Traducido por Shiro
Editado por Meli
—Jefe, debe tocar el botón de reproducir. Es una imagen dinámica —indició el técnico que fue asignado a Zhou Yunsheng.
El director de ventas de MOT abrió los ojos con sorpresa al descubrir que, entre las funciones básicas de edición, estaba el efecto para una imagen dinámica. Ahora, sin importar el resultado final, la habilidad de la persona que la hizo era suficiente para aplastar a todos sus oponentes.
Bonnie tocó el botón de reproducción antes que él. El joven se encontraba inmóvil, con una sonrisa radiante como la luz de la luna en su rostro. Sin embargo, la tableta en la palma de su mano comenzó a girar, la carcasa cambiando de colores vibrantes. Entonces, detrás del chico aparecieron innumerables puntos de luz, y aunque solo eran cinco colores, al mezclarse, formaban la paleta entera. Parecía como si miles de cintas de colores brotaran de la pantalla, creando un espectáculo similar a los fuegos artificiales o la explosión de una galaxia.
Elegante, dinámico y refrescante.
El director de ventas no pudo evitar decir «caray» mientras sus ojos se salían de sus órbitas.
—¿Le hiciste esto? —preguntó al técnico.
—No, no. Lo hizo él. Es más hábil que yo.
John de inmediato envió el video que había capturado al director del programa y este cambió la escena para que los espectadores lo vieran al instante. Entonces vieron al joven sentado en el suelo con las piernas cruzadas, editando y comunicándose con el técnico:
—¡Este programa es increíble! Su motor de procesamiento de imágenes digitales «image» es único y ofrece una calidad y capacidad de restauración superior a la de cualquier otro programa. Además, la velocidad es impresionante. ¡Puede lograr cualquier efecto que yo quiera! ¡Es maravilloso!
Mientras hablaba, poco a poco convirtió la imagen monótona en una pieza preciosa. John también le dio al técnico un primer plano, su expresión de asombro resultó muy interesante.
La audiencia frente al televisor se encontraba convencida y no podía evitar admirar a Romeo el Gurú de la Tecnología. Alguien, entonces, comentó con acierto:
【¡Romeo está usando tecnología de película de fantasía para tomar fotos! ¡Es un desperdicio de talento! ¿Cuántas habilidades más tiene que no ha mostrado?¿ ¡No me extrañaría si me dijeran que es Superman!】
El director de ventas de MOT miraba el video con una sonrisa. Sin duda alguna, ese era el anuncio ideal para su producto. Ni siquiera requería de edición.
—¡Es maravilloso! ¡Bravo! —elogió mientras miraba la imagen.
—Entonces, ¿puede anunciar al campeón? —Bonnie sonrió.
—Por supuesto. —El director de ventas una vez más comentó las fotos de todos una a una, señalando dónde se sentía insatisfecho, y cuando llegó a la foto de Emily, su tono se tornó extraño—: La foto de Emily es tan hermosa que no pude apartar la mirada después de verla.
La cámara apuntó a Emily y ella sonrió con orgullo.
—Pero… —El director cambió su discurso abruptamente—. No puedo esperar a quitarle la tableta de las manos y tirarla. Desearía tener visión de rayos X y apreciar su hermoso cuerpo. ¿Qué es esa tableta que sostiene? Está estorbando. No me deja ver bien el paisaje tan hermoso. Qué molesta.
Bonnie inclinó la cabeza y sonrió, comprendiendo hacia dónde se dirigían los pensamientos del director.
La mayoría de los espectadores masculinos frente al televisor sintieron una profunda resonancia con él, pensando también que la tableta era un lastre.
—Por esta razón, quiero eliminar a Emily —concluyó el director de ventas, luego de sus cálidos elogios.
Los concursantes quedaron atónitos, y Emily lo estaba aún más. Le tomó medio minuto antes de que preguntara furiosa:
—¿Por qué? Si mi foto es tan buena, ¿por qué debería ser eliminada?
Bonnie aplaudió para atraer la atención de todos y articuló:
—¿Olvidaste lo que te enseñé? Como modelo, eres solo el accesorio, no la protagonista. Lo que quieres promocionar es el producto o la ropa, no a ti misma. Emily, ¿de verdad piensas que mereces ganar el título cuando has convertido el producto en algo no deseado? ¡La publicidad es de la tableta Caminante del Cielo de MOT, no tu cuerpo!
El director de ventas añadió:
—En efecto. Si estuviéramos fotografiando una portada para Playboy, te daría el título.
El resto de los concursantes asintieron con la cabeza y los espectadores frente al televisor tuvieron una epifanía, tras lo que también asintieron con la cabeza. Algunos miembros de la audiencia incluso enviaron mensajes al grupo del programa, afirmando que Emily sería con toda seguridad la mejor chica Playboy y que su cuerpo era tan sensual que sería un desperdicio que se dedicara al modelaje.
Con esos comentarios, Emily estaba destinada a nunca poner pie en la pasarela de una marca de moda de alta gama en su vida. Ya había sido etiquetada como vulgar y pornográfica.
Emily ni siquiera conseguía pensar en una réplica decente porque, de hecho, sí que había intentado ganar utilizando su cuerpo. Si hubiera recordado lo que Bonnie le había enseñado antes, no habría hecho una apuesta tan arriesgada.
Se sintió avergonzada, y lentamente se agachó para sostenerse la cabeza y llorar. Sin embargo, ningún concursante fue a consolarla, al contrario, la ignoraron por completo.
Al final, fue eliminada en ese episodio y la audiencia le hizo hincapié en que posara para Playboy, que con toda seguridad se agotaría el número. Mientras el público se esforzaba por pisotear a Emily, Romeo, por otro lado, continuaba elevando su estilo, acumulando títulos como: el Gurú de la Tecnología, el hipster de la Literatura y el Arte, el Maestro del Dibujo, el Artista, entre otros.
Su talento era excepcional.
Desde luego, la publicación neurótica de Gustav Atchison también causó furor. Todos especulaban acerca de si tendría un amante, si se había comprometido en secreto o si tenía un hijo ilegítimo. En fin, todo tipo de conjeturas dramáticas.
La penúltima entrega del programa fue una recopilación de metraje de lo más destacado de la vida de los participantes, que mientras se emitía el programa se sometían a un duro entrenamiento, preparándose para la final.
Como se trataba de una competencia para elegir al siguiente supermodelo, era natural que la pasarela determinara al ganador. El grupo del programa invitó a uno de los diseñadores de moda más famosos del mundo, Wilson, y utilizó su próxima colección de otoño e invierno en el desfile del programa. Esta colección estaba inspirada en los uniformes militares, con líneas nítidas y fuertes y tonos fríos. De los cuatro participantes restantes, tanto las dos mujeres como los dos hombres debían mostrar su lado más fuerte y masculino mientras caminaban con osadía sobre la pasarela.
Este era el requerimiento básico de WIlson.
La transmisión en vivo comenzó, y Bonnie se acercó a Wilson y le preguntó qué jugador le entusiasmaba más.
—Soy muy optimista acerca de Ivanna. Es una modelo muy inusual debido a su aire masculino. Pienso que es la mejor intérprete de esta colección de ropa. Por otro lado, Romeo, el favorito del público. Todavía es menor de edad, su apariencia es andrógina y su complexión delgada. Me preocupa que pueda darle a mi ropa un efecto femenino.
Bonnie asintió con la cabeza en señal de comprensión.
Buscando obtener un efecto dramático en el programa, el camarógrafo enfocó de inmediato a Romeo en segundo plano, y dejó escapar un suspiro de admiración apenas lo vio.
El adolescente, usualmente gentil como la luz de la luna llena, se había peinado todo el cabello hacia atrás con esmero, dejando al descubierto sus rasgos increíblemente bellos. Sus ojos azul marino estaban un tanto entrecerrados y sus labios se curvaban de manera natural hacia arriba, pero su rostro no tenía ni un ápice de calidez, sino más bien desprendía gelidez. Llevaba un abrigo de estilo militar marrón oscuro, un cinturón le ceñía la cintura y resaltaba aún más su perfecta figura de triángulo invertido y sus largas y rectas piernas. Y para finalizar, sus pies llevaban un par de botas militares deslumbrantes.
Se acercó caminando, y esa mezcla de inocencia y frialdad en su expresión era como un cuchillo de combate que iba cortando a través de quien lo mirara, resultando imposible de resistir. Con su aura ambigua, podía ser bueno o malvado, suave o firme; logrando dominar cualquier estilo de ropa con facilidad.
Wilson quedó boquiabierto. El público frente al televisor estaba cautivado, gritando sin reparo.
Entonces, la música se escuchó y Miss Jeffrey le pidió a los concursantes que se alinearan y salieran uno a uno. Cada paso que el joven daba era firme y sereno, como un sable en movimiento, su filo incomparable.
La audiencia en el lugar olvidó por completo reaccionar, clavando en él sus miradas, boquiabiertos, y siguiendo su figura hasta que desapareció del escenario, tras lo que sintieron que los embargaba una sensación de pérdida y desconsuelo.
La ropa que llevaba puesta era muy elegante, incluso las chicas deseaban conseguir un conjunto para sí, ya que resaltaba sus delicadas cinturas y redondeadas caderas.
Cada vez que el joven se cambiaba de ropa y aparecía en la pasarela, el aplauso del público era ensordecedor, como las olas que una tras otra rompen contra la orilla, pero el revuelo nunca perturbó su mirada firme y decidida.
La temperatura en el escenario estaba a punto de ebullición, y Wilson no dudó en tomar el brazo de Romeo y sacarlo para el agradecimiento final.
Cuando regresaron al tranquilo estudio, las caras de los cuatro concursantes todavía estaban enrojecidas, como si estuvieran ebrios. Habían disfrutado demasiado ser el centro de atención.
En ese momento, Bonnie les pidió que dijeran quién creían que tenía más posibilidades de ganar y, después de pensarlo un poco, todos dieron el nombre de Romeo. Había obtenido el primer lugar en ocho episodios del programa con su brillante desempeño, un récord que ninguno de los otros concursantes podía igualar. Incluso en la pasarela, él había sido la presencia más deslumbrante.
—Romeo, ¿quién crees que ganará? —inquirió Bonnie deliberadamente.
—Quienquiera que gane me hará feliz. —Zhou Yunsheng evitó la pregunta y abrazó con fuerza a Ivanna.
Bonnie asintió con la cabeza y le pidió al director que mostrara los resultados de la votación de los espectadores. Primero, eliminaron a los dos concursantes con los votos más bajos, y cuando solo quedaron Ivanna y Romeo, hicieron una pausa comercial.
—¿Puedo golpearlos, chicos? —preguntó Ivanna con seriedad.
Miss Jeffrey y Eureka rieron a carcajadas, mientras que Zhou Yunsheng le revolvió el cabello rojo meticulosamente peinado.
Bonnie hizo una mueca de miedo e hizo puchero antes de decir:
—Está bien, está bien. Era solo una broma. Nuestro próximo supermodelo es… ¡Romeo! ¡Felicidades!
En el estudio llovieron innumerables cintas de colores. Ivanna no se sintió decepcionada en absoluto, al contrario, levantó al chico que, atónito, derramaba lágrimas que le corrían por el rostro y lo hizo girar. Los otros dos concursantes se acercaron y se unieron al abrazo.
Esta había sido una experiencia que les cambió la vida, y del mismo modo lo recordarían por siempre, por lo que se sentían muy satisfechos.
Esa noche, los índices de audiencia del programa «El próximo supermodelo» hicieron historia en el canal ABC. Todos sintieron que Romeo era quien más calificado estaba para obtener la corona. Su excelencia era evidente para todos y, con toda seguridad se convertiría en la estrella más brillante en el círculo de la moda.
Los ejecutivos de la ABC realizaron una fiesta de celebración para el grupo del programa e invitaron a todos los concursantes que habían participado. Cuando Zhou Yunsheng vio a Hayden caminando hacia él, pensó que iba a comenzar una pelea, pero, para su sorpresa, lo que hizo fue abrazarle fuerte, sonrojarse y agradecerle.
Pobre mocoso, lo he engañado lo suficiente.
Zhou Yunsheng respondió con una sonrisa amable mientras suspiraba, pero Gustav lo arrastró a una sala de descanso.
—Cariño, ¿has olvidado cuánto te lastimó?
—Lo olvidé —dijo, pero antes de que el hombre tuviera tiempo de angustiarse, Zhou Yunsheng se aflojó la corbata y articuló—: Él no significa nada para mí, por lo que no es necesario que recuerde lo bueno ni lo malo. Ahora, Gustav Atchison, me gustaría que lleváramos nuestra relación a otro nivel, me pregunto si estarás de acuerdo. ¿O piensas que soy alguien frívolo? Después de todo, apenas llevamos dos semanas saliendo.
—No, no… Q-Quiero decir —tartamudeó Gutav al tiempo que se frotaba la ropa con las palmas de las manos—, por supuesto que podemos subir de nivel nuestra relación. Y no, no creo que seas frívolo. Al contrario, pienso que eres muy sereno. Demoraste dos semanas en hacer la propuesta. En cambio yo, desde el primer momento en que te vi, me pregunté cómo se sentiría estar unido a ti…
Sintiendo que había expuesto su lado más vulgar, Gustav se calló abruptamente, empujó al joven contra la pared y lo besó. Zhou Yunsheng, quien había mantenido una dieta vegetariana por los últimos dos meses, tomó la iniciativa de rodear la cintura del hombre con sus piernas…
♦ ♦ ♦
Al día siguiente, ambos fueron invitados a participar en el programa de entrevistas más popular de la ABC. El joven lucía agotado, pero el hombre desbordaba vigor. Cuando el presentador le preguntó a este último qué pensaba del adolescente, se regodeó:
—Romeo es el modelo más prometedor que jamás he visto. Puede manejar con facilidad cualquier estilo, incluso los más estrafalarios. Pienso que llegará más lejos que yo. —Tan pronto como concluyó, inclinó la cabeza y le dedicó una gentil sonrisa al joven, quien entrecerró los ojos y le sonrió también.
Luego de la transmisión del programa, no era secreto para nadie que Gustav apreciaba mucho al joven y nunca perdía ocasión para elogiarlo. Cada vez que los reporteros le hacían preguntas personales, los ignoraba, pero cuando le hacían preguntas acerca de Romeo, de inmediato se detenía conversar seriamente. Al día siguiente de finalizar el programa, le dio «me gusta» a todos los comentarios positivos de Romeo; había perdido la cabeza por él.
Esto duró por uno, dos, tres años…
Diez años después, los dos participaron en el mismo programa de entrevistas tomados de la mano. Apenas el entrevistador inquirió acerca de Romeo, Gustav reaccionó de muy buena gana, charlando y mostrando una variedad de fotos privadas para presumir.
Con el tiempo, los fanáticos, ya insensibles, le dieron un apodo muy popular: Marido Maníaco del Showoff.
Gustav amaba a Romeo con su vida, y este le respondía con la misma entrega. Y la relación de ambos se convirtió en un modelo para el mundo.
En cuanto a Emily, la que debió haber alcanzado la cima en el círculo de la moda, diez años después, se convirtió en la chica de la portada de un sinfín de revistas para adultos. Su nombre y la «pornografía» quedaron vinculados, y nunca hubo manera de limpiar su nombre a pesar de lo mucho que lo intentó.