Pronto, utiliza el rostro del demonio – Arco 8 – Capítulo 14

Traducido por Shiro

Editado por Meli


Luego de que su sesión de fotos con el minino terminara, Gustav perdió toda la paciencia, en especial con las concursantes que intentaban seducirlo. A menudo le pedían que posara de manera íntima. Querían abrazarlo por la cintura, rodearle el cuello con los brazos e incluso acortar la distancia entre sus labios, como si fueran a besarse.

Si fuese el minino quien se lo pidiera, accedería encantado, pero no era el caso. Cada que este lo observaba, se sentía culpable, como si lo traicionara.

El fotógrafo se percató de su impaciencia, pero como su trabajo como modelo no se estaba viendo afectado, no dijo nada al respecto.

—Señor Atchison, ¿puede cargarme? —La concursante, parpadeó, fingiendo inocencia.

¡Lo mejor sería echarte de inmediato!

—Por supuesto, señorita.

Cuando se inclinó, notó que su minino se había ido. Sus tensos músculos por fin se relajaron.

Zhou Yunsheng no estaba interesado en ver cómo un grupo de mujeres seducía «sutilmente» a un hombre, así que salió. Quería ver cómo iba la sesión de fotos de Ivanna, cuya idea era singular.

Hizo que Bonnie usara una minifalda sensual de color rojo intenso, mientres que ella vestía un traje negro. Pidió al estilista que destacara sus líneas faciales y le hiciera un mohicano con gel en el cabello. Lucía como un hombre muy guapo, incluso su manera de caminar era impecable.

Pidió a Bonnie que adoptara una postura encantadora y dócil. La abrazó con determinación. Con una altura de un metro con ochenta centímetros, y unos zapatos acolchados que le aumentaron diez centímetros; encajaba a la perfección con Bonnie, quien medía un metro con setenta y ocho centímetros.

Entonces, puso un ramo de rosas rojas en los brazos de Bonnie con mirada afectuosa. Si Zhou Yunsheng no supiera que Ivanna era mujer, habría pensado que estaba viendo a un hombre franco cortejar a Bonnie.

El fotógrafo tomó muchas fotos maravillosas e interesantes, y cuando terminó comenzó a revisarlas, emitiendo risitas peculiares.

Bonnie, abandonó los brazos de Ivanna, se acomodó el cabello detrás de las orejas.

—Cariño, eres encantadora. No me importaría cenar contigo después de la grabación del programa. Me has inspirado mucho con la sesión de hoy, quizás la próxima vez los concursantes puedan experimentar algo refrescante.

Ivanna vio alejarse su grácil espalda antes de correr hacia su mejor amigo y repetir con orgullo lo que le acababa de decir.

¿Bonnie está implicado que para un desafío futuro invertirá los roles masculinos y femeninos? No sé qué tan bien le pueda ir a un tipo duro como Hayden en una situación como esa, pensó Zhou Yunsheng.

En cuanto a él, ha sido hombre, mujer y hasta ger, por lo que vestirse como una mujer no era nada.

Zhou Yunsheng e Ivanna se ocultaron entre la multitud para ver la sesión de fotos de Hayden. Llevaba un bañador ajustado, sus músculos brillaban por el protector solar. Cuando salió del vestidor, usó la mano para acomodar, con descaro, su voluminoso paquete.

Varias concursantes gritaron y miraron sin pestañear la parte inferior de su cuerpo, haciendo que su ego alcanzara un tamaño sin precedentes.

Bonnie, vestida con un bikini, estaba frustrada. Era una tortura tomarse fotos con un hombre tan arrogante. Valentine nunca debió permitir que a Hayden lo criara el viejo de la familia Brown.

¡Mira en lo que se convirtió!, contuvo sus náuseas.

—¿Es eso algo de lo que deba estar orgulloso? —se burló Ivanna—. Apuesto a que se lo rellenó. El del señor Atchison es el que es majestuoso, y es genuino. Cariño, entre los dos, ¿quién crees que es más grande y poderoso?

No perdía oportunidad de menospreciar a Hayden, mientras guiaba a su «mejor amiga» a que se olvidara de él.

Más tarde, cuando Gustav vio la escena, elogió a Ivanna hasta los cielos. Era una verdadera amiga, pero lo que no tuvo precedente, fue la respuesta de Romeo.

Zhou Yunsheng se obligó a sonrojarse y, cubriéndose el rostro, murmuró:

—Por supuesto que el señor Atchison es más poderoso. Aunque no me atreví a mirar… allí abajo. Es un hombre encantador y su cuerpo exuda hormonas masculinas. Estaba tan nervioso cuando cooperé con él que mi corazón casi estalló de lo rápido que latía.

—Entonces, ¿todavía te gusta Hayden? —inquirió Ivanna—. En comparación con el señor Atchison, no tiene nada que ofrecer. Te ruego que abras bien los ojos.

Zhou Yunsheng apartó la mirada y permaneció en silencio durante unos minutos, cuando susurró:

—Ivanna, comprendo tus buenas intenciones, pero por el momento, solo trato de salir del pantano en el estoy atrapado. Así que, por favor, no sigas juntándome con el señor Atchison. Él está en el cielo y yo en la tierra, está fuera de los límites. Nunca podremos estar juntos. Además, a él le gustan las mujeres.

Ivanna se encogió de hombros, también sabía que una relación romántica entre su «mejor amiga» y el hombre era imposible.

Al ver esta escena, Gustav cayó de rodillas y gritó para sus adentros: ¡Cariño, por favor, no te menosprecies así! Tú eres el cielo y yo la tierra. Si fuese yo el objeto de tus afectos estaría dispuesto a temblar, derrumbarme y hasta desatar un tsunami por ti. ¡Soy homosexual, pero no amo a nadie más que a ti!

Hayden parecía dos personas diferentes durante las sesiones fotográficas. Cuando posaba para fotos de moda, lucía genial y elegante, pero con el traje de baño, su comportamiento rayaba en lo cómico debido a las numerosas poses de físicoculturista que hacía para resaltar sus músculos. Incluso llegó a levantar y balancear a Bonnie, lo que la hizo gritar del susto.

Hayden pensó que lo hizo muy bien, después de tomar treinta fotos, se jactó de haber cautivado a Bonnie y que esta se había convertido en su fan número uno.

—Ella nunca debe haber visto a un hombre tan fuerte y encantador como yo. Ustedes no saben, pero, durante la sesión de fotos, el ardor con el me miraba podía derretir mis duros músculos. Creo que la oí decirle al fotógrafo lo genial que soy y que soy el concursante más prometedor. Cuando nos fuimos del estudio, vi que me miró varias veces. Seguro quiere invitarme a salir.

Hayden alardeó sin cesar en el autobús durante el regreso, provocando el enfado de muchos participantes, en especial con Emily, con la que discutió todo el trayecto.

Ivanna puso los ojos en blanco, mientras que Zhou Yunsheng miró por la ventana con expresión amarga.

♦ ♦ ♦

Al día siguiente, los concursantes se reunieron en el estudio, esperando su sentencia. Bonnie presentó los premios que el campeón podría ganar y luego los llamó uno a uno.

Sin la guía de profesionales, la temática, las poses, la vestimenta y otros aspectos presentaron muchos problemas. Sobre todo las concursantes femeninas, que eligieron usar trajes de baño; obsesionadas con el señor Atchison, se olvidaron de su desempeño.

A varias Bonnie las calificó con seis, cinco e incluso cuatro puntos. Cuando llegó el turno de Ivanna, mostró la primera sonrisa del día.

—¡Diez puntos! ¡Tu gusto es excelente!

—Diez puntos —añadió Eureka.

—¿Quién es este hombre guapo? Quiero pasar una noche romántica con él. Si le doy diez puntos, ¿tengo oportunidad con él? —bromeó Miss Jeffrey.

—¡Bebé! —exclamó Ivanna con los brazos abiertos.

Tanto los jueces como los participantes rieron ante la respuesta de Ivanna, y la tensa atmósfera en el estudio se aligeró un poco.

Llamaron a Emily al escenario, ella enderezó la espalda y elevó la barbilla. Todo su cuerpo exudaba confianza, e incluso arqueó una ceja con arrogancia cuando vio la foto de ella bailando tango con el señor Atchison aparecer en la pantalla.

Sin embargo, los jueces reaccionaron de manera opuesta a como había imaginado.

—Querida, deberías haber usado un bikini en lugar de ese vestido traslúcido —dijo Bonnie sin rodeos—. Es mejor ser sensual de manera abierta, que ocultarlo de forma vulgar. Tienes una figura estupenda, con un busto voluptuoso, pero eso no siempre es algo bueno en la industria de la moda. Las modelos a menudo no pueden usar sujetadores cuando modelan, y los espectadores se centrarán más en tu cuerpo que en las prendas de alta costura que estás exhibiendo. Y al tomar fotos sensuales, es fácil excederse.

»Mira allí, tu expresión lujuriosa le puso los pelos de punta al señor Atchison. Aunque tiene su brazo alrededor de tu cintura, en realidad, pareciera querer alejarte.

Al escuchar sus palabras, Miss Jeffrey enfocó su mirada en el hermoso rostro de Gustav y asintió con la cabeza.

Eureka no hizo ningún comentario, dando seis puntos como calificación.

—Seis puntos —dijeron Bonnie y Miss Jeffrey al unísono.

Emily se sintió insultada. Los jueces la habían descrito como una perra en celo jadeando por Gustav. Por fortuna, los internautas, contentos con su sensualidad, le dieron una puntuación relativamente alta, lo que la hizo sentir mejor.

La foto de Hayden también recibió amplia crítica. Bonnie y Eureka le dieron cinco puntos, mientras que Miss Jeffrey le dio un punto más por sus abdominales y pectorales perfectos. No obstante, su puntaje total se mantuvo en el fondo.

No entiendo, ¿adónde se fue mi enorme base de seguidores? ¿Se evaporó de la noche a la mañana?

El último a quien llamaron fue a Romeo.

Bonnie se reclinó en su silla y suspiró:

—Romeo, mi amado Romeo. Siempre nos sorprendes. Mira tu foto. —Chasqueó los dedos y la escena del enfrentamiento entre él y el señor Atchison, en el oscuro y estrecho guardarropa apareció.

La imponente figura de Gustav se cernía sobre él, sus fuertes y poderosos brazos apoyados a cada lado de su rostro. Sin embargo, él no se había dejado intimidar por su presencia, al contrario, lo agarró por la corbata, estrangulando su punto más vulnerable con la barbilla en alta para mostrar su orgullo y dignidad.

En el escenario, todo estaba envuelto en sombras, los protagonistas vestidos con ropa en tonos blanco, negro o plata, daban a la foto una sensación de nostalgia. Los ojos azul marino del joven, ligeramente entrecerrados, eran el único destello de color en ese mundo. Y a pesar de que estaban inmóviles, desbordaban un destello resplandeciente.

Los jueces observaron la imagen durante mucho sin conseguir distinguir nada que no encajara ni los disgustara. Todos los demás participantes quedaron boquiabiertos. En medio de la sobreabundancia de fotos sensuales en trajes de baño, emergió una foto clásica; solemne y romántica. Como la única estrella en el oscuro firmamento, resultaba sobremanera llamativa.

Ya fuera la coherencia de la escena, la ropa o la cooperación de los dos modelos, todo era perfecto. El talento de Romeo parecía ir más allá de la imaginación de todos.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

 

error: Contenido protegido