Traducido por Lugiia
Editado por Sakuya
—Parks-sama.
Cuando estoy regresando a mi habitación en la mansión, veo a mi hermano mayor y lo llamo.
— ¿Cómo van tus preparativos para la inscripción?
A principios de Año Nuevo, mi hermano mayor se inscribirá en la Academia.
Los hijos y las hijas se reúnen en esa Academia, y como se les enseña un conocimiento de alto nivel, es un lugar donde pueden profundizar sus lazos como compañeros nobles.
Aunque si se trata de alguien como mi hermano mayor, no creo que tenga ningún problema en cuanto a sus estudios.
—Oh, sí, ya casi he terminado con eso. Más bien, no hay muchas cosas que deba preparar.
—Ya veo… me sentiré sola cuando no estés.
Como la Academia está basada fundamentalmente en dormitorios, mi hermano mayor no estará en casa por un tiempo.
—Bueno, no digas eso. Volveré en mis días libres.
—Cuando llegue ese momento, por favor cuéntame historias sobre la Academia.
—Desde luego… —Silenciosamente, mi hermano mayor se acerca a mi oído. —Aunque, tú también irás ahí en tres años. —Luego, susurra eso discretamente.
—Es verdad. Aunque honestamente, no tengo intenciones de ir.
— ¿De verdad?
—Sí… a diferencia de Parks-sama, no he puesto tanto esfuerzo en mis estudios, y lo más importante, si tengo tiempo, entonces me gustaría entrenar en lugar de estudiar.
No es que piense que es un esfuerzo completamente inútil. Una vez que entre en la Academia y comience a vivir en el dormitorio, no podré participar en los entrenamientos.
Para empezar, es un misterio si seré capaz de entrenar de forma independiente o no.
Mientras tengo tales pensamientos, honestamente pienso que, si es posible, quiero quedarme en casa y no ir a la Academia para seguir esforzándome en mi entrenamiento.
—Ya veo. Bueno, todavía faltan tres años. Está bien si piensas cuidadosamente en el futuro.
—Sí…
Mi hermano mayor acaricia mi cabeza mientras asiento.
—Ahora que lo pienso, tendré que regresar una vez al territorio —murmura repentinamente, recordando algo.
— ¿Eh…?
—Porque hay varios asuntos que quiero terminar de tratar antes de entrar en la Academia. Como no podré regresar por un largo tiempo, decidí volver ahora. ¿Hay algo que te gustaría como recuerdo?
—No… nada en particular. Más importante aún, Parks-sama. ¿Estarás bien?
—Al menos he hecho un poco de entrenamiento. Además, llevaré escoltas conmigo. Estoy agradecido por tu preocupación, pero todo irá bien.
Mi hermano mayor sonríe irónicamente, pero mi sensación de inquietud crece.
Está aquel incidente con mi madre, y la vez que fui atacada. Es imposible para mí no preocuparme.
Después de eso, paso mis días preocupándome sin cesar, pero, aun así, los días siguen avanzando.
Y entonces, llega el día en que mi hermano mayor comenzará su travesía.
♦ ♦ ♦
Sintiendo que debo seguirlo sigilosamente, monto un caballo.
Aunque es inevitable que mi padre me regañe más tarde, sigo preocupada por mi hermano mayor.
Manteniendo una distancia para que no lo noten, sigo al grupo de mi hermano mayor.
Como es de esperar, están en alerta, así que esta vez hay un mayor número de guardias junto con él. No sólo hay muchos, sino que comenzando con Shurei, tienen un grupo de élites.
Sin embargo, cuando confirmo a los miembros de su escolta, me doy cuenta de que hay algunos soldados del Ejército mezclados entre ellos.
¿Por qué hay gente del Ejército también…?
Pienso que podría ser mi imaginación, pero veo algunos rostros que reconozco de mi entrenamiento diario… así que no hay manera de equivocarme. No sólo eso, sino que, entre los miembros del Ejército, Kuroitsu, que debería ser un subcomandante, también está.
Imposible…
Porque no importa cuán preocupado esté mi padre por mi hermano mayor, no hay forma de que utilice el Ejército para sus asuntos personales.
¿Qué está sucediendo…?
Una sensación de incomodidad, difícil de expresar, pasa a través de mí.
No hay ningún problema con los miembros, pero esa sensación de inquietud me estimula y al final, decido seguirlos.
Al salir de la Capital, avanzo a través de un entorno pacífico. Gracias a que el grupo de mi hermano mayor se dirige a una carretera con mucho tráfico, aún no se han dado cuenta de que los estoy siguiendo.
Aunque llevo una capa encapuchada por si acaso.
Ahora que lo pienso… ha pasado un tiempo desde la última vez que dejé la Capital. De repente, un pensamiento así llega a mi mente.
Al mismo tiempo, puedo imaginarme fácilmente la rabia ardiente de mi padre después de encontrar la carta que le dejé, y siento curiosidad por saber cómo se ocupará de mí cuando regrese.
Para empezar, ir a la ciudad probablemente será difícil por un tiempo.
¿Cuánto tiempo estará enfadado conmigo…? Aunque ya que su enfado se debe a que está preocupado, lo aceptaré valientemente.
La furia de mi padre es aterradora, pero le temo más al arrepentimiento. Si algo le sucede a mi hermano mayor, aún si me arrepiento, no será suficiente.
Precisamente por eso, aunque tema a su furia, no tengo intenciones de volver. Sin importar lo que pase… ¡seguiré viajando y protegiendo a mi hermano mayor!
Continúo mi travesía mientras fortalezco mi resolución, pero al continuarla, surge un único problema.
Para continuar esta travesía, el problema número uno es… los gastos de la misma. Esta travesía requiere una cantidad considerable de dinero. Sin embargo, ya que es secreta, no hay forma de que pueda depender de los fondos de mi casa.
Por el momento, traigo fondos de mis reservas, pero… el bolso que cuelga de mi cuello es más liviano de lo que esperaba, lo cual me inquieta. Aun cuando incluí una considerable cantidad, puede no ser suficiente…
A medida que pasa el día… el bolso se hace aún más ligero, y cuando confirmo lo que queda, como es de esperar, incluso comienzo a sudar.
Sin embargo, no tengo intenciones de volver. Lo que significa que tengo que reducir mis gastos de alojamiento.
Aunque si pudiera, me gustaría quedarme en la misma posada que él para prepararme para un ataque. No obstante, lo que es imposible es imposible, así que me comprometo a tomar una posada lo más cerca posible.
Después de confirmar en qué posada se aloja mi hermano mayor, elijo la más cercana y barata para los viajeros. Además de eso, trato de ahorrar en comida y agua, adquiriéndolas yo misma en la medida de lo posible mientras sigo mi trayecto… al hacer un esfuerzo tan conmovedor viviendo la vida como si estuviera en el campo, sigo con determinación a mi hermano mayor.
Y, entonces, llegamos al punto en el que casi estamos en el territorio. Poco a poco, el tráfico disminuye, y seguirlos se hace más difícil. Por lo tanto, no tomo el mismo camino que ellos, sino que continúo por un sendero sin carretera en sus alrededores.
Mientras me siento un poco melancólica al transformarme gradualmente en un ser salvaje, simplemente sigo avanzando.
Si no pasa nada aquí, entonces regresaré…
Justo cuando estoy pensando en eso, siento un cambio en las presencias cercanas.