Traducido por Shisai
Editado por Shiro
Desde la mejora de su condición física, los cinco sentidos de Tang Mo también se habían agudizado. Descubrió la presencia de Fu Wenduo apenas cuando la piedra brillante cayó del aire. Este había estado escondido. Una vez que la piedra rodó hasta el pilar en el que se escondía, el sexto sentido de Tang Mo notó que algo sucedía.
Sin embargo, fingió no darse cuenta y, mientras agarraba la piedra, sacó la pequeña sombrilla a la mayor velocidad y atacó.
La otra persona había estado escondida durante mucho tiempo sin ser descubierta. No había duda de que había llegado allí antes que Tang Mo. Entonces, a medida que luchaba contra este hombre, gradualmente sintió una sensación de familiaridad. Ambos entraron en contacto y Tang Mo pensó en un nombre: Fu Wenduo.
Medio mes atrás, los dos se habían unido para enfrentarse a Pinocho en el juego honesto de cartas. Momentos antes, Tang Mo se dio cuenta de que su oponente no tuvo tiempo de reaccionar cuando lo atacó la primera vez. Era una emergencia, así que Fu Wenduo convirtió su cuerpo en metal y bloqueó la punta del paraguas. El sonido de la colisión metálica le resultó muy familiar. Luego, los dos bandos intercambiaron ataques intensos y le dio la impresión de que la otra parte era quien había estado con él en la instancia de Pinocho.
Pero saber quién era la otra persona no significaba que pudiera relajar su vigilancia. Sujetó con fuerza la pequeña sombrilla, con la punta contra el cuello del polizón.
—Señor Fu, ¿por qué está aquí? —preguntó con frialdad.
La pequeña sombrilla de la Abuela Lobo podía utilizarse como arma defensiva cuando se abría. Solo la parte superior podía usarse como arma de ataque. Esta era la descripción del accesorio. Aunque Tang Mo en ese momento aprisionaba a Fu Wenduo con la pequeña sombrilla, no le haría daño; lo mismo sucedía con la daga.
—Buscando a alguien. —La voz del hombre resonó en el aparcamiento vacío.
La piedra brillante no podía iluminar tanto. En la oscuridad, las respiraciones de las dos personas se mezclaban como si fueran una sola.
—¿Busca a alguien? —repitió con calma.
Tang Mo no daba por sentado que lo estuviera buscando. Si la otra persona realmente quisiera encontrarlo, podía hacerlo a través del huevo de pavo. Otro punto a tomar en cuenta era que, aunque antes de dejar la instancia de Pinocho le dijo a Fu Wenduo que estaba en Pudong, en realidad, no quería encontrarse con el polizón después. Sin embargo, según el sentido común, conociendo su ubicación, el otro pensaría que quería encontrarse con él.
Ahora bien, no utilizó el huevo de pavo para ponerse en contacto de antemano y, además, se coló silenciosamente en el aparcamiento. Con toda probabilidad, no es a mí a quien busca.
Fu Wenduo volvió a coger la daga con la que amenazaba el vientre del otro y la colocó en una hebilla oculta en su cintura.
Tang Mo permaneció en silencio durante un momento. Luego se incorporó y retiró la pequeña sombrilla.
El polizón vio sus acciones y sonrió de manera imperceptible.
—Estoy buscando a alguien, tal vez tú lo conozcas. Ya que estás aquí, debes ser un miembro de la organización.
El corazón de Tang Mo se encogió al darse cuenta que Fu Wenduo pensó por error que era un miembro de Ataque.
—¿Te refieres a Ataque? —preguntó casualmente sin refutarlo.
—Sí.
La organización Ataque tenía cierta fama en Shanghái. Su reputación era bien conocida entre los jugadores. Después de eliminar a la organización de polizones que comían corazones humanos, los jugadores individuales se fueron familiarizando con sus nombres.
—¿A quién buscas? —preguntó, a pesar de que temía conocer la respuesta en su corazón.
La luz era tenue y la expresión de la otra persona no era clara. Sin embargo, sentía como si un par de ojos oscuros estuvieran clavados en él.
—Al líder del Equipo A del Instituto de la Torre Negra de China, Luo Fengcheng —dijo el nombre de esa persona.
Nadie en Ataque conocía la verdadera identidad de Luo Fengcheng. Todos creían que era un médico de un instituto de investigación en Shanghái. Para que conociera con exactitud su puesto de trabajo, la identidad de Fu Wenduo no debía ser sencilla. Además, era poderoso. Podía colarse en la base y no ser descubierto por ningún miembro. A Tang Mo le resultaría difícil impedirle ver al investigador.
Pensó un momento antes de levantar la vista.
—Te llevaré a verlo.
Los labios de Fu Wenduo se curvaron.
—Bien.
Metió la pequeña sombrilla en su mochila y comenzó a guiarlo, pero, antes de irse, recogió la piedra que, en apariencia, había rodado por el suelo al azar.
Cuando las dos personas entraron en el rango de la piedra de luz, vio mejor la apariencia de Fu Wenduo.
Era alto, un aire solemne le envolvía; y parecía tranquilo, como si no le estuviera prestando mientras recogía la piedra.
—Era un accesorio. Lo obtuve de una instancia —comentó con calma.
Algunas cosas era mejor hablarlas para evitar especulaciones. Fu Wenduo asintió y no preguntó nada más. Parecía no importarle la colisión del joven con la pared.
Se dirigieron juntos hasta la escalera.
—¿Es necesario golpear la pared cuando se utiliza ese artículo? —dijo el polizón en voz baja, justo cuando estaban a punto de subir las escaleras.
Atónito, exclamó en su interior: ¡¡Lo vio!!
Tang Mo dejó de prestarle atención a Fu Wenduo, lo llevó al tercer piso del aparcamiento y llamó a la puerta de la oficina del investigador. A continuación, entró en la habitación. Luo Fengcheng estaba estudiando la instancia del Zapatero de Hierro que descubrieron unos días atrás, y se sorprendió cuando lo vio.
—Pensé que no vendrías a verme hasta que Jack saliera de la instancia grupal.
—Eso es lo que pretendía. —No lo negó—. Pero una persona quiere verte.
Luo Fengcheng se dio cuenta de que algo iba mal.
—¿Quién es? —Se levantó.
Se hizo a un lado y una figura alta entró en la habitación. Era un poco más alto que el joven. Cuando estaban juntos, Tang Mo era como una espada en una vaina, la hoja afilada; mientras que el hombre tenía más parecido con un pesado cuchillo negro, aunque contenido.
El investigador agarró el documento con más fuerza. Tan solo era un jugador de reserva, pero se dio cuenta de que este hombre era tan peligroso como Tang Mo. Podría ser incluso más peligroso que este —desde la perspectiva de la fuerza—.
Tang Mo, al verlo ponerse alerta, se dio cuenta de que no conocía a Fu Wenduo y, dada la relación que han desarrollado con el tiempo, tomó la iniciativa de ayudarlo a ganar algo de ventaja.
—Él es Fu Wenduo.
La expresión del investigador cambió al instante. Pasó de la sospecha a la sorpresa y, por último, sonrió.
—Mayor Fu, hace mucho tiempo que no oía ese nombre. Después de que la Tierra se conectó, China perdió todos los nombres famosos.
Los ojos de Tang Mo se entrecerraron al captar la palabra clave: mayor.
Fu Wenduo avanzó hasta quedar al lado de Tang Mo y le preguntó:
—¿Sabías que vendría a verte?
—Pensé que si alguien estaba vivo, vendría a mí —explicó Luo Fengcheng—. Por eso, cuando dejé el instituto, reorganicé deliberadamente mi despacho. Si alguien llegase a ir a la oficina a buscar los datos, se daría cuenta que estoy vivo. Por desgracia, en ese momento, no sabía que usted seguía con vida. Si hubiera abierto el primer piso de la torre negra antes, habría podido hacer mejores arreglos.
Tang Mo se mantuvo en silencio a un lado, escuchando casualmente sin intervenir. Luo Fengcheng le miró.
—Tang Mo, parece que ya conoces al mayor Fu.
—Seguramente todos los jugadores chinos recuerdan su nombre. Lo conozco porque ambos estuvimos en la misma instancia de Navidad —respondió. No deseaba exponer la existencia de Momo.
Luo Fengcheng asintió.
—Así que ese es el caso. La razón por la que tu instancia fue tan difícil fue porque el otro jugador era Fu Wenduo. No me extraña.
Fu Wenduo fue el primer jugador de China en superar el primer piso de la torre negra. Por lo que, si él estaba en la instancia Navideña, sin duda sería más difícil.
Tang Mo había completado su tarea escoltando al hombre hasta la oficina. Además, parecían estar relacionados. Al menos, completos desconocidos no eran, así que se preparó para irse. No le interesaba escuchar la conversación de ambos.
—Mayor Fu, probablemente puedo adivinar por qué ha venido a Shanghái.
Fu Wenduo arqueó las cejas. El polizón estaba bloqueando la puerta. Tang Mo quería salir pero descubrió que esta persona dejaba apenas un espacio de unos 10 cm, por lo que no podía pasar. Iba a pedirle a la otra persona que le diera paso cuando le hablaron:
—Tang Mo, creo que con tu fuerza, puedes haber experimentado algo similar. Si estás interesado, quédate y escúchame. ¿No quieres saber lo que la rama de Shanghái del Instituto de la Torre Negra descubrió antes de que la tierra se pusiera en línea? —comentó el investigador.
El joven hizo una pausa y se volvió hacia quien le hablaba.
—Dijiste que no habías encontrado nada.
—Sí, no encontramos nada que pudiera cambiar la existencia de la torre negra —admitió con honestidad Luo Fengcheng—. Pero notamos un extraño fenómeno. Esto no afectó a la torre negra ni pudo evitar que se pusiera en línea.
—¿Qué fenómeno?
Luo Fengcheng le miró fijamente.
—Antes de que la tierra se conectara, ¿te sentiste irritable y los latidos de tu corazón… se aceleraron?
El exbibliotecario se sorprendió. Guardó silencio durante mucho tiempo y cambió de idea respecto a irse.
—Tang Mo, mayor Fu, por favor, siéntense. —Luo Fengcheng sonrió.
El jugador oficial se sintió extraño cuando el de reserva mencionó su nombre junto al del polizón, y miró al hombre que estaba a su lado antes de sentarse en una silla. Fu Wenduo le miró, sonrió y tomó asiento también.
Una brillante lámpara iluminaba la pequeña habitación. Luo Fengcheng puso todos los archivos desordenados en un cajón y se sentó a un lado de la mesa, mientras los otros dos ocupaban el lado contrario.
—Tang Mo, ya que te quedaste, parece que experimentaste el fenómeno de la aceleración de los latidos antes de que la tierra se conectara. —Luo Fengcheng sonrió mientras hablaba—. En la organización de Ataque, solo Nie Fei experimentó este fenómeno. Por desgracia, él ya no se encuentra entre nosotros. Creo que aparte de ti, el mayor Fu debió haber pasado por un fenómeno similar.
Ambos se volvieron para mirar a Fu Wenduo y este asintió con calma.
—El 15 de noviembre, la torre negra anunció que la tierra estaba en línea y dio tres días para seleccionar a los jugadores —explicó el investigador—. En la noche del 17 de noviembre, encontramos a cuatro pacientes con latidos rápidos en tres hospitales de Shanghái. Sus síntomas eran muy similares: sus corazones latían más rápido de lo normal, su humor era irritable y no podían mantener la calma.
Tang Mo recordó su experiencia en esos tres días.
La expresión de Luo Fengcheng no cambió mientras miraba a las dos personas frente a él.
—Nos pareció extraño, pero hubo muy poco tiempo para estudiar este fenómeno. Todavía no habíamos descubierto ninguna pista cuando el juego comenzó oficialmente el día 18. Sin embargo, después que el juego comenzó oficialmente, tuve tiempo para estudiar con calma este fenómeno. Me reuní con Nie Fei y él me proveyó mucha información y posibles direcciones. Finalmente, desarrollé algunas ideas y llamé a este fenómeno: selección de la torre negra.
El corazón del exbibliotecario se aceleró de inmediato.
La voz de Luo Fengcheng se detuvo por un momento y se centró en mirar a Fu Wenduo.
—Mayor Fu, parece que ya sabía de esto y puede que esté hasta más informado que yo. No necesito presentarle a Tang Mo —Luego miró a este último y sonrió—. Tang Mo, deja que te presente. Nombre clave Xiaolong, capitán del Equipo Especial A de la región militar del sur de China. El portador más joven del rango de mayor en China, Fu Wenduo.
♦ ♦ ♦
La autora tiene algo que decir:
Tang Tang: ¡Dijiste que no lo habías visto! ¡Obviamente viste todo y aún así dijiste eso! ¡¡Lo dijiste!!
Viejo Fu: #Mi esposa quiere que me haga el tonto. ¿Qué debo hacer?#