Traducido por Lucy
Editado por Sakuya
Los novatos miraban furiosos a Shi Xiaobai como lobos salvajes mientras el anciano curaba de sus heridas. De no ser por él, el grupo de novatos seguro habría descargado su ira abalanzándose sobre él y dándole una paliza.
Por supuesto, todo fue gracias a la presencia del anciano, o los novatos seguro vomitarían sangre al darse cuenta de que habían estado dando con diligencia a Shi Xiaobai oleada tras oleada de “finales felices” después de darle una paliza.
Él miraba de igual forma enfadado a la multitud. Nunca se doblegó ante las fuerzas del mal y estaba decidido a no hacerlo nunca, qué más ante estos subalternos dadores de experiencia.
Así que no tenía miedo de esta batalla, de hecho, también quería cargar con furia hacia adelante para descargar su ira contenida.
Sin embargo, al final reprimió la ira en su corazón porque sabía que no tenía sentido. Podría ser capaz de golpearlos y “torturarlos” para que confesaran, pero la información que obtuviera no podría ser verificada en cuanto a su veracidad, por lo que hacerlo era una pérdida de tiempo demasiado grande.
Cerró los ojos mientras su mente se calmaba poco a poco. Cuando volvió a abrirlos, sus ojos parecían tan tranquilos como el agua. Ya no miraba a los otros novatos, como si no existieran.
Aceptó con calma la grave situación de que los novatos no pudieran proporcionarle ninguna información, porque la única manera de enfrentarse a las espinas que tenía bajo los pies era seguir adelante.
—Tiene que haber una manera.
Comenzó a consolarse mientras bajaba la cabeza para contemplar.
Cuando los novatos lo vieron bajar la cabeza, se burlaron de forma despectiva en sus corazones, pensando que había sucumbido. Sus puños se cerraron con más fuerza, pero debido a la presencia del anciano, no hicieron ningún movimiento precipitado. Sin embargo, una vez que la batalla campal se reiniciara, sin duda no lo dejarían escapar.
Tenía que pagar un precio por haberles calumniado.
La curación del anciano también llegó con rapidez a su etapa final. Incluso él era incapaz de curarlo por completo de sus heridas. Todo lo que podía hacer era todo lo posible para eliminar cualquier posible efecto secundario residual. En ese momento, empezó a dudar cuando vio a los novatos mirando de forma agresiva a Shi Xiaobai. Se preguntaba si debía eliminarlo por la fuerza.
La mano derecha del niño no debía ser sometida por el momento a ninguna tensión, incluso a costa de que perdiera su elegibilidad para el entrenamiento colectivo. Si los novatos estallaban y atacaban sin contenerse, sería desastroso.
El anciano lo tenía en alta estima, lo que se traducía en todas estas preocupaciones. Incluso estaba alargando sin querer el tiempo de curación.
Varios novatos habían comenzado a reiniciar sus propias batallas, pero un gran número seguían esperando su partida.
En ese momento, Shi Xiaobai levantó la cabeza mientras recordaba lo que Ye Jiaquan le había dicho hace poco: ¡Chen Lingcun le había dejado una carta!
¡Tal vez mencionara su paradero en ella!
Aunque era poco probable, era como un destello de luz en una caverna oscura para el perplejo chico.
Ye Jiaquan había mencionado que había olvidado traerla. Entonces con claridad, fue dejada en los dormitorios de los novatos. Sin duda perdería mucho tiempo recuperando la carta haciendo un viaje de ida y vuelta.
Pero… ¡Este era el último método posible!
Lo miró y le preguntó con una expresión muy seria:
—Buey de Acero, si Este Rey te dice que Lingcun está en este momento en grave peligro, y la carta que dejó para Este Rey puede salvarle la vida, ¿qué deberías hacer?
Ye Jiaquan sintió como si un rayo le hubiera caído encima al oír esto.
Si la carta que olvidó traer determinó la vida de Lingcun, ¿no lo estaría perjudicando sin querer?
Si ese era de verdad el caso, ¿qué debía hacer?
—¡Iré a buscarla!
Después de gritar esas palabras, de inmediato se dio la vuelta y salió corriendo.
—¡Abran paso!
Rugió para que los novatos que bloqueaban su camino le abrieran paso. Sus ojos eran rojos como una bestia feroz, ¡así que esos pocos novatos se apresuraron a esquivarle asustados!
En ese momento, se culpaba a sí mismo y se sentía muy ansioso. Por las diversas acciones de Shi Xiaobai, podía adivinar que Lingcun muy seguro había encontrado peligro y ya estaba en una etapa crítica. Ahora, sabiendo que el olvido de traer la carta era una parte tan importante de este asunto, ¿cómo podía quedarse sentado sin hacer nada?
En ese momento, gritaba sin parar en su corazón: ¡Más rápido, un poco más rápido, necesito conseguir esa carta más rápido!
En ese momento, era como un toro rabioso que cargaba hacia adelante. Su ansiedad le había permitido romper sus límites, por lo que la velocidad a la que corría era asombrosa.
Los novatos estaban muy sorprendidos.
—¿Este tonto búfalo de verdad puede correr tan rápido?
—Mierda, esto no es científico. ¡Es como un búfalo, pero corre más rápido que un conejo!
—Ye Jiaquan, lo hemos subestimado. Pensábamos que era solo un tonto búfalo con fuerza bruta, quién iba a decir que era un misil scud.
Los novatos se quedaron muy sorprendidos. La mirada de Wang Lin y Xiang Wu también se volvió solemne, porque tenían que admitir que con sus velocidades, ¡había una alta probabilidad de que no pudiera seguir su ritmo!
Incluso Riko se asustó un poco.
—En efecto, los pájaros se juntan. ¿Cómo puede ser normal la gente que anda con Shi Xiaobai? Este [Paso del Toro Furioso] tiene el estilo de [Paseo del Viento].
Yama Minamiya asintió.
—Parece que la calidad de los novatos de esta hornada de [Aniquilación] no es mala. El [Paso del Toro Furioso] de este niño está a punto de abrirse paso hasta el reino de la Maestría Ejemplar. Es un talento poco común.
Mientras todos se maravillaban ante la repentina velocidad de Ye Jiaquan, alguien se quedó sin habla.
Shi Xiaobai dobló la comisura de sus labios. Él solo quería que Ye Jiaquan le guiara para poder recuperar la carta en los dormitorios de los novatos. Nunca esperó que fuera el que saliera corriendo, como si fuera a sacrificar su vida para traer la carta de vuelta.
Por supuesto, todo esto era culpa suya por no dejar las cosas claras, pero…
¿Por qué este Buey de Acero corre tan lento?
—No, esto no servirá. Será demasiado tarde si esto sigue así.
Con sus ojos concentrados, levantó sus pies y persiguió a toda velocidad con [Pasos de Cangrejo] Encontró la velocidad demasiado lenta, por lo que sin duda perdería mucho tiempo si esperaba recuperar la carta y regresara.
Mientras cargaba, una escena que hizo que a todos casi se les salieran los ojos ocurrió.
Todos lo vieron dar un paso adelante con su pie derecho y luego otro con el izquierdo. Sin duda no parecía dar grandes zancadas ni la frecuencia era muy alta, pero su figura parecía atravesar en un instante distancias de más de diez metros con cada zancada. En solo unos segundos, lo había alcanzado. Con un pellizco del brazo, avanzó con él. Las dos personas desaparecieron con rapidez bajo el horizonte.
Esta escena era como un paseo en motocicleta. Una persona que iba en bicicleta se lamentaba de lo rápida que era la motocicleta, cuando de repente un Ferrari se lanzó hacia adelante, bloqueandola. A una velocidad varias veces superior a la motocicleta, el Ferrari refrescó la visión del mundo de la persona.
En ese momento, todos estaban aturdidos. Ni siquiera podían gritar “mierda”.
Riko estaba a punto de llorar. Los [Pasos de Cangrejo] habían alcanzado el reino de Refinamiento Dominante, ¡un reino superior a sus [pasos de Meteoro]!
¡Yama Minamiya también confirmó su suposición de que Shi Xiaobai era “Dirigiendo como un perro”!
Y en este momento, los novatos que querían golpearlo rompieron de inmediato en sudor frío. Este zorrito seguía siendo la misma persona a la que le encantaba hacerse el cerdo para comerse a los tigres. ¡Casi habían caído en su maquinación!