Caballeros y magia – Capítulo 1: Mundo alternativo

Traducido por Army

Editado por Lucy


Un lugar al que no pertenecía, un mundo diferente.

Este mundo no tenía nombre y la gente no lo había explorado por completo. Pensaban que los continentes en los que vivían abarcaban todo su mundo, y uno de esos en este mundo era Zetterlund.

El continente Zetterlund estaba dividido en una región oriental y otra occidental por la cordillera de Aubigne. Dividido por la cadena montañosa, cada región tenía su propio ambiente único. El oeste estaba gobernado por varios países controlados por los seres humanos, conocidos colectivamente como la “Unión Occidental”. Al este estaba el mar de árboles Bocuse, gobernado por poderosas criaturas demoníacas — el nido de bestias demoníacas.

Sin embargo, la región oriental de Zetterlund no estaba totalmente desprovista de todos los humanos. Existía una nación humana solitaria, conocida como el Reino de Fremmevira. Debido a que este país estaba en la frontera del mar de árboles, también era la primera línea de defensa en la guerra contra las bestias demoníacas. Para contrarrestar a las bestias demoníacas errantes, la nación levantó un ejército de caballeros y lo ha mantenido hasta hoy. Estaban orgullosos de su papel como escudo de la humanidad y la “Unión Occidental” llegó a ser conocida como la “Nación de Caballeros”.

En el año 1268, comenzó la historia con este continente como telón de fondo.

En la base del Monte Aubigne, que llegaba hasta las nubes, estaba la capital de Fremmevira, Känkänen. Si se viajaba hacia el este durante medio día en carruaje, se llegaba a una gran ciudad. Esta ciudad era única porque más de la mitad de su espacio estaba ocupado por una sola instalación. Era un edificio fortificado hecho con ladrillos y piedras, sin embargo, no se sentía intimidante y no estaba destinado para uso militar. Este edificio era un instituto educativo para los niños conocido como la “Academia de Pilotos Laihiala”

Los caballeros defendían al pueblo contra los ataques de las bestias demoníacas. Como parte de la gloriosa nación de los caballeros, eran populares en Fremmevira, y era una ocupación muy respetada. Como un país propenso a los ataques debido a su ubicación geográfica, necesitaban el apoyo de un gran ejército. El entrenamiento de los caballeros se convirtió en una prioridad para la nación, lo que llevó a la expansión de la organización educativa para caballeros, la Academia de Pilotos Laihiala.

Un golpe bajo resonó dentro del edificio hecho de mampostería de piedra.

Este lugar tenía un amplio suelo de piedra, rodeado de muros y asientos del mismo material. Este campo de entrenamiento de forma ovalada estaba situado en un rincón de la academia.

En el centro de la tierra se encontraban dos caballeros que se enfrentaban con sus espadas. Ambos estaban fuertemente armados, uno con una espada y un escudo, el otro con una espada de dos manos. El campo de entrenamiento se usaba para simulacros de batallas. Los dos caballeros estaban pasando por todo tipo de ejercicios y las espadas que estaban usando estaban desafiladas para evitar lesiones.

Los caballeros se tomaban los ejercicios en serio, aunque sólo estuvieran practicando. Apuntaron sus espadas el uno al otro, midiendo cuidadosamente la distancia de su oponente. Una ráfaga de viento sopló arena en el aire. La poderosa mirada fija que se tenían terminó, y ambos lanzaron sus ataques simultáneamente, cerrando la brecha entre ellos en un instante. Se movieron dentro del rango de combate del otro con tanta agilidad, que era increíble pensar que estaban utilizando armadura de combate completa.

Pero había algo fuera de lugar en esta escena, el suelo temblaba con cada uno de los pasos de los luchadores, emitiendo un ruido bajo y pesado en el aire. Los humanos normales no deberían ser capaces de hacer sonidos tan fuertes con sus pisadas, aunque estén completamente armados.

La respuesta está en su entorno.

Había gente en los asientos de la audiencia observando el duelo de los caballeros, pero sus figuras eran mucho más pequeñas que la de los otros dos. No, lo contrario era cierto; eran los caballeros los que eran demasiado grandes. Si el tamaño de los caballeros y el tamaño de la audiencia se comparan lado a lado, ellos serían al menos 6 veces más grandes. Era natural que fueran pesados, y no era una exageración llamarlos gigantes.

Estos gigantescos caballeros no eran humanos. En realidad eran Caballeros Silhouette, de alrededor de 10 metros de altura con estructuras metálicas conocidas como “esqueletos internos” y “tejidos cristalinos”, que actuaban como músculos.

Impulsado por el maná, era un robot híbrido generado por la magia y la maquinaria, un caballero gigante. Fueron armas hechas para luchar contra las bestias mágicas, la unidad de combate más fuerte conocida por la humanidad.

A poca distancia de la batalla de los Caballeros Silhouette, varias figuras estaban observando la pelea, una de ellas tenía una mirada excepcionalmente intensa.

Era uno de los instructores de batalla. En otras palabras, su deber era instruir a los pilotos que manejaban los Caballeros Silhouette, con el fin de entrenarlos para proteger a los ciudadanos de las bestias demoníacas. Tomó cada movimiento de los aprendices, emitiendo un aire serio.

—Ellos son… Robots…

 

Una linda voz vino detrás. El hombre se dio vuelta y vio a una bella dama caminando hacia él con un niño en sus brazos. La señora tenía el cabello plateado suave y suelto con un toque de púrpura que le llegaba a la cintura. Su cabello se balanceaba en el viento mientras caminaba, dejando un rastro de plata brillante detrás de ella. Tenía suaves ojos azules, piel blanca pálida y parecía muy joven, entre los 15 y 20 años. A pesar de su corta edad, ya estaba casada y tenía un hijo.

El demoníaco instructor, cuyo rostro era temido por todos, mostraba una rara sonrisa. La gente que lo conocía podría haberse sorprendido, pero no sería sorprendente si estuviera en la cálida presencia de la dama.

—Tina, ¿qué te trae aquí? Es muy raro verte visitar la academia.

—Sólo quería dejar que Eru viera el lugar de trabajo de su padre, así que me desvié de nuestro habitual paseo.

—Ya veo, Eru, ¿qué piensas del trabajo de papá?

El hombre le preguntó al niño en brazos de su esposa, pero fue completamente ignorado. Su hijo siguió agitando sus cortas extremidades, mirando fijamente a los Caballeros Silhouette luchando en el campo de entrenamiento.

—Eh, no parece estar escuchando…

El hombre sonrió mientras le daba palmaditas en la cabeza a su hijo de tres años. Él había heredado las características adorables de su madre: pelo plateado con un toque de púrpura, una cara ovalada exactamente igual a la de ella cuando era joven, y un par de brillantes ojos azules. Su aguda mirada mostraba una pizca de su herencia paterna.

—Ara, Eru, estás prestando más atención a los Caballeros Silhouette que a tu propio padre, como un niño. ¿Realmente te gustan tanto los Caballeros Silhouette?

—He oído que muchos niños sueñan con ser caballeros, Eru parece pensar lo mismo.

Ambos padres sonrieron mientras lo observaban mostrar su curiosidad por este interés infantil. El pequeño niño observaba la escena con entusiasmo mientras agitaba los brazos y piernas, sin preocuparse por ser el centro de atención. Se concentró en el campo de entrenamiento sin parpadear, mostrando su excepcional concentración. El hombre frotó el suave pelo de su hijo durante un rato, pero se rindió después de no obtener ninguna reacción.

—De verdad te gustan, ¿eh?¿Cómo es eso? Eru, esos son los Caballeros Silhouette, gigantescos guerreros que defienden nuestro reino.

—Caballeros… Silhouette…

El niño parecía reconocer las palabras del hombre por primera vez, repitiendolas con un tono único de los niños cuando caen profundamente en un pensamiento. El hombre sonrió amargamente después de ver a su hijo comportarse así, y volvió a su puesto después de conversar con su esposa por un tiempo. En el campo de entrenamiento, los caballeros gigantescos terminaron su encuentro y se estaban preparando para salir.

—Bien, volvamos a casa, tenemos que preparar la cena y esperar a que papá regrese.

La señora persuadió al niño que seguía mirando hacia atrás, reacio a irse. Se iban a casa.

—Caballeros Silhouette …

El niño en brazos miró a los gigantescos caballeros en el campo de entrenamiento hasta que quedaron fuera de su campo de visión.

El nombre completo del niño, conocido como Eru, era Ernesti Echevarria. Era hijo de Mathias Echevarria, instructor de la Academia de Pilotos Laihiala, nacido de su madre Celestina.

Habían pasado tres años desde su nacimiento. Estaba en la edad en la que un niño comienza a tener sentido de sí mismo, un período en que se vuelven juguetones. Pero Eru era muy sensato. Él entendía a  sus padres desde temprana edad y se comportaba bien. Todo el mundo sentía que era un niño brillante, pero su inteligencia provenía de otra fuente.

Desde que llegó a ser consciente de sí mismo, desarrollando su propio carácter, se hizo consciente de recuerdos que nunca antes había experimentado; los recuerdos de su pasado donde vivía en otro lugar. Un lugar llamado Japón, una civilización de las computadoras, y donde tenía el nombre de Kurata Tsubasa.

Una teoría conocida como reencarnación.

La reencarnación describe el fenómeno que ocurría cuando los espíritus de los que habían muerto renacen en el mundo una y otra vez. Se menciona en el budismo, y todos los japoneses habían oído hablar de esta teoría, tanto si creían en ella como si no. Kurata no era una excepción, pero no creía en ella en ese momento y nunca esperó experimentarla por sí mismo. Incluso había conservado las experiencias de su vida anterior, esto era una reencarnación exitosa.

Pero, él mismo incluido, nadie supo realmente lo que pasó. De lo único que estaba seguro era que era Ernesti en este mundo y Kurata Tsubasa en su mundo anterior. Por eso, comparado con los niños de su edad, tenía una mente “experimentada”, y una calmada y madura capacidad analítica.

Por el capricho de su madre, visitó el lugar de trabajo de su padre. El impacto de esta visita lo inspiró a dedicar su segunda oportunidad de vida a esto.

Cuando el sol comenzó a ponerse en el oeste, una señora y un niño caminaron a lo largo de las calles de la Academia Laihiala.

El joven seguía preguntando por los gigantescos caballeros que había visto, y su madre le respondió con paciencia y dulzura. Mirando a su excitado hijo, respondió alegremente:

—Realmente te gustan los Caballeros Silhouette, ¿no? ¿Eru quiere ser un caballero en el futuro?

—Caballero… ¡Está bien! ¡Quiero ser un caballero!

—Ara, un niño tan confiable. Vamos a pedirle a papá que te enseñe cuando seas un poco mayor ¿de acuerdo?

—¡Está bien!

Nadie sabía lo que sucedería en este viaje dimensional. Pero él estaba seguro de que su segunda vida como Ernesti Echevarría se estaba desarrollando más allá de su control.

♦️ ♦️ ♦️

La residencia Echevarría estaba situada cerca de la Academia Laihiala.

Aparte de esta familia, la gente de esta nación se despertó temprano. Mientras el sol salía por el este, la joven madre Celestina, se levantó para preparar el desayuno. Cuando terminó, toda la familia comió junta como de costumbre.

El único hijo de la familia, Ernesti, despertó al último.

—¡Caballero Silhouette!

Eru parecía haber soñado con algo, mientras se quitaba la manta y saltaba de la cama. No sabía que su madre se reía por su grito. El niño miró a su alrededor, dándose cuenta de que estaba en el dormitorio, y se volvió a meter en la cama.

Anoche estaba demasiado emocionado y no pudo dormir. En su lugar de eso, se acostó en la cama soñando despierto, con una sonrisa en su rostro.

¡Son robots, y en forma humanoides, gigantescos robots humanoides…!

Ernesti, o más bien el japonés Kurata Tsubasa, derramó una lágrima de alegría en su corazón por esta inesperada bendición, y no pudo dejar de sonreír. Conservar los recuerdos de Kurata Tsubasa significaba que heredó intereses y aficiones similares de su vida anterior. En la vida anterior de Eru, él era Kurata Tsubasa, un otaku adicto a los robots.

Como un adulto trabajador, que pasó casi todos sus ingresos en su afición, navegando entre las revistas de modelado y juegos, incluso buscando obras visuales a veces. Puso el doble de esfuerzo en su afición en comparación con otros, y no sería malo decir que estaba obsesionado. Pero a pesar de su obsesión, todavía era un hombre ordinario. Él no tenía la pasión como para unirse a la fuerza de autodefensa sólo por la oportunidad de operar un tanque. Pero la situación era diferente en esta vida. De hecho, gigantescos robots humanoides “Caballeros Silhouette”, realmente existían aquí.

Cuando “despertó”, se sintió decepcionado al encontrarse en un mundo sin modelos ni computadoras. Pero estaba agradecido desde el fondo de su corazón por este milagro, ya sea por casualidad o por la voluntad de una fuerza misteriosa que le  permitió reencarnar en este mundo, su decepción cambió cuando descubrió a los Caballeros Silhouette. Esto no era una broma, gigantescas armas humanoides de 10 metros de altura realmente existían.

Para un otaku de robos como él, ver a los Caballeros Silhouette tuvo suficiente impacto como para cambiar completamente su vida. En otras palabras, creía que la razón por la que había venido a este mundo era para pilotear estos gigantescos robots. No tenía ninguna base para decir esto, pero aún así lo creía firmemente.

Tenía la determinación, pero su diminuto cuerpo perdió ante su somnolencia, y durmió un poco más antes de que el desayuno estuviera listo.

Era casi mediodía, Celestina y Eru estaban en la sala de estudio de Mathias.

El estudio estaba lleno de muebles de madera sencillos pero prácticos, que se mantenían limpios y ordenados. Mathias era principalmente un instructor de espada, pero también estaba involucrado en otros campos. Las estanterías de la sala de estudio estaban llenas de todo tipo de literatura, incluyendo libros ilustrados para niños.

Tina se sentó en el sofá de la habitación, apoyando al pequeño Eru en su regazo, leyendo el libro de imágenes lentamente. Hablaba con claridad y tranquilidad. Eru, quien ayer había disfrutado de esto, escuchó durante algún tiempo antes de empezar a inquietarse. Llamó a su madre:

—Mamá, mamá.

—¿Qué pasa, Eru? ¿No te gusta este libro?

Tina inclinó la cabeza, pero las siguientes palabras del niño disiparon su confusión.

—Me gustan los libros… ¡Pero, quiero saber más acerca de los Caballeros Silhouette!

Ella dejó el libro a un lado y estudió la expresión de Eru. Mirando sus brillantes ojos llenos de curiosidad y alegría, no podía rechazarlo.

—Ara ara, ya veo. Aunque todavía es temprano para ti, Eru, si quieres pilotar un Caballero Silhouette, primero tienes que ser un caballero.

—Caballero… ¿cómo me convierto en un caballero?

Eru tenía un objetivo fijo en mente, pero todavía era un niño de 3 años. Incluso con el intelecto de un hombre adulto, sus acciones todavía estaban restringidas, incluyendo la parte más crucial, la recopilación de información. ¿Cómo podría un niño pequeño, con acceso limitado a los recursos, obtener información? Tenía que confiar en sus padres.

—Veamos, necesitas leer muchos libros y practicar esgrima. Bien, vamos a ir donde tu papá para que te enseñe sobre la espada. Tu padre enseña en la Academia de todos modos. ¿Qué tal si lees tu libro favorito en el que aparecen los Caballeros Silhouette?

—¡De acuerdo!

Eru finalmente se concentró de nuevo en el libro. Tina le frotó la cabeza, sacó un libro relacionado con los Caballeros Silhouette, y se lo leyó lentamente. El niño escuchó la historia que era lo suficientemente simple para que un niño la entendiera con entusiasmo.

Eru se imaginó pilotando al gigantesco caballero, de pie ante enormes bestias demoníacas para proteger a aquellos en peligro. Reforzó su espíritu una vez más. Quería pilotar un Caballero Silhouette sin importar qué, y cuanto antes mejor. Para lograrlo, necesitaba usar su mentalidad madura para su ventaja y lograr todo lo que pudiera dentro su poder. Preparó un programa para el futuro en su mente, pero por ahora, escuchó tranquilamente la historia.

♦️ ♦️ ♦️

—Papá, ¿tienes un minuto?

Matias Echevarria, quien estaba descansando en el estudio, escuchó la voz detrás de él. Se giró y vio a su hijo, Ernesti Echevarría correr hacia él. Eru, quien ahora tenía 5 años de edad, tenía un corte de tazón, con el pelo justo por encima de las cejas. Tenía el pelo púrpura plateado brillante como su madre; su linda apariencia permaneció igual. Incluso el estricto Mathias, con su rostro despiadado, sonreía a menudo frente a Eru.

—Oh, tengo tiempo. ¿Qué pasa, Eru?

—Quiero pedirte un favor, papá.

Eru era joven, pero hablaba con claridad. Su forma de hablar era un poco confusa cuando tenía tres años, era ahora suave a la edad de 5 años. Este niño siempre había sido educado con todos desde que era joven. A medida que su forma de hablar se hacía más clara, esto se hizo más evidente. Pero esto no se sentía extraño, y en realidad complementaba su aspecto lindo y pequeño. Mathias sonrió alegremente mientras miraba el rostro suplicante de Eru. Su “cariño” hacia su hijo había estado empeorando con el tiempo.

—Papá, quiero ser un caballero, por favor enséñame a usar la espada.

Finalmente es el momento. Mathias estaba preocupado, pero él no lo mostró en su rostro. Sabía que su hijo había estado interesado en ser un caballero desde que era muy joven, y no había ningún problema con su objetivo. Si tuviera la motivación, eso sería genial. Pero Eru tenía sólo 5 años, así que todavía era demasiado pronto para enseñarle a usar la espada. Si se apresuraban y comenzaban antes de que el cuerpo de Eru se desarrollara, sería perjudicial para él. Además, Eru se parecía más a su esposa con cada año que pasaba, y era más pequeño en estatura comparado con los niños de su edad. Para ser honesto, Mathias se preguntó si su hijo podía manejar una espada.

Pero Mathias todavía se enfrentaba a su hijo con firmeza. Ya que Eru estaba mostrando su determinación, no podía ignorar esto como instructor o como padre. Le aconsejó a su hijo que no se apresurara, y que empezará a desarrollar su fuerza física en primer lugar. También le informó que además de la esgrima, el conocimiento en la magia también le ayudaría en su camino para convertirse en un caballero, animándole a estudiarla.

—Magia… Entiendo papá, buscare tu consejo sobre el manejo de la espada en el futuro.

Mirando el inquebrantable rostro de su hijo, Mathias asintió con la cabeza, prometiendo que le enseñaría a usar la espada.

—Eso es lo que ocurrió mamá…, por favor, ¡enséñame magia!

Después de hacer la promesa con Mathias, Eru fue inmediatamente a Tina y le preguntó. ¿Por qué le preguntó a su madre? Porque el padre de Tina, que era el abuelo de Eru, era el actual decano de la Academia de Pilotos Laihiala, Lauri Echevarría. Ella aceptó con gusto, reuniendo los materiales de enseñanza necesarios dentro de sus posibilidades.

—Magia.

No hace falta decir que en la vida anterior de Eru, en la Tierra, la magia no existía, sólo aparecía en las historias y cuentos de hadas. La mayoría de la gente sólo oyó hablar de magia al jugar juegos de rol, como Calabozos y Dragones. Pero esta poderosa fuerza existía en este mundo, y los caballeros usaban la magia a menudo como apoyo en la lucha.

Bajo la guía de su madre, que se desempeñaba como maestra, Eru leyó libros de texto relacionados con la magia.

Desde el momento en que Eru decidió pilotar un Caballero Silhouette, comenzó a tomar medidas. Lo que había estado haciendo era lo básico, simplemente aprendiendo a leer. Aprender a leer a la edad de 3 fue un comienzo muy temprano. Incluso la clase privilegiada de este país —los aristócratas— no empezaban tan temprano. Debido a esto, podía manejar materiales que eran bastante avanzados…

Era natural que los niños detestaran el estudio, pero no era un niño normal. Todo su esfuerzo fue para el objetivo de convertirse en un caballero. Cuando pensaba en pilotar a un Caballero Silhouette, estudiar no era molestia en comparación con la recompensa. Incluso podía leer a través de los libros de texto de principio a fin. Debido a que el contenido era tan rígido, era mejor tratarlo como un juego, y disfrutarlo en lugar de pensarlo como un estudio. Con el rápido ritmo de aprendizaje único para los niños, aprendió el contenido a un ritmo increíble.

Tina no era una profesora de profesión, pero lo manejaba sin problemas. Ella era la hija de un decano de escuela y la esposa de un instructor después de todo. Satisfaciendo los deseos de Eru, le estaba enseñando magia con paciencia.

—En términos simples, la magia en este mundo se refiere a la habilidad de manipular mana para realizar fenómenos físicos.

Todos los seres vivos en este mundo tenían la capacidad de convertir el “éter” del aire en mana y almacenar una cierta cantidad de él dentro de su cuerpo.

—El maná es algo así como el combustible, la magia se utilizará de acuerdo con el contenido de la escritura mágica y a través de un catalizador, esto puede expresarse físicamente.

Tina le explicó a Eru quien estaba sentado obedientemente.

Había dos tipos de seres vivos en este mundo; divididos en aquellos que pueden usar la magia independientemente, y los que no. La diferencia radicaba en la existencia de un catalizador dentro de su cuerpo. Para los seres que podían usar la magia, tenían un cristal dentro de su cuerpo que actúa como catalizador. Por ejemplo, las criaturas más fuertes conocidas como dragones poseían un catalizador, y su aliento de dragón se crea usandolo.

—Los seres humanos no tienen un catalizador dentro de ellos, así que somos una raza que no puede usar magia.

Como los humanos no tenían un catalizador de cristal, no podían usar magia. Basado en las leyes de este mundo, esto fue un hecho natural e innegable. Pero la gente había aprendido una manera de usar la magia. Este fue el resultado de usar su arma llamada sabiduría. Como seres vivos de este mundo, los humanos podían hacer uso de maná y catalizadores externos para desarrollar gradualmente secuencias de comandos para usar la magia, superando con éxito su debilidad.

Con este avance, los seres humanos, que siempre fueron los más débiles en este mundo, desarrollaron gigantescas armas potenciadas por la magia después de años de investigación: los Caballeros Silhouette. Esto hizo de los humanos una de las razas más poderosas.

—Mamá, ya que los Caballeros Silhouette son tan poderosos, y tenemos un enorme ejército de caballeros, podemos construir un país más grande, ¿verdad?

—Tal vez se pueda hacer, pero es difícil.

Los Caballeros Silhouette pueden ser armas poderosas, pero eran armas tácticas que requerían grandes cantidades de recursos para construir y mantener. Era prácticamente imposible preparar una fuerza capaz de dominar la tierra. La humanidad usó la Cordillera de Aubigne como frontera para mantener la paz en la mitad occidental del continente. Fremmevira permaneció como una pantalla para proteger su punto de apoyo en el este. El estancamiento había estado sucediendo durante siglos.

—Dejaré los detalles para la clase de historia. Aprenderás sobre ello con más detalle cuando empieces la escuela.

Tina estaba hablando de las aplicaciones prácticas de la magia. Como se mencionó antes, la magia tenía que ser conjurada a través de comandos, y la construcción y el uso de estos comandos eran realizados por un órgano virtual en el cerebro conocido como el circuito Magius. En este mundo, todos los seres que son conscientes de sí mismos tienen el potencial de usarlo.

—Y Eru, los comandos son sellos que realizan fenómenos específicos. Primero, están los sellos “Arquitecto” que realizan los fenómenos básicos, seguidos de los sellos de “Control”, que coordinan y utilizan sellos de Arquitecto.

Mediante la combinación de los sellos arquitecto y sellos de control, la imagen creada fue algo similar a los círculos mágicos de invocación en la tierra.

Para los principiantes en magia, la parte con la que se tropezaban era la construcción de comandos. La mayoría de las personas podía manipular los sigilos de Arquitecto de inmediato, pero el uso de poderosos hechizos mediante el uso de secuencias de comandos más complejos, requiere una gran cantidad de práctica. Como los humanos no pueden usar la magia de forma natural, crear magia de alto nivel requiere la acumulación de experiencia. Aparte de la perseverancia, esto también requería talento natural.

Los sellos Arquitecto que determinan el fenómeno y los sellos de Control que maximizan sus efectos. Combinándolos a ambos utilizando un conjunto de leyes fijas… Bien, he visto esto antes, esto es como…

La ocupación de Eru en su vida pasada —programador—, le ayudó a entender esta parte. En términos sencillos, los sellos y sus interacciones en la forma de comandos, seguían una lógica similar a la codificación de programas. El funcionamiento de los comandos por el circuito mágico era similar a un ordenador virtual. Como el circuito mágico se construyó dentro del cerebro, activarlo no tomó mucho tiempo, y funcionó  mejor que los ordenadores de su vida anterior.

Después de que Eru comprendió la lógica detrás de esto, “extrajo” el sello Arquitecto y el sello Control del libro de texto y comenzó a usar su circuito mágico, que estaba dentro del cerebro humano, para empezar a codificar. Con una cantidad tan grande de códigos, ni siquiera un programador veterano sería capaz de organizarlos dentro de su cabeza; necesitaría la ayuda de editores de software. Para contrarrestar esto, usó el dominio del circuito mágico como editor de software para planificar y reunir las secuencias de comandos.

Debido a que era un principiante, no tenía ni idea cuánta magia podía usar la gente de este mundo. No consideraba que su capacidad para construir y controlar fácilmente el complicado lenguaje de programación fuera especial.

Eru sostuvo un pequeño báculo de madera y se concentró con los ojos cerrados.

Un pequeño cristal se fijó en la punta del báculo. Ese era el catalizador de cristal, un artículo milagroso que permitía a los humanos usar magia. Para las personas que usaban magia, preferían manejar báculos con el catalizador de cristal fijado en la punta. El báculo en la mano de Eru hizo un suave sonido y una línea de fuego se disparó, dejando una marca quemada en el centro del tablero objetivo. Acaba de activar el sello Arquitecto de fuego con la magia para principiantes- [Antorcha de fuego]

—Wow Eru, eso es genial, aunque es sólo el sello Arquitecto, nunca imaginé que serías capaz de usar la magia tan rápidamente.

—Pero mamá, el libro de texto dice que esto es lo básico de lo básico, cualquiera puede usarlo inmediatamente.

—Es cierto que cualquiera puede activarlo, pero para alcanzar el objetivo con tanta precisión se requiere práctica. Eru tienes talento para la magia.

Por muy bueno que fuera Eru en la programación, era inútil estudiar la teoría sin ponerla en práctica. Un tablero de blanco simple en el patio trasero y Tina acompañó a Eru para el entrenamiento práctico. Practicaron todo tipo de sellos de Arquitecto uno a uno, permitiendo a Eru acostumbrarse a la sensación de usar la magia. Después de lanzar hechizos repetidamente, Eru empezó a sentirse extraño… sentía que la energía estaba siendo drenada gradualmente de su cuerpo. Era como la fatiga que sientes después de hacer ejercicio, pero diferente al mismo tiempo. Esta experiencia única lo confundió, pero era un efecto natural de gastar maná. Jadeó pesadamente y respiró el éter del aire alrededor, tratando de reponer su maná.

No sabía que era tan agotador… Si hubiera usado hechizos avanzados, probablemente me habría desmayado debido a la falta de aliento.

Tina, quien lo había estado supervisando, se acercó con una sonrisa suave y le frotó la cabeza.

—Así es como se siente cuando gastas maná. Si no lo experimentas ahora, será problemático en el futuro

—No puedo recuperar el aliento… se siente doloroso. Mi maná está vacío con solo usar un poco de magia, es tan deprimente.

—No te desanimes, todavía eres joven. Carecer de maná es normal.

—¿Tendré más maná cuando crezca?

—Hmm… Déjame pensar. Es un poco diferente, pero piensa en ello como algo como la resistencia. El crecimiento del maná no depende únicamente del crecimiento físico. También se fortalecerá mientras entrenes tu mente.

—Lo entiendo. Mamá, ya que ese es el caso, ¡haré un entrenamiento especial para aumentar mi reserva de maná!

Tina sonrió con amargura, frotando la cabeza del enérgico Eru.

—Ara, qué niño trabajador. No seas demasiado impaciente, ir demasiado rápido podría ser malo también.

Él reflexionó sobre esto y sintió que estaba siendo demasiado temerario. Tina tenía razón, precipitarse no sería bueno para él, y no quería que su madre, que lo acompañaba, se preocupara.

—Sí, mamá. Lo tomaré despacio y con calma.

Eru le prometió a su madre con una cara seria. Tina asintió y lo abrazó con fuerza.

Eru comenzó su entrenamiento especial al día siguiente.

♦️ ♦️ ♦️

Con la promesa con Tina y el futuro en mente, necesitaba mejorar sus habilidades físicas y mágicas de manera constante. Construir secuencias de comandos era la fuerza de Eru. Él sería capaz de encontrar una manera de avanzar si hacía uso de los conocimientos de su vida anterior. El resto dependería del maná que necesitaba para usar la magia. Persistió en su rutina de trotar, hacer ejercicio físico, agotando su maná y recuperándolo. Mientras hacía su entrenamiento fundamental, encontró una magia interesante en el libro de texto.

Estaba buscando hechizos de estímulo físico. Un impulso físico significa literalmente fortalecer las capacidades de su cuerpo, incluyendo la fuerza, la resistencia y la velocidad. El plan de Eru era incorporar este hechizo en su ejercicio físico, entrenando tanto la mente como el cuerpo cuerpo al mismo tiempo para la eficacia.

El hechizo de impulso físico era de alto nivel, uno que era difícil de usar. Los efectos de la magia dependían de la secuencia de comando. Cuanto más simple fuera la estructura, más se acercaría al Sello del Arquitecto, y a la inversa, más fácil sería controlarlo; cuanto más objetivos hubiera, más compleja y difícil se convertiría.

El complejo hechizo impulso físico de alto nivel tenía la capacidad de mejorar “cada fibra muscular”, fortalecer “todos los huesos” para absorber el impacto, y la mejora de la durabilidad de la piel. Había una necesidad de controlar el objetivo del hechizo, que cambiaba rápidamente con cada movimiento. Para usar el efecto, las secuencias de comandos necesitaban ser activadas constantemente. Por eso el hechizo de impulso estaba en un nivel más alto que los hechizos más avanzados y llamativos, que no requerían un constante mantenimiento.

Normalmente, Eru se habría rendido en esta etapa y habría elegido un hechizo más práctico. Pero él sabía cómo resolver el problema debido a sus habilidades únicas – sus concepto de programación. Tenía experiencia en el diseño y codificación de software para manejar múltiples variables. Por eso se saltó la fase mágica de principiante y saltó directamente a la fase de “magia modificada”. Revisando la estructura de las secuencias de comandos del impulso físico, Eru comprimió la estructura para minimizar el número de variables, creando subcomandos que extraerían automáticamente el estado del cuerpo. Después de compilarlo sólo necesitaba diseñar la interfaz de usuario para facilitar el control y reducir la carga.

Los proyectos complicados como la mejora de las secuencias de comandos no eran algo que pudiera ser hecho fácilmente por cualquiera. Eru, sin embargo, no era consciente de esto, completando la mejora en poco tiempo, y el parche, fue una gran mejora. Pero aun así, todavía era difícil controlar la magia que tensaba su mente en gran medida. Pero con su extraordinaria capacidad de procesamiento, no era mucho. Nadie se dio cuenta de que se había producido una revolución histórica, pero para Eru, esto era sólo un pequeño paso en su viaje.

Todo estaba listo. Eru sostuvo el báculo en su mano, activó el hechizo mejorado de impulso físico, y comenzó su régimen de entrenamiento diario con entusiasmo. Pero su viaje enérgico terminó en tragedia, ni siquiera tuvo tiempo de sentirse conmovido por sus atributos físicos mejorados antes de colapsar unos cientos de metros de distancia debido al agotamiento de su maná.

Como se esperaba de un hechizo avanzado, los controles eran complicados y el costo de maná era tremendo. Eru se sintió decaído debido a este error básico y regresó a su régimen de entrenamiento normal por un tiempo.

Incluso con los esfuerzos que puso en esto, todavía necesitaba 3 años antes de que pudiera activar su magia de impulso físico por una cantidad de tiempo razonable. Eru fue impulsado por su pasión, avanzando hacia su objetivo día a día.

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