Traducido por Lugiia
Editado por Yonile
Ahora bien, después de ser regañada de forma severa por Martha, pierdo la fuerza en mis piernas y caigo al suelo. En mis ojos, las lágrimas se empiezan a formar.
El dragón es capaz de cambiar su tamaño a su antojo, así que ahora parece un perro de raza grande. Ya que no tengo fuerzas para caminar, termino subiéndome en su espalda y comienza a trotar.
Dirk se pone de mal humor después de verme sobre el dragón. Al parecer, quería ser el que me llevara sobre su espalda… sin embargo, ya que tengo una ofensa previa de hacer mofumofu en público, me estoy conteniendo.
En la cima de la colina, donde planeamos hacer el picnic, se encuentran mi hermano y mis padres, preocupados por mí.
—¡Rosarin! ¡¿Estás bien?! No estás herida, ¿verdad? —pregunta mi hermano, llorando—. ¡Eres una tonta! ¡¿Cómo puedes dirigirte sin pensar a un lugar donde están combatiendo a un dragón?!
—Lo siento, hermano. Por favor, no llores —respondo, limpiando sus lágrimas. Un momento después, baja la mirada hacia mis pies…
Había olvidado por completo que estaba sobre el dragón.
—Rosarin, ¿en qué estás sentada? —pregunta él con una sonrisa en su rostro.
—El dragón…
—Puedo ver eso. Explícate.
¡Oh, no! Tengo el presentimiento de que otro regaño viene en camino…
En el momento en que pienso eso, se oye el sonido de un estómago vacío.
—Hermano…
—¿Qué?
—Yo también tengo hambre.
—Yo también… —expresa mi hermano, avergonzado. Después de discutirlo un momento, los caballeros deciden retirarse también después de almorzar.
De cierta forma, es algo incómodo tener un almuerzo tan lujoso al lado de ellos, que solo están comiendo pan y carne seca.
—Señor Rudolf, ¿puedo cocinar una sopa para todos ustedes? —pregunto mientras me acerco a él.
—¿Puede cocinar aunque sea así de pequeña, señorita?
—Sí, más o menos.
—Comandante, las comidas de Rosarin son increíblemente deliciosas.
Por favor, detente, ¡no eleves el nivel de exigencia! ¡Solo me parece un poco mejor que carne seca con pan!
—De acuerdo, entonces la dejaré a cargo de eso.
—Oh, señorita, ¿va a preparar algo? —pregunta Arc, sacando varias cosas de su bolso mágico. Entre ellas: una olla, un cuchillo de cocina, una tabla de cortar, un juego completo de condimentos, hierbas, verduras, pescado seco…
—¿Por qué tienes esas cosas allí? —pregunto, algo aturdida.
—Dan me dijo que preparara todo esto por si sucedía algo. Ya que los monstruos aparecen mucho por aquí, temía que su almuerzo se viera comprometido, señorita, y por ello me mandó a prepararlo.
—Dan…
En definitiva, esto es una emergencia… ¡Estoy agradecida por tu consideración!
Me decido por hacer una barbacoa rápida y una sopa para los hambrientos caballeros. Como pensé, ya que cocinar con el cuerpo de una niña sería un inconveniente, transformo mi cuerpo al de Rosalia de dieciséis años.
—Hombre, ella es linda.
—¡Sus senos son enormes!
Oigan, ustedes dos… Oh, no importa, Dirk acaba de darles un puñetazo sin piedad. Por lo general no se molesta tanto.
—¿Acaso estaban hablando de mi hija? —pregunta mi padre. ¡Detente! ¡Tu poder mágico se está filtrando! ¡Debido a eso, el fuego se está apagando!
—Déjame ayudar~
¡Ah, excelente! El fuego no se llegó a apagar gracias al aliento de fuego del dragón.
—Gracias.
Cuando le doy una palmada, vuelve a ser del tamaño de la palma de mi mano y sube a mi cabeza.
—De nada, hermana —dice riendo.
¡No puede ser! Es demasiado lindo… Parece estar cómodo en mi cabeza ya que no se mueve de allí.
—Es muy linda, pero sus guardias no son tan estúpidos.
—Es una belleza, pero aquellos a su alrededor la hacen inalcanzable. Además, parece que el Demonio Rojo también la adora.
—¿En serio? ¿No es eso una bandera de muerte?
Martha, ¿eres famosa incluso entre la orden de los caballeros? En serio, ¿qué fue lo que hiciste? Cuando la miro, la encuentro molestando a Rudolf.
—En el pasado, esos dos estuvieron en el mismo grupo de aventureros; sin embargo, no estamos seguros aún si se llevan bien o no… Aunque esa hermana mía debería dejarlo tranquilo, siempre termina molestándolo —comenta Arc.
—¡Oh, quiero oír historias sobre sus aventuras!
—Por supues… Hmm, mejor alguno de estos días, señorita. No lo haré hoy porque estoy asustado de las personas a sus espaldas.
—¿Qué? —Al darme la vuelta, me encuentro a mi hermano y a Dirk.
—¡¿Cómo planeas tomar la responsabilidad si Rosarin empieza a hablar sobre convertirse en aventurera después de escuchar esas historias, Arc?! —exclama mi hermano.
Hmm… cualquiera puede registrarse apenas cumple siete años. De todas formas, ya tenía planeado convertirme en aventurera, ¿sabes? Quizás. Por ahora, no puedo hacerlo.
—¡Así es! Además, ¿qué sucede si Rosarin se escapa de la casa?
¿Qué tan liberal soy en la mente de Dirk? No sería capaz de abandonar a mi familia ni a él por eso.
—No, no iría tan lejos. Amo a mi familia, tengo a Dirk, soy muy cercana a la bestia sagrada… no me siento inconforme con mi vida en estos momentos. No tengo interés alguno en apartar a todo el mundo por un poco de libertad.
Los dos se sienten descaradamente aliviados cuando declaro eso.
Ya les dije que no iré a ninguna parte, pienso suspirando.
Ahora bien, la sopa está lista. Cuando observo a mi alrededor, encuentro que las personas ya están comiendo la barbacoa que preparé hace un momento.
Ya que los caballeros trajeron los platos y utensilios que usan para acampar, se alinean para recibir sus porciones.
—O-Oh… ¿puedo estrechar su mano, señorita?
¿Soy un ídolo o qué?
—¿Eh? Hmm, ¿está bien?
Un apretón de manos está bien… es lo que pensé; sin embargo, termina con un abrazo también, así que Rudolf logra calmar, de cierta forma, a la persona en cuestión.
Me las arreglo para servir la comida a todos, pero termino totalmente agotada.
Cuando termino de distribuir la comida restante, me recuesto en el regazo curativo de Dirk.
—Ugh~ Estoy muy cansada. Dirk… cúrame~
Justo cuando me cuelgo de su cuello y me comporto como una niña mimada, me doy cuenta que algunas partes de mi cuerpo son diferentes. ¡Lo había olvidado! ¡Mi apariencia en estos momentos es Rosalia de dieciséis años!
—R-R-R-Rosarin…
De cierta forma, logra decir mi nombre después de morderse varias veces su lengua. Oh, Dios, ¿qué he hecho? Está ridículamente conmocionado.
Su timidez acaba de incrementar, incluso su cuello está rojo.
—Ah, lo siento. Lo olvidé.
Cuando me hago a un lado, una mano me agarra por detrás.
—No, está bien. ¿Debería transformarme?
—¿Perdón? Siendo honesta, me gusta tu forma bestia y tu forma actual, estoy bien con cualquiera. Sin embargo, en este momento, me gustaría que me acariciaras.
Este servicio es bastante bueno. Normalmente no acepta mis peticiones.
Ah, qué alegría. Las caricias de Dirk son tan suaves. Me encantan.
—Qué felicidad~
Me acurruco hasta el cuello de Dirk y me froto contra él. Sus palmaditas se detienen por un momento, pero pronto las reanuda. ¡Me siento demasiado feliz!
—Oye, eso hace cosquillas —dice Dirk, sonriendo… No puede ser, mi corazón está palpitando muy rápido. ¿Qué está sucediendo? Por lo general no llego tan lejos.
¿Qué? Dirk también se frota contra mí.
—En serio, me estás haciendo muchas cosquillas.
—¡¡¡Ahh!!! —grita un caballero cercano.
—¿Qué?
—¡Oye, Dirk! ¡¡¡Qué envidia!!! ¡¡Oh, vamos, si quieres coquetear, hazlo en algún lugar donde estén solos!!
Sintiéndose de la misma manera, los otros caballeros asienten.
Ah, lo siento mucho. Ya que terminé siendo mimada por Dirk, me olvidé por completo de la situación a mi alrededor y solo me enfoqué en él.
—Por lo general, se contiene, así que no tendría sentido si no lo hace aquí y ahora, ¿verdad?
—¿Eh?
¿Se estaba conteniendo? ¿Es por eso que estaba pegado a mí más cerca que de costumbre? ¿Acaba de decir, de forma indirecta, que le pertenezco a Dirk?
¡Oh, no! ¡Mi corazón late muy rápido y me cuesta respirar! ¡Con eso, estoy segura de que estoy sonrojada!
—¿Estás avergonzada? Qué linda.
Normalmente, es al revés… No puede ser, de verdad me cuesta respirar delante de su dulce y varonil rostro.
—Dirk, ¿tal vez eres un lolicon[1]?
En una situación tan dulce, esas palabras toman por sorpresa a todos en la colina y nos paralizamos.
El cabeza hueca no es nada más y nada menos que Curtis Blanc, un personaje de captura en el juego que vence a Rosalia en uno de sus finales. Su apodo era “Estúpido Perro”. Si llegan a conocerlo, se darán cuenta que es un perro y un estúpido… Más bien, un cabeza hueca.
—No, si la chica es tan hermosa, no puede ser un lolicon, ¿verdad?
Dirk negó con la cabeza ante las palabras de los otros caballeros.
—No creo que sea un lolicon por amar a Rosarin, en todas sus formas. No siento nada al mirar a otros niños —responde seriamente Dirk.
Ah, estoy muy feliz de oír eso.
—Ya veo… Iré a decirles a Adele y a Hugh.
Por su expresión, logro captar que la pregunta no originó de él sino que fue una petición de los demás. Más bien, ¿acaso entiende lo que significa lolicon? Al parecer, es más idiota de lo que pensaba.
Ya que estoy concentrada en las acciones del estúpido perro, noto tarde la cercanía del pequeño demonio.
—¿Rosarin? ¿Qué te parece si comenzamos a comer?
—¡Ah, sí! ¡Lo siento mucho, hermano!
Mis ojos se llenan de lágrimas ante la mirada de mi hermano. Asustada, disipo la magia y regreso a mi forma de tres años.
[1] Lolicon, es una contracción japonesa de la frase “complejo de Lolita”. En Japón, el término describe una preferencia sexual por jovencitas de 11 a 17 años o mujeres adultas con aspecto infantil, o a un individuo con tal atracción.