Traducido por Selena
Editado por Meli
—Xian’Er… —La sujetó por la mano para detenerla—. Xian’Er, dame una oportunidad más, ¿de acuerdo? Al principio, estabas comprometida conmigo. ¡Tú, habrías sido mi esposa!
—¡Suéltame! —Quiso soltarse, pero la sujetaba con la firmeza de un grillete.
—¡No! —Apretó los dientes y miró el hermoso rostro de Murong Qi Qi—. Una vez, Benwang se dejó llevar y casi dejó ir el amor de su vida. Ahora, por fin tengo una oportunidad. Esta vez, este príncipe no la dejará escapar…
Fue interrumpido por una figura blanca que lo golpeó en el bajo vientre. Voló por la fuerza de la patada y con un sonido de explosión, cayó al suelo.
—¡Sirvientes, cierren la puerta, dejen salir a los perros…! —Feng Cang sujetó la cintura de Murong Qi Qi y miró fríamente a Longze Jing Tian.
En un instante, una gran y apestosa mosca había parecido y tocado lo que era suyo.
Longze Jing Tian se agarró el abdomen y se acurrucó dolorosamente en el suelo, el golpe había sido realmente fuerte.
—Príncipe, ¿te irás solo o quieres que te echemos? —Feng Qi dirigió a un grupo de personas hacia él y todos rodearon a Longze Jing Tian, listos para levantarlo y echarlo.
Un príncipe del país siendo expulsado; ¡¿qué tan vergonzoso sería eso?! Longze Jing Tian luchó y se levantó por sí mismo,
—¡Benwang se irá por sí mismo! —Se levantó con dificultad y antes de salir, observó a Murong Qi Qi y gritó—: ¡Xian Er, no me rendiré! ¡Definitivamente no te dejaré ir!
—Vete… —advirtió iracundo Feng Cang.
El sonido de la voz llegó hasta Longze Jing Tian, haciendo que sus oídos sintieran un dolor punzante. Se agarró las orejas. Su apariencia no podía ser más lamentable que ahora, las puertas se cerraron justo detrás de él.
¡No me rendiré! ¡Eres mía! ¡No me rendiré! ¡Serás mi esposa!, apretó los puños y se volvió con fiereza para mirar la puerta roja.
Feng Cang estaba muy celoso. Mordió la oreja de Murong Qi Qi como un animalito enfadado y descargó la insatisfacción de su corazón.
—Príncipe, no hay nada entre nosotros. Tienes que creerme. —El calor en su oreja hizo que todo su cuerpo sintiera picazón. Rápidamente esquivó su mordisco.
—Lo llamas príncipe, y a mí también me llamas así. ¡Ni siquiera sé a quién estás llamando!
Feng Cang cruzó los brazos e hizo un mohín enfadado. Su rostro traslúcido se había vuelto rojo como una manzana, haciendo que los demás no pudiera evitar querer besar esa cara.
El par de hermosos ojos diabólicos estaban ahora llenos de fuego: Longze Jing Tian la persiguió y también le agarró la muñeca. ¡¿Cómo no iba a estar enfadado?!
—¿Qué tal si te llamo de otra manera? —Le dio un beso ligero en la cara—. ¿Qué te gusta? Por ejemplo: Cang, Cang Cang, pequeño Cang Cang, amado, querido, bebé…
—¡No quiero un apodo popularizado! —Su expresión había mejorado—. ¡Para no confundirme y no saber si me llamas a mí o a Longze Jing Tian!
Murong Qi Qi descubrió que cuando Feng Cang estaba celoso, su temperamento era muy malo. Sin embargo, eso significaba que se preocupaba por ella. Cuando un hombre ya no se preocupa por ti, no importa lo que hagas, incluso si te fugas, ¡él no tendría una opinión!
—¿Qué tal si lo matamos?
—¡Genial! —Aplaudió—. He oído que Moyu es la mejor organización expertos en asesinatos. Qing Qing, ¿por qué no les pedimos a ellos que maten a Longze Jing Tian? ¿Qué te parece?
Los ojos de Murong Qi Qi se contrajeron. ¿Feng Cang, podría saber que ella era Du Xian Er? Si descubriera que ella era esa asesina similar a una serpiente de los rumores, ¿qué pensaría?
—Olvídalo, no lo mates. Después de todo, todavía está en Bei Zhou. Si le pasa algo, Xi Qi creará problemas…
—Qing Qing, —Apoyó su barbilla en su frente—. Tu corazón solo puede tenerme a mí, ¿lo sabes? Solo pensar que te enamoras de otro, hace que sienta dolor como si una daga me atravesara. Qing Qing, ya te has convertido en parte de mi vida. Si te pierdo, no sé qué hacer…
—Cang, no me enamoraré de otro, porque tú ya has llenado mi corazón y nadie más podría entrar en él. —Sus ojos llorosos reflejaban sus sentimientos.
—Entonces, está bien —Feng Cang cerró los ojos y la besó en la frente.
♦ ♦ ♦
Por la tarde, Feng Cang convocó a Nalan Xin al estudio.
—Ve. —Le lanzó un papel en cuanto entró al estudio— Investiga la identidad de Wangfei.
—Wangye, ¿estás diciendo que wangfei podría ser Du Xian Er de Moyu? —Frunció el ceño.
—En primer lugar, investiga a Longze Jing Tian. Una vez huyó de un asesinato. Averigua quién lo salvó. Si fue Du Xian Er, entonces Du Xian Er es wangfei. —Se sentía inquieto por la conversación que escuchó por la mañana.
Si Murong Qi Qi era Du Xian Er, entonces podría explicar por qué Guanghua gongzi, apostaba mil piezas de oro en un lanzamiento [1] sobre Murong Qi Qi…
Los rumores del jianghu[2], eran que Du Xian Er y Guanghua gongzi eran pareja. ¿Murong Qi Qi y el desconocido Guanghua gongzi eran amantes? ¿qué debía hacer?
Feng Cang, sabía que la probabilidad de que Murong Qi Qi fuera Du Xian Er era muy alta. Du Xian Er era muy buena usando venenos y Murong Qi Qi era Lian gongzi; tenía la habilidad de salvar, pero también de matar, todo encajaba como un rompecabezas. Además, Du Xian Er[3] era hermosa como un hada, por eso recibió el nombre de «Xian Er». Y la extraordinaria apariencia de Murong Qi Qi solo podría describirse como «Xian…»
La eficiencia del trabajo de Fu Sheng Men era muy alta. Esa noche, Nalan Xin volvió con la respuesta: quien había salvado a Longze Jing Tian era Murong Qi Qi y éste, sin saber que eran la misma persona, había roto su compromiso. Ahora que sabía la verdad, se arrepentía y por eso la había ido a buscar para continuar su destino una vez más.
—Wangye, ¿qué debemos hacer? —preguntó con nervisismo al ver el rostro sombrío de Feng Cang, todo indicaba que el estado de ánimo del maestro era muy malo y que alguien moriría. No sabía quién sería esa persona desafortunada.
—¡Cierren el Jue Se Fang y el Tong Bao Zhai de Guanghua gongzi! —ordenó con los dientes apretados.
¡No me importa quién seas! Si te atreves a luchar conmigo por Qi Qi, ¡dejaré que te arrepientas de haber venido a este mundo!
[1] Apostar mil piezas de oro en una tirada: tirar el dinero imprudentemente.
[2] Jianghu: mundo de las artes marciales.
[3] Du Xian Er: Du = veneno, Xian= hada/inmortal/diosa, Er= término de cariño