Traducido por Dalia
Editado por Sakuya
Bajo la luz de la luna, su sonrisa parecía más afilada que nunca. Después de eso, Lucas desapareció ante mis ojos en un instante.
—¿Princesa?
Con un sentimiento indescriptible, miré el asiento vacío donde solo quedaba la luz de la luna. Lily me llamó preocupada, pero, lamentablemente, no pude prestarle atención.
Lucas, maldito bastardo… Te juro que la próxima vez que te vea, te mataré de verdad. Así que dejé escapar un clamor silencioso y apreté los dientes hacia Lucas, que había desaparecido ante mis ojos.
Irónicamente, la noche se volvía aún más profunda.
♦ ♦ ♦
Al día siguiente se celebró un gran baile en la casa del Marqués de Iraine. Jennette y Ezequiel debían asistir al baile como pareja, por lo que era natural que compartieran un carruaje.
—Entonces, la señorita Florence vio el collar y le dijo al gato… —Como era costumbre, la voz animada de Jennette llenaba el carruaje como el canto de un ruiseñor.
Sin embargo, en algún momento, Jennette se dio cuenta de que Ezekiel no la estaba escuchando y parecía estar perdido en sus pensamientos.
—¿En qué estás pensando, Ezequiel?
Ezekiel giró la cabeza ante la clara voz que llegaba desde el otro lado. Su rostro estaba inmóvil, como si nunca hubiera perdido el enfoque por un momento, pero Jennette no se dejó engañar.
Pronto, su boca se abrió ligeramente.
—¿La princesa Athanasia originalmente era el tipo de persona que agradece cuando alguien la ayuda?
A petición de Jennette, no hablaba muy bien de ella en privado. No obstante, su pregunta fue tan inesperada que Jennette inclinó la cabeza con curiosidad.
—¿No es así? Todos suelen dar las gracias cuando les ayudan.
Ante sus palabras, los ojos de Ezekiel cayeron por un momento, como si estuviera reflexionando. Luego, soltó una voz baja como si hablara consigo mismo y volvió a asomar la cabeza por la ventana.
—Supongo que sí.
Observándolo de esa manera, Jennette no pudo evitar tener una pregunta que aún no tenía respuesta.
Después de un rato, los dos llegaron a la mansión del Marqués de Iraine y se bajaron del carruaje. Ezekiel y Jennette entraron al salón de baile juntos, luciendo como una pareja armoniosa.
Como si estuvieran siguiendo un procedimiento establecido, avanzaron hacia el centro del salón de baile, donde fueron recibidos con saludos y elogios de todos. A pesar de que los hermanos del marqués Iraine eran los anfitriones del evento, Jennette y Ezekiel irradiaban una presencia inigualable.
Los dos bailaron en perfecta sintonía en el salón, luciendo hermosos como si fueran personajes sacados de un cuento de hadas. Aunque había otras personas bailando alrededor al compás de la dulce música, Jennette y Ezekiel destacaban claramente.
Después del baile, recibieron aplausos de todos y compartieron amigables miradas con los demás invitados. Luego, alguien más se acercó a Jennette.
Era el joven hijo del marqués Iraine, quien llevaba tiempo cortejando a Jennette abiertamente. Entre las jóvenes, era conocido como ´La Flor más bella‘ y, como era de esperar de alguien que hacía latir los corazones, poseía una belleza excepcional.
Jennette no respondió de inmediato, sino que miró el rostro de Ezekiel. A pesar de su elegante presencia, también estaba recibiendo la atención de otras jóvenes y damas nobles esa noche. Ezekiel y Jennette eran dos personas cuyo futuro juntos estaba prácticamente garantizado.
Sin embargo, no existía una pasión apasionada entre ellos.
Ezekiel no sentiría celos si Jennette bailara con otro hombre mientras él sostuviera la mano de otro, y a Jennette no le importaría si Ezekiel intercambiara sonrisas con otra mujer. En el pasado, Jennette solía sentir ansiedad cuando Ezekiel se alejaba de su lado, pero sorprendentemente, ese sentimiento había desaparecido por completo.
Entonces, ¿es la confianza firme en sus corazones? Pero, para hacerlo…
—No tengo más remedio que aceptar la petición de la flor más bella. —Jennette sonrió brillantemente y tomó su mano cuando la extendió frente a ella. Entonces, naturalmente, la mano que estaba tocando la de Ezekiel cayó. No obstante, ni Jennette ni Ezekiel se arrepintieron.
Por un lado, se sentía un poco extraño, pero Jennette no le dio mucha importancia y se dirigió al salón de baile. Ezekiel también cruzó el pasillo, dejando a Jennette atrás. Las jóvenes presentes esperaban que él las invitara a bailar, pero Ezekiel no se acercó a nadie hasta que comenzó la segunda canción.
—La princesa Athanasia está sola hoy.
De repente, escuchó un nombre familiar y se detuvo en seco. Oh, ahora que lo pienso, ¿la princesa Athanasia también asistió al baile hoy? Era una persona que siempre estaba presente sin hacerse notar, como una flor en la pared. Así que hoy ni siquiera se dio cuenta de que estaba en el baile de graduación.
—De todos modos, ¿cómo es que siquiera es parte de la familia imperial? … ¿A dónde fue su sangre real?
—Exacto. Incluso si eres descendiente de una humilde bailarina, la mitad de ella es sangre de la noble familia real. ¿Por qué es tan diferente de la princesa Jennette?
Sin embargo, la voz que siguió fue bastante grosera. Estaba claro que las jóvenes que decían tales cosas no conocían la cortesía de la familia real.
Ezekiel se dirigió hacia el sonido con una expresión ligeramente fría. En la esquina del salón de baile había una sala de descanso y un espacio separado por gruesas cortinas. Como era de esperar, la princesa Athanasia y otras tres jóvenes estaban ahí. Pero en el siguiente instante, Ezekiel no pudo evitar dudar de sus ojos ante lo que vio.
♦♦♦
Hoy estaba de muy mal humor. La razón fue Lucas en primer lugar y este baile de mendigos en segundo lugar.
Oh, por supuesto, no había quejas sobre la familia del Marqués Iraine, que celebró el baile de hoy. Pero lo que me amargó fue el hecho de que tenía que asistir a este baile en lugar de la princesa Athanasia.
Uf, qué vida… No va a ser tan fácil como me gustaría.
Lucas, quien secuestró a la princesa Athanasia, desapareció por completo de mi vista. La busqué en todos los palacios y torres oscuras de la Ciudad Imperial, pero no pude encontrar ni un solo mechón de su cabello en ninguna parte. Entonces, de repente, estaba nuevamente interpretando el papel de la princesa Athanasia.
Si simplemente desapareciera así, todos pronto se enterarían de la desaparición de la princesa Athanasia. Muchas veces me pregunté si esa sería una mejor manera de encontrarla.
Pero, la pregunta era si Claude encontraría personalmente a la princesa Athanasia desaparecida. Heuk, por alguna razón, no tenía mucha confianza.
¡Me molesta, pero se ha ido! ¿Qué debo hacer si estoy bastante aliviada? Entonces Lily no tendrás que preocuparte hasta que muera.
Además, por alguna razón, sentí que la vida de la princesa Athanasia aquí estaba arruinada por mi culpa, y mi corazón estaba apesadumbrado. Así que decidí encontrar a las dos personas que desaparecieron mientras llenaba su vacante adecuadamente.
Parecía que venir al salón de baile hoy fue una elección equivocada. No importa cuán insignificante sea una princesa en el palacio imperial, sigue siendo una princesa, por lo que entré al salón de baile con cierta escolta que en realidad era una ilusión espiritual.
A menos que fuera un idiota, no podría haber sabido que estaba siendo ignorada en este salón de baile, para resumirlo.
—Oh, Dios mío, princesa Athanasia. ¿Estabas ahí? Era tan obvio que ni siquiera te reconocí. Oh, en realidad, la situación en Palacio Rubí no es muy buena, ¿verdad? Si me lo hubieras dicho con anticipación, con gusto te habría prestado joyas o un vestido que no uso…
Por tercera vez. Frente a la joven que secretamente me hacía sentir incómoda, reflexionaba sobre mi paciencia. Me sentía muy molesta cuando pensaba en la princesa Athanasia, quien había sido maltratada y había huido de un lado a otro todo este tiempo.
Aun así, no olvidé mi deber y evité el asiento con una expresión amable, como si fuera la verdadera princesa Athanasia aquí. No los evité porque les tuviera miedo, sino porque pensé que tendría un accidente si me quedaba.
Mi estómago seguía revuelto, así que agarré la bebida preparada para el salón de baile y la bebí.
¡He soportado mucho! Hoy me siento como una bestia salvaje peligrosa, así que no me toques ahora. Después de liberar a la ilusión que había creado, para que me acompañara hoy, me quedé sola en la esquina y bebí unas copas.
¿Se debe a mi estado de ánimo? Por alguna razón, me siento un poco incómoda. De todos modos, me alegra sentirme mejor que antes.
Estaba a punto de salir a la terraza con una copa, pero ya había parejas por todas partes, como cucarachas. ¡Malditas parejas por doquier! Me quejé y me dirigí al área de descanso en la esquina del salón de baile. Un sofá rojo en el centro llamó mi atención, así que me acerqué y me senté en el.
¡Ah, es tan suave! Aunque incluso si no lo fuera, mis zapatos eran incómodos, pero estaba bien. Decidí tomar un breve descanso aquí. Suspiré y estiré las piernas en el sofá. En otros momentos, no me habría visto tan vulnerable, pero ahora, de alguna manera, todo mi cuerpo estaba cansado, así que pensé que no importaba.
Vaya, ¿por qué suceden cosas tan sorprendentes en mi vida? ¿Dónde más podría encontrarme con Lucas y la princesa Athanasia? Y, diablos, ¿cómo demonios llegaré a casa?
—¿Cuál es el criterio para distinguir lo real de lo falso…?
¿Cuál es ese criterio? Solo aquellos que se encuentren a sí mismos podrán regresar y tomar posesión de la nebulosa. Ser tu verdadero yo, eso suena como una broma profundamente filosófica.
—¿Oh, princesa Athanasia? —En ese momento, una voz desagradable sonó desde la entrada del área de descanso. Aún recostada en el sofá, levanté la cabeza y vi a tres mujeres en mi campo de visión.
—La princesa Athanasia está sola hoy.
Oh, por la expresión en sus rostros, no son precisamente fans de la princesa Athanasia de este mundo.
—De todos modos, ¿cómo es que siquiera es parte de la familia imperial? … ¿A dónde fue su sangre real?
—Exacto. Incluso si eres descendiente de una humilde bailarina, la mitad de ella es sangre de la noble familia real. ¿Por qué es tan diferente de la princesa Jennette?
La discusión sobre el origen de la princesa Athanasia, como era de esperar, había comenzado.
—Bueno, dado que nació del vientre de una mujer cuyo origen es desconocido, es una lástima. Ahora que lo pienso, a menudo los bailarines son descendientes de esclavos, ¿verdad? He oído que venden más que simplemente su canto y baile…
—Oh, no te dejes engañar. No es diferente de ser una prostituta en un burdel.
No pude mantenerme en silencio como antes, debido a sus continuos comentarios despectivos.
—Oye, ¿serías un santo si aguantas este tipo de palabras como un ser humano decente?
—¿Q-Qué estás diciendo?
—No, no sería un santo, más bien simplemente dejarías de hacer el papel de una completa idiota.
Arrojé el vaso vacío que tenía en la mano y me levanté.
—Estoy de mal humor hoy. Aun así, no soy la que va a encargarse de ti si sufres un accidente, así que me las he arreglado para aguantar hasta ahora, porque la persona a la que insultaste es mi madre.
—¿Eres realmente tú? ¡Me estás hablando de manera bastante descuidada en este momento!
—Estás siendo ruidosa… y lo haces bien debo admitir.
Chasqueé los dedos mientras observaba a las jóvenes charlatanas. En ese momento, todos los objetos a mi alrededor comenzaron a flotar en el aire. Al ver esto, tres pares de ojos se abrieron de par en par.