Traducido por Sharon
Editado por Ayanami
La atmósfera estaba completamente silenciosa. Después de un largo rato, Ning Xi tragó con dificultad e intentó cambiar el tema balbuceando.
—Haha… Gran Jefe, ¡tus habilidades de disparo son impresionantes! ¡Increíbles, increíbles! ¡Aunque eres algo derrochador! Esa vasija debe haber sido bastante cara, ¿verdad?
—Si no quieres hablar de ello, no tienes que —dijo Lu Tingxiao con ojos fríos.
Ning Xi dejó caer su cabeza con una actitud derrotada.
—Pero luces como si fueras a romper todo vínculo conmigo si no confieso todo. No estás siendo nada honesto…
Además de confesar, ¿tenía alguna otra opción?
Ning Xi suspiró, dándose cuenta de que solo podía contarle los eventos como sucedieron.
—¿No te dije antes que algo salió mal con la utilería y lastimé sin querer a Ning Xueluo? Ahora mismo, el jefe de utilería insiste en decir que yo lo chantajeé para cambiar las espadas. ¿No me fuerza eso a un camino sin salida? Si se aferra a su confesión, no sólo arruinará mi carrera, incluso podría ir a la cárcel.
—¿Y? —Preguntó él, dándole una mirada tranquila.
—¡Así que fui a forzarlo a decir la verdad! —Dijo Ning Xi con una sonrisa incómoda.
Al ver su actitud despreocupada, nubes de tormenta comenzaron a reunirse en el rostro de Lu Tingxiao.
—Ning Xi, ¿sabes lo peligroso que fue eso para ti? Como una chica…
—¡Lo sé, lo sé! —Exclamó ella, cubriéndose el rostro—. ¿Pero tenía otra opción? ¡No sabes que ese Zhang Jiang es toda una comadreja! ¡Con ese tipo de personajes solo se puede usar la violencia!
—Dije antes que puedes venir conmigo si necesitas ayuda. ¿Sin embargo elegiste usar un método así de peligroso antes que acudir a mí? —Los ojos de Lu Tingxiao estaban llenos de una decepción profunda.
Esa mirada, inesperadamente produjo que su corazón se retorciera. Era la primera vez que él se enojaba tanto con ella, por lo que su rostro se llenó de ansiedad.
—No, no es así. Yo… —Finalmente, sintiendo que estaba por tener un dolor de cabeza, suspiró—. Estoy acostumbrada a eso…
Acostumbrada a resolver todo por su cuenta. A no confiar en otros.
Los dos volvieron a sumirse en el silencio.
—Um, pero, ¿cómo sabías que tenía una pistola? —Preguntó con sospecha de repente, recordando la situación.
—El olor —respondió él con frialdad.
—¡Así que fue eso! ¿El olor a pólvora? No me di cuenta de que tu sentido del olfato era tan fuerte, Gran Jefe. Jeje…
La expresión de Lu Tingxiao permaneció fría como el hielo, del tipo que ha estado congelado por cientos de años.
Su adulación falló.
—Lu Tingxiao, no es que no quisiera pedir tu ayuda —dijo Ning Xi con una expresión de impotencia—. Simplemente no es necesario que te encargues de asuntos pequeños como este. ¿No sería como usar un martillo para aplastar a una mosca? Sin embargo, ahora mismo, hay algo con lo que en verdad necesito tu ayuda. ¡Tienes que ayudarme esta vez, por favor, por favor, por favor! ¡Sigo pensando en ello, pero eres la única persona en la que puedo confiar! ¡Así que, aunque no estés dispuesto, seguiré molestándote!
Esta vez, aunque su expresión permaneció helada, finalmente la vio a los ojos.
—Habla.
—¡Es esto! —Suspiró Ning XI, aliviada—. Aunque finalmente tengo la confesión de Zhang Jiang, así como los correos y detalles de las transferencias bancarias de la mente maestra, toda esta evidencia podría aclarar mi inocencia, pero no podré descubrir quién planeó todo. No sería caballeroso de mi parte si no tomo venganza por esta falla. Dejar que la mente maestra se vaya sin consecuencias es un desperdicio. Por eso, estaba pensando, ¿hay alguna manera en que puedas decodificar los detalles de cuenta y dirección IP? Gran Jefe, debe haber sido por tus genes que Pequeño Tesoro es tan inteligente a pesar de su edad. ¡Así que el Gran Jefe debe ser maravilloso con las computadoras! Estoy segura de que tienes alguna manera de lograrlo, ¿verdad?