En una hermosa tarde de domingo, Azuza y Kyouya se pararon juntos frente a una colosal puerta de hierro forjado. A través de ella, la joven vio una mansión imponente que era el doble de grande que en la que se estaba quedando, la cual no era pequeña según ningún estándar, pero parecía una cabaña en comparación con la que se alzaba más allá de la puerta.
Apretó una caja de pastel y la invitación a una fiesta de té que se celebraría en la mansión y que había recibido el día anterior. Youta Kisagari era el anfitrión. Se tomó el tiempo de escribir a mano que le encantaría que ambos asistieran. Él aceptó porque era una invitación de su hermano menor, a pesar de no estar entusiasmado con la idea. Mientras tanto, ella estaba emocionada de recibir su primera invitación a la casa de alguien desde que llegó a la ciudad del Clan Rojo. Seguí leyendo “Contrato con un vampiro – Capítulo 49: Tregua”
Punto de vista de Kyouya
Azuza estaba montada sobre mi estómago mientras pasaba un cortador de cajas por su muñeca y me miraba. Su inocencia habitual dejaba paso a una voz seria y desafiante. Hizo este movimiento agresivo en el momento en que volvimos a la mansión.
Una vez la dejé en su habitación, regresé a la mía para cambiarme como suelo hacer. Me encontraba quitándome las odiosas lentillas y dejando el abrigo, cuando escuché un golpe suave en la puerta. Concentré mi atención para percibir que ella estaba frente a mi puerta y me encontré derribado en el momento en que abrí para ver qué pasaba. Me empujó contra el suelo y se montó sobre mi estómago evitando que me levantara. Seguí leyendo “Contrato con un vampiro – Capítulo 48: Realización”
Azuza corrió por el pasillo después de dejar a Sukiharu y Louta detrás, entró con rapidez al salón de clases por su bolso para salir pronto del mismo. Sus compañeros trataron de hablarle, pero no tenía por qué darle importancia. ¡Después de todo Kyouya podía morir!
Su corazón latía con fuerza en su pecho, claro que su muerte era sólo asumiendo el peor escenario y no creía que ya se encontrara en ese punto aún, pero odiaba la idea de que siquiera existiera esa posibilidad. Entendía por completo la situación, pero aún así no podía evitar que el pánico la obligará a apresurarse. Corrió a toda velocidad a través de la escuela hasta que alguien la tomó del cuello de su camisa, casi haciendo que se asfixiara. Seguí leyendo “Contrato con un vampiro – Capítulo 47: La razón de sus lágrimas”
—Y parece ser que Kyouya no se está sintiendo bien. ¿Tienes alguna idea de que pueda estar causándolo?
Intente preguntarle solo para recibir la respuesta de que no era mi problema y no debería preocuparme.
—Me pregunto qué puede ser. De verdad solo conozco a Kyouya desde hace poco más de un año así que aún no lo conozco bien. Dudo que sea una enfermedad seria o algo similar. Quizá solo no está descansando lo suficiente. Seguí leyendo “Contrato con un vampiro – Capítulo 46: la causa de su mala salud”
Traducido por Herijo
Editado por Ayanami
Unas cuantas horas antes
Kyouya acompañó a Azusa a la escuela y le ordenó a su familiar mantenerla vigilada, mientras regresaba a su habitación en la mansión donde sin siquiera quitarse los lentes de contacto cayó exhausto sobre la cama.
—Estoy sediento… Rodó para quedar sobre su espalda, mientras se acomodaba el cabello con las manos.
Su cuerpo se sentía débil, su cabeza pesada y sus extremidades entumecidas. Los síntomas parecidos a una anemia habían empeorado, a unos peores que estaban relacionados con el impulso por beber sangre.
Realmente. Quiero sangre… Seguí leyendo “Contrato con un vampiro – Capítulo 45: Sed”
Traducido por Herijo
Editado por Ayanami
—¡Azusa Saito! ¿Estás lista para enfrentarnos de nuevo?
—Nunca se cansan de esto chicas, ¿o sí? La escuela ya terminó, déjenme ir a casa.
—¡Heriste nuestro orgullo, debes compensarlo con tu muerte! Seguí leyendo “Contrato con un vampiro – Capítulo 44: La primera promesa”
Traducido por Herijo
Editado por Ayanami
—¡Azusa! Olvidé mis libros para la siguiente clase, ¿podría sentarme contigo?
—¿Por qué parece que siempre olvidas tus libros… Higari?
—No pienso responder al menos que me llames Sukiharu.
—Sukiharu… Seguí leyendo “Contrato con un vampiro – Capítulo 43: Una nueva normalidad”
Traducido por Herijo
Editado por Ayanami
Punto de vista de Kyouya
Transcurrieron varios minutos mientras nos mirábamos fijamente, inseguros de qué hacer. Mantenerla presionada debajo de mi en el sillón en una posición embarazosa no era nada bueno mentalmente para ninguno de los dos. Me retorcí un poco para retroceder, intentando no lastimarla.
No tengo idea de cómo interpretó mis movimientos, pero cerró firmemente sus ojos con resignación. Giro su rostro exponiendo su cuello tensando el rostro. Observándola temblar atemorizada, hizo que quisiera darme un golpe. ¿Qué bien me hace asustarla de esta manera?
—Lo lamento… Seguí leyendo “Contrato con un vampiro – Capítulo 42: Amanecer (Punto de vista de Kyouya)”
Traducido por Herijo
Editado por Ayanami
Me bañe con agua fría. Quería despertar, pero también necesitaba calmarme. Sentí náuseas mientras las memorias surgían desde el preciso momento en que me desperté. Las lágrimas no surgen más. Me dije a mi mismo que eso sucedió hace mucho tiempo e intente dejarlo de lado. Fue así como siempre lidie con ello.
Salí de la ducha un poco más refrescado que antes y regresé a mi cuarto. Seguí leyendo “Contrato con un vampiro – Capítulo 41: Asalto de medianoche (Punto de vista de Kyouya)”
Traducido por Herijo
Editado por Ayanami
Mi madre era mi mundo cuando era pequeño.
Para cuando me di cuenta, solo dos tipos de personas me rodeaban: aquellos que me temían y despreciaban por mis ojos rojos, y los que trataban de usarme a su favor. Algún espectador curioso salía de vez en cuando, pero después de un tiempo mostraban un obvio desagrado. Tal vez, debido al acondicionamiento recibido por lo que los demás decían de mí o las amenazas de sus padres de que se alejaran de mí, siempre terminaban retirándose. Seguí leyendo “Contrato con un vampiro – Capítulo 40: Su propio mundo (Punto de vista de Kyouya)”
Traducido por Herijo
Editado por Ayanami
—NO.
—Pero Kyouya…
—No puedo estar de acuerdo.
—Considerando la situación, asistir a clases es la mejor opción.
—No me importaría tener que amarrarte, lo sabes, ¿verdad? Seguí leyendo “Contrato con un vampiro – Capítulo 39: La Manifestación de una emoción”
Traducido por Herijo
Editado por Ayanami
—Este corredor lleva a la librería. El edificio adjunto que puedes ver desde la ventana es la cafetería. Si sigues derecho por el pasillo y entras a esa habitación estarás en la biblioteca. Los estudiantes pueden tomar prestado cualquier libro que quieran, pero asegúrate de regresarlos cuando termines de usarlos… creo que eso sería todo. ¿Hay algún lugar al que les gustaría ir?
—Yo estoy bien Iouta
—¿Azusa? Seguí leyendo “Contrato con un vampiro – Capítulo 38: Compañero de clase”
Traducido por Herijo
Editado por Ayanami
—Muy bien clase. Me gustaría presentarles a la nueva estudiante transferida. La señorita Saito.
—Hola. Mi nombre es Azusa Saito. Espero que podamos llevarnos bien.
El profesor encargado, que parecía más adecuado para ser el maestro de deportes, llevó a Azusa a un salón de clases similar al que podrías encontrar en cualquier escuela de Japón. No estaban bromeando cuando dijeron que la escuela fue construida para imitar a la de los humanos. No había ni el más mínimo detalle que se sintiera fuera de lugar en comparación a las escuelas a las que había asistido. Seguí leyendo “Contrato con un vampiro – Capítulo 37: Auto introducción”
Traducido por Herijo
Editado por Ayanami
—Ha pasado tiempo desde la última vez que nos vimos, señorita Azusa. Creo que la última vez fue en la fiesta —Azusa miró con incredulidad la mano extendida de la persona que estaba hablando con ella, antes de regresar el apretón de manos. Un hombre portando un elegante y costoso traje dirigió una sonrisa de corazón hacia ella y Kyouya.
Habían llegado a la escuela con una hora de antelación para saludar al director. La secretaria en la entrada los había guiado hacia los asientos dentro de la oficina, donde fueron recibidos por el hombre de gran constitución que había atormentado a Azusa durante la fiesta. Seguí leyendo “Contrato con un vampiro – Capítulo 36: Una Pretensión engreída”
Traducido por Herijo
Editado por Ayanami
Azusa giró frente al espejo, su falda y listón escarlata brillaban bajo las luces fluorescentes. Se ajustó su blazer café oscuro, cubriendo las partes características de su uniforme, las cuales imitaban a los corsés de la época victoriana.
—¡Muy bien! Nada parece fuera de lugar —Comentó con una emoción incontenida. Hoy era el día que había estado esperando, su primer día en una escuela local. Seguí leyendo “Contrato con un vampiro – Capítulo 35: Escuela”