive parece más madura.

Cuando ambas están juntas muchos piensan que parecen hermanas, a pesar de que su apariencia no es similar, debido a que Emilyn se ve más inocente que las señoritas de su edad.

—Señorita Lilycia, así que viniste con la señorita Emilyn.

—Sí, huyó tan pronto como vio la figura de Julius, así que la dejé.

—Es porque a la señorita Emilyn le gusta mucho Julius.

—Sí, es verdad.

Ella habla con una sonrisa torcida, ya que también es una de las chicas que anhelan a Julius.

Sin embargo, también anima a su mejor amiga desde el fondo de su corazón, mientras mira a las dos figuras a un paso de distancia.

—¿Está bien si espero a su lado?

—Aah, por supuesto que sí.

—Bueno, entonces, disculpe.

Lilycia se para junto a Maxian y gira su mirada hacia la misma dirección que él.

Permanecen en silencio por un momento mientras observan las figuras danzantes de sus amigos en el centro de la sala de banquetes.

La gente circundante había dejado de bailar, y el único par que quedó se convirtió en los personajes principales del lugar.

Julius está al lado de Emilyn.

Emilyn está al lado de Julius.

Una sonrisa siempre flota en el rostro de Julius, y para Maxian, quien ha mantenido una larga relación con él, esa sonrisa no es algo que normalmente pone delante de los demás. Es genuina desde el fondo de su corazón.

Emilyn porta una sonrisa amplia. Incluso desde aquí, todos pueden ver que es completamente sincera.

Las dos personas bailando alegremente, desde el exterior se reflejan, deslumbrantes, en los ojos de sus amigos.

Eran amantes muy apropiados, tanto que ni siquiera una partícula de polvo tenía la oportunidad de entrar entre ellos.

—Pareja… —murmuró Maxian, mirando a Julius.

—¿Eh?

Lilycia, quien está mirando en la misma dirección, se sorprende un poco por sus palabras, haciendo que se vuelva hacia él. Sin embargo, los ojos del otro siguieron en Julius y no se voltearon hacia ella.

—Esos dos, me pregunto si siempre permanecerán de este modo.

—Eso es…

Lilycia comprende el significado de aquellas palabras muy bien. Puesto que ella misma había pensado en ello varias veces.

Julius y Emilyn: “Una pareja de dos mujeres”… Ambos están convencidos de ello.

—Al menos, Emilyn piensa seriamente en Julius. Y, por lo que puedo ver,  él probablemente… —dice Lilycia, volviendo a mirar el centro de la sala de banquetes.

—Sí… eso parece —responde Maxian, soportando el dolor.

Para él, que ama a Julius y desea que vuelva a ser mujer, no quiere admitir que piensan seriamente el uno en el otro. Sin embargo, observando la apariencia de los dos, quienes parecen felices, sentimientos de querer animarlos nacieron.

Te amo, así que quiero que te quedes a mi lado. Como te amo, también quiero que seas feliz. 

Su corazón se encontró en un dilema ante estos dos sentimientos.

Las palabras van acompañadas de una mirada complicada, así como de una inundación de emoción y deseos.

El silencio se adueña de la escena apenas la conversación finaliza.

Aunque el aire se encuentra un poco pesado debido a la conversación anterior, Maxian, al no le agrada la atmósfera, trata de cambiarla hablando en un tono más brillante.

Puede haber sido malinterpretado, como si intentara disimular el dolor en su corazón.

—Por cierto, si no le importa, ¿se uniría a mí para una canción…? Si se puede, por sólo un poco de tiempo, señorita Lilycia. Porque como es de esperar, no tengo el coraje de interrumpir la situación allí.

—Sí, estaría encantada de ser su compañera de baile, pero yo tampoco puedo ir allí. Como se puede ver en las miradas frías de los alrededores no seríamos bien recibidos, y el que nos comparen con ellos sería demasiada presión. Me pregunto si hay alguien con tanta confianza en sí mismo como para hacerlo… —Lilycia, quien de repente nota algo, se da la vuelta para mirar en esa dirección. Su expresión pronto cambia a una de asombro—. ¿Quizás no se dieron cuenta de las miradas circundantes?

Al notar la mirada de su acompañante, Maxian mueve lentamente su línea de visión hacia la misma dirección. Cuando los dos se dan la vuelta, un par, un hombre y una mujer se dirigen hacia el centro de la pista.

—Por ejemplo, como esa persona.

—Oh cielos, es la aparición del príncipe.

5 respuestas a “El Secreto de la Belleza – Capítulo 4: Mejor Amigo”

  1. Sep, creí que era su íntimo amigo pero también cree que es mujer, que pedo xD. Me alegra que su madre no le haya emparejado con un hombre en su fantasía de que su hijo es “mujer”. Por otro lado, sería bizarro que siendo “mujer” lo emparejen con otra.

    No soy fan de las historias de relaciones homosexuales, aunque tampoco las desprecio (cada quien sus gustos) jaja por eso me alegra que esta no sea de este tipo xD. Porque la trama está muy buena, la verdad.

  2. Sharon yo apoyo la moción de matarlo o golperlo, que show con este tipin!!! Que no entiende que es del genero masculino…. Elizabeth que le hiciste a tu hijo….pobre Julius…

    1. La verdad, si Maxian hubiera querido cambiar a Julius por el bien del propio Julius, no habría tenido problema. Pero sólo quiere que vuelva a su “verdadero yo” para que él pueda salir con Julius.

    1. Julius es hombre, desde el primer capitulo te lo definen es hombre, por mala muy mala suerte para el su madre es una fanatica ferviente de una novela sobre una travestida por lo que uso a julius desde pequeño para hacer la novela realidad, lo entreno especificamente para aparentar ser un travestido.

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