Villana mimada por el príncipe vecino – Capítulo 36: Té de Coral

Traducido por Sharon

Editado por Sakuya


Aishira fue invitada a la fiesta de té para escuchar su reporte sobre su visita a la Reina de las Hadas del Mar.

Delicioso té junto a los pasteles que Tiararose preparó, los esperaban en el cuarto.

La razón por la que Tiararose, Aquasteed y Aishira estaban aquí era para que pudieran hablar sobre las Hadas del Mar que robaban los dulces.

Los guardias de Aquasteed y Tiararose esperaban en la puerta, vigilando. Sin embargo, debido al tema de la fiesta, la atmósfera no era placentera.

Tiararose estaba impresionada por lo sombría que lucía Aishira, quien recibió una gran sorpresa cuando la Reina de las Hadas del Mar no la aceptó.

Ella era la persona más amada por las Hadas del Mar en el Reino. Había tenido confianza que podría llevarse bien con su Reina.

—La Reina es diferente. Aunque las Hadas estén encariñadas contigo, es difícil hacer que la Reina se sienta de la misma forma. No te sientas mal por ello. —dijo Aquasteed como si fuera normal.

—…Sí.

Aishira asintió débilmente.

—Princesa Aishira… Yo tampoco soy amada por las Hadas del Mar.

—Gracias, Tiararose.

Tiararose era amada por el Rey de las Hadas del Bosque y otros. No obstante, las Hadas del Mar la odiaban.

Y aunque eso la hacía sentirse algo triste, también pensaba que era arrogante querer que todas las Hadas la amasen.

Por supuesto, estaba en el juego otome que ella más amaba. No era como si no hubiera esperado ser querida por todas las personas. Pero al final, su amor más grande iba dirigido a Aquasteed.

No había ni una parte dentro de ella que pensara que necesitaba más.

—Me encontré con la Reina de las Hadas, y me echó. Nadé en el océano varias veces después de eso, pero…

Aishira apretó sus puños sobre su regazo.

Claramente era difícil para ella hablar, pero continuó lentamente.

—…Pero ya no puedo alcanzar el Palacio de la Reina Hada. No importa cuán profundo nade, el mar continúa para siempre.

Había lágrimas en los ojos de Aishira ahora. Tiararose le ofreció un pañuelo en silencio. Entendía que esto le preocupaba, pero esperaba que no se culpara demasiado por ello.

Aishira le agradeció y se limpió los ojos.

Finalmente, el resultado fue… que nada se resolvió.

A Tiararose no le importaba demasiado, ya que sólo significaba que el robo de dulces continuaría. Pero Aquasteed se sentía de forma diferente.

La comida de su amada esposa estaba siendo robada. Y quién sabría con qué continuaría. Tenía que eliminar cualquier incertidumbre.

—Respecto a ese asunto, tendré que-… ¿Grail?

Aishira fue incapaz de obtener información, así que él tendría que hacer algo. Esto era lo que Aquasteed estaba pensando cuando el aire en el cuarto cambió repentinamente.

Reconoció de inmediato a la persona que apareció y llamó su nombre.

—Hehe. Decidí visitarlos.

— ¡Grail!

La Reina de las Hadas del Cielo llegó de visita.

Justo cuando Tiararose llamaba feliz su nombre, otra voz sonó desde un lado. Sonaba bastante molesta.

— ¿Qué, entonces sólo vas a ignorarme?

— ¡Keith!

Grail, Reina de las Hadas del Cielo, y Keith, Rey de las Hadas del Bosque. Y ambos aparecieron en el mismo momento.

Tiararose alzó la voz sorprendida. Aishira se encogió un poco, abrumada ante la vista de dos personas tan importantes.

—Escuché que estuviste tomando el té con Grail recientemente. Es bueno verte, Tiara.

—Ha pasado tiempo. Estoy feliz de encontrarme con el Rey de las Hadas del Bosque cada-

—Por favor, olvida las formalidades. Bueno, es bueno ver que eres feliz.

Tiararose y Keith no se habían encontrado desde la boda.

Consideró agradecerle al Rey Hada, pero Keith odiaba esas formalidades.

Se sentó por su cuenta en una de las sillas y se sirvió algo de té.

Tiararose le hubiera servido té ella misma, pero era típico de él hacerlo por su cuenta. Ella se rio levemente.

Keith bebió de un trago y bajó la taza con fuerza.

—Qué malos modales. —le advirtió Grail, pero él no pareció preocuparse por ello.

—Más importante, ¿no tienes un regalo para ellos?

—Tú también eres un Rey Hada. ¿No podrías comportarte mejor? Oh, sí. Les traje algo de té de coral conmigo hoy.

El Rey y la Reina Hada hablaron sin preocuparse por sus alrededores.

Tiararose le pidió a Philiane que trajera un nuevo conjunto de tazas para ellos. Nunca había escuchado de un té como ese, ¿a qué sabría?

Miró con curiosidad el paquete que Grail sacó.

—Eres la gobernadora de las Hadas del Cielo, ¿pero les traes té de coral?

Aquasteed miró a Grail con sospecha.

Los Reyes Hada generalmente tenían una fuerte conexión con su bosque, cielo o mar. Los corales son del océano, así que eran parte del territorio de Pearl.

Parecía muy extraño que Grail, quien era la Reina de las Hadas del Cielo, trajera eso como regalo.

— ¡Exacto! Bueno, en realidad lo conseguí de Pearl. Pero es tan bueno que voy a compartirlo con ustedes.

Lo que sacó de su bolso fueron corales pequeños.

Entonces los puso en las tazas preparadas. Una vez que las llenaron con agua caliente, una esencia marina mezclada con flores dulces se extendió a su alrededor.

—Increíble. —exclamó Tiararose sin poder contenerse. Y Grail sonrió feliz.

— ¿Cierto? Es uno de mis favoritos. —sonrió Grail.

Moviéndose cerca de Tiararose, comenzó a explicarle qué tan delicioso era con leche.

Sin embargo, Aquasteed se paró de inmediato y evitó que se acercara.

Empujó a Tiararose cerca suyo y alejó a Grail con sus manos.

— ¡¿Aqua?!

—Tiara es mi esposa. No te acerques a ella.

—Hmph. Eres tan descorazonado, Aquasteed.

Él no tenía intenciones de ocultar sus instintos territoriales infantiles. El corazón de Tiararose comenzó a latir con fuerza. Usualmente él no era así de franco cuando estaban en público.

¿Realmente le molestó tanto que Grail y yo nos pusiéramos amistosas?

No podía imaginarse por qué. Y no se le ocurría ninguna respuesta. Inclinó la cabeza a un lado.

Aun así, no intentó removerse del fuerte abrazo de Aquasteed.

Estaba avergonzada, pero muy feliz.

—Realmente la adoras… Oh, me haces sentir celosa. —dijo Grail derrotada mientras se movía a una silla diferente y comenzaba a servirles a todos algo de té.

Aishira aceptó su taza humildemente, sus ojos abiertos con el asombro ante la forma de utilizar el coral. Después de todo, sus corales eran los mejores de todo el Reino, pero ella no tenía idea de que podían usarse para el té.

Consideró que si la Reina de las Hadas del Mar la quisiera, podría haber obtenido este conocimiento. Y su ánimo cayó aún más.

—Ahora, ahora Keith. Toma un asiento. Oh, por cierto, lamento haber interrumpido repentinamente, espero que no hayan estado ocupados.

Después de colocar la mesa, Grail miró a todos los presentes.

Usualmente, serían sólo Tiararose, Aquasteed y Grail quienes tendrían su fiesta de té. Viendo a una persona inesperada como Aishira le causó algo de sorpresa.

—Está bien. —dijo Aquasteed sacudiendo la cabeza, rindiéndose.

—Bueno, entonces, vamos a tomar el té jun-

Y entonces, escucharon algo de agua salpicar.

Todos se giraron confundidos, y vieron que dentro de la taza de té estaba el pequeño rostro de la Reina Hada, Pearl.

Los únicos presentes que la conocían eran Grail y Keith. Además de Aishira, que visitó su palacio.

Aishira había asumido que nunca volvería a verla, así que sus ojos se abrieron con sorpresa.

Grail sonrió feliz y sostuvo la taza donde apareció Pearl.

—Hehe. Me preguntaba si podría verte con este té de coral.

—…

Pero, ella sólo se vio molesta y se rehusó a decir una sola palabra.

—Umm, ¿Grail? ¿Quién es…?

—Ahh, todavía no la conoces, Tiararose. Esta es la Reina de las Hadas del Mar, Pearl.

— ¡!

La atmósfera se volvió extraña. Tiararose abrió la boca tímidamente.

Escuchando que esa persona era la Reina de las Hadas del Mar la hizo sentirse nerviosa.

Había pensado que nunca la conocería. Aquasteed parecía pensar de la misma forma, pero se puso de pie y le agradeció a Pearl.

Pero ella le ignoró y miró a Grail con agudeza.

—Oh, Pearl, ¿por qué estás tan enojada? Eso está mal, deberías responder sus saludos… —dijo Grail en un tono preocupado. Pearl finalmente abrió la boca.

— ¡No me darás órdenes! ¡Especialmente vestido de esa forma a pesar de ser hombre!

—Pearl…

Tiararose estaba tan sorprendida por la repentina revelación que dejó escapar un pequeño grito.

Pensar que la hermosa mujer con la que estuvo tomando el té era un hombre… No podía creerlo.

El Príncipe Aqua parecía celoso de Grail… ¿Quizás sabía que era un hombre?, consideró Tiararose.

Debía ser por eso que Aquasteed no quería que viera a Grail a solas. Seguramente no hubiera sido tan irrazonable si se hubiera tratado de una mujer.

Estos Reyes Hadas son personajes realmente interesantes.

Un atractivo pero pomposo hombre, un travestido hermoso, y una chica ruda parecida a una princesa. Así es como debería ser la secuela del otome.

Pensando de esta forma, esos personajes tenían mucho más sentido.

— ¡Grail, idiota!

— ¡!

Eso fue lo último que Pearl dijo antes de desaparecer dentro de la taza con un chapoteo.

Tiararose sólo pudo observar en silencio.

Finalmente, Grail rompió el silencio con una voz tranquila. Su tono era mucho más bajo de lo usual. Andrógina.

—Dijo que odiaba a los hombres, así que pensé que podríamos hacernos amigos si me vestía de esta forma.

13 respuestas a “Villana mimada por el príncipe vecino – Capítulo 36: Té de Coral”

  1. Ohhhhhhh raiox así q estaba transvestido 😮😮😮 ahora solo me pregunto si Aqua lo sabía o simplemente era su instinto q le advertía del “peligro” 🤔🤔🤔🤔 y obviamente Pearl está celosa de q Grail se acerque a alguien q no sea ella 😅😅
    Gracias por la droga 😆😆😆

  2. Colo es que no sospeche que era hombre?? Pensé que había leído mal y que el objetivo de captura no era el Rey Hada del cielo. Pero si resultó correcto… Además estaba Aqua todo celoso cada vez que Tiara estaba cerca.

  3. gracias al cielo ya me estaba volviendo loco porque recuerdo que la heroina dijo que uno de los objetivos de captura era el rey del cielo(por un segundo pense que el autor decidio cambiarlo)

    1. Cuando pensaba que el rey del cielo era chica tenía la teoría de que la reina de mar y ella eran amigas de la infancia y que el hada del mar se le daba mal compartir….ahora, me decanto por los celos de otra índole XD
      Por otra parte ahora le encuentro más sentido al comportamiento de Aqua, ya que me venía preocupando que estuviese tan sobreprotector… pero de igual forma debería confiar más en nuestra prota que se muere por sus huesos y ha demostrado poder estar rodeada de chicos guapos sin mayor problema… XD

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