Cenicienta – Capítulo 29: Brennan: ¿Hombres que no están en buena posición?*

Traducida por Den

Editada por Sakuya


Regresé a mi oficina debido a una emergencia. Nicolo me informó que mi padre adoptivo había venido de visita.

Ha pasado mucho tiempo desde que se retiró del ejército. Ahora es un anciano, pero todavía muy fuerte y activo debido a su larga carrera militar.

Me comuniqué con Nicolo a través de nuestros ojos.

— ¿No es solo mi padre?

—Aun así es urgente. —respondió.

Me dirigí a la sala de recepción, donde mi padre estaba sentado bebiendo un poco de té.

—Padre, ¿estás bien? ¿Por qué la repentina visita?

Nunca ha venido a verme al trabajo antes. Se mudó de la Ciudad Real para vivir una tranquila vida en el campo con mi madre. Y nunca pidió demasiado, tampoco vino a visitar sin previo aviso. Por lo que tengo un mal presentimiento sobre esto.

—Estoy bien. He venido porque escuché un pequeño rumor. —respondió.

El mal presentimiento se convirtió en una convicción.

El rumor es probablemente sobre el incidente en el teatro. En otras palabras, ha venido a preguntar por Fredericka. Me senté frente a él y mi padre me miró en silencio.

—Volker, ¿vamos a tener una nuera?  —preguntó directamente. Mi padre realmente prefería ser directo. Sonreí, no lo había visto por un tiempo, era agradable saber que padre no había cambiado.

—Sí, una hermosa novia.

—He oído que es la joven señorita Castley.

—Sí, su nombre es Fredericka.

— ¿Qué edad tiene? ¿No es joven todavía?

—Tiene diecisiete años.

— ¡Diecisiete!

Padre permaneció en silencio después de eso. Supongo que no sabía que había una diferencia de edad tan grande. Entonces mi padre me miró con una sonrisa mientras decía:

— ¡Lo has hecho muy bien muchacho! Esta es una noticia maravillosa. ¡La mejor noticia!

Era la primera vez que veía a mi padre así de feliz con algo que había hecho. Le devolví una sonrisa perpleja.

—Ha sido un deseo mío que, si tenía una hija, sería la novia o la segunda esposa del Vizconde Castley, pero nunca se hizo realidad. Y ahora, tú y la joven señorita Castley…

Ahora estoy escuchando cosas ridículas.

—Padre, ¿qué quieres decir?

Padre me miró y dijo:

—Ignora lo que dije. —y tomó un sorbo del té.

Durante la última gran guerra, gracias a la abundante ayuda financiera de la familia Castley, la moral de los soldados que luchaban en la guerra se recuperó gracias a la comida de alta calidad y el equipamiento suministrado al ejército por la familia Castley en ese momento. Fue el Sr. Castley quien trabajó con el Primer Ministro en la negociación de un alto al fuego y, finalmente, el tratado de paz.

Se enfrentó a muchas condiciones y oposiciones imposibles. Mi abuelo parecía confiar mucho en el dinero de Castley en esa guerra y recurrió a él sin permiso. Usó el dinero de Castley para pagar reparaciones a los países vecinos con los que estábamos en guerra. Fue una enorme cantidad de dinero. Era increíble que todo ese dinero viniera de un solo comerciante.

Mi abuelo, después de que fue dicho y hecho, inclinó su cabeza ante el mercader Castley en disculpa y agradecimiento. Se le presentaron los honores que se le darían a un soldado que arriesgaba la vida por el país.

Después, hubo un rumor de que el mercader Castley había prestado el dinero de un prestamista. Mi abuelo investigó la fuente del rumor y la lengua de la persona fue cortada.

El mercader Castley tenía una bóveda de oro, y de ahí procedía el dinero. El Rey se disculpó con el mercader Castley, pero este le respondió al rey con una sonrisa.

—Soy muy bueno haciendo dinero, ¿quién más podría prestarle dinero al rey aparte de mí?

Al final fuimos capaces de completar las reparaciones y rápidamente pagar nuestras deudas.

Mi abuelo se enamoró del espíritu y el talento del mercader Castley, y se comprometió a devolverle el favor.

—Pero el mercader Castley no estaba contento con un ascenso de rango, al contrario, para él se sentía deshonroso para un nuevo rico como él ascender de tal forma. Esperaba que el estatus de la familia Castley ascendiera de forma más estable.

—Así que… ¿no estás en contra del matrimonio? —le pregunté a mi padre, solo para confirmar.

—Sí, me alegró saber al respecto. Solicitaré saludar a su familia lo más pronto posible.

Después de eso, le pedí al vizconde Castley que informara al rey y a la reina del inminente compromiso de Fredericka. Y la solicitud para el matrimonio estaba preparada para ser presentada a la Cámara de Lores.

Pronto, nos encontramos solo los dos, en el salón de su familia.


Sakuya
Acerca del título… no tengo ni idea jaja así venía en inglés y en japonés :0

8 respuestas a “Cenicienta – Capítulo 29: Brennan: ¿Hombres que no están en buena posición?*”

  1. Nietos, nietos nietos, es lo que quiere su papá…. La emoción de que por fin encontró a su alma perdida es gratificante……. 🥰🥰🥰

    1. Waa ya se ganó al suegro, por cierto mendigos aristócratas todavía que los salvo de quedar en la ruina por la guerra los desprecian

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