Mi hermana, la heroína – Capítulo 110

Traducido por Sharon

Editado por Tanuki


Decidí seguirlos en silencio con la condición que Freesia no venga.

Ella no conoce a Marywa, pero nunca pensaría en presentarsela. Sólo resultaría en caos. Y tendría que tomar la responsabilidad.

Dejar a Freesia causó un gran efecto en calmar mis nervios.

Tragué saliva cuando llegamos frente a la puerta del cuarto de recepción de la Escuela.

Una vez que abra, veremos a Marywa. No puedo evitar sentirme nerviosa.

Dejando de lado el debate de hoy, han pasado tres años desde que Marywa y yo nos vimos a la cara. Todavía tengo la mala impresión de ella martillando sus enseñanzas como mi tutora privada.

—¿Qué sucede? Apresúrate y entra. De otra forma te patearé adentro.

—Bueno, quiero decir… ¿Hm?

Ignorando sus violentas palabras, algo que dijo capturó mi atención.

—Surfania, ¿no entrarás conmigo?

—¿Qué? ¿Quieres que te acompañe?

Estaba bajo la impresión de que iríamos juntas, pero Surfania me miró sorprendida.

—Sé que no debo arruinar el ambiente, ¿sabes? Y la idea de verte llorar mientras te regañan… Bueno, supongo que es una buena oportunidad para interrumpir.

—Detente ahí mismo.

Más palabras innecesarias. Ella es demasiado grosera.

Estaba por decirle que se quedara donde planeó, pero ella pareció haber malentendido mis intenciones. Tomó un paso adelante.

—Imposible. Ahora que llegó a esto, no importa qué-

—Leon, detenla.

—Sí.

—¡¿Qu-?! ¡Traidor! ¡Suéltame, Leon!

—Vamos, no arruinemos el ambiente. No harás nuevos amigos si sigues de este modo. Controla un poco más tus deseos. Te gusta escupir abusos ante el menor incidente. Por eso las personas normales se alejan de ti.

—¡Métete en tus propios asuntos!

León contuvo a Surfania cuando ella se emocionó repentinamente. Suspiré profundamente y golpeé la puerta.

Está bien. Marywa puede ser un demonio, pero es razonable. Así que debería poder salvar la situación si digo alguna excusa. Sólo tengo que probar la validez de mis razones para convertirme en una delincuente desde que me inscribí en la Academia.

Diciéndome eso, entré al cuarto. Siento que soy un criminal condenado caminando hacia la horca por mi propia voluntad.

—E-Estoy entrando.

Entré al cuarto donde está Marywa.

Probablemente estaba aquí cuando golpeé antes. Ella se paró del sofá y me dio una reverencia elegante.

—Buenos días, Señorita Noir.

Ella enderezó su espalda como si estuviera feliz de verme. A pesar de que nos conocemos desde hace tanto, sigue hablándome con formalidad.

Me perdí por el inesperado saludo.

Es como si estuviera saludando a una extraña.

Es natural. Marywa ya no es mi tutora. Desde su punto de vista, es natural que me trate con respeto.

Dicho eso, no esperaba que se comportara de este modo.

—Ha pasado tiempo. ¿Sucedió algo malo? ¿O quizás necesite algo? —me preguntó Marywa mientras yo estaba de pie sin palabras.

Otra respuesta inesperada. Es como si estuviera saludando a un cliente. Me pregunto si está relacionado con su actual actitud.

Quizás Surfania le dijo algo.

—Um, ¿Surfania comentó algo?

—No, no lo hizo. La Señorita Calibrachoa simplemente me invitó a juzgar el debate. Eso es todo.

Así que no le dijo nada…. Estaba convencida en cierto grado que eso es lo que sucedió, pero Marywa sopló lejos todas mis expectativas.

—Cumplí mi rol como la jueza, así que es tiempo de que me vaya a casa. Estaba pensando en proceder con las formalidades para retirarme en la oficina-

—¡E-Espera un minuto!

Sigo confundida porque pensé que Marywa y Surfania habían hablado entre ellas antes de esto. Le pedí que se detuviera para poder calmarme.

Si Surfania no le dijo nada, entonces ¿por qué diablos me arrastró aquí? Tengo ganas de llorar ahora.

—¿Qué sucede, Señorita Noir? Mis más profundas disculpas, pero soy una persona ocupada, ¿sabe? ¿Le importaría decirme qué es lo que desea?

—Oh, bueno, um…

Con mis pensamientos todos mezclados, todo lo que pude hacer es bajar mi cabeza.

—L-Lo siento.

En respuesta a mi abrupta e incómoda disculpa, Marywa inclinó su cabeza ligeramente.

—¿Por qué te disculpas de repente? Es probable que seas una estudiante, pero alguien de tu posición no debería bajar su cabeza con tanta facilidad.

—¿A-A qué te refieres…?

Confundida por su pregunta, miré en mi interior y me di cuenta.

¿Por qué?

¿Exactamente por qué me estoy disculpando? Hay algunas cosas superficiales por las que debería pedir perdón, pero más que nada, es por mi comportamiento indigno  de una dama en la Academia desde que me inscribí. Desobedecí todas las enseñanzas de Marywa y le fallé como su estudiante.

Pero antes que eso, siempre sentí que nunca podría mirarla directamente al rostro, que me sentía culpable por algo.

¿Por qué es eso?

—B-Bueno…

Lo más probable…

Creo que encontré la razón.

Siempre me engañé a mí misma. Debido a eso, me aferré a las palabras de Marywa.

Porque quería creer que definitivamente podría salvar a Mishuli.

—Lo lamento. Por varias cosas.

No puedo expresarlo bien. No soy una persona que cree que el destino es algo ya determinado, pero me convencí a mí misma de lo contrario. No tengo excusas por cambiar mis creencias y abandonar mis esfuerzos.

Por eso no puedo evitar decir palabras tan vagas.

Va a golpearme.

Va a enojarse por mi inmadurez y por haber desafiado sus enseñanzas.

Surfania tenía razón cuando dijo que no maduré para nada. Confiando en el Destino para guiarme al futuro de Mishuli, probablemente no soy diferente de la Christina de mi vida anterior.

La escuché suspirar.

Al mismo tiempo, su humor cambió.

—Por favor, cálmate.

Ella puso las palmas que temí toda mi vida en mi cabeza.

Ha pasado tanto tiempo desde que me acarició.

Sus manos parecen más pequeñas que las de hace tiempo. Ahora me pregunto si ella no usó toda su fuerza cuando me disciplinaba. Pero incluso ahora siento su calidez.

Levanté la mirada y miré sus ojos sin necesidad de que tuviera que inclinar la cabeza.

Ahora noto que nos estamos mirando a los ojos directamente. Por primera vez, noté lo mucho que he crecido.

—Creo que sé por qué te estás disculpando. Sin embargo, no es necesario. Más que nada, es mi culpa.

Sus manos realmente son cálidas.

A pesar de que son toscas y torpes, es suficiente para hacerme llorar. Bajé la mirada para contener las lágrimas.

—Lo lamento…

—Como dije, no es necesario que te disculpes. Aun entonces eras una mocosa.

Su evaluación de mí es algo increíble para una persona de estatus noble.

—¿Acabas de llamarme mocosa…?

—Sí, eso hice.

Mis lágrimas se secaron ante su afirmación inmediata.

—E incluso ahora, sigues siendo una mocosa impertinente.

—Ya veo. ¿Realmente soy eso?

—Sí. Eso es lo que eres.

Ella reafirmó sus palabras.

—Y yo fui una idiota por dejar que se me escapara la lengua. Cuando escuché tu tonta teoría en el debate, tuve que contenerme para evitar golpearte en frente del público.

—N-No hagas eso.

—No, lo haré ahora.

Probablemente era una broma, pero aún es aterrador.

—Supongo que ya estás arrepintiéndome de tu actual situación. Por eso no te diré lo que deberías hacer. Sería indigno de mí introducir razón y lógica a alguien tan despreocupada como tú —añadió como si hubiera fallado en hacerlo en el pasado.

—Sin embargo, permíteme decirte esto.

Marywa llevó mi cabeza a su pecho como si estuviera consolando a un niño pequeño. Cerré mis ojos y no puse resistencia.

Su calidez y el latido de su corazón se sienten agradables. Me siento a salvo.

—Me gustas como eres cuando actúas como quieres, sin un guión.

Lágrimas están empañando mi visión ligeramente.

No siento arrepentimiento ni culpa, sólo una felicidad abrumadora.

—Hey Marywa.

—¿Qué sucede Chris?

Probablemente esta sea la única vez.

Ella me llamó Chris.

—Le hice cosas terribles a Mishuli.

—Lo hiciste, ¿verdad? ¿Deberíamos ir con ella más tarde para que ofrezcas tus disculpas?

—Me pregunto si ella perdonará a una hermana tan inútil como yo.

—Tus preocupaciones no tienen fundamento.

—Me pregunto si puedo rehacer el futuro…

—Por supuesto.

Ella escuchó mis arrepentimientos y me consoló.

—Todos caen una o dos veces. No sabemos lo que sucederá al próximo instante, pero un día significa mucho más para ti de lo que un mes significa para mí. Y tienes trescientos sesenta y cinco de esos días en un año. ¿A qué le temes?

Me pregunto por qué sus palabras resuenan tanto dentro mío.

—Marywa.

—¿Qué sucede?

—¿Está bien que sea yo misma?

—Por favor no te equivoques. Tú eres tú sin importar lo que suceda.

Escuchar sus palabras me llena de confianza, y mi rostro formó una sonrisa.

Rompimos el abrazo y nos miramos a la otra.

—Gracias, Marywa.

Como si pensara que una gran sonrisa es algo extraño, Marywa sonrió ligeramente.

—No hay de qué, Señorita.

Su sonrisa pareció agrandarse un poco cuando habló.


Sharon
No me canso de decirlo, pero amo la relación que tienen Marywa y Chris. Me gusta sobre todo que en esta ocasión Marywa entendiera que ella fue la que cometió el error (dejando de lado que Chris entendió otra cosa a lo que su profesora pretendía transmitirle)
.

Tanuki
Yo esperaba mas drama, pero me voy contento con una reunión tan hermosa

Una respuesta en “Mi hermana, la heroína – Capítulo 110”

  1. Gracias por la traducción, yo también estaba muy preocupada. Estuvo genial el capítulo.

    Y gracias a Dennis, se siente extraño, porque mi amigo se llama Dennis también.

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