Estimada esposa del Príncipe – Capítulo 247

Traducido por Naremi

Editado por Sakuya

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Los brillantes y estrellados ojos de Dongfang Yu eran amables hasta el punto de que parecían húmedos, con una voz profunda, pero con gracia, que parecía estar preocupada.

Baili Hongzhuang asintió levemente.

—Entiendo.

Esta era la competencia de Gong Shaoqing y Cui Haoyan, su poder de ayuda ya debería estar dándole cara a Gong Shaoqing.

Y en cuanto a quién triunfa y gana, ella simplemente no estaba relacionada con eso. Sin embargo…

¡A ella nunca le gustó perder!

—Mujer estúpida, si pierdes la competencia, todo lo que tienes que hacer es admitir que eres una mujer estúpida. —Gong Shaoqing habló apáticamente, con la mirada mirando hacia adelante, como si fuera un llamado exótico, así era como hablaba, realmente no sabe con quién está hablando.

¡Qué bastardo sin modales!

Todas y cada una de las acciones de este bastardo se tiñeron con el hedor de la arrogancia y el desdén. Era un hedor que se originó en las profundidades de su carácter.

—Parece que ya he ganado, así que ¿por qué no admites que eres un idiota?

Sus ojos claros, pero astutos, estaban llenos de ridículo. A pesar de que las palabras que Gong Shaoqing dijo no eran arrogantes en absoluto, ella podía escuchar el consuelo oculto dentro de ellas.

Básicamente, lo que quiso decir fue: ella perdió la competencia, pero no necesita preocuparse por eso. Todo lo que tenía que hacer era admitir que era una mujer idiota y eso es todo.

De hecho, lo admitiera o no, Gong Shaoqing aún la llamaría así.

Si la situación es así, entonces para ella no hubo diferencia en ninguna de las opciones.

Gong Shaoqing miró fríamente a la tranquila Baili Hongzhuang y luego siguió caminando hacia adelante.

La esquina de su boca se curvó en una sonrisa burlona. Parece que este bastardo no era tan repulsivo. Cuando estaba aburrida, podía provocar a este bastardo de parálisis del nervio facial para una reacción interesante.

El encanto astuto de Baili Hongzhuang fue visto por Dongfang Yu. Sus ojos en forma de flor de durazno revoloteaban con una sonrisa brillante en su rostro.

La entrada a la Cordillera de las Nubes Caídas no estaba muy lejos de la Escuela de Agua Celeste porque normalmente habría muchos estudiantes que ingresan al rango para completar misiones. Por lo tanto, estaba muy cerca.

Tanto el lado este como el oeste tienen una entrada, la entrada a la que llegaron Baili Hongzhuang y compañía fue la entrada este. Por otro lado, Bai Junyu y su equipo entraron en la entrada oeste.

Al mediodía, habían llegado a la entrada de la Cordillera de las Nubes Caídas.

Originalmente, esto era solo una entrada normal, pero a medida que aumentaba el número de personas que viajaban por aquí, eventualmente se convirtió en una pequeña ciudad. Vendía todo tipo de cosas que los cultivadores pudieran necesitar.

Al mismo tiempo, había comerciantes que habían venido a comprar pieles de bestias demoníacas. Todos los que vivimos aquí viven en contacto con bestias demoníacas.

Gong Shaoqing y su compañía de tres eran claramente visitantes frecuentes de la Cordillera de las Nubes Caídas. Cuando llegaron, había una multitud de miradas envidiosas y admiradoras mientras viajaban por la calle.

Sin embargo, hubo más miradas en Baili Hongzhuang.

—¿Desde cuándo el grupo de Gong Shaoqing incluye a otra mujer? Y su aspecto no perdió ante Liu Qinyue en absoluto.

—¿Podría ser uno de los nuevos alumnos de inscripción especial de la Escuela de Agua de Celeste?

—No pensé que los estudiantes de matrícula especial tuvieran no solo una gran fortaleza, sino incluso una belleza.

—Si somos capaces de convertirnos en estudiantes de la Escuela de Agua Celeste… ¿Qué maravilloso sería eso?

La línea de visión de Baili Hongzhuang se extendió sobre la multitud. No es de extrañar que Dai Zhiman actuara con tanta altanería.

Esta identidad sola era suficiente para atraer la envidia de miles de personas.

—¿Ya has preparado todo lo que necesitas? ¿Necesitas comprar algo aquí? —Dongfang Yu tenía una expresión sonriente en su rostro mientras miraba gentilmente a Baili Hongzhuang.

—No es necesario, tengo todo lo que necesito.

—Primero vayamos a la posada y comamos antes de cambiarnos a ropas más duraderas.