Traducido por Dalia
Editado por Sakuya
—Princesa, dado que ha llegado hasta aquí, ¿podría tomarse un tiempo para conocer a los aprendices de la torre? Por instrucción de Su Majestad, mientras estuvieron absortos en sus labores día y noche, no paran de expresar su deseo de conocer en persona a la princesa de las hadas.
En ese instante, el supervisor de la torre me planteó directamente un favor, ya que me encontraba en estado de shock y con la mente en otro lugar.
¡Yo… no estoy tan segura de eso! ¿No será uno de esos momentos en los que me critican por ser la razón principal por la que tuvieron que trabajar duro? Ya sabes, ¿porque soy yo la fugitiva que está en la piedra de visión?
—¡Oh! ¡Acaso esa princesa de las hadas…existe en realidad!
—¡Dios mío, de verdad está delante de mis ojos!
—¡Uf, he pulido las piedras de visión con un paño encantado durante dos horas diarias cada mañana!
Sin embargo, afortunadamente, parece que la situación planteada en mi cabeza no era real.
Siguiendo el consejo del supervisor de la torre y otros magos, recorrí la Torre Oscura, piso por piso. Cada vez que me encontraba con los magos, sus reacciones eran parecidas a las de alguien que ve a su sobrino caminar por primera vez o como si un aficionado de una serie ve revivir a su personaje favorito…
—¡Ta-da, hemos llegado a mi oficina!
Recibí una invitación inesperada a la oficina del líder en el piso más alto.
—Vaya, ¿qué es todo esto?
—Estos son mis tesoros. Hay algunos objetos mágicos que se crearon aquí, aún están en fase experimental y son inestables, así que no los toques, pero eres libre de apreciarlos con tus propios ojos.
Similar a las paredes exteriores de la torre, decenas de hojas de papel estaban adheridas a las superficies blancas y numerosos libros y objetos se encontraban esparcidos en los escritorios y el suelo. Entre ellos, resplandecían piedras y joyas con un brillo enigmático, frascos con líquidos burbujeantes y adorables muñecas que movían sus brazos y piernas por sí solas.
Oh, ¿qué es aquello en la estantería? ¿Será algo como vino? Aunque, espera, ¿acaso algo se mueve en el interior de la botella?
En la esquina hay un objeto cubierto con una tela que oculta su interior, pero debido al sonido constante de golpes que emanan de el, parece ser una jaula que encierra algo semejante a un animal.
De todas formas, esto resulta un tanto sospechoso. ¿Acaso todas las oficinas de los magos son así?
—Entonces, princesa. ¿Podría darme un mechón de su cabello?
Mientras entrecerraba los ojos y observaba mi entorno, el líder de la torre me dirigió una mirada repentina y esbozó una sonrisa radiante.
Dudé por un instante y luego cuestioné con precaución, preguntándome si había escuchado correctamente.
—¿Cabello…?
—¡Sí, señorita! Piense en ello como un acto de caridad, como si estuviera ayudando a algunos viejos magos.
¡Esto es una señal de alerta!
Bien, ¿tengo la sensación de que no debería darle mi cabello a este hombre…? ¡Creo que va a hacer algunas cosas realmente raras con el!
—Si te parece bien, incluso puedes donar una o dos gotas de sangre…
—¡¡Diablos, no!!
¡Este hombre! ¡De verdad parece que está teniendo un brote psicótico!
—¡Oh, vamos, señorita! ¿Acaso no siente curiosidad también? ¡Como de repente emergieron unos poderes mágicos tan increíblemente hermosos! ¿Y también el por qué posee un poder mágico tan fuerte? ¿Dónde ha estado este hermoso mana todo este tiempo? ¿Entonces significa que la princesa no siente curiosidad por ello? ¿Verdad?
Me vinieron a la mente las palabras que me dijeron los magos fuera de la torre.
—¡Además, nunca había visto a alguien adquirir capacidades mágicas tan maravillosas y poderosas!
—¡Tienes razón! En estos días en nuestra torre, nuestra conversación gira en torno a la princesa.
¡Dios mío! Así que, ¿ahora el líder de esta torre quiere experimentar conmigo? En realidad, la razón detrás del repentino aumento en mi poder mágico se relaciona con Blackie, pero ningún otro mago o persona lo sabe, a excepción de Lucas, claro.
—Je, je… Sus poderes mágicos se vuelven más bonitos cada vez que los veo. ¿Le importaría si los toco un segundo?
Cuando decidió caminar hacia mí con esa sonrisa aterradora, decidí teletransportarme fuera de aquella sombría torre… parece que el nombre si le hace justicia finalmente
¡Esperaba ver magos, no viejos locos!
¡Demonios!
—¡Por supuesto que me molesta! ¡¿Quién crees que soy?!
—¡Vaya, vaya, vaya! ¡Así que realmente la princesa puede desencadenar magia en segundos!
Me teletransporté fuera de la Torre Oscura, dejando un efecto de asombro
—¡Oh, princesa! Llegaste antes de lo previsto.
—¿Ocurrió algo en el interior?
¡Exactamente! ¡A partir de ahora, evitaré volver a visitar ese lugar espeluznante!
Tan pronto como salí, Lily, Félix, los otros caballeros y trabajadores que me esperaban me dieron la bienvenida.
La norma dictaba que sólo aquellos que hayan sido invitados podían ingresar a la Torre Oscura, por lo que dejé a los demás atrás y me dirigí a mi suerte, aunque debería haber ido al Palacio Esmeralda para limpiarme y tomar una siesta.
—Lily, ¿podrías prepararme un poco de sal cuando regresemos al Palacio Esmeralda?
—¿Eh? ¿Sal?
¡Cuando regrese al palacio, esparciré un poco en mi habitación como protección!
Me estremecí al pensar en la mirada espeluznante del líder.
♦ ♦ ♦
—Pido disculpas profundamente, alteza.
Al día siguiente, el líder de la torre vino personalmente a disculparse conmigo.
—Ayer, al observar el maravilloso poder mágico de la princesa por un tiempo, perdí la compostura y cometí un grave error.
…La verdad es que Claude, que escuchó las noticias ayer, hizo un gran agujero en la Torre Oscura.
—No he venido a disculparme porque quiera recuperar la mitad de mi torre.
Estaba sudando profusamente en secreto mientras observaba al líder de la torre y a los magos acercarse al Palacio Esmeralda personalmente para ofrecer disculpas.
Las doncellas de mi palacio deambularon alrededor de ellos con curiosidad y enojo, aunque después de recibir mi orden, cada una se dispuso a realizar sus tareas.
—Tampoco me disculpo porque me amenazaran con volar la otra mitad y colgarme en la horca frente a la puerta del castillo si no me disculpaba cien veces ante la princesa. Es la verdad.
Anoche, mientras estaba cenando con Claude mencioné: ‘Ocurrió esto y aquello en la torre. Así que, ¿quién es ese tipo extraño?‘ algo por el estilo, pero jamás imaginé que Claude destrozaría la torre de esa manera.
De acuerdo con Hannah, quien fue a inspeccionar la Torre Oscura tras escuchar los rumores, casi un tercio de la torre quedó destrozada.
¿Y una amenaza de muerte en la horca si no se disculpa?
Bueno, esa ‘amenaza de muerte’ no es realmente propia de Claude… Podría haber dicho simplemente ‘¡Quedas desterrado!’
Lo bueno es que nadie resultó herido porque Claude les advirtió de la destrucción de la torre antes de actuar. Suspiré suavemente y abrí la boca.
—Todos, levanten la cabeza.
Ciertamente, es verdad que el líder de esa extraña torre me asustó, pero resulta incómodo que estén inclinando la cabeza de esa manera frente a mí.
¡Soy una persona respetuosa y me guío por los valores confucianos! ¡Honor a los mayores! ¡Tratemos a los ancianos con amabilidad! Aunque… por supuesto, el líder de la torre frente a mí lucía demasiado joven para ser considerado anciano.
—Si prometes que nunca más intentarás sugerirme eso, como lo hiciste ayer, olvidaré lo sucedido.
¡Ahg! Si bien es cierto que el anciano fue irrespetuoso conmigo ayer, según el mago guía, la mitad de la torre, que tenía una historia impresionante, desapareció de la noche a la mañana por mi culpa… ¡¡Por qué me siento culpable de eso por culpa de Claude!!
—Agradezco enormemente su misericordia princesa.
—¡Gracias!
—¡Mil gracias, princesa!
—¡Ahhhh!
Los magos, que temblaban detrás del líder y bajaban la cabeza hacia mí, exclamaron como si estuvieran verdaderamente conmovidos, y mi remordimiento se intensificó aún más.
¡Puaj! El líder de la torre puede parecer un total psicópata, pero el resto de los magos parecen personas ingenuas y amables… siento lástima por ellos.
Tan pronto como di mi aprobación, los magos que me habían estado observando con ojos tristes, como un grupo de ciervos lamentables, comenzaron a alejarse en fila.
…Entonces ¿por qué no te vas, líder psicópata?
A diferencia de los otros magos, noté que el líder de la torre actuaba como si nada hubiera pasado, mientras me observaba con una sonrisa afable y una mirada astuta.
—Je, je, je. Sin duda vivir como mago en el Palacio Imperial brinda experiencias bastante peculiares y todo gracias a la princesa. La torre, que es un tesoro nacional de Obelia, fue partida por la mitad. Trabajar duro para hacer un total de 500 piedras de visión… además de ser encerrado en un calabozo…
Mientras incómodamente lo escuchaba recordar con pesar sus recientes aventuras, le pregunté algo.
—¿Fuiste encarcelado en un calabozo por mi culpa?
¡De ninguna manera! ¿Podría ser que Claude puso a ese anciano en el calabozo? De alguna manera, ¡esto es embarazoso! ¡No es de extrañar que pareciera tan agotado! No, de hecho, parece ser el mismo de ayer…
—Ah, es posible que no lo sepa, ya que la princesa estaba inconsciente, pero en realidad, en el pasado, vine a verificar su condición en aquellas dos ocasiones en que su poder mágico causó problemas.
— ¿Ah, de verdad?
—Sí, bueno… Claro, no pude hacer mucho. Tengo un talento innato para percibir el maná a simple vista, pero no siempre es visible. Entonces, cuando la princesa cayó desmayada por primera vez, su Majestad se puso furioso, así que los aprendices de la torre en donde me encontraba yo, quedamos encerrados. Jejeje. Pero no pasé por mucho ya que en aquel entonces solo era un mago común y corriente.
¡Oh! ¡Oh! Lo recuerdo de manera vaga. En aquel momento, Claude le estaba gritando a un tipo que temblaba en el suelo, diciendo que lo mataría si no encontraba una forma de sanarme.
¿Pero acaso todos los aprendices fueron encarcelados? ¡Pensé que solo lo encerraron a él!
—He oído que mi maestro, que era el director en aquel entonces, pasó por muchas dificultades. No ha pasado mucho tiempo desde que asumí su cargo después de su muerte.
Me mantuve solemne ante el líder de la torre, quien me observaba con una expresión distante, como si extrañara a alguien del pasado.
Entonces, ¿acaso aquella persona en el suelo era el líder en aquel entonces? Mis recuerdos son vagos, pero en aquel instante frente a Claude dijo algo como ‘¡Soy su director! ¡Si yo no lo sé, nadie más lo sabrá!’ y esto por supuesto lo hizo enfurecer más.
Espera… Entonces ¿cuántos años tendría por aquel entonces? El anciano ante mí ahora también afirma tener alrededor de 60 años, pero aparenta tener unos 30. ¡Curiosamente, aquel mago lucía como un anciano en aquel entonces, ¿cuál era su edad real?! Vaya. ¡Claude, le diste un buen susto a un anciano!
—Sin embargo, no esperaba que mi Maestro viviera hasta los 100 años. Eh, podría haberme convertido en director diez años antes, pero él simplemente no moriría… Ups, por favor ignora lo que acabo de decir
Le miré con frialdad mientras continuaba hablando por sí mismo.