Pronto, utiliza el rostro del demonio – Arco 8 – Capítulo 11

El equipo del programa organizó de forma detallada el itinerario de los concursantes. Antes de la quinta ronda del programa, hubo unos días de descanso. El desafío consistía en meterse en una pelota inflable de playa y caminar desde un extremo de la piscina hasta el otro. No solo tenían que mantener el equilibrio, sino que debían hacerlo con gracia y aplomo.

Tras la explicación de Eureka, se escucharon trágicos lamentos de los concursantes. No habría manera de detener la pelota una vez que tocara la superficie del agua. ¡Nadie podría permanecer en pie!

—Vayan a ponerse su traje de baño. Alégrense de que no los hiciéramos caminar con tacones altos, ¿no fuimos amables? —El rostro de Eureka permaneció serio, pero se regocijaba en su corazón; su picardía no siendo inferior a la de Miss Jeffrey.

¿Traje de baño? ¿Gatito usará traje de baño? ¡Dios!

Gustav sintió una comezón en la nariz, levantó la cabeza y bloqueó sus fosas con una toalla de papel. Su mente se llenó con imágenes de la piel suave y blanca del gatito. Incluso especuló sobre la forma, el tamaño y el color de las partes privadas del minino.

Rosa, deben ser de un rosa precioso.

Su pulso se aceleró, mientras un atisbo de sangre goteaba de su nariz.

—¡Dios mío, señor Atchison, le sangra la nariz! —exclamó Eureka en voz baja.

Gustav esquivó el enfoque al tiempo que se secaba la nariz.

—Hay muchos problemas en el programa. Nos han llegado cartas de denuncia sin parar. Me siento un poco ansioso —dijo y le dedicó una mirada significativa.

La imagen de Gustav siempre había sido de nobleza y gentileza, siempre alejado de los rumores vulgares y los escándalos. Por lo tanto, Eureka jamás sospechó que sus pensamientos, en realidad, iban en una dirección lasciva, por lo que sintió gran simpatía por él. Poco después, la hemorragia nasal se detuvo y ambos charlaron un rato, tras lo que los concursantes finalmente salieron.

Con la mirada, Gustav buscó a Romeo, pero tan pronto lo encontró se giró para mirar a otra parte. Su corazón latía desbocado, a punto de explotar. Nunca imaginó que el gatito, de aspecto tan delgado, en realidad tuviera un cuerpo tan sensual. Cinturón de Adonis, músculos de pecho y abdominales… poseía todo lo que un modelo debería tener, sus hermosas líneas parecían las de una escultura. Además, su piel lucía tan blanca y pura como la leche y su escaso vello corporal lo hacía lucir aún más exquisito que la mayoría de las participantes femeninas. Bajo la luz del sol, todo su cuerpo reflejaba un radiante brillo, similar al de una inmaculada pieza de jade oriental.

El hombre quería encontrar una lujosa caja en la que pudiera conservarlo, pero tuvo que contenerse.

Entonces, Ivanna se acercó con sigilo al joven y tocó sus fuertes músculos abdominales; su rostro lleno de admiración. Zhou Yunsheng, a su vez, le dio un toque a los de ella. Era inusual que una mujer tuviera músculos abdominales.

Ambos la estaban pasando a lo grande y los camarógrafos los grababan con avidez, pero la expresión de Gustav era sombría. Si no supiera que Ivanna era lesbiana, habría encontrado una manera de separarlos.

—Comencemos el juego —le dijo a Eureka para que pusiera todo en marcha.

Eureka dio una explicación simple de las reglas y luego dejó que cada uno de los participantes se metiera en una pelota inflable. Buscando preservar su reputación, Hayden fue el primero, pero no le fue tan bien en el desafío como había imaginado. Después de tan solo dos pasos se cayó, solo para levantarse y caerse de nuevo. Moverse dentro de la pelota implicaba una caída segura.

Al final, solo le quedó gatear de un extremo de la piscina al otro, su apariencia miserable. El resto de los participantes rio a carcajadas, incluso señalaron su trasero mientras se burlaban de él. Era evidente que su popularidad entre los concursantes disminuía a una velocidad vertiginosa.

Emily se cubrió la cara, mortificada, mientras que Zhou Yunsheng observaba con atención la pelota inflable rodante con expresión «preocupada».

Con Hayden como precedente, los concursantes que le siguieron intentaron proceder con cuidado, pero ninguno pudo caminar con éxito de un extremo al otro. Cuando llegó el turno de Ivanna, Zhou Yunsheng la agarró del brazo y le susurró:

—Camina deprisa y pisa la misma costura con cada paso. Te ayudará a mantener el equilibrio.

Ella asintió y siguió sus instrucciones. Aunque se tambaleó un poco a la mitad, caminó hasta el final sin caerse. Zhou Yunsheng le siguió de cerca, caminando con parsimonia, sonriendo como si estuviera dando un paseo en un jardín. Cuando Ivanna por fin pisó el borde de la piscina, miró hacia atrás y vio que él estaba casi por llegar.

Salieron de sus respectivas pelotas y se abrazaron, riendo.

—¿No quieres acercarte y abrazarlos? —sugirió Gustav a Eureka.

Gustav estaba enojado porque quien lo acompañaba ese día era la seria de Eureka. Si hubiese sido, Miss Jeffrey, este habría corrido hacia ambos, chocaría esos cinco y los abrazaría en celebración. Entonces, Gustav podría unirse al festejo y con el abrazo, aprovechar para tocar la suave y delicada piel como la leche del joven.

—No, la indiferencia y la seriedad son lo mío —contestó, indiferente a los sentimientos de su jefe.

¿Puedes convertirte en una persona más entusiasta por el día de hoy?, pensó Gustav, quería acercarse, pero eso le generaría demasiados problemas.

Emily era muy calculadora. Observo a todos y aprendió de sus experiencias. Fue así como en cuanto vio el maravilloso desempeño de Ivanna y Romeo, sintió que había dado con la solución. Después de un poco de práctica, salió con confianza.

Su andar estaba lleno de contoneo y aplomo, como una reina que saludaba en un desfile ante cientos de millones de admiradores. Sin embargo, su diminuto bikini de hilo apenas podía cubrir su amplio pecho saltarín.

Los participantes masculinos se le quedaron viendo embobados. Tenían que admitir que Emily era la concursante más atractiva y con más probabilidades de ganar.

—Emily es buena. Espero grandes cosas de ella. —Eureka señaló su espalda.

Gustav la miró de soslayo y comentó:

—Tiene un gran potencial y puede convertirse en una excelente modelo, pero su figura es demasiado sensual y una vez queda expuesta transmite una sensación obscena. Le será difícil afianzarse en el mercado de alta costura. No es rival para Romeo.

—Tienes razón —asintió Eureka—. Aunque tiene buen temperamento, si se le compara con Romeo parece vulgar. Él es el chico más puro y etéreo que he visto en mi vida. Podría usar desde la ropa más casual hasta la más sofisticada y verse bien. Por supuesto, ahora es demasiado pronto para sacar una conclusión. Tenemos que esperar y seguir viendo su desempeño.

Los generosos elogios de Eureka complacieron a Gustav quien, al ver al adolescente mirando en su dirección, no pudo evitar levantar su barbilla y sonreírle.

Esto hizo que Emily y otras participantes, que estaban de pie junto a Zhou Yunsheng, se ruborizaran, asumiendo que el gesto iba dirigido a ellas y comenzaron a especular:

—¿El señor Atchison me está mirando? ¿Estoy viendo bien?

—No, me está mirando a mí.

—Están equivocadas. Está mirando a Emily. ¿Quién de ustedes diría que es más atractiva que ella? —La amiga (o mejor dicho, súbdita) de Emily, Daphne, replicó.

Emily le dio un golpecito a Daphne con expresión avergonzada. No dudaba que el señor Atchison se interesaría en ella. Desde que tenía doce años ella se dio cuenta de que era hermosa y que con facilidad podía atraer a cualquier hombre que estuviera a su alrededor.

Cuando todos los participantes terminaron el desafío, Eureka señaló a Ivanna, Zhou Yunsheng y Emily; haciendo una breve pausa en cada uno de ellos con la intención de generar suspenso entre los espectadores.

—El campeón de hoy es Romeo —anunció finalmente—. Su velocidad, porte al andar y expresión fueron impecables. Caminó sobre el agua como si estuviera en una pasarela deslumbrante. Ivanna y Emily también hicieron un muy buen trabajo, pero se notó que caerse les generaba miedo y ansiedad, por lo que tuve que restarles un punto.

Ivanna abrazó al chico y gritó de felicidad, mientras que los demás participantes lo felicitaron, genuinamente o por hipocresía, excepto Emily y Hayden, cuyas expresiones se tornaron indescifrables. Pero si bien la primera perdió la compostura solo por un instante, su novio no se molestó en ocultarlo.

En el camino de regreso, como era de esperar, Hayden pasó todo el rato quejándose de Romeo, haciendo todo lo posible por humillarlo. El aludido aguantó hasta que sus ojos se enrojecieron, no por tristeza sino de ira. Quería colgar a Hayden y darle una paliza.

Como sus intenciones eran demasiado obvias, enterró el rostro en los brazos de Ivanna y mostró una expresión resignada. Parecía que ya era momento de enviar a Hayden a casa.

Emily estaba rezando en su interior para que ambos iniciaran un enfrentamiento, de modo que violaran las reglas del programa y los eliminaran.

Con Romeo fuera de mi camino, no habría rival que impida en mi ascenso al estrellato. 

Desilusionada, Emily observó como, a pesar de sus deseos, Romeo retrocedió. No replicó ni siquiera a una sola de las ofensas, y mucho menos tomó acción.

De vuelta en la villa, en la pantalla del televisor se reproducían las puntuaciones del desafío de los concursantes. Romeo había obtenido diez, mientras que Ivanna y Emily nueve. Los tres habían estado compitiendo ferozmente desde el episodio anterior, pero en general, Romeo, el caballo negro, parecía tener más probabilidades de ganar. La apariencia orgullosa de Emily no podía compararse con el aspecto puro y etéreo, similar al de un elfo, del joven.

Esa noche, Zhou Yunsheng fue de nuevo el primero en lanzarse sobre su almohada y dormir, mientras que los otros participantes padecieron una larga noche de insomnio.

Al día siguiente, todos se levantaron y encontraron una tarjeta en la televisión que decía:

Se necesita coraje para trabajar con las grandes ligas.

El mensaje era más que obvio. El equipo de producción había invitado a uno de los supermodelos más populares del momento para que participara en la sesión de ese día.

¿Quién será? 

¿Será hombre o mujer?

Con altas expectativas, los concursantes entraron uno a uno al estudio fotográfico, donde vieron a Bonnie y Gustav Atchison de pie, uno al lado del otro.

De manera instantánea, comprendieron quién sería el modelo y todos alzaron sus manos y vitorearon.

Bonnie sonrió apreciativamente.

—Parece que todos lo han adivinado. ¡Sí! Hoy sus compañeros seremos el señor Atchison y yo. Serán libres de elegir con cuál de nosotros colaborarán, lo que ustedes y su compañero vestirán y el estilo de su cabello. Así que tengan cuidado porque la calidad de sus fotos dependerá por completo de su criterio personal. Para un modelo, el gusto y la visión son los factores clave que determinarán qué tan lejos podrán llegar en el mundo de la moda.

Dado que Bonnie y Ariel no congeniaban, ests palabras eran sin duda una crítica para ella.

Gustav la miró con una sonrisa burlona antes de asentir con la cabeza en dirección a los concursantes a modo de saludo. No se debía juzgar por su postura elegante y relajada, en realidad, le sudaban las palmas de las manos. Debido a la negativa de Bonnie, no fue capaz de organizar las parejas de los concursantes de antemano, y no saber a quién elegiría su minino lo tenía en ascuas.

A gatito le gustan los hombres, por lo que no debería rechazarme. Pero si me cree fuera de su alcance, podría evitarme para no hacerse ilusiones, muy probablemente elegirá a Bonnie. Dios, por favor, ¡haz que me elija!, rezó Gustav mientras le dedica una de sus encantadoras sonrisas a los participantes.

Las mujeres presentes se emocionaron al extremo, sus rostros ruborizados.

Ivanna, a quien le interesaban los hombres, tenía su mirada puesta en Bonnie, pero aun así tiró de Zhou Yunsheng para que levantara la cabeza y mirara al apuesto señor Atchison, solo le dio un vistazo y luego, muy «dedicadamente», se volvió para contemplar a Hayden.

Tal fue la desilusión que Gustav sintió en ese momento, que lo que más deseaba era devolver de inmediato el patrocinio de la familia Brown y eliminar sin piedad a Hayden.