Sentido Común de una Casa Guerrera – Capítulo 29: Lágrimas

Traducido por Tomoe

Editado por Sakuya


Y así, recibí el día siguiente sin dormir.

Al final, sin resolver mis pensamientos, balanceé mi espada de la manera usual en la arena de entrenamiento.

Sin importar cuanto pensara sobre eso, no lo entendía.

El corazón de Louis dijo que era una pérdida de mi talento.

El corazón de mi hermano mayor dijo que rezaría por mi felicidad.

Mi talento es algo que pulí de manera en que pueda desgarrar el objetivo de mi venganza en pedazos.

Mi felicidad se encontraba cumpliendo mi venganza.

Sin importar cuantas veces lo pensara, no tenía nada más que eso.

Nuestra familia perdió a madre, y pensé que, para todos, una pequeña parte de nuestros corazones se congeló.

Sin embargo, no era así.

Era mi corazón el que se había congelado.

No… la noción de que se había congelado puede que sea un poco indiferente para describirlo.

Si un corazón tuviera forma física, estoy segura de que el mío estaría roto, golpeado, con una forma distorsionada.

Porque incluso ahora, mi campo de visión estaba teñido de un rojo brillante.

Dándome cuenta de que tenía pensamientos innecesarios mientras balanceaba mi espada, redirigí mis pensamientos.

Vamos a parar de pensar sobre cosas difíciles. Porque ahora, en este tiempo, solo debo enfocarme en pulir mi espada.

Ahh, mi corazón está bailando. Qué divertido. Es tan divertido que no lo puedo evitar.

Dentro del rojo que se reflejaba en mis ojos, podía sentir un ligero deleite.

Cuando el entrenamiento terminó, miré a mi alrededor. Hoy había menos personas de lo usual.

Kuroitsu-san no estaba tampoco hoy.

¿Me pregunto si algo ha pasado?

Ese tipo de pregunta apareció en mi mente.

Sin embargo, mientras Kuroitsu-san no está aquí, no tenía a nadie a quien preguntarle.

Más bien, incluso si algo ha pasado, ellos probablemente no le dirían a un ciudadano común como yo.

Con un sentimiento similar a la resignación, me aseé y regresé a la mansión.

Cuando entré a la mansión, vi como mi hermano mayor corría hacia mí de una manera inusualmente ruidosa.

—¡Melly………!

—¿Ha pasado algo?

—Justo ahora, una noticia llegó…

Por la apariencia de mi hermano mayor, era claro que no era un asunto trivial, así que me preparé a mí misma.

—Padre ha aprisionado a los bandidos que atacaron a madre…

En ese momento, mi visión se volvió completamente negra.

Se sintió como si el mundo fuera completamente silencioso y se detuvo por un momento.

—¿Es verdad?

—Sí, no hay error. Aquellos de la Armada lo investigaron.

—Es… así…

Respondí a sus palabras y caminé hacia delante con pasos temblorosos e inestables.

—¡O-oi…! ¡Melly!

Como si parara, mi hermano mayor gritó mi nombre.

—Regresaré a mi habitación.

No obstante, hablé para rechazarlo y volví a mi habitación.

Hablando honestamente, cómo conseguí regresar a mi habitación después de eso… no tengo ni idea.

Aunque no sabía cómo, antes de que lo supiera, estaba en mi habitación.

Miré al escenario fuera de la ventana sin prestar atención. Desapercibidamente, el sol se había puesto y el cielo estaba oculto por un velo de oscuridad.

Era tranquilo. Tanto que daba la ilusión de que era la única en el mundo.

Una gota de agua se deslizaba por mi cara.

¿Eran lágrimas de felicidad? O…

Por lo menos, no había un error de que mi objetivo se había cumplido. Porque padre fue quien aprisionó a los bandidos que atacaron a madre.

Si ellos fueron quienes robaron a madre, estoy segura de que padre no tendrá compasión.

Él probablemente los derribó al infierno magníficamente.

Ese es el porqué, mi deseo de venganza había sido completado.

Estaba honestamente feliz por eso. Estoy feliz, pero… pero, no puedo ser sinceramente feliz.

Más bien, se siente como si un agujero se hubiera abierto en mi corazón.

Quería arreglar las cosas por mí misma. Sé que es solo mi deseo egoísta.

Sin embargo, con estas manos, usando las técnicas que he pulido, quería usar todo lo que he cultivado hasta ahora para arreglar las cosas.

Porque, por ese bien, tomé la espada… era por eso que pulí mi manejo de la espada.

Y era solo por eso que estaba viviendo.

Era problemático.

Y, era despreciable.

Mi objetivo había sido alcanzado.

Entonces, ¿qué debería hacer?

Llevando una sensación de pérdida, no podía encontrar un propósito o significado para vivir.

Desde ahora, ¿cómo debería vivir?

Mi corazón estaba pintado del mismo color que el cielo.

Ese día, lloré todo el tiempo. Como el día en que perdí a mi madre.


Capítulo 30 ya disponible en Kovel Times edición 21.

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