Traducido por Shiro
Editado por Yugen
En una habitación oscura, un joven delgado se encontraba atado a los cuatro postes de una cama, cubierto en una capa gruesa de sudor y pegajoso de pies a cabeza. Sus ojos estaban hundidos en extremo y su pálido color de piel, en algunos sitios violáceo, revelaba signos de abuso de drogas. Apenas había luchado durante la primera ronda de síntomas de abstinencia, y en su lugar miraba el dosel de la cama con la mirada perdida, se desconocía lo que pasaba por su cabeza.
Entonces se escuchó el sonido uniforme de algunos pasos acercándose poco a poco. Un hombre particularmente alto y apuesto que llevaba puesto un traje gris plomo abrió la puerta y entró, deteniéndose junto a la mesita de noche para mirarlo. Su cabello oscuro estaba peinado hacia atrás, revelando un rostro sumamente atractivo y ojos largos y angostos, los cuales a veces destellaban de forma peligrosa y desalentadora.
—Dejaré que la enfermera te ayude a darte un baño. —Sacó un pañuelo del bolsillo de su traje y limpió el sudor frío de la frente del joven, el cual se lamió los labios secos y agrietados.
—Tío, Zhou Yun Sheng me tendió una trampa. Lo recuerdo, he visto a esa mujer antes, estaba con él en un bar, bebiendo whiskey bourbon. Se veían íntimos. Estoy seguro de ello, ¡le dijo a esa mujer que me hiciera daño! —dijo con voz ronca y lamentosa.
Este joven era Zhou Wenjing, ahora estudiando el segundo año en la universidad. Unos meses atrás, se involucró con una hermosa mujer, pero no esperaba que esta albergara motivos ulteriores. Le dio un cigarrillo adulterado, una fuerte droga estaba mezclada en este, y solo fumarla una vez generaba una alta adicción. Zhou Wenjing, aunque su naturaleza era desconfiada y además era muy cuidadoso con respecto a su propia seguridad, tenía una debilidad fatal: la avaricia por la belleza. Siempre y cuando se tratara de una hermosa mujer, sin duda alguna la recibiría.
Cuando se presentaron los primeros síntomas de abuso de drogas, finalmente reaccionó, pero ya era muy tarde. No tuvo otra opción salvo llamar a su tío, el cual se encontraba en el lejano País J.
Du Xu Lang, inexpresivo, arrojó el pañuelo húmedo a la basura. La ira que mostraba no se debía a la acusación de su sobrino, sino porque detestaba su propia decepción. Le había advertido numerosas veces que no aceptara de extraños nada que pudiera consumirse, incluso había enviado a algunos guardaespaldas a que lo vigilaran en secreto.
Pero los guardaespaldas no eran niñeras a tiempo completo, no podían inmiscuirse en los asuntos personales del empleador. Zhou Wenjing siempre estaba atrás de chicas y ellos no podían intervenir.
¡Había cortejado su propio desastre [1]!
Du Xu Lang contuvo el impulso de lavar su mano y llamó por teléfono para informarle a sus trabajadores que vinieran a darle un baño a su sobrino. Entonces se sentó en el sofá.
—Yun Sheng no está detrás de esto, a quién más has ofendido. Piensa en ello —dijo con voz pesada.
Él ya había descubierto quién lo había hecho, pero no tenía la intención de decírselo. Si ni siquiera tenía claro quiénes eran sus verdaderos enemigos, tarde o temprano, terminaría como un cadáver no identificado. Él lo guiaría, de ser necesario, lo ayudaría, pero no erradicará personalmente a sus enemigos. En aquel entonces, si su sobrino no le hubiese dicho que su hermana había sido acosada por Yang Xi, lo cual había derivado en que esta se quitara la vida en la bañera de la ya mencionada, no habría pensado en matar a Zhou Yun Sheng.
El odio intenso era contagioso, su sobrino detestaba hasta los huesos a este par de madre e hijo y él decidió ayudarle sin reservas en su venganza en lugar de ponderar primero al respecto. Si la condena por parte de Zhou Yun Sheng no lo hubiese despertado, se habría convertido en una persona vil, mordiendo la mano de quien lo alimentó. Desde esa oportunidad, la confianza en las palabras de Zhou Wenjing se redujo considerablemente.
—Si no es él, ¿entonces quién? ¿Quién más se beneficiaría de matarme? —Su rostro delgado estaba lleno de resentimiento e indisposición. Él ya era consciente de la creciente impresión favorable de su tío hacia Zhou Yun Sheng, y también acerca de su inexplicable preocupación hacia él. Una vez, cuando pasó caminando junto al gabinete en la mesita de noche de su tío, encontró muchas fotos de su hermano. Debido a la perspectiva, se veía que habían sido tomadas a escondidas, pero en cada una de ellas la estética era hermosa y los rasgos faciales vívidos.
Zhou Yun Sheng, aunque no era tan guapo como él, tenía rasgos faciales ligeramente femeninos que poseían un extraño atractivo, especialmente su par de ojos claros, los cuales se veían como una luna reflejada en el agua. Tan solo con que mirara ligeramente hacia la cámara, el corazón de cualquier persona se desbocaría.
Las esquinas de la foto en la que miraba directamente hacia la cámara estaban algo desgastadas, lo cual mostraba lo mucho que al coleccionista le gustaba. Él creía, que de no ser por su persona, su tío enmarcaría y colgaría la foto, cubriendo por completo la pared con esta.
No entendía de dónde venía esta clase de preocupación, ¿era porque su madre le había enviado ropa y juguetes cuando era un niño? Su tío había abandonado el orfanato cuando tenía cinco años, ¿cuánto agradecimiento de su parte podría ella obtener? Incluso habiendo patrocinado a su madre, ella pagó con su vida todo lo que le debía, ¿no era eso suficiente?
Sí, Zhou Wenjing finalmente entendió —Yang Xi no condujo a su madre hasta la muerte, más bien había sido al contrario—. Al principio, había pensado que su madre se había cortado las muñecas en la bañera de Yang Xi para tomar represalias contra ella, hasta ese día en el callejón en el que Zhou Yun Sheng lo bañó en maldiciones. En ese momento entendió que su madre, siendo la persona amable era, tenía su corazón lleno de culpa hacia Yang Xi, por lo que decidió suicidarse en su tina para decirle: «Todo lo que debo, te lo devuelvo».
Pero la idea era demasiado simple e ignorante, y con eso no esperaba que indirectamente contribuiría a la muerte de Yang Xi. Después de eso, obligaron a sus hijos a transitar por un camino de odio, hasta que su relación ya no tuvo arreglo. Incluso estando dispuesto a reconciliarse con Zhou Yun Sheng, este nunca lo aceptaría.
Du Xu Lang frunció el ceño, bastante insatisfecho con la extrema terquedad de su sobrino.
—Puedes dudar de cualquiera, menos de Yun Sheng. ¿Quién más se beneficiaría? No me digas que realmente no se te ocurre más nadie —dijo en voz baja.
¿Yun Sheng? ¿Ahora lo llama de forma tan íntima?
La expresión de Zhou Wenjing se llenó de celos y odio, pero cuando vio la mirada afilada y gélida de su tío tuvo que pensar sobre el asunto con seriedad, y solo se le podía ocurrir Zhou Wenang.
No, Wenang no.
Él fue el único que le mostró benevolencia en la familia Zhou. Le enviaría medicina sin que nadie supiera cuando estaba herido, celebraría su cumpleaños con él en secreto, lo acompañaría de manera clandestina a barrer la tumba de su madre, ¿cómo podía ser él?
Padre dijo que como él heredará el legado de Yang Xi, el Grupo Zhou no le pertenecerá.
No tenían conflicto de intereses, ¿por qué le haría daño?
Zhou Wenjing sacudió la cabeza para erradicar la idea, pensando con vigor en círculos ya que todavía sentía que Zhou Yun Sheng era la mano oscura detrás de todo esto.
Du Xu Lang vio que no había tenido ninguna revelación y, demasiado perezoso como para hablar, esperó a que llegaran los trabajadores de cuidado y regresó a su estudio. Entonces hizo una videollamada.
—¿Qué necesitas? —En la pantalla, un rostro apuesto de apariencia perezosa apareció, como se había quedado despierto hasta muy tarde en la noche, sus ojos estaban un poco enrojecidos.
—¿Sigues programando? Ya son las dos y media, hora de dormir. —Du Xu Lang miró su reloj, su aparente y fingido tono apagado ocultaba su profunda preocupación.
—Me voy a dormir ya. —Zhou Yun Sheng miró hacia arriba, dejando caer unas gotas de colirio para apaciguar sus secos ojos.
El joven limpió el exceso de líquido y luego entornó ligeramente sus brillantes ojos, conmoviendo las almas de las personas, y haciendo que la respiración del hombre pausara por un breve momento. Fingiendo espontaneidad, Du Xu Lang se inclinó hacia atrás en la silla y cruzó sus delgadas piernas, esperando a que su respiración y los latidos de su corazón se calmaran.
—Wenjing está pasando por una desintoxicación. ¿Conoces a una Elsa?
Elsa fue la mujer que lo llevó a consumir drogas. Zhou Yun Sheng se rio de inmediato.
—Tarde o temprano morirá sobre el estómago de una mujer. —Habiendo dicho esto, agarró una taza de leche caliente y se la terminó en un trago. Entonces, lamiendo sus labios, continuó—: La conozco. Unos meses atrás intentó darme un cigarrillo adulterado. Sabes que mi olfato siempre ha sido excepcional, por lo que me negué.
Con 007 a su disposición, Zhou Yun Sheng podía ajustar con libertad sus atributos físicos, como por ejemplo, mejorar sus cinco sentidos, fuerza, poder espiritual, y así sucesivamente. Pero él ajustaba el cuerpo de acuerdo a los límites de tolerancia del mundo, ya era lo suficientemente bueno el sobrepasar a una persona ordinaria. No se haría tan fuerte como para llegar al punto de desafiar el orden natural porque eso podría hacer colapsar al mundo.
Antes incluso de que el cigarrillo de Elsa le fuera entregado, ya había percibido el acre olor a drogas.
Du Xu Lang apenas había dejado escapar un leve suspiro de alivio cuando la persona al otro lado de la videollamada le dijo:
—¿No tienes a gente observándome? Deberías tener todos los hechos claros. No lastimaré a tu sobrino, puedes relajarte.
—¿Cómo podría monitorearte? Mis manos no pueden llegar tan lejos. —Las pupilas del hombre se contrajeron, pero su rostro no reveló más nada. Todavía usaba una identidad falsa, ni siquiera Zhou Wenjing sabía que su tío estaba al timón del Conglomerado Du. Este creía que después de renunciar, él se había ido al País J a trabajar para una compañía, y que actualmente trabajaba como gerente en el sector intermedio de esta. Tenía algo de dinero pero no tenía poder.
—No hay lugar en este mundo que no puedas alcanzar, Du Xu Lang. Mira. —Zhou Yun Sheng sacó una foto de una gaveta, y la puso frente a la cámara.
Esta era la única foto que los medios habían logrado tomar del jefe del clan Du. Por casualidad, la gruesa capa de guardaespaldas se había separado, pero el lente estaba muy lejos, por lo que solo pudieron capturar su perfil, y era muy vago. Ni se diga de otras personas, ni siquiera Du Xu Lang podría reconocer a la persona en la fotografía. Por esta razón, el Conglomerado Du no la bloqueó incluso después de haberse filtrado.
—¿Quién pensaría que este Du Xu Lang [2], sería el mismo que el Du Xu Lang del País J? La diferencia es solo de un carácter. Es lo que más se acerca a la verdad pero que por alguna razón todos obvian. Patriarca Du, ¿te has divertido lo suficiente estos años? —Bajó la foto y arqueó las cejas ligeramente.
—Esa foto es muy borrosa, ¿cómo puedes estar seguro que soy yo? —dijo como último intento.
—Olvidé decirte, nuestra compañía acaba de desarrollar un programa de identificación. Olvídate de una foto de perfil, incluso con una foto de la parte posterior de la cabeza podemos distinguir la verdadera identidad de la persona según la estructura ósea, altura, peso, porte y otros factores relacionados. Actualmente, el Departamento de Defensa del País A se está preparando para comprar el programa a un alto precio para rastrear terroristas. ¿Qué tal si te doy una demostración?
Zhou Yun Sheng recogió el equipo y estaba preparándose para escanear la imagen y contrastarla con el verdadero Du Xu Lang en la computadora.
Sabía que nunca podría ocultarle al omnipotente hombre su relación con Noah, por lo que ni siquiera se molestó en intentarlo.
—No tienes que hacerlo, soy Du Xu Lang. —Se rio con impotencia y preguntó—: ¿Cuándo te diste cuenta? —Estaba al tanto de su identidad pero seguía interactuando con él tranquilamente. Inexplicablemente, esto lo hizo sentir bastante alentado.
—Casi dos años. Querías jugar así que te seguí el juego, ¿estás satisfecho? —Movió su mano para apagar el video.
—No te desconectes aún, tengo algo que decirte. —De manera inconsciente se inclinó hacia adelante, y mirando a la cámara dijo con seriedad—: No te estoy monitoreando ni dudo de ti, más bien, estoy tratando de protegerte. ¿Cuántos problemas piensas que te he ahorrado estos últimos años? Dos días atrás, tu guardaespaldas atrapó a un asaltante que quería robarte. El hombre llevaba un arma cargada. ¿Sabes lo que esto significa?
Zhou Yun Sheng apartó su mano con expresión burlona.
—¿Alguien quiere matarme? ¿Quién?
—¿No lo sabes ya? —Du Xu Lang sacó un cigarrillo de su bolsillo y lo encendió, el humo blanco difuminaba la frialdad en sus ojos.
La compañía de Zhou Yun Sheng se estaba haciendo más y más grande, era inevitable ofender a algunas personas, pero el único que de verdad quería su vida era Zhou Wenang. Después de reflexionar por un momento, algo de comprensión cruzó por sus ojos como un rayo.
Du Xu Lang exhaló una bocanada de humo.
—Regresa a casa. En el País C no debería actuar tan descaradamente en tu contra. Con tus abuelos y tíos cuidándote, sería al menos un poco más seguro para ti que permaneciendo en el extranjero. Después de algunos años, me temo que no habrá lugar para ti en la familia Zhou. Son las propiedades de tu familia, nadie está calificado para pelear por ellas contigo —sugirió con suavidad.
—¿Ni siquiera Zhou Wenjing está calificado? —preguntó de manera inconsciente.
—Wenjing tampoco está calificado —afirmó mientras asentía con certeza. Ya fuera porque buscaba compensarlo o por compasión, el Du Xu Lang original creía que el Grupo Zhou le pertenecía a Wenjing, pero ahora había cambiado de opinión. Él podía ayudar a su sobrino a abrir su propio negocio, pero el Grupo Zhou debía pertenecerle a Zhou Yun Sheng, ya que él era el sucesor verdadero y lógico.
Además, él sentía que la relación entre los dos hermanos Zhou era muy extraña. La familia a la que pertenecían era de empresarios ordinarios, no una yakuza como el clan Du, por lo que competir por la propiedad familiar no tenía por qué terminar en derramamiento de sangre ni en la pérdida de vidas. Si Zhou Wenang ganara, podría simplemente echar a sus hermanos de la casa pero, ¿por qué pelear hasta el último aliento? A quien debería odiar era a Zhou Wenjing, su sobrino, pero contrario a las expectativas, era incluso más cruel hacia su propio hermano mayor. Eso no tenía el más mínimo sentido.
Du Xu Lang había investigado a los dos hermanos desde la infancia hasta la adultez. Zhou Yun Sheng había sido siempre considerado y amable hacia Zhou Wenang, no había rastros de hostilidad, por lo que no podía entender por qué este lo odiaba al punto de querer asesinarlo.
Aún inmerso en sus cavilaciones, no pudo evitar vociferar sus preocupaciones:
—¿Por qué? Porque Zhou Wenang es un espurio, y si Yun Sheng llegara un día a saber la verdad perdería todo lo que ahora tenía. Incluso si su hermano no apoye la idea de atacarlo, los padres de Yang Xi se asegurarían de que tuviera una muerte miserable. Aunque el Grupo Yang es más pequeño en escala que el Grupo Zhou, su trasfondo es muy complejo, y su industria se extiende desde lo luminoso hasta lo turbio. Los padres y hermanos de Yang Xi son personas despiadadas, y ferozmente protectoras. Ahora miman a Zhou Wenang, pero si la verdad llegase a ser revelada, lo odiarían hasta la muerte.
Zhou Yun Sheng era un cuchillo que colgaba sobre la cabeza de Zhou Wenang oscilante y expectante, una espina en el corazón, solo cuando este sea eliminado podrá respirar con tranquilidad. Y su padre probablemente sentía lo mismo, o no instaría a su hijo mayor a que alienara a la familia Yang.
En ese pequeño momento, Zhou Yun Sheng pensó mucho, pero no tenía la intención de explicarle a Du Xu Lang.
—Ya has hecho mucho, puedo solventar mis propios problemas. Si quiere apoderarse del Grupo Zhou, lo puede hacer, nunca ha sido de mi interés. Un día, mi compañía aplastará al Grupo Zhou —dijo con tono burlón mientras se desvestía.
Desechando sus prendas, se desordenó el cabello y se fue directo al baño a tomar una ducha, incluso olvidando apagar la cámara.
El muchacho ya se había convertido en un hombre incomparablemente apuesto. Como se encerraba en su habitación por largos períodos de tiempo, y era poco el sol que recibía, su piel era blanca, casi transparente, pero su abdomen era de músculos compactos y gráciles líneas de sirena, dejando ver que se ejercitaba con regularidad.
Luego se quitó la correa, revelando una cintura fuerte y flexible, pero como su trasero era redondeado, los pantalones no se deslizaron mucho, colgando sueltos de sus caderas.
Esa apariencia casual y perezosa era muy sensual.
Du Xu Lang era incapaz de apartar sus ojos de él, cuando el joven se salió del marco de la cámara, hasta estiró su cuello intentando seguir su figura.
El hombre joven se dio un baño rápido y salió con una toalla alrededor de su cintura. Sus piernas delgadas y rectas atrajeron la atención de Du Xu Lang una vez más. Zhou Yun Sheng parecía no notar la extraña expresión en el rostro del otro ni su postura rígida, solo deseándole buenas noches y apagando el video.
La escena encantadora desapareció, y Du Xu Lang dejó escapar un suspiro oscilante. Después, apoyando su frente sobre su mano rio con amargura. Parecía que lo estaban seduciendo, pero la tragedia radicaba en que la otra parte parecía no ser consciente de ello.
♦ ♦ ♦
¿Zhou Yun Sheng no era consciente de ello? Tan pronto apagó la cámara, sus labios se curvaron en una sonrisa maliciosa. Él era un hombre homosexual con estándares muy altos. Du Xu Lang era bisexual, su apariencia y figura siendo de la mejor calidad, y él no había alcanzado el punto en el que podía rechazar la mercancía de mejor calidad para buscar una inferior.
En cuanto a cómo lidiar con las consecuencias posteriores al banquete, no lo había considerado aún. Estaba harto de ser la marioneta del sistema, ahora solo deseaba vivir de acuerdo a su sentir.
[1] Es una manera que tienen de decir que se buscó él mismo sus problemas.
[2] Du Xu Lang: el caracter «Xu» es diferente en el alias.
Amo amo! Gracias por el cap!