La propuesta del Héroe – Volumen 3 – Capítulo 11: Bailemos el vals juntos

Traducido por Army

Editado por Tsunai


—¿Eh? ¿Ahora? ¿En este mismo momento?

Pregunté, mirando su mano extendida con incredulidad.

—Así es.

No pensé que se refería a hoy.

—No sabes cuándo será el próximo baile, ¿verdad?

—Bueno, tienes razón… pero también te lo dije ¿no? Que no me han invitado a este baile, ¿verdad? Si no estás invitado a bailar…

—Sí, lo sé. Entonces lo haremos de esta manera. —Greed señaló la antecámara y añadió—: Propongo que usemos esta habitación privada. Desde aquí podemos escuchar la música y, como es la antecámara real, nadie podrá espiarnos, ¿verdad?

—B-Bueno…, tienes razón, pero…

Me sentí confundida, pero Greed sonriendo me presionó para que respondiera mientras me tendía la mano.

—Estamos solo nosotros dos aquí. Podemos bailar sin que nadie nos mire.

—Pero…

—Quiero que el primer baile sea contigo, Aria… No, el único baile de esta noche.

—Greed…

 De repente, su sonrisa se desvaneció ligeramente y ladeó la cabeza con una expresión lastimera.

—¿Acaso odias bailar conmigo?

 ¡Uf, qué astuto! ¡Otra vez esa mirada de cachorro abandonado!

—Está bien, está bien…

Suspiré y levanté la bandera blanca. De alguna manera, siento que Greed me está manipulando tanto como yo a él… ¿O solo me lo imaginaba?

Pero sabía que no había aceptado solo por su mirada de cachorrito triste. Se había negado a bailar con otras personas, incluida Tiana, y me había dicho que solo quería bailar conmigo. Para ser sincera, eso me hizo muy feliz. Si alguien te dice algo así, ¡no te quedará más remedio que ceder!

Coloqué mi mano sobre la suya, respondiendo con un leve tartamudeo mientras desviaba la mirada, esperando con ansias que llegara pasado mañana para ocultar mis mejillas ligeramente sonrojadas y mi expresión tímida.

—Bueno, es una p-promesa. No tengo más remedio que bailar contigo .

Parece que realmente me estoy convirtiendo en una persona muy fría.

La melodía que comenzó a sonar era un vals.

Greed y yo nos acercamos en la antecámara, siguiendo el ritmo de la música. Nos movimos con pasos medidos y giramos suavemente. Cada vez que lo hacíamos, podía vislumbrar el magnífico candelabro y a los invitados bailando y conversando al otro lado de las cortinas que separaban el salón principal de la antecámara. Era como si este pequeño rincón también formara parte del baile.

Pero nadie nos mira. Si alguien dirigía la vista hacia aquí, vería una pareja peculiar: un hombre apuesto, como sacado de un cuento de hadas y una mujer sencilla vestida de sirvienta.

Al principio, mis movimientos eran rígidos y torpes, pero la seguridad de no estar bajo la mirada de los demás fue relajando mis hombros poco a poco, permitiéndome disfrutar del baile.

Cuando eso sucedió,nuevas dudas comenzaron a asaltarme.

Greed, ¿acaso eres increíblemente bueno bailando? 

 A pesar de que no soy muy hábil en la danza, bailar con él resultaba sorprendentemente fácil.

—¿Dónde aprendiste a bailar, Greed?

Siempre había asumido que los nobles estaban acostumbrados a los bailes, pero Greed había sido un simple aldeano hasta que fue seleccionado como el Héroe. Según Rufaga, tanto Renas como Milly podían bailar correctamente. ¿Sería posible que los bailes de salón fueran populares en el pueblo de Langrea?

Greed respondió a la simple pregunta con una sonrisa.

—Aprendimos a bailar en el Gran Templo. Cuando me quedé allí después de ser seleccionado como Héroe, me informaron de que existiría esa oportunidad. No solo aprendí a bailar, sino también todos los modales y la etiqueta necesarios en los círculos sociales.

—¿De… de verdad?

Todavía no entendia del todo el papel del Gran Templo. No solo ayudaban en el viaje del Héroe, sino también en su integración social?  ¿Es el Gran Templo una especie de fábrica de héroes?

—Sin embargo, esta es la primera vez que bailo así.

Dijo Greed, sonriendo ampliamente mientras me guiaba con destreza a través del salón.

—Hasta ahora he rechazado todas las invitaciones.

—¿T-tu primera vez…?

Sus movimientos son naturales y suaves como si lo hubiera estado haciendo durante años…

—Sí. Esta es la primera vez que bailo. Pero bailar no es diferente a mover el cuerpo y sólo hay que recordar los patrones, por lo que es más fácil que las artes marciales. —F-Fácil. . . ¿Qué dices?

Recordé lo mucho que me costó aprender a bailar y mi expresión se tensó inevitablemente.

Ahora que lo pienso, alguien…  ¿Fue Rufus quien lo mencionó antes? Greed es competente en todo lo que hace. Ya sea con la espada o con la magia, para él parece tan fácil como respirar. Estoy segura de que aprendió a bailar con la misma rapidez… De alguna manera, creo que entiendo los sentimientos de los hombres del pueblo que estaban celosos de él.

¡Qué sobrehumano perfecto y odioso!

—Err, ¿hay algo que Greed no pueda hacer…?

Pregunté a regañadientes.

Mientras observaba a este ser casi irreal ante mis ojos, me pregunté si realmente podría haber algo en lo que no destacara.

Yo, en cambio, soy alguien completamente normal, sin ninguna habilidad especial…

Greed reflexionó por un momento y luego, como si acabara de recordar algo, respondió con calma:

—No puedo coser. Lo intenté una vez, pero me pinché los dedos tantas veces con la aguja que la tela terminó manchada de sangre. No lo he vuelto a hacer desde entonces. Renas es bueno en ese tipo de cosas.

—¿Renas…?

De inmediato, me imaginé a Renas con una aguja e hilo en sus manos, cosiendo botones y arreglando dobladillos deshilachados. ¿Es… como una madre? Quise responderle con eso, pero aunque la imagen le encajaba, ¿no debería ser Milly la más adecuada para ese papel? También quería comentarlo, pero me mordí la lengua.

 Pero, sobre todo, me sentí aliviada. De coser. En ese caso…

—Puedo coser.  No sé hacer vestidos, pero puedo encargarme de otras cosas. Así que…

Dije aquello con una sonrisa, pero en cuanto las palabras salieron de mi boca, me di cuenta de lo que acababa de decir. Sentí cómo el calor subía hasta mi rostro.

Oye… ¿de qué estoy hablando y a quién intento impresionar? ¿¡Por qué me preocupo tanto por lo que Greed puede o no puede hacer?! ¡¿Y por qué, además, me ofrezco a arreglarle las cosas como si fuera su esposa?! ¡¿En qué clase de niña ridícula me estoy convirtiendo?!

Greed me miró con diversión, sonriendo encantado mientras yo me revolvía por dentro, deseando que la tierra me tragara.

—Entonces, ¿puedo pedirte un favor la próxima vez?

—Oh . . . S-Sí…

Asentí.

Estoy perdiendo la cabeza. Acabo de darme cuenta de mis sentimientos, y ahora no puedo controlar mi propia confusión. Mi corazón late con un ritmo distinto al de ayer… ¿En qué momento cambié tanto?

Ni siquiera puedo recordar con claridad cómo era mi actitud con Greed hasta ayer. Extraño a mi antiguo yo, más tranquila y controlada. Pero…

Mientras seguíamos los pasos del baile, alcé la vista y lo encuentro mirándome con esa sonrisa.

Creo que la razón por la que esta sonrisa me hace tan feliz es porque finalmente he reconocido mis sentimientos… Así que, aunque ahora me sienta arrastrada por este torbellino de emociones, no quiero volver a cerrar los ojos y fingir que nada ha cambiado. No quiero negar lo que siento y regresar a mi antiguo yo.

Cierro los ojos un instante y, cuando los abro, miro a Greed con determinación.

No sé cuando será la próxima oportunidad de bailar con la persona que me gusta. Ahora disfrutaré bailando juntos sin pensar demasiado.

— La canción termino.

Greed y yo nos detuvimos al mismo tiempo. Pero apenas unos segundos después, otra melodía comenzó a sonar y, sin necesidad de hablar, nuestros cuerpos se movieron al unísono.

Esta vez, era un vals con un tempo más lento que el anterior. Los pasos no eran demasiado difíciles, pero exigían que bailáramos más cerca el uno del otro.

También se le conocía como el Vals de los Enamorados, y se decía que era un baile reservado para amantes y esposos. No era una pieza que, tradicionalmente, se bailara con padres o hermanos.

Tal vez, en el salón de baile, las parejas también se toman de la mano y se acercan más al ritmo de la música. Estoy bastante segura de que la princesa y los demás están bailando con sus cuerpos muy juntos.

Esta canción lo exige, así que es inevitable que Greed y yo estemos tan cerca… Sí, solo es por eso. Una excusa débil para esquivar los sentimientos que me están agitando por dentro.

Hasta ahora, ya debería haberme acostumbrado a esta cercanía.

La razón por la que ahora me siento diferente es, sin duda, porque he tomado conciencia de mis propios sentimientos. Greed, en cambio, no ha cambiado en absoluto.

—Sí. Afortunada o desafortunadamente, su actitud sigue siendo la misma que ayer. Todo sigue igual… y, de algún modo, eso me alivia.

Greed rodeó mi cintura con su mano y sonrió con satisfacción mientras nos guiaba con facilidad en el baile.

 Su estoicismo de antes en el pasillo… casi parecía una mentira.

Mientras lo observaba, las palabras escaparon de mis labios sin que pudiera detenerlas.

—Me gustaría que no le sonrieras a nadie más que a mí .

—¿Mi sonrisa?

Los ojos de Greed se abrieron ligeramente, como si estuviera un poco sorprendido.

Ah… Estoy feliz de verlo hacer expresiones tan sutiles. Poco a poco, parece estar empezando a mostrar más emociones.

Asentí con una sonrisa.

—Así es. De ahora en adelante, solo sonríeme a mí…

No quiero que le sonría así a otras personas, especialmente a Tiana Aunque, claro, Renas y los demás son una excepción.

—También quiero que les sonrías a tus amigos.

Greed solía mostrar una sonrisa vacía, solo para cumplir con las expectativas de los demás. Pero aquellos que realmente se preocupan por él estarían felices de ver que ahora puede sonreír de verdad, aunque, por ahora, solo sea conmigo.

—Incluso si no lo muestras abiertamente, sé que aprecias a tus amigos, Greed.

A simple vista, Greed  no parece expresar sentimientos especiales hacia nadie, pero los observa en silencio. Lo mismo ocurre cuando está a mi lado. Estoy segura de que, si algo le sucediera a alguien cercano, él no se quedaría de brazos cruzados.

—Por eso quiero que les sonrías. Una sonrisa sincera, desde el fondo de tu corazón… No una que sientas obligado a mostrar.

Mientras hablaba, la expresión de Greed cambió sutilmente. Parecía… un poco avergonzado.

—Aunque no creo que todos estén felices de verme sonreírles…

—Estoy segura de que si lo estarán.

—¿Eso crees? Pero antes, cada vez que sonreía, Renas fruncía el ceño o parecía triste. Tal vez fue porque no estaba sonriendo correctamente…

—¡E-Estás equivocado!

Sorprendida, lo negué apresuradamente.

— ¡Eso era porque la sonrisa de Greed se veía forzada!

La sonrisa que solía llevar en su rostro no coincidía con la frialdad de sus ojos… De alguna manera podía entender la reacción de todos y sus sentimientos. Estoy seguro de que no podían mirarlo directamente.

Pero ahora lo comprendo. La razón por la que Greed no sonríe con facilidad frente a sus amigos.

¡Muy bien! Aquí es donde entra en acción mi deber como educadora.

—Greed… ¿no sería mejor para usted sonreír en lugar de llorar o tener una expresión triste?

—Yo tambien pienso lo mismo.

—Pero qué pasa si estoy triste y quiero llorar, ¿me veo obligada a sonreír?

—No me gusta.

Greed me miró de inmediato, con una expresión seria.

Cuando secuestraron a la princesa…a menudo contenías las lágrimas y te obligaban a sonreír, yo te miraba y fue doloroso verlo.

¡Oh, cielos! Acabo de decir algo problemático…Eso fue antes de que Greed partiera  a rescatar a la princesa, ¿verdad…? Acabo de descubrir  otro hecho aterrador. Pero ahora mismo, eso no es lo importante. Lo guardaré en un rincón de mi mente.

Marcaré esto como información relevante para más tarde.

—Es lo mismo. A nadie le gustaba ver a Greed forzar una sonrisa cuando en realidad no estaba feliz. Solo una sonrisa verdadera tiene significado.

—Sí.

—Pues yo también me alegro cuando Greed sonríe. Y lo mismo ocurre con todos. Por eso… no quiero que solo me sonrías a mí. Quiero que seas realmente feliz.

Greed se quedó en silencio. Bueno… esto es un problema... Sus ojos azul verdosos reflejaban desconcierto.

Debe de ser difícil para alguien que ha pasado tanto tiempo sin sonreír volver a hacerlo con naturalidad. Especialmente si ha cargado con expresiones tristes durante tanto tiempo.

Pero esto también es por el bien de Greed.

¡Como su educadora, este es el momento de demostrar mis habilidades!

—Es fácil, Greed. Cuando le pidas un favor a alguien, simplemente sonríe y di: “Gracias”. Comencemos por algo pequeño, ¿vale?

Greed reflexionó sobre mi sugerencia por un momento y luego sonrió.

—¿Serás feliz si hago eso?

—Por supuesto. Si todos se alegran al ver la sonrisa de Greed, entonces yo también estaría feliz .

Los ojos de Greed se entrecerraron ligeramente  mientras sonreía.

—Entiendo, Aria. Si tú lo dices…Gracias, ¿verdad?

—¡Si, exactamente!

Respondí animadamente mientras giraba bajo su guía. Si fuera posible, me encantaría estar allí y ver las reacciones de sorpresa de todos. Su sorpresa, su satisfacción…

Sí, de alguna manera siento que verlo sonreír será la culminación de mi educación.

Quiero hacerlo sonreír más. Quiero que todos puedan verlo y sentir felicidad en lugar de preocupación. Quiero que piensen que el encuentro entre Greed y yo fue algo bueno, y no el presagio de una crisis mundial.

Para cuando me di cuenta, la tensión y la confusión inicial se habían desvanecido por completo. Solo seguí bailando con Greed, sonriendo.

Me reía y disfrutaba de nuestro baile sin darme cuenta de lo que ocurría a nuestro alrededor…

Desde detrás de la cortina que separa el salón de la antecámara, estaba Tiana, observándonos mientras bailábamos.

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