El Perseguido – Capítulo 126: Afilando el cuchillo

Traducido por Shisai

Editado por Sakuya


Hace muchos años, cuando Chi Yan entró a la universidad, durante su primer año tomó un curso que aún recordaba. Este curso trataba sobre los puntos de vista filosóficos y las orientaciones de valores de muchas escuelas diferentes, como Ayn Rand, Nozick y Rawls y Kant. En la clase se discutía sobre la equidad y la justicia.

Todavía recordaba una pregunta que se discutió en la clase: Haciendo una suposición extrema, si hay una persona en el mundo llamada A, donde si se mata a A, el mundo entero puede vivir mejor, ¿entonces A debería morir? Si A es una persona inútil para este mundo, y todos los demás pueden vivir mejor si se mata a A, entonces ¿debe morir A?

Similar a esta pregunta fue la famosa cuestión del tranvía: un tranvía de alta velocidad se descontroló y se precipitó por la vía. Diez personas morirían en su trayectoria original. Resulta que tenías una manivela en la mano. Si pulsas la manivela, el tranvía cambiaría de vía, pero morirían tres personas. Independientemente de otros factores, como las normas sociales, en términos de orientación de valores solamente, ¿uno apretaría la palanca?

Cuando era más joven, sabía muy poco y siempre le gustaba hablar y opinar a vista de pájaro. Sentía que tenía un profundo sentido de la perspectiva. Cuanto más sabía y veía, no se atrevía a emitir juicios con facilidad. El primer paso para crecer fue aprender a bajar la cabeza para escuchar diferentes sonidos.

Esta mañana, Chi Yan pensó de repente en la pregunta que había discutido antes en clase: ¿y si el mundo empeora por la existencia de A? ¿Y si A es tu amante, que está unido a ti en carne y corazón, al que amas con tu vida?

No era un utilitarista benthamiano y su vida actual no era una cuestión de ensayo a discutir. Ye Ying Zhi no era ni siquiera A, quien se sacrificó inocentemente, era el fantasma más poderoso del mundo y el espíritu maligno que nadie podía resistir.

Chi Yan no lo engañó, realmente compró algunos productos de tónico corporal para visitar a Tao Guan Guan. El alma de Song Jin había desaparecido y su cuerpo sería encontrado en algún momento. Antes de que su amigo se fuera, le dijo que ocultara este asunto a Tao Guan Guan, pero Chi Yan no sabía cuánto tiempo podría mantenerlo en secreto.

Tao Guan Guan le dio una calurosa bienvenida y estuvo un largo rato hablando de Song Jin, diciendo que se había ido de nuevo a una misión. Sólo le envió un mensaje después de salir, informando de que estaba destinado a realizar tareas confidenciales y que su celular tenía que estar apagado, así que no se podría contactar con él durante esos días. En su rostro se reflejaban las quejas y la insatisfacción, pero sobre todo el amor y la añoranza por su amante.

Ella realmente no sabía que Song Jin se había ido. Chi Yan supuso que envió el mensaje después de salir de casa y se dio cuenta de que estaba muerto antes de ir a verlo.

Chi Yan se apresuró a bajar la cabeza para ocultar sus emociones. Después de unos segundos, levantó la cabeza y miró el abdomen de Tao Guan Guan.

—No hables de Da Song, esta vez estoy aquí para ver cómo está mi ahijada —dijo sonriendo.

Tao Guan Guan se rio.

—Ni siquiera yo sé si es un niño o una niña, ¿cómo sabes que es una niña?

Por supuesto, Chi Yan no sabía el sexo del niño en el vientre de Tao Guan Guan, sólo hizo un comentario de pasada. Song Jin había estado hablando de querer una niña cuando estaba vivo, una que luciese como Tao Guan Guan. También dijo que tener un bebé varón igualmente era bueno, para poder llevar al pequeño a jugar al fútbol.

Chi Yan movió sus ojos hacia donde estaba el feto y se quedó atónito. El efecto del hechizo en sus ojos no había desaparecido, y lo que vio fue todavía el Yin y el Yang del mundo. En este momento, pudo ver claramente una fuerte energía negra reuniéndose alrededor del abdomen de Tao Guan Guan, tratando desesperadamente de llegar a donde estaba el feto. La débil energía Yang de Tao Guan Guan en su cuerpo apenas le impedía entrar.

El feto que crecía en el cuerpo de la madre necesitaba absorber la energía de un ser vivo junto a la energía Yang circundante, pero ahora que el mundo del Yin y el Yang se había invertido y la energía fantasma había volcado el cielo, el Yang y la energía de los vivos eran cada vez más escasos. El niño no nacido sólo podía depender de la limitada vitalidad que le proporcionaba la madre para apenas crecer bien. Además, había espíritus malignos que rodeaban al feto, intentando ansiosamente poseer el joven cuerpo que no estaba completamente formado.

Si esto continuaba, el cuerpo de Tao Guan Guan podría no ser capaz de sostenerlo, y el niño estaría en una situación muy peligrosa.

O tal vez la mala situación que preveía podría ni siquiera suceder. Cuando Tao Guan Guan saliera a pasear, podría ser asesinada por los espíritus malignos que la acechan. El bebé en su vientre se convertiría en un bebé fantasma incluso antes de nacer en este mundo.

Para no dañar a Tao Guan Guan y a su bebé, Song Jin optó por destruir su propia alma, pero, aun así, sus acciones no podían garantizar la seguridad de la madre y del niño en este mundo con el Yin Yang invertido.

Chi Yan se excusó y fue al baño. En secreto, se mordió el dedo índice de la mano izquierda, sacó unos talismanes de seguridad y se los dio a Tao Guan Guan para que se los llevara a donde fuera. Antes de salir, pasó la mano manchada con su sangre por el abdomen de Tao Guan Guan y apartó ligeramente la energía oscura, aunque exteriormente parecía que sólo estaba dando palmaditas al aire.

Levantó la cabeza, curvó las cejas y sonrió a Tao Guan Guan: —Cuídate. El pequeño Song crecerá seguro y se convertirá en una persona mejor y más capaz que Da Song.

La mujer sonrió y lo acompañó fuera.

Después de salir de la casa de Song Jin, Chi Yan no se fue a su casa inmediatamente. Se dirigió a un parque cercano, se sentó en un banco vacío, sacó un libro de su mochila, lo puso en su regazo y comenzó a mirar con atención.

El libro era muy viejo y las páginas estaban blandas y amarillentas. Muchas de las páginas del centro estaban desgastadas y rotas, pero Chi Yan las había colocado cuidadosamente en el centro del libro.

Este libro era uno de los tres que Chi Yan se llevó de la casa Chi ese año, y también era el más antiguo y profundo. La mayoría de las matrices mágicas registradas eran incomprensibles, así que después de hojearlo, lo guardó y no volvió a mirarlo. Sólo lo sacaba cuando lo necesitaba y lo ojeaba en busca de inspiración.

Recordó que había una técnica mágica grabada que podía enviar a los espíritus malignos al otro mundo. También recordó vagamente que uno de los costes de lanzar este hechizo era la vida del propio lanzador.

Chi Yan bajó la cabeza, hojeando y buscando cuidadosamente las palabras en su memoria, y finalmente vio lo que buscaba en una de las páginas.

—… Con sus huesos, en este corazón… —murmuró, mostrando una sonrisa. Todavía lo recordaba mal. En el libro constaba que el lanzador tenía que estar presente para custodiar el núcleo de la formación y no tenía tiempo para escapar, por lo que después de la muerte, entraría en el otro mundo con el espíritu maligno. Esto era exactamente lo que quería, después de todo, en este mundo, sólo le importaba esa persona.

Aunque no fuera humano en absoluto.

Leyó cuidadosamente las condiciones de la técnica mágica varias veces y las memorizó. Luego guardó el libro y se preparó para volver a casa.

Había muchas condiciones para que la técnica mágica fuera efectiva, y todas podían satisfacerse fácilmente excepto una que no era fácil de conseguir. La llamada “con sus huesos, en este corazón” significaba utilizar el hueso del espíritu maligno para que se hundiera en el corazón y se manchara con la sangre del corazón del lanzador del hechizo. Su corazón estaba aquí, pero el hueso de Ye Ying Zhi no era tan fácil de conseguir. Recordó que su tumba estaba en la zona prohibida de la familia Ye en el Monte Yin, custodiada por los miembros de la familia Ye que ya no eran humanos.

Sentado en el autobús de vuelta a casa, Chi Yan vio a los espíritus malignos y a los monstruos que estaban por todas partes pero que espontáneamente mantenían la distancia con él. De repente, tuvo una idea.

Había una cosa que había pasado por alto. Esas criaturas malignas de bajo nivel y los fantasmas le temían, una de las razones era que había nacido con maldad, especialmente el aura maligna en su sangre. La otra razón era la pequeña botella de porcelana que Ye Ying Zhi le dio durante el año nuevo cuando estaba en la universidad. No pensó en esto antes, pero ahora pensando en ello, según lo que Xu Rui le había dicho, él ya estaba muerto cuando se convirtió en el jefe de la familia Ye. Fue por su muerte que no se atrevió a conocerlo directamente.

Entonces, ¿qué cosa le daría el difunto hermano mayor Ying Zhi en ese momento? ¿Qué había dentro de esta botella de porcelana que haría que los espíritus y los monstruos tuvieran tanto miedo? Después de que una persona muriera, ¿qué cosa dejaría atrás que fuera digna de ser enviada a él a través de las montañas y los ríos, pidiéndole que la llevara consigo a donde fuera?

Chi Yan no podía quedarse quieto pensando en esto. Se levantó a toda prisa, se bajó del autobús en la siguiente parada y tomó un taxi hasta el taller de artesanía más cercano. En internet se decía que esta tienda podía procesar a medida varios tipos de cerámica, cobre, hierro y otras artesanías hechas de diferentes materiales.

Chi Yan entró en la tienda y encontró al dueño. Cogió la pequeña botella de porcelana que llevaba colgada al cuello y se la pasó.

—Señor, ¿puede cortar esta botella de porcelana y no dañarla en lo posible, sacar el contenido y luego restaurarla como estaba originalmente? —preguntó.

La pequeña botella de porcelana estaba completamente integrada, era muy redonda y no había huecos en el empalme. Se notaba que la fabricación de la botella de porcelana requería mucho esfuerzo. El dueño la sostuvo en la mano durante un momento y dijo que sí.

Chi Yan asintió.

—¿Puede empezar a hacerlo ya? Yo esperaré aquí. Es urgente, estoy dispuesto a pagar más para que acelere.

No era demasiado complicado y el dueño aceptó sin dudarlo. Chi Yan se hizo a un lado y esperó nervioso, su respiración se fue acelerando. Si adivinaba bien, lo que quería debería estar ahí.

Al final, la pequeña botella de porcelana se abrió. Chi Yan no dejó que el dueño hiciera nada. Sacó personalmente una pequeña bolsa de tela amarilla y le pidió que restaurara la botella de porcelana.

La bolsa de tela contenía cosas en polvo, y había muchos amuletos encantados pintados en el exterior. Chi Yan sintió que su respiración se estancaba. Ye Ying Zhi hizo más de lo que había adivinado. Pensó que sólo le había enviado sus cenizas para ayudarle a alejar a los espíritus malignos, pero los hechos, obviamente, no se quedaban ahí. La serie de amuletos adjuntos mostraba claramente que Ye Ying Zhi había adjuntado al menos parte de su alma encima de sus cenizas.

Solía pensar que, en esos momentos críticos, lo que le ayudaba a resolver esas crisis y convertirlas en buena fortuna eran sólo los hechizos de Ye Ying Zhi en la botella de porcelana. Ahora parece que siempre le ha prestado atención y ha velado por él. Siempre que estaba en peligro, venía a rescatarlo.

Chi Yan no pudo evitar pensar en la noche en el Templo Nuo Shen. En ese momento, la situación era tan crítica y su vida estaba en peligro. ¿Por qué su hermano Ying Zhi no hizo ningún movimiento? Entonces se quedó perplejo. Pensó en una posibilidad, una posibilidad que era muy obvia.

No era que Ye Ying Zhi estuviera retenido por otra cosa y no le ayudara. Había acudido a su rescate, sólo que no lo reconoció.

¿Cómo puede haber sido una coincidencia? Esa cosa era obviamente muy poderosa, sin embargo, vivió en el Templo Nuo Shen durante mucho tiempo y no realizó ninguna acción, ¿esperó a que él se fuera y luego decidió atravesar los obstáculos fantasmales de la Aldea He Jia? Ningún dios o demonio sería tan ocioso como para salvar su vida y pedir un beso a cambio. Por no hablar de los hechizos utilizados que tenían exactamente los mismos efectos que los registrados en las notas; y la capacidad de absorber fácilmente la energía fantasmal del cielo de la Aldea He Jia.

La energía fantasma de la Aldea He Jia no era nada para él, ya que él mismo poseía una energía fantasma que era miles de veces más pesada que aquella.

¿Cómo podía haber una persona tan mala en este mundo? Sabiendo que no era algo bueno, obviamente se enfadaría, pero aun así no podía evitar quererlo más.

Ye Ying Zhi…

En su trance, el dueño ya había vuelto a conectar la pequeña botella de porcelana. Todavía se podían ver algunos defectos y huecos en una mirada más cercana, pero a simple vista, no era diferente de antes.

Chi Yan dio las gracias y volvió a ponerse la pequeña botella de porcelana en el cuello. Luego sacó el hilo de la pequeña bolsa de tela.

—Hay una cosa más con la que debo molestarlo. ¿Puedes ayudarme a hacer una daga y mezclar este polvo dentro de ella? Estaré aquí para ver cómo lo hace —miró las muestras que había en la tienda. También se podían personalizar algunas espadas decorativas que se podían colgar o colocar en casa. Chi Yan añadió más dinero—. ¿Puedes ayudarme también afilando el cuchillo? Las cosas no me van bien últimamente. El maestro taoísta me aconsejó que colgara una daga en el salón para alejar a los malos espíritus, y dijo que sólo es eficaz si el cuchillo está afilado.

Por supuesto que no está pensando realmente en alejar a los espíritus malignos. El que ama es malvado.

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