Traducido por Maru
Editado por Nemoné
Un corpulento y aburrido verdugo en blanco y negro. Una mujer atada y empapada de sangre. Su ostentoso vestido, que mostraba su prestigioso estatus, estaba empapado y manchado desde hace un tiempo. Enfurecida, la gente gritaba ruidosamente.
— ¡Mátala!
— ¡MATADLA!
— ¡Perra malvada!
Una piedra voló y la golpeó en la cabeza.
Aunque sangraba vívidamente, nadie la compadecía. Ellos solo le lanzaban miradas furiosas y maldiciones.
— ¿Unas últimas palabras que le gustaría pronunciar?
El Emperador se paró frente al lugar de ejecución. Solo mantuvo un frío desprecio, hacia la persona que una vez fue su esposa, mientras hablaba con una voz indiferente.
—El Duque… Tu padre y tus hermanos mayores murieron por los pecados que cometiste.
—…
—Durante su último aliento, todo lo que les preocupó fuiste tú. Suplicaron que perdonaran tu vida a cambio de la suya.
Después de ver que sus ojos mostraban remordimiento y agonía, era demasiado tarde para lamentarse ahora.
—Expíalos en el infierno. —dijo con frialdad.
Después, una espeluznante hoja de guillotina cayó sobre su cuello.
♦ ♦ ♦
La escena cambió.
Un quirófano en blanco y negro. Los cirujanos miraban al paciente con expresión de urgencia.
— ¡El bazo del paciente se ha roto! ¡La presión sanguínea es demasiado baja!
— ¿Has transfundido sangre?
—Ya lo estoy haciendo, pero el paciente ya ha perdido mucha.
Sus ojos temblaron. La condición actual del paciente era crítica.
— ¿Podrán salvar la vida de esa persona?
Fue entonces cuando la puerta del quirófano se abrió y entró una joven chica en la sala.
— ¿Cuál es la condición del paciente?
La palabra pequeña, no, la palabra delicada la describía muy bien. Lucía como alguien que se desmayaría al ver una gota de sangre. Esa joven parecía no pertenecer a una sala de urgencias, pero, la forma en que los médicos la miraban era extraña.
— ¡Profesora!
Sus rostros se iluminaron como si fuera su salvadora. La chica habló con voz calmada.
— ¿Están todas las preparaciones para la cirugía listas? ¿Cuál es la presión sanguínea?
—Sesenta de sistólica. [1]
Esa era una condición de shock grave, pero la mujer solo asintió con la cabeza sin ningún atisbo de tensión. Mientras se ponía los guantes, miró al doctor robusto.
—Chief Kim.
— ¿Sí? ¡Sí, profesora!
— ¿Por qué estás tan nervioso?
—La… La condición del paciente…
Ante eso, la dama se echó a reír. Tenía una sonrisa tan suave que al instante podía calmar a una persona.
—Chief Kim, ¿qué debemos hacer ahora?
—…
—Dime.
—Después de abrir el abdomen, necesitamos encontrar el vaso roto y detener el sangrado. Después debemos decidir, dependiendo de los daños, si quitarlo o no.
La joven asintió con la cabeza como si no fuera gran cosa.
—Correcto. Es una respuesta precisa, y es exactamente lo que vamos a hacer.
—…
—Ahora, escucha. De ahora en adelante, vamos a salvar a este paciente. Incluso si su condición actual no es muy buena, creo que todavía podemos salvarlo. ¿Están de acuerdo conmigo, chicos?
—Sí, también lo creemos.
Los médicos que estaban bajo mucha presión se calmaron. Es cierto que pueden salvar a ese paciente. ¡No, cualquier paciente si estaban al lado de esa fuerte dama!
—Bisturí.
Tan pronto como ella entró en la operación, su expresión cambió. De una delicada dama, se transformó en un cirujano que luchaba por la vida de un paciente al borde de la muerte.
—Voy a comenzar.
El bisturí cortó el abdomen. Después, la sangre salió a chorros y salpicó su pálido rostro. De esa forma, su guerra había comenzado.
♦ ♦ ♦
Sus ojos se abrieron de golpe.
—Era un sueño de nuevo…
Sacudió su cabeza. Eran sus vidas pasadas. El sueño de cuando era una malvada villana, Elise, y la cirujana coreana, Song Ji Hyun.
—De todos modos, ¿qué está pasando?
Miró su cuerpo.
—Fui asesinada…
¡Pero definitivamente estaba muy viva en un cuerpo que le resultaba familiar!
Dejó escapar un profundo suspiro y miró el espejo como si no pudiera creer lo que estaba viendo. Con un cabello dorado y cara de muñeca…
Elise de Clarence. Había regresado al cuerpo perteneciente de su segunda vida.
— ¿Qué está pasando?
Dejó escapar otro suspiro. Estaba completamente segura de que Song Jin Hyun estaba muerta. Murió en un misterioso accidente aéreo, no había duda. Sin embargo, cuando abrió los ojos había regresado al cuerpo de su primera vida. Y no solo era su anterior cuerpo, sino de cuando tenía dieciséis años.
—Como sea —sacudió su cabeza—. De todos modos, estoy viva.
Habían pasado diez días desde que retomó la consciencia. Cuando llegó la primera vez, sus sentidos y pensamientos eran caóticos; sus emociones también estaban exaltadas, pero ahora se sentía tranquila. Estaba en una condición mucho más estable y decidió aceptar lo que le había pasado, aun si no tenía idea de cómo había ocurrido.
Entonces, en ese momento…
— ¿Señorita? Joven señorita, estoy entrando.
—Ah. Mmmm, sí, entra.
—Aquí está su comida, señorita.
—Mmmm. Gracias.
La joven doncella colocó cuidadosamente la comida en la mesa y luego miró a su dama con cautela.
—Esto… ¿Señorita?
— ¿Eh?
— ¿No se siente bien?
—Estoy bien. ¿Por qué? —respondió con cierta perplejidad.
—No, es… Es solo que no es su ser habitual. Parece menos enérgica de lo usual…
Al principio estaba completamente desconcertada, pero luego se dio cuenta de lo que ella quería decir.
Ah… claro. Mi personalidad original…
En su primera vida, Elise, a diferencia de su cara de muñeca, tenía una personalidad horrenda. Cada minuto, se quejaba o lanzaba un ataque. Obviamente, no hacía falta decir que siempre estaba tirando cosas. El número de personas que resultaron heridas en el fuego cruzado no era de sorprender.
Esto todavía se considera “gentil”, ya que en este momento, todo lo que tenía era una personalidad repulsiva que aún no había cometido ningún crimen importante. Sin embargo, a medida que crecí…
Se sintió repugnante mientras repasaba sus crímenes pasados. La casa noble más grande de este país fue destruida por su culpa. Ver morir a sus seres queridos se había convertido en una carga que debía llevar consigo todos los días de su segunda vida.
En esta vida, no permitiré que vuelva a suceder. Desde que regresé al cuerpo de Elise, debo vivir su vida.
Sin embargo, ella, que había vivido como cirujana en la Tierra, no sabía cómo iba a vivir esta vida. De lo único de lo que estaba segura era de su rechazo hacia su vida anterior llena de pesar.
—Mary.
— ¿S-Sí? ¡Sí!
Mary estaba tan sorprendida por su suave tono, que prácticamente gritó.
¿Qué está planeando? Qué excusa está buscando para golpearme…
La joven sirvienta ya estaba dominada por las formas maliciosas de su señora y sus ojos mostraban gran temor.
— ¿Es hasta hoy… el último día de mi castigo?
Actualmente, Elise cometió una mala acción y enfadó a su padre, el Marqués. Estaba confinada en su habitación para arrepentirse como castigo.
—En realidad es bueno que haya sido castigada.
Por lo tanto, no causó que nadie la visitase, lo cual era bueno. Si alguien la hubiera visto desconcertada, la habrían encontrado bastante extraña.
—Ah, señorita, el Marqués quiere verte en la cena.
— ¿Padre?
—Sí, él quiere que asista a la cena familiar.
—Oh…
Si es una cena familiar, entonces…
— ¿Se están reuniendo todos? ¿Padre, madrastra y mis hermanos mayores?
—Sí, todos los que no están especialmente ocupados, excepto, por supuesto, para el hermano mayor, ya que el jefe de la Caballería Romanoff siempre está ocupado. Por lo demás, todos vendrán.
Elise sintió que su corazón daba un vuelco. Finalmente estaba encontrándose con su familia anterior. Había sido un camino tan largo, tan largo… Esta era la primera reunión después de sus dos vidas y muertes.
♦ ♦ ♦
Pronto llegó la hora de la cena.
Elise, en su precioso vestido, estaba de pie frente a la puerta.
—Tengo que entrar.
No podía soportar abrir la puerta del comedor. Por un largo tiempo, merodeó por el pasillo. Como ya había pasado el tiempo señalado, todos deberían haberse reunido ya.
— ¿Cómo debo reaccionar ahora?
La razón por la que se demoraba en el pasillo, era que no sabía cómo tratar a los miembros de su familia, a quienes no había visto desde hace treinta años.
—Quise verlos por tanto tiempo…
No era como si alguna vez los hubiera olvidado, incluso en su segunda vida en la Tierra. De hecho, por su culpa, los arrastró con ella. Siempre los añoró y deseó expiar su pasado.
Sin embargo… La actual ella no era la original Elise, Dama del Marqués, sino la cirujana Song Ji Hyun. Así que por eso se sentía incómoda y no sabía cómo tratarlos. Pero pronto negó con la cabeza.
— ¿Por qué tienes problemas, Song Ji Hyun? Me encontraré con mi familia. La familia que anhelé durante treinta años.
Y entonces abrió la puerta. Tan pronto como lo hizo, la conversación de los miembros de su familia se detuvo. Giraron sus cabezas hacia ella.
—Ah…
Tan pronto como vio sus caras, el tiempo se paró.
—Ah…
Cubrió su boca con sus manos. Sus dedos, sin su consentimiento, comenzaron a temblar incontrolablemente. No tenía sentido en preocuparse por cómo tratarlos. Su padre era alguien que siempre la amó incondicionalmente sin decir nada, pero por ella, fue marcado y asesinado.
Su hermano mayor más joven, cuyo amor infinito cubría a su yo atroz, para pagar por sus crímenes, se vio obligado a luchar hasta la muerte en batalla. Incluso cuando estaba muriendo por enfermedad, la madrastra que solo se preocupaba por ella como su fuera su propia hija, su propia carne y sangre… Sin embargo, al final, Elise la odió.
Estaban vivos de nuevo frente a ella. Este hecho estaba destrozando sus entrañas.
— ¿Elise? ¿Qué está mal?
Tan pronto como su desconcertado padre habló, una lágrima cayó de sus ojos.
—Ah, ah…
Rápidamente limpió la lágrima, pero siguieron fluyendo otras sin parar.
— ¿Lize? ¿Qué ocurre?
El hermano, que siempre la atesoró, se sorprendió y acercó.
— ¿El castigo fue demasiado duro para ti? Por eso le dije a padre que aun si hiciste algo mal, el encierro en tu habitación durante diez días era demasiado severo. Ahora deja de llorar, mi bella hermana, ven aquí.
Su hermano mayor, Chris, la abrazó con fuerza.
Al sentir el calor familiar que no tuvo desde hace treinta años, sollozó interminablemente en ese cálido abrazo.
—Hermano mayor, lo siento. De verdad, de verdad… En esta vida, prometo que eso no volverá a suceder.
Por sus crímenes, él tuvo que expiarse luchando en la guerra. Recordó haber recibido noticias de su muerte en la finca. Nunca volverá a repetir esa desgracia.
Chris le dio unas palmaditas en los hombros mientras la sostenía.
— ¿Lize? Debe haber sido duro para ti. No llores. Eres una dama en espera de un compromiso, así que no debes llorar.
Padre y madrastra también se acercaron.
—Querido, no importa lo que haya hecho mal, te dije que eras demasiado duro con ella.
—Ah… Lo… Lo siento mucho. Fui demasiado estricto. Sé que la culpa es mía, así que no llores.
El padre generalmente digno se disculpó con una cara nerviosa.
Sin embargo, Ji Hyun no escuchó sus palabras.
Están vivos de nuevo. Todo el mundo está vivo otra vez y no es un sueño.
Se despegó de Chris.
—Estoy… bien.
Miró a su familia. Sus lágrimas no paraban, pero les sonrió. Era una sonrisa llena de sufrimiento, arrepentimiento y un poco de fragilidad de su anterior vida.
—Padre, madre, hermano.
— ¿Qué es? ¿Elise?
Finalmente pudo decir las palabras que durante treinta años estuvo escondiendo en su corazón.
—Los quiero. —Cerró los ojos, cayendo más lágrimas—. Y… lo siento por todo. De verdad.
De esa forma, ella había vuelto a su primera vida.
[1] La presión arterial (o tensión arterial) es la presión que ejerce la sangre sobre las arterias. Tiene que tener unos valores que permita llevar la sangre a los órganos para que estos puedan nutrirse, y si éstos son bajos, éstos entrarán en fallo. Existen dos presiones: la sistólica (que coincide con el latido cardiaco y con el valor más alto) y la diastólica (coincide con la relajación cardiaca/llenado del corazón y es el valor más bajo). Para que una persona esté bien, debería tener una presión sistólica superior a 100 mmHg (presión normal 120/65 mmHg). En los niveles que se muestran en este capítulo, 60, no hay presión suficiente para que los órganos puedan nutrirse y llevar a cabo sus acciones. A esto se le llama shock, hipovolémico en este caso, por la caída de la presión por pérdida de sangre. Lo primero a hacer en este caso, además de parar la hemorragia, es reponer el volumen para subir la presión.
[Pueden encontrar el siguiente capítulo en la edición 11 de Kovel Times]
Siempre me he preguntado, ¿ qué fue lo que ella hizo que hizo que su esposa la odiara a tal punto? y también, qué hizo, que su familia tuvo que morir por ello. Pero la vida le está dando una oportunidad, de apreciar a todo aquel que realmente la aprecia.
Muchas gracias por el capítulo 💜🌸💜🌸
Adoro a Lize 😍😍😍 aprendió de sus grandes errores y ahora le han dado otra oportunidad para poder sanar su corazoncito 😍😍😍
Ay lloré se nota su arrepentimiento
Gracias estoy muy feliz! me encantó
¡Gracias por leer! Ya puedes echarle un vistazo al segundo capítulo en la Edición 11 de nuestra revista. ¡Continuaremos actualizando para traer esta linda historia!
Gracias por el capitulo maru-sensei!!!
¡Gracias a ti por leer!. Recuerda que esta novela se actualiza antes en la revista, así que ya puedes echarle un vistazo al segundo capítulo en la Edición 11 ;D
Gracias por el capítulo, Leo el manhwa, pero cuando me enetere que traducirán la novela, realmente me lleno de alegría
Esta disponible el próximo capítulo en la edición 11 de “Kovel Times” 😉