Traducido por Yonile
Editado por Lugiia
¿Supervisar a Liz Cather…? En primer lugar, ¿por qué necesitan que alguien la vigile?
—Entendemos lo excepcional que es usted. Es por eso que es la única a la que podemos confiarle esta tarea.
—Si lo dice así, entonces Alicia sentirá que no puede negarse. —Mi padre reprende al rey antes de que tenga la oportunidad de decir algo.
—Um, ¿cuándo dice que quiere que la vigile…?
—Liz Cather es la santa.
No estoy realmente sorprendida por la declaración del señor Johan, ya que ya lo había supuesto mucho antes.
Siendo honesta, no sé cómo pude haber olvidado algo así. Como alguien que ha jugado el juego hasta el final, ya debería haber sabido que Liz era la santa.
Supongo que estuve demasiado concentrada en Alicia mientras jugaba para prestar atención a la configuración del personaje de la heroína. Quiero decir, ni siquiera podía recordar cómo se llamaba, así que supongo que es comprensible.
Pero todavía no entiendo. Cuando dicen monitorear, ¿qué esperan que haga?
—Creo que ya debería haber escuchado que su magia se salió de control hace un par de años, ¿verdad?
—Sí…
—Ella es una existencia muy importante para este país…
—Lo sé —interrumpo antes de que el señor Johan pueda darme toda la historia sobre lo crucial que es la santa para nosotros.
—Entonces, iré al grano. Incluso si ella es la santa y tiene un poder mágico asombroso, si no tiene la sabiduría para ejercer bien su poder, entonces no podrá desempeñar las funciones que requiere para tal puesto.
Ahora que lo pienso, hubo ese tipo de evento en el juego donde se pone a prueba la sabiduría de la heroína. Cuando estaba jugando esa parte, obtuve cero puntos.
Si mal no recuerdo, fallé todas las opciones para cada una de las preguntas. Si no piensas demasiado en ello, las respuestas sonaban bien, pero ninguna solucionó los problemas planteados. Por lo tanto, no había una opción plausible para elegir.
Entonces, en el juego, al jugar como la heroína, nunca pude participar en las reuniones importantes que decidirían el destino del país. Lo cual, sinceramente, fue lo mejor, ya que la santa es una idiota.
—Por ello, cuando solicitamos que se le vigile, también debe observar sus acciones y juzgar si tiene la sabiduría para poder soportar todas las cargas que recaen sobre este país. Y, de no ser así, queremos que la guíe para asegurarnos de que cultive esa capacidad.
Entiendo todas las palabras que dice el señor Johan, pero siento que me estoy perdiendo algo aquí. Su plan suena bastante… incompleto.
En esencia, parece ser que necesito determinar si ella es lo suficientemente sabia para estar al frente del país, ¿verdad?
Pero ¿a qué se refiere cuando dice que quieren que yo la guíe?
¿Está tratando de decir que, hasta el día en que su papel como la santa finalmente se revele al público, se supone que debo moldear su forma de pensar? ¿Que necesito empujarla hacia el camino correcto?
¡No quiero hacer eso…! ¡Eso es algo que solo una persona verdaderamente buena haría!
Estoy tratando de convertirme en una villana. ¡No puedo aceptar una tarea como esta! Eso destruiría todo por lo que he estado trabajando tan duro.
Incluso si el castigo por negarse es ser desterrada del país, no hay forma de que pueda aceptar este trabajo.
—Alicia, ¿no se convertirá en una villana para nosotros?
Debo haber oído mal… ¿Qué acaba de decir el rey?
—Um, creo que le escuché decir que quiere que me convierta en una villana…
—Exactamente. No podrá decirle a nadie que está monitoreando a Liz Cather. Además, se le pedirá que use comentarios agudos y mordaces para cambiar su forma de pensar. Y considerando que Liz Cather es bastante popular dentro de la Academia, es probable que no sea vista con buenos ojos por tales acciones.
Esto se siente como un sueño. ¿No es esta una oportunidad única en la vida para mí…? ¿Es este un regalo de Dios por todo el arduo trabajo que he puesto para convertirme en una villana?
—Entonces, en conclusión, ¿me está diciendo que me convierta en la persona más malvada del mundo?
—No digo que deba convertirse en ese tipo de persona, pero es posible que sea percibida como tal.
—No hay necesidad de que aceptes este papel si no quieres, Alicia. Solo di la palabra y olvidaremos que esta conversación sucedió —me dice padre con seriedad.
¿No aceptar? Me niego a considerar eso como una opción en este momento. ¿Por qué declinaría? ¡Nunca antes me había sentido tan feliz en toda mi vida! ¡Pensar que sería capaz de recibir este tipo de papel del mismo rey!
Todo este tiempo he querido intimidar a Liz, pero en el fondo de mi mente siempre he dudado un poco porque no tenía un motivo adecuado para justificarlo. ¡Sin embargo, con esto, tengo el motivo perfecto ahora!
No tengo ninguna duda sobre mi respuesta. Solo me pregunto cuál es la mejor manera de expresarles lo que siento.
—Acepto su propuesta. Le mostraré que puedo convertirme en una villana verdaderamente fenomenal.
Al escuchar mi respuesta, el alivio inunda los rostros de todos los hombres en la habitación, excepto el de mi padre.
—¡Te convertirás en una marginada!
—Estaré bien, padre.
—¡La gente te despreciará!
—Lo sé.
—¿Serás capaz de soportar todo eso?
Qué pregunta más estúpida.
¿Qué hay que soportar? Estoy segura de que disfrutaré cada día que pase cumpliendo con esta tarea mientras asisto a la Academia.
—Por supuesto.
Mi padre lanza un suspiro de resignación; mis sentimientos parecen haber llegado finalmente a él.
—Incluso a sus hermanos, bajo ninguna circunstancia se le permitirá…
—No hablaré de ello en absoluto —interrumpo al rey antes de que pueda terminar su frase, proyectando toda mi ambición en mi voz, y le miro directamente a los ojos.