Todos creen que él me gusta – Capítulo 64

Traducido por Bee

Editado por Sakuya

---

—Ai ya ya. —La escuela iba a empezar pronto. Ye Zhou estaba acostado en la cama y felizmente contaba un montón de dinero—. Mirarlos da una sensación de seguridad.

Shang Jin lo miró y continuó mirando el juego en la pantalla.

Ye Zhou se sentó y sacó dos piezas, rascó la mejilla de Shang Jin y dijo: —Belleza, dale a este joven maestro una sonrisa y esto es tuyo.

Shang Jin inmediatamente sacó un fajo de dinero del cajón y se lo arrojó a Ye Zhou.

—¿Quieres humillarme con dinero? —Ye Zhou gritó—. ¡Te digo que lo has logrado! —Ye Zhou terminó de decir y metió todo el dinero de la cama en su propio escondite privado.

Al final de la instancia, Shang Jin se volvió para ver a Ye Zhou con la cabeza gacha, su flequillo cubriendo completamente sus ojos. Extendió la mano y le levantó el cabello.

—Ya es tiempo de que te cortes el cabello.

—¿De verdad? —Ye Zhou sostuvo su escondite privado y dijo—: Salgamos a cortarnos el cabello en un momento, y podemos depositar el dinero en el camino.

Como Shang Jin no pidió ni un centavo a su familia, Ye Zhou inició su modo de pellizcar cada centavo. Una vez había gastado dinero de manera extravagante, pero ahora comenzó a presupuestar cómo gastar el dinero. Incluso el dinero que le dieron sus padres, ya no lo tocaba.

En ciertos lugares, las dos personas eran sorprendentemente parecidas.

Pensando que algún día podría tener una pelea con su familia, ahora estaba siendo económico, tratando de estar separado de ella. De esta manera, tendría más confianza incluso si se fuera.

—Las dos tías me preguntaron si todavía estaba dando clases particulares después de comenzar la escuela. —Siento que el tiempo es un poco escaso y lo desperdicié.

De hecho, el corazón de Ye Zhou goteaba sangre. Le pareció ver los billetes rojos despedirse uno por uno. Originalmente, Ye Zhou solo había enseñado a pequeña Qiu en matemáticas e inglés en la escuela secundaria. Más tarde, cuando estaba charlando, Ye Zhou mencionó accidentalmente que había ayudado a Shang Ming a mejorar su puntaje en 50 puntos en el tercer año de la escuela secundaria, y otra tía con un hijo en el tercer año de la escuela secundaria lo convenció de que asesorara a su niño.

Ye Zhou sólo se había graduado hace dos años, por lo que se sentía más cómodo con el plan de estudios de la escuela secundaria. Para ese estudiante de último año de secundaria, lo abarrotó bien en ese medio mes de vacaciones de verano. Luego, el estudiante de último año de secundaria tomó el examen en agosto. Su puntuación que no se pudo subir en vida o muerte en realidad aumentó en 20 puntos. Sus padres estaban tan felices que le dieron a Ye Zhou un gran sobre rojo.

—Pero agregué el WeChat de los dos estudiantes y les dije que, si tenían alguna pregunta, podrían enviarme un mensaje de texto. Cuando vuelva para el Año Nuevo Lunar, buscaré los materiales de mi último año.

Shang Jin sonrió.

—Si dejas que Sun Xiaohao apruebe el examen de ingreso a la universidad, creo que el tío Sun te enviaría una pancarta.

—Pensando en ese año, los padres de Shang Ming querían enviarme uno, pero lo detuve. —Ye Zhou dijo complacientemente.

—¿Por qué? —Aunque nunca había visto a los padres de Ye Zhou, Shang Jin podía sentir por las palabras de Ye Zhou que serían personas que amaban la cara. Si los padres de un amigo visitaban su casa para expresar su gratitud, eso les estaría dando una cara enorme.

—Incluso si fueran, solo dirían que no fue nada. —Ye Zhou curvó los labios.

Al ver que el estado de ánimo de Ye Zhou no era alto, Shang Jin simplemente cambió el tema.

♦ ♦ ♦

El día que comenzó la escuela, Ye Zhou recibió de repente un mensaje de Su Yin. Lo que debería venir, vendría. Que Su Yin pudiera soportarlo hasta ahora no era fácil.

Aunque las dos personas alquilaron un lugar afuera, no se retiraron del dormitorio de la escuela.

Mientras Shang Jin descansaba en el dormitorio, Ye Zhou llegó al lugar acordado con Su Yin.

—Oye, no te he visto en dos meses. Gran belleza, Su, ¿te pusiste más delgada?

Su Yin hizo un gesto frío y no aceptó los halagos de Ye Zhou en absoluto. Sin mantener a la gente en suspenso, preguntó directamente.

—¿Qué está pasando contigo y Shang Jin?

Ye Zhou tosió ligeramente y dijo—: Es lo que ves.

—En ese momento, ¿no dijiste que Shang Jin no estaba en tus opciones?

Su Yin realmente no entendió. Si fueran a regresar hace un año en este momento, ella sabía mejor cuánto odiaba Ye Zhou a Shang Jin. No esperaba que en solo un año, el afecto del otro cambiara y se enamorara.

—Yo… —Ye Zhou movió la mirada y se forzó a reír—. ¿No es porque Shang Jin es mi respuesta? Entonces no necesito múltiples opciones. No existe ninguna otra opción.

Su Yin se estremeció por la piel de gallina que cubría su cuerpo.

—¿Qué hay de Tang Dongdong?

—¡Tang Dongdong y yo somos simplemente amigos y nada más! —Ye Zhou prometió.

Su Yin miró fijamente a Ye Zhou durante medio día. Finalmente, sus brazos cruzaron su pecho y exhaló un largo suspiro.

—Olvídalo. Mientras seas feliz.

No había esperado que Su Yin lo dejara escapar tan fácilmente. Debería saberse que si alguien hubiera tocado al dios masculino con un dedo, parecería que estaba pidiendo por su vida.

—¡¿De verdad?! —Dijo sorprendido.

—Está bien siempre que el dios masculino sea feliz. Y… —Su Yin pensó en el gran entorno de A Uni y dijo—: Ahora, nadie se atreve a separarlos. Si hay una señal de desarrollo, lo eliminarán de raíz.

Ye Zhou apretó el puño y elogió la superstición feudal de la Universidad A en su corazón.

♦ ♦ ♦

Al ingresar al tercer año, se sintió como si los estudiantes de los alrededores tuvieran muchas metas. Planearon empezar a prepararse para el examen de ingreso de posgrado y comenzar a trabajar directamente después de la graduación, y comenzaron a prestar atención a cada profesión.

Ye Zhou y Shang Jin decidieron por unanimidad estudiar para el examen de posgrado.

Shang Jin miró la exuberante planta de fresas.

—Encuentro que plantar es muy interesante. Que dices, ¿debería estudiar para la facultad de ciencias agrícolas?

—¿¿Ah?? —Ye Zhou se sorprendió.

¡Su intención de regalar esta fresa no era dejar que Shang Jin se fuera a la granja! Y un estudiante de finanzas con una gran habilidad para la agricultura… Ye Zhou pensó en Shang Jin con un sombrero de paja con las mangas subidas, agachado en los campos. Parecía bastante interesante. Estaba seguro de que si Shang Jin realmente estudiaba agricultura, definitivamente podría lograr otra carrera.

—Como tú quieras.

—Olvídalo. Soy bastante vago. —Shang Jin se conocía muy bien a sí mismo—. Si estoy en finanzas, solo necesito usar mi cerebro.

Ye Zhou se sentó en su silla y se deslizó a su lado.

—Si te gusta plantar, podemos comprar una casa más grande más tarde y personalizar un solárium. Solo planta un poco. De esta manera, no sería agotador.

—Buena idea.

Liu Yutian encogió sus oídos. La frecuencia de este tipo de palabras en el dormitorio parecía un poco alta recientemente, y se sintió un poco sofocado. Estas dos personas, ¿no se retrasó un poco su período de luna de miel? Habían estado saliendo durante un año y ahora solo han comenzado a ser pegajosos. ¡Piensen en el resto de sus vidas! ¿Acaso creen que el período de luna de miel dura tanto?

Wen Renxu también nació sin amor. Descubrió que era cada vez más imposible meter a otra persona entre Shang y Ye.

Por ejemplo, un día, Ye Zhou estaba leyendo un libro, de repente miró hacia arriba y llamó.

—Shang Jin.

Luego, Shang Jin tomó un libro de la mesa y lo puso directamente sobre la mesa de Ye Zhou.

Ye Zhou abrió el libro con mucha naturalidad y continuó leyendo.

De principio a fin, Ye Zhou solo había llamado un nombre, pero Shang Jin podía escuchar exactamente lo que Ye Zhou quería de ese nombre.

¿No sabían que este tipo de comportamiento inadvertido era el mayor abuso de perros?

Afortunadamente, estas dos personas también sabían que debían quedarse en otro lugar por la noche, de lo contrario, con esta fuerza pegajosa, Wen Renxu estaba realmente preocupado de que, si quería evitarlo, tomaría mucho, demasiado tiempo.

Sobre esto, Ye Zhou declaró que era inocente. Realmente rehuía hacer cualquier actividad íntima en el dormitorio, ni siquiera abrazar y mucho menos besar.

Sin embargo, por el bien de la salud mental de sus muchos amigos solteros, Ye Zhou y Shang Jin regresaron conscientemente a su lugar alquilado cuando no tenían clase.

Entonces, cuando Ye Heng caminó hacia la entrada de A Uni a las dos de la tarde, Ye Zhou y Shang Jin estaban durmiendo profundamente en la cama de la casa de alquiler.

La compañía de Ye Heng se estaba preparando para expandir el mercado en A City, y él se ofreció como voluntario para transferirse a la sucursal de A City. Después de completar la entrega en los dos meses restantes, podría venir aquí directamente.

Agregó varios días de turnos y no fue fácil exprimir finalmente dos días para venir a la Ciudad A con anticipación. Uno era familiarizarse con el medio ambiente, y el otro era conocer a Ye Zhou y tener una idea de cómo era su vida estos dos años en esta ciudad.

Como resultado, estaba un poco emocionado y no fue hasta que se paró en la puerta de A Uni que recordó que no se había puesto en contacto con Ye Zhou.

Ye Heng marcó el número de teléfono de Ye Zhou mientras deambulaba por A Uni.

Sin embargo, después de 40 segundos, solo una fría voz femenina salió del teléfono.

—Lo siento, el número que marcó no está disponible temporalmente…

Ye Heng no estaba dispuesto a rendirse y volvió a llamar. Recibió la misma respuesta.

—¿Podría ser que esté en clase? —Ye Heng se dijo a sí mismo.

A Uni era digna de ser una escuela famosa. El área de los edificios era comparable a la de su alma mater. No era una exageración decir que encontrar a una persona en el campus era como encontrar una aguja en un pajar. Y la comprensión de Ye Heng de Ye Zhou fue limitada a saber que estaba en el departamento de finanzas.

Caminó unos pasos adentro. Las clases pueden cambiar, pero el dormitorio no. En ese momento, Ye Heng detuvo a un estudiante de rostro amable y le preguntó:

—Compañero, ¿cómo puedo llegar al dormitorio masculino para el departamento de finanzas?

El niño dijo torpemente.

—Lo siento, soy nuevo. Todos los días estoy en entrenamiento militar y todavía no tengo claro el diseño de la escuela.

—Está bien, gracias.

El clima en septiembre fue un poco caluroso y sofocante. Junto con el hecho de que no pudo ponerse en contacto con Ye Zhou, sintió comezón y murmuró—: De verdad, este Ye Zhou, no contesta el teléfono y tampoco responde el mensaje de texto.

No pensó que después de que esta oración acabara de terminar, el estudiante de primer año que estaba a punto de irse se dio la vuelta y preguntó—: ¿Estás buscando a Ye Zhou?

Ye Heng se sorprendió gratamente.

—¿Lo conoces?

El estudiante de primer año lo miró de arriba abajo y dijo: —No lo sé—. Después de eso, se apresuró a alejarse como si un fantasma lo persiguiera.

El corazón de Ye Heng latió con fuerza.

Esta persona no parecía que no reconociera a Ye Zhou. Un estudiante de primer año que había ingresado a la escuela no hace mucho tiempo realmente reconoció a Ye Zhou, entonces solo había una posibilidad: Ye Zhou tenía cierta reputación en la escuela.

Pensando en Ye Zhou, que estaba silencioso y poco comunicativo cada vez que estaba en casa y se resistía a todos sus esfuerzos, y Ye Zhou, quien en la boca de sus padres se volvió incapaz de hacer nada bien, Ye Heng no pudo evitar preocuparse por si sería intimidado en colegio.

De hecho, había venido en silencio porque quería ver cómo era Ye Zhou en el campus.

Una vez más, marcó el teléfono de Ye Zhou y nadie respondió. Ye Heng estaba inquieto. No estaba seguro de si Ye Zhou simplemente perdió la llamada o si algo había pasado y no pudo contestar. No podía importarle si estaba molestando a alguien y directamente detuvo a una persona y le preguntó:

—Compañero de clase, ¿cómo se llega al dormitorio masculino para el departamento de finanzas?

Zhou Wendao había comprado un bocadillo y estaba listo para regresar al dormitorio cuando lo detuvieron.

—Soy del departamento de finanzas y voy a volver al dormitorio. Vamos juntos. —dijo sin rodeos.

—Muchas gracias.

—No hay necesidad. —Zhou Wendao era una persona cuya boca no podía permanecer inactiva. Incluso si era un extraño, dijo familiarmente—: Hermano, ¿estás buscando a alguien?

—Sí, mi hermano menor es un estudiante de tercer año en el departamento de finanzas. Solo llamé, pero nadie respondió. —Ye Heng sonrió cortésmente.

—Qué casualidad. También soy de tercer año. ¿Cuál es el nombre de tu hermano? Déjame ver si lo reconozco.

—Su nombre es Ye Zhou.

—¡¿Ye Zhou?! —Zhou Wendao dijo con gran alarma.