Lector Omnisciente – Episodio 60: Sabor a ruina (2)

Traducido por Shisai

Editado por Sakuya


Suria se acercó y se puso delante de mí. Era al menos 20 cm más alto que yo. Abrí más mi estado para contrarrestar la presión que emitía. La oficina se inundó de repente con su energía.

La conversación a partir de ahora fue entre nosotros.

—La ruina del Olimpo… ¿Es algo personal o un deseo de los Vedas?

【—¿Es importante?】

—Sí, es importante.

Esperaba que los problemas entre las grandes nebulosas estuvieran ya en pleno apogeo. Buscaban cooperar conmigo para arruinarse mutuamente, pero en un principio, Vedas, Olimpo y Papiro no eran alianzas sólidas. Todas las grandes nebulosas estaban en una posición potencialmente competitiva cuando perseguían «Una sola historia».

Suria pensó un momento antes de responder.

【—No me gustan el Olimpo y los Vedas. ¿Es esto suficiente como respuesta?】

Era una respuesta vaga. Sin embargo, en cierto sentido, era la respuesta que quería. Basado en la novela original, Suria era definitivamente una constelación herética de los Vedas.

—Es una respuesta.

【—Tengo suficiente autoridad para dar un Soma. ¿No sabes quién soy?】

Suria era la fuente del Soma, una bebida inmortal. Si conseguía su promesa, entonces obtenerla definitivamente no sería un problema. Las cosas se habían puesto interesantes.

El dedo de Metatrón se movió como si le agradara escuchar nuestra conversación. Observé el dedo que se movía como un metrónomo y hablé:

—Aún me queda una pregunta. La ruina del Olimpo es precisamente…

【—El escenario 60, Gigantomaquia.】

—Eso es sólo un evento del parque temático. Convocarán a unos cuantos gigantes para cazar y…

【—Si no son serios, tú los harás ponerse serios.】

…¿Desde cuándo me escuchaba? ¿Se suscribió al canal de Biyoo?

【—El Olimpo no será destruido repentinamente a causa del escenario. Sin embargo, es posible proporcionar un peldaño hacia la ruina.】

—¿Cómo?

【—¿No has pensado ya en cómo hacerlo?】

El tercer ojo en la frente de Suria era blanco. Lo miré a los ojos. En efecto, no podía dar un paso atrás y fingir ignorancia.

—Es absurdo con mi poder o el poder de mi nebulosa. Por supuesto, esto no significa que no tenga una manera.

El dedo de Metatrón dejó de moverse al oír mis palabras y lo observé.

—Escriba, asume la responsabilidad de llamar a esta persona.

【—¿A qué responsabilidad te refieres?】

—Sé testigo de este acuerdo.

Metatrón pasó de tener una expresión expectante a lucir intrigado.

【—¿Cuáles son las ventajas de ser testigo?】

—Te daré una participación en la historia gigante que obtendré esta vez.

Una participación en una historia gigante. Fuera cual fuera el escenario, la historia gigante era una tentación que no podía ser ignorada por una nebulosa. Además, los arcángeles del Edén necesitaban un enorme número de historias gigantes porque todos los días se producían incidentes y necesitaban difuminar la tormenta de probabilidades.

Metatrón asintió satisfecho.

—Naturalmente, tu boca no puede estar vacía.

【—¿Qué quieres decir? Basta con ser testigo…】

—¿Quieres clavar una estaca en una historia gigante sólo con eso? ¿Adónde fue a parar la conciencia de un arcángel?

【La ‘Cuarta Pared’ asiente.】

【La ‘Pared que divide el Bien y el Mal’ mira de cerca a su maestro.】

Una ligera vergüenza cruzó el rostro de Metatrón. A veces la justicia devoraba a su amo.

Suria sacudió la cabeza y murmuró:

 【—Verdaderamente un rey demonio.】

【—…Rey Demonio de la Salvación, ¿hay algo que quieras del Edén?】

Asentí con la cabeza. Había muchas cosas que quería. Y es que uno o dos preparativos no eran suficientes para la futura Gigantomaquia.

「 Kim Dokja recordó la regresión 1863. 」

No perdería a nadie.

「 En la mente de Kim Dokja, la información de «Formas de Sobrevivir» aparecía y desaparecía. 」

A partir de ahora, era probable que constelaciones de alto rango se unieran a la batalla. No sólo Suria, sino también los otros Lokapala de los Vedas y algunos de los 12 dioses del Olimpo podrían participar en el escenario.

¿Eso era todo? Podría ser posible encontrarse con reyes demonios mayores como la «Selección del Rey Demonio». Tal vez Michael también.

…Michael.

「 Finalmente, Kim Dokja tomó una decisión. 」

Miré uno de los objetos dispuestos en un estante detrás de Metatrón.

—Dame una de las reliquias estelares del Edén.

♦ ♦ ♦

Unos minutos después, Kim Dokja terminó su contrato con Suria y se plantó en la entrada de un portal. A diferencia de cuando entró, ésta era la puerta principal. Varios ángeles acudieron a despedirle.

【—…¿Ya?】

Uriel estaba llena de pesar mientras agarraba la mano de Jung Heewon. La mujer miró a su patrocinadora y la abrazó con fuerza.

【—¿Uh…?】

La inicialmente avergonzada Uriel pronto le devolvió el abrazo. Su rostro estaba lleno de emociones.

【La constelación ‘Lirio de Acuario’ está mirando a la encarnación ‘Jung Heewon’.】

El mensaje indirecto de Gabriel vino de alguna parte. Kim Dokja miró al cielo como si estuviera pensando en algo. Luego le dijo a Jung Heewon:

—Siento interrumpir la emotiva despedida, pero Heewon se quedará aquí una semana más.

—¿Eh?

—No te preocupes, ya he hablado con el escriba.

Los ojos de Uriel se abrieron de par en par al oír esas palabras.

【—¿En serio? ¿Es eso posible?】

—Por supuesto. En su lugar, por favor entrena a Heewon. Has estado ausente los últimos tres años.

【—¡Sí! ¡Déjamelo a mí!】

Kim Dokja se apartó de la amplia sonrisa de Uriel hacia Jung Heewon.

—Heewon, te veré dentro de una semana en el Olimpo.

—…Entiendo. Me aseguraré de hacerme más fuerte hasta entonces.

Tras un breve apretón de manos, Kim Dokja desapareció en el portal. Algunos ángeles parecían contrariados, mientras que otros suspiraban.

El breve acontecimiento terminó y los ángeles volvieron a sus posiciones. Gabriel observaba desde la distancia.

【—Gabriel.】

【—Escriba.】

Gabriel se inclinó hacia Metatrón que apareció detrás de ella.

【—¿Por qué no te reuniste con él?】

Gabriel no contestó.

【—El asunto de Jofiel no es culpa tuya.】

【—Pero…】

【—Jofiel es fuerte. Está haciendo bien su trabajo. Su elección será el primer paso para evitar la destrucción del Edén.】

Los ojos claros de Gabriel temblaron al oír la palabra «destrucción». Sus labios se abrieron como si quisiera preguntar algo.

【Ha llegado un mensaje.】

En el cielo, llegó un mensaje para Metatrón. Sorprendentemente, el remitente del mensaje era el «Comandante del Cosmos Rojo».

—Este es un informe sobre la identidad del dios exterior, Trazador Secreto.

Metatrón habló mientras alcanzaba el informe.

【—Pronto, la verdadera guerra va a comenzar.】

♦ ♦ ♦

En una calle bulliciosa que recordaba a un campo de batalla. De camino a la casa de subastas, innumerables mercaderes vendían todo tipo de artículos.

—Ve rápido. —Yoo Jonghyuk habló detrás de él.

A pesar de sus duras palabras, el hombre estaba constantemente preocupado por los movimientos de Lee Seolhwa. Bloqueaba su frente como si le preocupara que fuera herida por las encarnaciones y constelaciones que pasaban. Algunas de las encarnaciones lo maldijeron, pero a Yoo Jonghyuk no le importó.

—Deberías evitarlos…

—Los peatones primero.

La desvergüenza de Yoo Jonghyuk fue tan alta que Lee Seolhwa se rio.

—…¿Por qué te ríes? —preguntó el hombre.

—Dijiste que eres un regresor.

—Así es.

—¿Entonces me conociste en tu vida anterior?

Yoo Jonghyuk se tomó un momento para responder.

—No.

—…Ya veo.

Se formó una atmósfera incómoda entre las dos personas. Lee Seolhwa lo miró de reojo. Era alguien que parecía estar caminando a lo lejos, a pesar de estar a su lado.

Sonrió amargamente.

—Ve un poco más despacio. Puede que haya objetos o libros de habilidades que quieras comprar.

—No hay tiempo para eso.

—¿Aunque ya he comprado uno?

Lee Seolhwa sonrió y agitó el libro de habilidades que tenía en la mano.

【Habilidad: Conservar la humedad.】

Yoo Jonghyuk confirmó el libro de habilidades y entrecerró los ojos.

—Compraste una habilidad inútil.

Lee Seolhwa ya estaba usando la habilidad mientras sus mejillas y labios se humedecen. Era más difícil encontrar las necesidades diarias después de que comenzara el escenario y estas habilidades para la vida cotidiana estaban ganando una gran popularidad, independientemente del género. Lee Seolhwa miró la cara del otro y habló:

—Jonghyuk, ¿no la necesitas? Tienes el dorso de la mano y los labios secos. La temperatura de esta ciudad es baja en general, así que tu piel se reseca rápidamente.

—No necesitas habilidades que no sean para el combate.

—Pero ¿no tiene Dokja también esta habilidad?

Las cejas de Yoo Jonghyuk se crisparon.

—¿Kim Dokja tiene esta habilidad?

—Sí, dijo que esto es necesario si quieres ser popular con las constelaciones…

—Ese tipo quiere ser un ídolo —Yoo Jonghyuk apretó los dientes y siguió moviéndose.

Lee Seolhwa lo miró como si fuera gracioso. No sabía por qué, pero este hombre de corazón frío se enfadaba cada vez que oía el nombre de Kim Dokja.

Los ojos de Yoo Jonghyuk se desviaron hacia un puesto que decía «50% de descuento en libros de habilidades».

Lee Seolhwa no pudo evitar reírse.

—¿Quieres comprar uno?

Los pasos de Yoo Jonghyuk se detuvieron. Se preguntaba si le gustaba algún objeto, pero algo iba mal. Sus puños temblaban. La ira se desbordó de los ojos del hombre y dominó su expresión.

—…¿Yoo Jonghyuk?

A lo lejos se veía la entrada de la casa de subastas. Un grupo de encarnaciones entraba en ella, entre ellos una chica de pelo rubio. Lee Seolhwa sintió que su corazón se hundía. Yoo Jonghyuk no podía controlar su intención de matar mientras su mano se movía hacia la Espada del Espíritu del Demonio Negro.

—¡Jonghyuk, espera! —Lee Seolhwa instintivamente lo agarró del brazo. Ella conocía la identidad de la chica rubia.

Era el profeta de Asgard. Ella recordó la historia. Yoo Jonghyuk de la última regresión murió después de ser traicionado por ella.

—No. ¡Este lugar… los otros miembros…!

Su corazón tenía prisa. No importa lo fuerte que fuera Yoo Jonghyuk, este lugar era la casa de subastas de las constelaciones. Era un lugar donde constelaciones de grado bajo y superior se reunían. Además, la enemiga de Yoo Jonghyuk no estaba sola. Si se apresuraba ahora…

—Pensé que sería así —mencionó de forma sarcástica Han Sooyoung, la cual estaba de pie a un costado—. ¿Lo has olvidado? Kim Dokja te dijo que no te metieras en problemas.

Han Sooyoung chasqueó la lengua como si fuera patético y movió una moneda entre sus dedos.

—Esto no es asunto tuyo —Yoo Jonghyuk respondió con voz fría.

—¿No es asunto mío? ¿No somos compañeros?

—¿Compañeros? —La expresión de Yoo Jonghyuk se distorsionó—. No lo somos.

—Este es el fondo… ¡eh, puede que seas el protagonista, pero…!

—Sooyoung.

Las palabras de los rezagados hicieron que Han Sooyoung se tocará la frente.

—Uff… No puedo vivir por Kim Dokja y Yoo Jonghyuk… —murmuró.

—Anna Croft debe ser removida aquí.

—Bueno, Kim Dokja no quiere eso.

—No tiene nada que ver con él.

—¿Sólo quieres darle un golpe?

Yoo Jonghyuk hizo una pausa y la miró. Han Sooyoung le devolvió la mirada por un momento antes de volver su vista hacia la entrada de la casa de subastas.

—¿Y si tengo una buena idea? —Había un objeto en la mano de Han Sooyoung.

Los ojos de Yoo Jonghyuk temblaron.

—¿Eso…?

—Lo saqué a escondidas del abrigo de Kim Dokja —una sonrisa malvada se formó en la cara de Han Sooyoung—. Vamos a probar la capacidad profética de esa chica.

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