Estimada esposa del Príncipe – Capítulo 116

Traducido por Naremi

Editado por Sakuya

Corregido por YukiroSaori


Al día siguiente, al romper el alba, Baili Hongzhuang salió de la cueva.

Después de una noche de cultivación, el terrible dolor del día anterior había mejorado un poco. Aunque todavía estaba algo adolorida, era algo con lo que podría lidiar fácilmente.

Después de tomar la píldora de los siete tesoros, podía sentir que su cuerpo era más fuerte que antes. ¡Ese era el poder que obtuvo cultivando!

Con su mirada recorriendo el área, Baili Hongzhuang no pudo encontrar ninguna pista de Dibei Chen y Hei Mu. Dejó de buscar, y siguió cultivándose bajo la cascada.

En este momento, cada segundo era precioso. Para poder obtener un buen rango en la competencia de caza, necesitaba romper el límite lo más pronto posible.

Había dos razones por las que era tan importante conseguir un buen logro en la fiesta real de cacería: primero, borrar el título de “basura”, y segundo, porque las recompensas eran muy abundantes.

Las recompensas resultaban ser cosas que ella necesitaba.

¡Por supuesto, no dejaré escapar esta oportunidad!

Con la experiencia de ayer, Baili Hongzhuang fue capaz de mantenerse en la roca mientras se entrenaba. Pero después, su cuerpo nuevamente fue arrastrado por las mareas.

A pesar de que solo fueron unos pocos segundos, el corazón de Baili Hongzhuang estaba muy satisfecho. ¡Mientras haya progreso, entrenar completamente su cuerpo era inevitable!

El tiempo pasó volando en un instante.

Baili Hongzhuang continuó entrenando todos los días, solo deteniéndose cuando su cuerpo estaba a punto de colapsar por agotamiento. Todas las noches, tomaba una de las píldoras y se cultivaba hasta el amanecer.

Bajo tal entrenamiento casi masoquista, su progreso fue extremadamente rápido.

Junto con su extraño método de cultivo, su velocidad era suficiente como para aturdir a Dibei Chen.

Incluso con la ayuda de la píldora de los siete tesoros, debería ser imposible que la fuerza de Baili Hongzhuang mejorara tan rápido.

Hei Mu la respetaba, postrándose por admiración. Originalmente había pensado que solo podría persistir por un día. Verla continuar todos los días era muy asombroso.

Nunca pensó que ella lo haría todos los días, y cada vez permanecía en la roca más tiempo que el anterior. Era como si no pudiera sentir dolor o desesperación.

Si él también pudiera tener la fuerza de voluntad de Baili Hongzhuang, de seguro rompería y aumentaría su fuerza una vez más.

Todos los días, Dibei Chen y Hei Mu salían a cazar y siempre volvían con diferentes bestias demoníacas para asar, como comida.

Las habilidades de rostizar de Hei Mu eran inesperadamente buenas, así que todos los días, Baili Hongzhuang disfrutó de una buena comida. Además, la carne de una bestia demoníaca era regordeta y llena de vitalidad, ayudando inmensamente mientras recuperaba su fuerza.

Aunque no sabía por qué Dibei Chen estaba haciendo tantos esfuerzos por ella, estaba muy agradecida con él.

Por supuesto, ese tipo tampoco era pobre.

Finalmente, la competencia de caza de la familia real estaba por comenzar. Los tres comenzaron su viaje de regreso.

A lo largo de su cultivación, Baili Hongzhuang sintió los cambios que ocurrían dentro de su cuerpo.

Aunque todavía era tan delgado como antes, podía sentir que su poder era incomparable a antes. Sus músculos estaban tonificados, e incluso su piel era fuerte y brillante.

Después de comer tantas bestias demoníacas, los diez años de malnutrición y abuso, habían mejorado mucho. Todo su cuerpo irradiaba luz como el lustre brillante de una gema, su físico era mucho más fuerte.

Por la tarde, Baili Hongzhuang y Dibei Chen regresaron a la mansión del príncipe.

Después de más de diez días viviendo en la naturaleza, había un sentimiento indescriptible y familiar al regresar a la mansión del príncipe.

Pero, por otra parte, la familia Li aún estaba en pánico por las pecas de Li Yunyue.

Viendo que Baili Hongzhuang aún no regresaba, buscaron a otros doctores, solo para obtener el mismo resultado.

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