Traducido por Den
Editado por Sakuya
Sin embargo, sólo porque estuviera acostumbrada, no significaba que no sintiera nada. Cada vez que lo pensaba, me sentía sola.
Ah, está bien.
Tenía que reconocerlo. Nunca existió un momento en que me sintiera bien sabiendo que Claude me había olvidado. No importaba cuánto tratara de convencerme a mí misma, no estaba bien en absoluto. Me estaba mintiendo.
Estaba hechizada por la calidez y el cariño que sentí por primera vez en mi vida, sin saber que era una polilla atraída por una llama, que poco a poco se estaba perdiendo en ella.
Después de experimentar esa dulzura una vez, no pude escapar de esta trampa.
Para ser sincera, todos los días me sentía como si me estuviera muriendo. No podía soportar el hecho de que la causa de todo esto fuera yo. Cada día estaba llena de odio por mí misma.
No estaba bien en absoluto.
—No me mires así.
Pero tenía que estar bien.
—Porque no estoy llorando.
Si no lo estaba, no podría soportarlo.
—Sí. No vi nada.
Isekiel no se rió de mi terquedad. Desvió la mirada y se quedó a mi lado hasta que mis lágrimas dejaron de caer.
La brillante luz que podía ver a la lejanía fulguraba en ondas. Todo comenzaba a desvanecerse como si fuera un sueño. Me sentí como si estuviera atrapada en un acuario.
Ah. Ojalá todo se convirtiera en burbujas y desapareciera.
Cerré los ojos sintiéndome como una carpa dorada que no podía respirar porque no tenía branquias.
La noche parecía eterna.
♦ ♦ ♦
—¡Isekiel! —el duque Alfius le gritó a su hijo, que acababa de aparecer.
Hoy, el baile para celebrar el cumpleaños del emperador había terminado temprano. Y en medio de eso, Isekiel había ido tras la princesa Athanasia sin decir ni una palabra, así que era de esperar que estuviera nervioso.
—¿Por qué seguiste a la princesa aun sabiendo que puedes ser el receptor de la ira del emperador? —lo regañó.
Sin embargo, ni él sabía la razón. No obstante, la princesa Athanasia claramente había perdido el favor del emperador. No, era demasiado pronto para decir que lo había perdido por completo.
Alfius pensó en la princesa, quien se marchó sola y llena de confianza a pesar de haber sido arrastrada por los caballeros al principio.
Al parecer, el emperador no la detestaba por completo, ya que la dejó irse por su propia voluntad, sin los guardias…
—Subamos al carruaje.
Pero, sea cual sea la razón, dado que el emperador había anunciado que la princesa Athanasia no era su hija, era peligroso que lo vieran con ella. Por lo que en el carruaje Roger Alfius siguió recalcando que Isekiel debía mantener cierta distancia de ella.
Su sabio hijo ya lo habría entendido, sin embargo, por alguna razón, cuando se trataba de la princesa, él tenía una actitud un poco desconcertante.
—Padre, —comenzó a decir finalmente—, siempre me has dicho que actúe con lógica.
—Sí.
—No sé si estás satisfecho conmigo hasta ahora, pero creo que siempre te he hecho caso.
Era obvio que el duque Alfius estaba orgulloso de su hijo, quien nunca lo había decepcionado.
—Pero hoy… —y dijo algo impactante—, experimenté por primera vez que todo era inútil.
—¿De qué estás hablando?
Roger Alfius no entendía lo que su hijo estaba diciendo. Pero el susodicho prosiguió en voz baja:
—Padre, no estoy seguro de poder soportar ver sus lágrimas de nuevo, —Isekiel miró firmemente a su padre, el duque Alfius—, y no creo poder perdonar a quienes la hacen llorar. —Su voz también era firme.
—Isekiel, tú… —titubeó Alfius, a diferencia de su yo habitual.
Esa persona, a la que Isekiel se refería, era claramente la princesa. Cuando se dio cuenta de eso, sus ojos reflejaron sorpresa.
La luz del exterior entró por la ventana y sus rostros se volvieron dorados. El duque Alfius sabía, mirando a esos ojos dorados, que no podría convencerlo sin importar lo que dijera.
—¿Hablas en serio?
A su pregunta, Isekiel permaneció en silencio. Pero eso significaba un “sí”.
Después de eso, el silencio se apoderó del carruaje.
Roger Alfius soltó un suspiro profundo y se volvió hacia su hijo.
—Como sabes, no estoy involucrado en los acontecimientos de hoy.
—Lo sé. —No obstante, Isekiel prosiguió—: Pero no será así en el futuro.
Las cejas del duque se curvaron. Pensó que sabía lo que quería decir su hijo, sin embargo, seguía incrédulo. Así que solo pudo sorprenderse por lo que dijo.
—Si lo que estás planeando, la lastima de alguna manera, no me quedaré de brazos cruzados.
—¿Esa es tu postura?
—Lo siento, padre.
Estaba sin palabras, por lo que se limitó a mirar el rostro de su hijo.
—Ja… —se rió, sorprendido. No sabía que Isekiel le haría esto a él, de entre todas las personas.
—Hablemos de nuevo más tarde. —Se tocó el rostro cansado.
De todos modos, no se había puesto completamente del lado de Zenit o de la princesa Athanasia, así que realmente no importaba demasiado, pero por lo que vio en el baile, el bando de la princesa no lucía muy bien.
El duque frunció el ceño pensativo hasta que llegó al vestíbulo.
Sin embargo, el largo día aún no había terminado.
Tan pronto como entraron a la residencia se encontraron con el rostro manchado de lágrimas de Zenit.
—Acaba de llegar una carta… ¡La tía…! ¡Ella…!
Ante su apariencia inusual, le quitó rápidamente el papel de la mano… y su rostro se tensó.
♦ ♦ ♦
—¿Sería mejor una bandeja de plata? O, ¿una maceta? —preguntó Seth, perdida en sus pensamientos, mientras limpiaba las escaleras con una fregona—. Creo que una fregona también estaría bien.
—¿De qué estás hablando?
Pero su rostro, mientras limpiaba, era violento. Lilly entrecerró los ojos y le preguntó, luego Seth volvió la cabeza para mirarla y dijo:
—La terapia de choque tiene algunos efectos, y estaba pensando en golpear la cabeza del emperador con fuerza una o dos veces.
—Seth, ¿realmente quieres ir a prisión?
Lo que dijo podía meterla en prisión fácilmente… o peor que eso.
No obstante, Lilly entendía de dónde venía eso. Además, Seth no era alguien que diría esas palabras tan fácilmente. Al final, suspiró y terminó de organizar las flores en el jarrón.
—Pero si seguimos así, no sabemos cuándo mejorará el emperador.
Lilly no estaba en desacuerdo con lo que dijo. Se mordió los labios pensando en lo que sucedió hace unos días.
Fue un alivio que la princesa Athanasia regresara sin ningún rasguño, pero no podría olvidar fácilmente ese día.
¿Cómo pudieron llevarse a la princesa de esa manera?
Su yo normalmente tranquila y apacible nunca lo habría imaginado, pero inconscientemente estaba apretando los dientes.
Siguió pensando en los guardias expulsando a la princesa y… en su débil yo, quien solo pudo rezar por ella hasta que regresó.
Se sintió feliz de ver que regresara sana y salva, pero también destrozada cuando escuchó lo que sucedió de Seth. Pero mucho peor cuando pensó en los ojos rojos de la princesa Athanasia.
¿Simplemente cómo lo hizo? El impacto de perder a su única familia debe haber sido grande y, aun así, no lo mostró en absoluto.
Todo este tiempo, la princesa Athanasia había estado diciendo que estaba bien, pero ¿qué otra razón podría haber para que siguiera adelgazando y dando vueltas por la noche? Para colmo, tuvo que experimentar esto.
Me da igual si los golpes en la cabeza funcionan o no 😤 Yo todavía quiero hacerlo en nombre de mi bebé
Muchas Gracias por el cap (◍•ᴗ•◍)❤plis no lo abandonen son lo único que tengo (╥﹏╥)(─.─||)
Me encanta la novela, no hace mucho que la empese pero es increible los detalles que se pierden en el manhwa aunque sigan caminos diferentes en algunas escenas lo esencial es el detalle ❤
Muchas grasias por la traducción ❤✨