Ningún mundo parece el adecuado – Capítulo 4: Lo siento, estoy un poco aturdido. El protagonista me llamó hermanito

Traducido por Shisai

Editado por Nemoné

Corregido por Shiro

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—¿Qué está pasando? —Zhang Guo Qiang dio un paso adelante y los separó a los dos—. Comienzas una pelea en cuanto regresas a casa. Además, ¿te atreviste a levantarle una mano?

—Papá, no lo hice. —El rostro de Zhang Qing se llenó de agravio apenas vio a Zhang Guo Qiang—. Solo estaba tratando de persuadir a mi hermano menor para que no se la pase encerrado en la casa; que salga a caminar. ¿Quién se habría imaginado que mi hermano menor…?

Al ver el acto inocente de la protagonista, Shao Qian dejó escapar una risa fría en su corazón.

Con una apariencia tan falsa lo que se ganará será el odio de las personas. Sin embargo, ¿crees que eres la única que puede actuar?

—Papá, mi hermana mayor fue la que empezó, preguntándome cómo no había muerto de hambre si no me había dado dinero los últimos veinte días. De hecho, quiero corregir a mi hermana mayor, no fue tanto, fueron solo diecisiete o dieciocho días. Además, aunque pocos, mis amigos no me dejarán morir de hambre tan fácilmente. —Su expresión sonriente mientras hablaba con Zhang Guo Qiang era deslumbrante—. Papá, ya que regresaste, devuélveme la llave. Voy a buscar a mis amigos para ir a jugar, te aseguro que no me harán nada.

¿Cómo puedo permitir que vaya a buscar a esos gamberros de nuevo? Definitivamente está fuera de discusión. Lo encerré hoy en casa porque no quería que saliera, ¿cómo puedo ceder ahora?

—Hijo, no hagas un escándalo. —Zhang Guo Qiang señaló al hombre alto que estaba parado en la puerta y dijo—: Llámalo hermano mayor.

Shao Qian estaba algo sorprendido. ¡La trama no decía que tuviesen otros hermanos!

—¿Je… Jefe? —Zhang Qing miró hacia la dirección que apuntaba su padre, y al ver al apuesto hombre parado en la puerta, se alisó apresuradamente las arrugas de su ropa antes de forzar una sonrisa en su rostro—. ¿Por qué vino a este pequeño lugar?

El hombre en la puerta asintió con la cabeza hacia Zhang Qing antes de mirar al joven que Zhang Guo Qiang agarraba con firmeza.

—Hermano menor —dijo con cautela.

Lo siento, estoy un poco aturdido, dame tiempo para digerir todo esto. 

Justo ahora, la protagonista femenina falsa lo había llamado jefe, por lo tanto, él debía ser el protagonista masculino de la novela: Zhang Zi Xuan. Sin embargo, su padre le dijo que lo llamara hermano… Entonces, durante todos esos años durante los que los protagonistas estuvieron juntos… ¿tuvieron una relación incestuosa?

Lo siento, las relaciones parecen estar un poco desordenadas, me gustaría intentar ponerlas en orden.

—Hijo, a partir de hoy no viviremos en esta casa. —Zhang Guo Qiang tomó a su hijo y, sin decir una sola palabra a su hija, salió.

—Camina —dijo Zhang Zi Xuan luego de asentir con la cabeza en su dirección.

—Oh, sí. —Cerró la puerta deprisa y lo siguió.

Una vez que iban en la vía, Zhang Guo Qiang explicó su relación con Zhang Zi Xuan de manera simple. Sin embargo, Shao Qian todavía estaba confundido. Incluso sospechaba que había entrado al mundo equivocado. ¿Por qué seguía sintiendo que este mundo no era del todo correcto?

Este padre apostador resultó ser el segundo tío de Zhang Zi Xuan, quien era el protagonista masculino de ese mundo. Si Zhang Guo Qiang no hubiese dejado a la familia Zhang a causa de su amada, el actual jefe de la familia habría sido él…

Esto hizo que Shao Qian escuchara aturdido, y una vez más, sospechó si el hecho de que los datos del sistema no estuvieran completos fue lo que generó este problema. De lo contrario, ¿cómo podría desarrollarse la trama de forma contraria a sus expectativas?

Por otro lado, Zhang Qing, quien los seguía a un lado, sintió una mezcla de felicidad y dolor. Felicidad porque será una rica señorita de ahora en adelante; podrá sentarse en grandes autos, comprar bolsos de marca y la mejor ropa. Ya no tendrá que soportar las miradas desdeñosas de otras personas. Sin embargo, también albergaba cierto resentimiento. Estaba molesta con su padre por no haber regresado a la familia Zhang antes. De ese modo no habría tenido que sufrir tanto.

Zhang Zi Xuan los llevó a la residencia y, en el momento en que entró, vio a su furioso padre sentado en el gran salón junto con su tercer tío.

—Padre, tercer tío. —Asintió con la cabeza hacia los dos hombres antes de pasar, y Zhang Guo Qiang, quien venía detrás de él, se vio revelado.

Los dos hombres sentados en el sofá se parecían mucho a Zhang Guo Qiang. No obstante, el jefe de la residencia no parecía tener el mismo temperamento, su apariencia era un poco más distinguida y solemne.

—¡Hijo de puta! —El padre de Zhang Zi Xuan, Zhang Guo Fu, agarró la regla sobre el sofá y atacó, atrapando a Zhang Guo Qiang en un instante—. ¡Te dejaré correr! ¡Te dejaré correr!

En cuanto a Zhang Guo Jian, su tercer tío, este fue aún más desvergonzado. Cuando su segundo hermano trató de esconderse, lo agarró de inmediato y lo presionó contra el sofá, ayudando a su hermano mayor a que lo golpeara.

Cuando Shao Qian vio esta escena caótica, se quedó boquiabierto, y extendió una mano, intentando disuadirlos. Quién habría pensado que en el momento en que la levantó, una mano blanca la atraparía, haciéndolo a un lado.

—Sé bueno. No se han visto en muchos años. Esta es también una forma de expresar su afecto.

Cuando Zhang Zi Xuan tiró de Shao Qian, usó mucha fuerza, haciendo que este se tambaleara. Entonces, para evitar que se cayera, lo atrajo a su pecho, estabilizándolo.

Mm, justo a tiempo. Aun así, está demasiado delgado. De ahora en adelante, cuidaré de él.

Zhang Zi Xuan no sabía lo que había sucedido, pero en la fracción de segundo en la que vio al joven, quedó petrificado, y su corazón exclamó: Abrázalo. Nunca permitas que salga de tu vista. O de lo contrario, desaparecerá sin dejar rastro.

Sintiéndose incómodo, Shao Qian salió del abrazo de Zhang Zi Xuan y, girando su cabeza, vio a su padre, quien ya tenía entre cuarenta y cincuenta años, inmovilizado recibiendo nalgadas. Las comisuras de sus labios se crisparon.

¿A esto se llama expresar afecto?

Sin embargo, tuvo grandes dificultades para aceptar este método. Zhang Qing, por su parte, quedó fascinada por el lujo de la residencia. Aunque no lo entendía del todo, era consciente de que nada de lo que veía era ordinario. Colgada en la pared estaba una pintura famosa sobre la que había leído en un libro de texto llamado Campaña, la cual, a juzgar por los recursos financieros de la familia Zhang, sin duda alguna era la obra auténtica.

Si hay una pintura invaluable colgada en la sala, ¿qué clase de vida llevaré en el futuro? De la emoción, su rostro se enrojeció y su respiración se tornó agitada.

Aunque gran parte de la atención de Zhang Zi Xuan estaba dirigida al joven a su lado, eso no significó que no le prestara atención alguna a su prima más joven, y cuando vio la expresión codiciosa con la que miraba las decoraciones a su alrededor, sus cejas se arrugaron.

Como era de esperar de una persona de mente estrecha que nunca ha visto el gran mundo. Ambos comieron el mismo arroz, sin embargo, la brecha entre ellos es enorme. Al menos la expresión del joven no cambió cuando vio las decoraciones.

—Bueno… —Shao Qian miró las nalgas hinchadas de Zhang Guo Qiang, que parecían un huevo, y rio con indiferencia mientras lo señalaba—. Mi… Mi padre parece estar medio muerto.

—Hijo, ten la seguridad, ¡papá todavía está vivo! —Al escuchar sus palabras, levantó la cabeza y le dirigió una sonrisa deslumbrante a Shao Qian.

Habría sido para él una suerte no levantar la cabeza, no obstante, una vez que lo hizo, los otros sintieron crecer las llamas de la ira. Entonces, cuando el patriarca de la familia Zhang agarró la regla con fuerza, sus intenciones de continuar con la golpiza evidentes, su hermano, Zhang Guo Jian, lo detuvo.

—Hermano mayor, olvídalo. Ya habrá tiempo para eso más tarde.

Zhang Guo Fu lo pensó, comprendiendo el significado implícito.

Como ya regresó, no lo dejaré escapar, y si lo hiciera, tomaré su apellido.

Por fortuna, no articuló sus pensamientos. De lo contrario, Zhang Guo Qiang lo habría ridiculizado. Al fin y al cabo ya compartían el mismo apellido.

—Xiao-Hui ya está tan grande. —Zhang Guo Fu miró a Shao Qian de arriba abajo antes de suspirar emocionalmente—. Ese año, cuando se fue, todavía no habías nacido. Ahora, estás enorme.