Barra de Progreso de la Muerte – Capítulo 102: Monstruo

Traducido por BeeMiracle

Editado por Ayanami

El entrenamiento matutino transcurrió sin problemas y la tarde fue un tiempo libre poco común, es decir, tiempo de descanso. Shi Jin rechazó la invitación de Luo Donghao de ir juntos a la cantina. Se sentó en el suelo, mirando a Xiang Aoting, que se estaba preparando para irse. Por su comportamiento, fue bastante obvio.

Xiang Aoting lo miró de reojo y dejó la lista. Una vez que el escuadrón se disolvió y todos se apresuraron a irse, se acercó a él.

Shi Jin lo miró. —Me duele la mano —dijo.

Xiang Aoting frunció el ceño. Se agachó y le revisó la mano, preguntando:

—¿Por qué, te lastimaste?

—No, no dormí bien. —Shi Jin permitió que su hermano le tomara la mano.

Al ver que su mano dejó de temblar en el instante en que Xiang Aoting la tocó, suspiró, su estado de ánimo era complejo. Curvando los dedos, retiró la mano y dijo: —Cuarto hermano, busquemos un lugar para sentarnos y hablar.

Al ver su mal humor, Xiang Aoting no dijo nada, solo extendió la mano y lo puso de pie.

Xiang Aoting llevó a Shi Jin a la enfermería y le pidió al médico que le echara un vistazo a su mano. El dolor en los dedos de Shi Jin fue causado por razones psicológicas, así que, naturalmente, el médico no pudo encontrar nada; al final, solo pudo recetarle un medicamento para aliviar el agotamiento por calor.

Después de eso, fueron a la cantina para comer, luego encontraron un rincón sombreado en el campo de entrenamiento y se sentaron uno al lado del otro.

—El pronóstico del tiempo dice que lloverá en los próximos dos días. Si lo hace, tendremos que cambiar al entrenamiento en interiores: como el curso de educación ideológica de defensa nacional, conferencias, ver películas militares patrióticas, etc. Podrás descansar un poco —dijo Xiang Aoting, ofreciéndole una botella de jugo frío a Shi Jin: —Toma, bebe un poco.

Shi Jin le dio las gracias y lo tomó; al contacto con la botella fría, le empezó a doler la mano de nuevo. Bajó la cabeza y susurró:

—Cuarto hermano, últimamente, he tenido una pesadilla. En mi sueño, papá acababa de fallecer y yo había aceptado la herencia en lugar de rechazarla. Luego me secuestraron, me desfiguraron la cara y me cortaron un dedo. Me dolió mucho. Probablemente, estaba a punto de morir, pero luego viniste y me salvaste.

Xiang Aoting frunció el ceño cuando escuchó esto y volvió la cabeza para mirarlo.

—Después de despertar, comencé a sentir dolor en mi mano, como si realmente me hubieran cortado un dedo. Es como lo que la gente llama dolor de miembro fantasma, algo que experimentan a menudo aquellos que han perdido alguno de sus miembros —dijo Shi Jin, girando inconscientemente la botella entre sus dedos. Levantó la cabeza para encontrarse con la mirada de Xiang Aoting y continuó: —Cuarto hermano, hay una cosa que no puedo entender. En el sueño, desapareciste justo después de salvarme y nunca volviste a contactarme… ¿Por qué harías eso? Si estuvieras en esta situación, ¿qué te habría hecho hacer eso? ¿Me puedes decir?

Xiang Aoting le tomó la mano y sacó la botella. —Xiao Jin, es solo un sueño, no tiene sentido tratar de encontrarle sentido. ¿Es por eso que te ves tan agotado estos días? Deberías haberme dicho que no te sentías bien, yo…

—Imagina que no fue un sueño —lo interrumpió Shi Jin, agarrando su mano y apretándola con mucha fuerza. —¿Si no fuera un sueño, y esto realmente hubiera sucedido? Xu Jie una vez le pidió a Xu Chuan que contratara a alguien para secuestrarme, ¿recuerdas lo que quería que hiciera? Desfigurarme, cortarme los dedos… Si no hubiera renunciado a la herencia, o no hubiera intentado suicidarme, o no me hubiera escapado del hospital y conocido a Lian Jun por casualidad… Entonces, eso es lo que probablemente me habría sucedió, ¿no lo crees? Cuarto Hermano, esa espantosa escena de mi sueño estaba a un pelo de convertirse en realidad. Si cambiamos sólo una pequeña cosa, ese habría sido nuestro final.

—¡Xiao Jin! —Xiang Aoting se sintió alarmado de repente: los ojos de Shi Jin estaban en blanco y desenfocados, y el aura soleada y confiada que siempre lo rodeaba desapareció abruptamente. El adolescente parecía haber sido arrastrado al abismo, vagando en la oscuridad e incapaz de salir.

Y, lo que Shi Jin había descrito era muy probable que se cumpliera. Si la situación tomara un curso un poco diferente, Shi Jin habría sido considerado desafortunado si las cosas sucedieran como en el sueño. Afortunadamente, evitaron ese final por un pelo, y todavía tenían la oportunidad de enmendar su relación y compensar el pasado.

—Es solo una situación hipotética; en realidad, estás vivo y bien, y tus hermanos saben que sus acciones pasadas no fueron correctas. Nadie puede volver a hacerte daño. —Tocó la cabeza de Shi Jin y dijo con dulzura: —Xiao Jin, es solo una pesadilla sobre el pasado. El presente y el futuro son más importantes, así que no dejes que esos sueños te detengan.

La mano que tocaba la cabeza de Shi Jin estaba muy caliente. Sus emociones agitadas se calmaron, Shi Jin soltó lentamente la mano de Xiang Aoting y preguntó:

—Entonces, dime: ¿por qué en el sueño me salvarías y me abandonarías más tarde?

Su instinto le decía que la respuesta a esta pregunta era la clave para deshacerse de las pesadillas. Era importante, extremadamente importante.

—Xiao Jin. —Xiang Aoting no tuvo más remedio que suprimir su disgusto por el contenido del sueño y reflexionar sobre la información que le proporcionaba. Después de un momento, dijo: —Si tu sueño fuera real y esas cosas realmente hubieran sucedido, entonces, solo habría una razón para mi desaparición. Si mal no recuerdo, ¿La organización que contrató Xu Chuan, Wolfraime, era una organización criminal extranjera?

Sorprendido por la pregunta, Shi Jin parpadeó y luego asintió. —Sí, operaban principalmente en el extranjero. En mi sueño, me secuestraron en el extranjero.

—Bueno, entonces, tiene que ser esto. —Xiang Aoting suspiró y dijo algo impotente: —Soy un soldado chino y miembro de una unidad especial. Si hubiera ido al extranjero para salvarte, definitivamente me habría ido sin el conocimiento y la aprobación de mis superiores. Salir sin permiso de esa manera, ciertamente, no funcionaría con el ejército. Entonces, si “desaparecí” después de salvarte, debió ser porque fui castigado y no tuve forma de contactar contigo. ¿Cómo podría realmente abandonarte, Xiao Jin? Me gustes o no, sigues siendo mi hermano.

Levantó una mano y tocó la cabeza de Shi Jin nuevamente, con los ojos llenos de remordimiento. —Lamento haberte hecho sentir tan inseguro. Con todo lo que sucedió, estábamos tan preocupados por el Gran Hermano y nos olvidamos de que eras tú quien había sido el más lastimado. Lo siento.

Shi Jin lo miró aturdido, sintiendo un nudo en la garganta. De repente, soltó una risita y escondió su rostro entre sus manos, pensando que era realmente demasiado estúpido, ya que no había sido capaz de resolver esto durante todos estos días.

En realidad, fue por esto, una explicación tan simple y obvia… Sí, con el personaje de Xiang Aoting, solo podría haber habido una razón. Fue castigado, desapareció no por sus sentimientos personales, sino porque fue castigado.

“Shi Jin”, “Shi Jin”, ¿escuchaste eso? Tu cuarto hermano nunca ha pensado en abandonarte, nunca. Incluso sacrificó su carrera para salvarte; actuar sin permiso es un delito muy grave en el ejército.

Un alivio abrumador inundó su corazón. Bajó la cabeza y presionó la cara contra su brazo, bloqueando las lágrimas que se precipitaron en sus ojos, y respiró hondo varias veces, tratando de reprimir sus emociones.

【Déjalo salir, JinJin, te sentirás mejor si lloras,】dijo Xiao Si, angustiado por él.

—¿Por qué debería llorar? No soy el ‘Shi Jin’ original, ¿por qué tengo que ayudarlo a llorar? —Shi Jin gruñó en su mente. Sin embargo, no pudo reprimirse más y comenzó a llorar, las lágrimas corrían por sus mejillas y sus hombros temblaban, como un niño herido y agraviado.

¡Maldita sea, no quería dejarse influenciar por esas emociones vergonzosas que dejó el “Shi Jin” original! Pero… ¡Maldita sea, la trama de esta novela era un puto lío de malentendidos!

Xiang Aoting se sorprendió cuando Shi Jin rompió a llorar. Desconcertado, extendió la mano e intentó apartar el brazo de Shi Jin. —¿Qué pasó, por qué lloras? ¿Se te metió arena en los ojos? No lo bloquees, déjame ver…

¿Qué hay para ver, eh?

Shi Jin apartó la mano y se secó los ojos con furia, luego se puso de pie y miró a Xiang Aoting con el ceño fruncido. De repente, extendió la mano y agarró la mano derecha de su hermano, mirándola firmemente; esta mano, en el sueño, era esta mano la que “Shi Jin” apretó con fuerza y ​​se negó a soltar.

—¿Xiao Jin? —Xiang Aoting lo miró con preocupación y confusión. Al ver la expresión del adolescente, reprimió una sonrisa inoportuna. Llorando así, pero aún fingiendo ser duro, Xiao Jin parece un niño.

—Si te atreves a reír, te golpearé los dientes —amenazó Shi Jin, notando que las comisuras de la boca de Xiang Aoting se contraían. Sin previo aviso, se inclinó y le dio un fuerte mordisco a la mano que sostenía, luego se enderezó y golpeó la gorra en la cabeza de su hermano, resoplando. Después de eso, se secó las lágrimas y se alejó sin mirar atrás.

¡El año que viene, el año que viene definitivamente será lo suficientemente fuerte como para derrotar a Xiang Aoting! ¡Espera y verás!

Xiang Aoting se enderezó la gorra y miró la espalda del adolescente pisando fuerte, luego las marcas de dientes en su mano. Incapaz de contenerse más, bajó la cabeza y se rió. Cuando su mirada cayó sobre los rastros de lágrimas que habían quedado en el suelo donde se había sentado Shi Jin, su risa se desvaneció y extendió la mano para tocar las marcas húmedas. Recordó el sueño que Shi Jin describió y los dedos temblorosos del adolescente, y sus labios se presionaron en una línea recta.

Su hermano menor había sufrido demasiado.

Acarició el suelo suavemente, como si tocara la parte superior de la cabeza de alguien.

♦ ♦ ♦

Shi Jin pasó el precioso tiempo libre recuperando el sueño: después de dejar a Xiang Aoting, fue directamente a su dormitorio y se tiró sobre la cama. Esa tarde, finalmente, tuvo un buen descanso, sin sueños y sin sentirse sofocado por emociones confusas y complejas después de despertar.

Se terminó.

Dejó caer su mano levantada y miró hacia el techo, dejando escapar un largo suspiro. Se incorporó, a punto de bajar de su litera e ir a cenar cuando, por el rabillo del ojo, vio un objeto rectangular oscuro junto a su almohada.

Esto es… Sus ojos se iluminaron. Se sentó de inmediato, sus ojos mirando alrededor como los de un ladrón. Después de asegurarse de que no hubiera nadie más en la habitación, agarró el objeto, lo encendió y echó un vistazo, finalmente confirmando: ¡era el teléfono móvil de Xiang Aoting! ¡Desbloqueado y puesto en modo silencioso!

Para inculcarles un sentido de independencia, a los estudiantes de primer año no se les permitió usar sus teléfonos durante todo el período de entrenamiento militar, durante más de un mes. Solo pudieron contactar a sus familias a través de sus instructores. Sin embargo, ¡Xiang Aoting le dejó su teléfono en secreto!

Esto significaba que estaba ayudando a Shi Jin a contactar a Lian Jun.

Shi Jin golpeó la cama con el puño, tan emocionado que podía volar. ¡Xiang Aoting era el mejor hermano del mundo! ¡Viva, viva, viva!

Echó hacia atrás la colcha y saltó de su litera, luego corrió hacia la puerta de la habitación y miró hacia afuera. Después de confirmar que no se acercaba ningún rostro familiar, se puso en cuclillas justo detrás de la puerta, para vigilar el movimiento de los reclutas afuera, y rápidamente marcó el número de teléfono de Lian Jun.

Bip, bip, bip… Shi Jin esperaba ansiosamente. Finalmente, cuando el teléfono casi se cuelga automáticamente, escuchó una voz familiar desde el receptor: {¿Sí?}

Ah, este tono frío y distante, esta voz profunda y encantadora.

Una sonrisa tonta se extendió instantáneamente por el rostro de Shi Jin. Tosió y dijo, bajando deliberadamente el tono de su voz: —Xiao Jin me pidió que te pasara un mensaje, dice que te extraña un poco.

El tono de Lian Jun inmediatamente perdió su frialdad. {¿Shi Jin?}

—No, soy Xiang Aoting —refutó Shi Jin, todavía imitando a su hermano.

Lian Jun se rió entre dientes. Dijo con indulgencia: {Muy bien, eres Xiang Aoting. Entonces, ¿Shi Jin tiene algo más que quiera que me digas?}

—Sí —respondió Shi Jin, su sonrisa era tan amplia que sus ojos se entrecerraron en rendijas. Se sentó en el suelo justo donde estaba agachado y continuó: —Quiere preguntarle si está comiendo bien, cómo van sus ejercicios, si ha estado ocupado recientemente y si está durmiendo bien por la noche.

Lian Jun le hizo un gesto a Gua Uno, con quien había estado hablando, para que se fuera temporalmente. Mirando la foto de Shi Jin que puso como fondo de escritorio, respondió las preguntas una por una: {El tío Long cambió mi dieta hace un tiempo, y los nuevos platos saben horrible. El ejercicio va bien, voy mejorando poco a poco. He estado un poco ocupado recientemente. No duermo bien; y a menudo me despierto porque extraño mucho a cierta persona.}

Mientras escuchaba, Shi Jin se imaginó a Lian Jun frunciendo el ceño mientras comía comidas nutritivas y se despertaba por la noche con frecuencia, y su sonrisa se desvaneció.

Con el corazón adolorido, susurró: —Lian Jun, quiero verte.

Lian Jun extendió la mano y tocó la imagen de Shi Jin en el escritorio, su sonrisa también se desvaneció. {Yo también.} Quiero verte, quiero verte tanto que estoy empezando a odiar mi identidad por no permitirme entrar en el mundo de luz al que perteneces.

Al escuchar el tono de la voz de su amante, Shi Jin no pudo soportar más. Colgó, buscó en el teléfono de Xiang Aoting, encontró la aplicación de mensajería y la abrió. Sin prestar atención al grupo de chat anclado en la parte superior que mostraba una gran cantidad de mensajes, se desconectó de la cuenta de Xiang Aoting, se conectó a la suya e hizo una videollamada a Lian Jun.

Apenas un segundo después, Lian Jun apareció en la pantalla del teléfono.

Shi Jin lo miró sin parpadear, solo se relajó después de que la imagen de Lian Jun fue completamente clara. Tratando de lucir como si todo fuera normal, sonrió a la cámara.

—Te ves un poco más delgado —dijo —No tienes permitido hacer esto, ¿sabes? Necesitas comer bien. Lo comprobaré cuando vuelva.

{Entonces intentaré comer un poco más en cada comida.} Lian Jun se inclinó más cerca de la pantalla, como para ver mejor a Shi Jin. De repente, frunció el ceño. {¿Por qué tienes los ojos hinchados?}

Um… porque me fui a dormir justo después de llorar.

Sintiéndose un poco culpable, Shi Jin cubrió su expresión levantando una mano para rascarse la cabeza. —Hoy tuvimos medio día de tiempo libre y lo pasé durmiendo. Supongo que están hinchados por el sueño.

Lian Jun no fue tan fácil de engañar. Escudriñó el rostro de Shi Jin y frunció el ceño. {Tienes círculos oscuros pesados ​​debajo de los ojos. ¿No duermes bien allí?}

Tenía pesadillas todos los días, sería extraño que durmiera bien.

Un poco arrepentido de hacer una videollamada, evadió: —No, no tengo ojeras, es solo un bronceado. Es difícil evitar broncearse durante el entrenamiento militar ya que estamos afuera casi todo el tiempo…

La mirada de Lian Jun se posó en su cuerpo nuevamente. Su expresión se oscureció cuando notó un moretón en el brazo expuesto de Shi Jin. {¿Por qué tienes moretones? ¿Estás siendo intimidado? ¿Es así cómo te cuida Xiang Aoting?}

—No, no, me caí mientras practicaba. No te preocupes, mi hermano me está cuidando muy bien, ¿ves, no me dejó en secreto usar su teléfono móvil? —Shi Jin explicó apresuradamente. Ajustando el ángulo de la cámara para que solo su rostro fuera visible, aseguró: —Realmente, estoy bien aquí, no estoy herido y no estoy siendo intimidado. No necesitas preocuparte.

Después de que su rostro fue ampliado, los círculos oscuros de Shi Jin se hicieron aún más evidentes, y al mirar de cerca, se podía ver cuán inyectados en sangre estaban sus ojos.

Claramente, esta no era la apariencia de alguien que acababa de despertar.

Las manos de Lian Jun se apretaron con fuerza, pero no mostró nada en su rostro.

Al ver a Shi Jin pensando ansiosamente en una explicación, se obligó a relajar su expresión y cambió de tema. {¿El entrenamiento militar es difícil? ¿Estás cansado?}

Shi Jin suspiró aliviado y comenzó a describir los eventos de los últimos días, eligiendo deliberadamente los incidentes más divertidos para hacerlo sonreír. Lian Jun escuchó con atención; viendo al adolescente volverse cada vez más enérgico, sus manos apretadas se relajaron.

Los dos habían charlado durante solo diez minutos cuando Luo Donghao regresó, interrumpiendo su llamada. Shi Jin cerró la sesión de la aplicación de mensajería a regañadientes, borró su información de inicio de sesión y ocultó el teléfono. Luego, con los nudillos crujiendo, ¡fue a tener una “charla de hombre a hombre” con Luo Donghao!

En el club, Lian Jun miró la pantalla oscura del teléfono, recordando la expresión de consternación que apareció en el rostro de Shi Jin cuando tuvieron que terminar la llamada. Su mano se apretó de nuevo, levantó la voz para llamar a Gua Uno.

Al día siguiente, Shi Jin fue al campo de entrenamiento antes de la hora del montaje. Como era de esperar, vio a Xiang Aoting, quien también había llegado temprano.

—Gracias por prestarme tu teléfono —dijo Shi Jin, deteniéndose junto a su hermano y pasándole su gorra.

Xiang Aoting miró el teléfono móvil escondido en el interior y reprimió una sonrisa. Cogió el teléfono y le devolvió la gorra. —¿Dormiste bien anoche?

—Sí, muy bien. Cuando me levanté esta mañana, ya no me dolía la mano. —Respondió Shi Jin, volviéndose a poner la gorra. De repente, preguntó: —Dime, ¿le otorgarán una medalla y un certificado a un cadete, como premio por ocupar el primer lugar en el entrenamiento?

Xiang Aoting lo miró. —¿Sí, por qué?

—Quiero llevarle a mi novio algunos recuerdos —respondió Shi Jin, alzando la barbilla de manera dominante. —Y mi novio se merece solo lo mejor, así que, naturalmente, le daré lo mejor.

Xiang Aoting frunció el ceño y extendió la mano para tocar su gorra. —Tonterías, el entrenamiento es por tu propio bien.

Shi Jin se inclinó rápidamente hacia atrás para protegerse la gorra y agregó: —Oh, no sé, cuando llegué aquí por primera vez, creo recordar a alguien que dijo que a su hermano menor no se le permitía hacerlo “lo suficientemente bien”. Sin embargo, ¿quién era ese?

Xiang Aoting vaciló, luego trató de explicar: —No lo quise decir así, tú…

—Está bien, está bien, ¿desde cuándo te has vuelto tan molesto? —Shi Jin lo interrumpió, enderezándose. Al ver a su hermano fruncir el ceño de nuevo, su expresión se volvió repentinamente seria. —Cuarto Hermano, si obtengo el primer lugar en el entrenamiento militar, regresa a la Fuerza Aérea —dijo con firmeza.

Desconcertado, Xiang Aoting comenzó. —Xiao Jin…

—No renuncies a tu carrera por mi culpa. El tiempo para que un soldado pueda luchar libremente es demasiado corto; prefiero verte volar en un cielo azul que atrapado en una base militar como esta. —Shi Jin lo miró y dijo solemnemente: —El hermano mayor de Shi Jin, no puede ser un simple soldado. Tienes que hacer todo lo posible y convertirte en el mejor en el campo donde se encuentran sus talentos, solo entonces te reconoceré.

Xiang Aoting estaba profundamente conmovido. De repente, sonrió y puso su mano sobre la cabeza de Shi Jin, presionando hacia abajo. —Está bien, haré todo lo posible para que me reconozcas.

Shi Jin le dio una palmada en la mano y lo miró, molesto. —¡Te dije que no me tocaras la cabeza! ¿Estás buscando pelea conmigo?

No muy lejos, Luo Donghao miró conmocionado a Xiang Aoting y Shi Jin “coqueteando”. En su mente, aparecieron todo tipo de títulos de novelas románticas desordenadas: “Instructor dominante se enamoró de mí”, “Pareja peleadora: del odio al amor”, “El hombre que hizo crecer al joven maestro mimado”, etc. .

No pudo evitar dar un paso hacia atrás, llevándose una mano al pecho. ¿Es realmente así? La razón por la que al instructor le gustaba ponerle las cosas difíciles a Shi Jin era…

Xiang Aoting y Shi Jin notaron que Luo Donghao estaba boquiabierto y se volvieron para mirarlo.

A estas alturas, Luo Donghao se había convencido por completo de que la historia que produjo su mente es cierta. Se volvió y se escondió detrás de un árbol, tratando de fingir que nunca había estado aquí.

—¿Qué está mal con él? —Preguntó Xiang Aoting, frunciendo el ceño.

Shi Jin negó con la cabeza. —No lo sé. ¿Quizás comió demasiado en el desayuno y ahora no pudo evitar vomitar?

Los miembros del escuadrón descubrieron que después del tiempo de descanso del medio día, el entusiasmo de Shi Jin por el entrenamiento aumentó repentinamente.

Hasta este punto, ninguno de ellos se había dado cuenta de Shi Jin; después de todo, los cadetes todavía seguían haciendo solo ejercicios básicos. Todos ya sabían que la condición física de Shi Jin era muy buena, por lo que no se sentían particularmente sorprendidos o incrédulos de que Shi Jin se desempeñara mejor que un estudiante de primer año promedio; a lo sumo, solo suspiraron de que, en realidad, no parecía un joven maestro rico.

Sin embargo, cuando terminó el entrenamiento básico y pasaron a la carrera de obstáculos, finalmente, se dieron cuenta: ¡este “joven maestro” era simplemente un monstruo!

Cuando todos seguían aprendiendo a gatear correctamente, Shi Jin ya había logrado atravesar el gateo bajo como una brisa, haciendo que los cadetes detrás de él comieran polvo; cuando todos aún estaban tratando de escalar la primera pared y fallaron miserablemente, Shi Jin había trepado cuidadosamente sobre la última y se sentó a tomar un trago de agua y descansar; durante la práctica de combate, Shi Jin tuvo que entrenar con el instructor porque podía derrotar a cualquier estudiante fácilmente, incluso cuando se les permitía cooperar e ir contra él de dos en dos o de tres en tres… En resumen, todos se pararon en la tierra de los mortales y miraron hacia arriba. Shi Jin deambulaba por el mundo de los fuertes, sintiéndose tan frustrados que casi no podían respirar.

—¿Qué diablos le dieron de comer cuando era niño …? —Liu Yong se derrumbó en el costado del pozo de arena. Mientras observaba a Shi Jin, que había estado entrenando durante toda la tarde, pero todavía tenía la energía para entrenar con Xiang Aoting, Liu Yong sintió que no era digno de respirar el mismo aire que él.

Luo Dongao se dejó caer junto a él y se secó el sudor de la frente. También observando a Shi Jin, dijo: —Les diré algo aún peor: durante la inspección de la habitación, Shi Jin obtuvo la puntuación más alta. En nuestro segundo día aquí, podría doblar su edredón en un bloque de tofu.

—Argh, no quiero vivir más. —Con el corazón roto, Liu Yong se volvió para acostarse de lado. Por el rabillo del ojo, captó la escena de Shi Jin golpeando el hombro de Xiang Aoting con un puñetazo y sintió que le dolía el hombro. Encogiendo su cuello, comentó: —Al instructor parece gustarle mucho Shi Jin. Entrena con él todos los días y le enseña movimientos y todo. Ah, tengo mucha envidia.

La expresión de Luo Donghao se congeló. Vio a Shi Jin detenerse después de golpear a Xiang Aoting y correr hacia adelante para revisar su brazo con una mirada de preocupación, Xiang Aoting le palmeó la cabeza diciendo que estaba bien y cerró los ojos con fuerza.

—No tengas envidia, esto no es algo que debas envidiar… —pronunció con la voz de alguien que había experimentado las vicisitudes de la vida. —Aparte de eso, será mejor que entrenes. Pasado mañana, se supone que debemos aprender a disparar; si no pasas por la carrera de obstáculos hasta entonces, ¿quieres apostar acerca de si el instructor te dejará entrenar aquí solo?

Liu Yong se estremeció y se levantó apresuradamente del suelo. Cuando un pensamiento cruzó por su mente, se animó y dijo —Shi Jin es bueno en todo lo demás, pero ¿tal vez, su puntería apesta? Mi tío tiene un campo de tiro y yo, básicamente, crecí con un arma. ¿Quizás pueda vencerlo? ¿Qué opinas?

Al ver la expresión de optimismo en su rostro, Luo Donghao quería hablar, pero se mordió la lengua. Al final, solo dejó escapar un suspiro silencioso y se alejó.

♦ ♦ ♦

Dos días después, el campo de tiro.

Luo Donghao hizo un gesto con la barbilla hacia el objetivo que Shi Jin acababa de golpear y preguntó: —Liu Yong, ¿puedes ganar?

—Joder… —Liu Yong estaba a punto de llorar. —¿Es Shi Jin un monstruo? ¡Incluso disparando, es el mejor! ¿No es suficiente que sea bueno en todo lo demás? Deja que otros vivan, ¿quieres…?

Luo Donghao le dio una palmada en el hombro, reconfortándolo. —Está bien, todavía tienes una oportunidad, hay una actividad más que no hemos hecho.

Liu Yong, apartó de la mano, enojado. —¡Oportunidad, mi pie! ¡La última actividad pone a prueba la fuerza física y la resistencia! ¡¿Crees que puedo ganar con eso?!

♦ ♦ ♦

El autor tiene algo que decir:

Extra: ¿qué pasaría si Shi Jin no hubiera ignorado los mensajes del grupo de chat cuando usó el teléfono de Xiang Aoting, sino que los hubiera leído?

Rong Zhouzhong: Las habilidades fotográficas del Cuarto hermano apestan. ¡No hay una sola imagen que muestre la cara! Solo mira estos, todos están tomados de la parte de atrás, bla, bla, bla … [imagen]

Shi Weichong: De hecho, no hay ninguno.

Fei Yujing: Esta es aceptable. [fotografía]

Li Jiuzheng reenvió la foto en silencio y luego cambió su foto de perfil.

Unos segundos después.

Rong Zhouzhong: ¡Oye! ¡Despreciable, quinto! ¡¿Cómo te atreves a usar la foto de Xiao Jin como foto de perfil?!

Li Jiuzheng: …

Rong Zhouzhong: ¡No pretendas morir, cámbialo ahora mismo!

Rong Zhouzhong: Quinto, tú # ¥% @% ¥

Shi Jin: “……” ¿Qué diablos es esto?

Pasó el dedo para navegar por el historial de chat.

Diez minutos después, el teléfono de Xiang Aoting entregó el fantasma bajo el pie de Shi Jin.

#¿Quién necesita hermanos mayores de todos modos?

Una respuesta en “Barra de Progreso de la Muerte – Capítulo 102: Monstruo”

  1. Demonios yo tambien quiero leer ese chat grupal que tienen los hermanos.
    Jajaja maldicion, ahora me muero porque todos se enteren que simplemente es su hermano, y como es que Lou Donghoa conozca todas esas novelas XD

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