Traducido por Sharon
Editado por Ayanami
—Es suficiente.
Para evitar perder el control, Lu Tingxiao fue forzado a detener el masaje.
—Bien. —Ning Xi no pensó demasiado en la razón detrás de su cambio de parecer, y volvió a estudiar la pistola. A continuación, se giró hacia Lu Tingxiao con incertidumbre y le preguntó—: Esta pistola… ¿Realmente me la regalas?
—Tómala como tu regalo de cumpleaños.
Este regalo era algo especial…
—¡Gracias! ¡Me encanta! —Sonrió Ning Xi, acariciando el arma.
La efectividad de esta pistola era mucho mejor. Además, tenía una apariencia más discreta, y nadie podría decir de qué modelo era, a menos que la desarmaran. Era mucho más conveniente usarla.
—Lu Tingxiao, gracias… —dijo Ning Xi, incapaz de evitar que sus ojos se humedecieran ligeramente al observarla—. Nadie ha sido tan amable conmigo antes.
Lu Tingxiao se sentía ligeramente conmovido. Pero antes de que pudiera decir algo más, ella le interrumpió.
—¡Se siente como si tuviera un padre!
Eso… Era una mejor evaluación que la última vez, pero él no sabía si reír o llorar.
—Ya es muy tarde, debes estar hambriento. ¡Te haré algo de cenar!
Después de que Ning Xi saliera corriendo felizmente, Lu Tingxiao desarmó su antigua pistola en un parpadeo.
Como se esperaba, el número de serie fue borrado. Sin embargo, esto reduce la lista de sospechosos de nuevo.
Diez minutos después, Ning Xi regresó con un tazón de comida caliente.
—Lu Tingxiao, ¿te gustan las bolas de masa? Vi que quedaban algunas en el refrigerador de la última vez que hice, así que las calenté para ti.
—Déjalas ahí.
—¡Ok!
Viendo lo ocupado que estaba, Ning Xi se sintió mal por molestarlo, así que volvió a tomar el tazón.
—Te daré de comer, ¿está bien?
Lu Tingxiao frunció el ceño ligeramente. Quería rechazar su oferta al principio, pero no podía soportar hacerlo.
—¡Te alimentaré, te daré de comer! ¡Solo enfócate en el trabajo!
Ning Xi se apresuró a tomar una masa con el par de palillos, y la sopló con cuidado antes de acercarla a su boca. Él continuó mirando la pantalla de su computadora con una expresión serena, antes de abrir su boca y comer.
¿Por qué la última vez que lo comió no sabía tan bien como ahora?
Ning Xi continuó dándole las albóndigas de masa una por una hasta que terminó el tazón.
—Ve a tomar un descanso, casi termino aquí.
Lu Tingxiao le regresó la computadora de Zhang Qiang y comenzó a concentrarse en su trabajo.
—Oh, está bien —dijo ella, abrazando la laptop contra su pecho y regresando al sofá en la esquina. Estaba tan aburrida, que empezó a revisar la computadora de Zhang Qiang para ver si podía encontrar alguna pista.
Al final, encontró algo.
Descubrió una carpeta titulada “Secretos importantes” en el disco duro. Al abrirlo, vio que había algunos videos dentro.
¿Quizás ocultó algo de evidencia que no me dijo?
Observando la pantalla sospechosamente, Ning Xi abrió uno de esos videos. Al instante, sintió que algo estaba mal. Sin embargo, cuando por fin se dio cuenta, ya era demasiado tarde. Jadeos incontrolables y gemidos salieron desde el parlante de la laptop, resonando con extremada claridad en el silencioso estudio.
Ning Xi quería cavar un agujero en el suelo para enterrarse. Quiso cerrar varias veces la ventana, pero no logró apuntar a la X por el pánico que sentía.
Al final, Lu Tingxiao no pudo soportar seguir observándola, y se acercó para ayudarla. Ning Xi arrojó la computadora a un lado.
—¡Tenía algunos archivos en una carpeta llamada “Secretos importantes”! ¡Pensé que era evidencia…! ¡Maldición! ¡Debería haberme dado cuenta! —Se quejó.
Cualquier carpeta sospechosa en la computadora de un hombre era ese tipo de cosa.
Viendo su apariencia indignada, Lu Tingxiao puso una mano en su entrecejo y lanzó un suspiro de absoluta impotencia.
—He terminado, ven a darle una mirada.
Le había dicho que le tomaría una noche por su propio egoísmo, esperando poder pasar más tiempo con ella. Sin embargo, si este tormento continuaba, no sabía qué terminaría haciendo…