—Si le sigue respaldando, la va a malcriar —dijo Arsenio.
—¿Cómo es que tienes el corazón tan frío? ¿No te han criado bien? —dijo Helena.
—¿Corazón frío? Solo dije… Seguí leyendo “Prometida peligrosa – Capítulo 71”
—Si le sigue respaldando, la va a malcriar —dijo Arsenio.
—¿Cómo es que tienes el corazón tan frío? ¿No te han criado bien? —dijo Helena.
—¿Corazón frío? Solo dije… Seguí leyendo “Prometida peligrosa – Capítulo 71”
Traducido por Maru
Editado por Yukirosaori
—¡No mientas! Si eso es cierto, ¿por qué no me lesioné en absoluto? Caímos al mismo lugar, pero ¿por qué fuiste el único que resultó herido? ¿La cascada de Benoit tiene ojos para distinguir personas?
—Es porque tengo mala suerte… Seguí leyendo “Prometida peligrosa – Capítulo 70”
—¡Madre!
Eckart respondió lentamente. Sintió que la brillante sonrisa de su madre le resultaba extraña.
—Démonos prisa ahora. El emperador está esperando. Seguí leyendo “Prometida peligrosa – Capítulo 69”
Traducido por Maru
Editado por YukiroSaori
Tosió por fin.
Marianne no podía soportar las náuseas, se levantó un poco. Su cabeza caía de lado a lado. Como no tuvo tiempo de taparse la boca con las manos, comenzó a toser como paciente asmática. Seguí leyendo “Prometida peligrosa – Capítulo 68”
Al igual que dos espadas que chocaban, sus palabras se apuñalaban entre sí. No podían permitirse el lujo de encubrir sus sentimientos y usar tonterías como lo hacían en los salones. Las dos acababan de salir del horror de la muerte y estaban muy perplejas por diferentes razones. Seguí leyendo “Prometida peligrosa – Capítulo 67”
En ese momento, un caballo que tiraba de un carruaje hizo un ruido extraño y se derrumbó. El resto de los caballos que iban con él se enredaron y cayeron. El carro que iba a la velocidad del viento perdió repentinamente el impulso.
—Oh, ¡no…!
Jason voló por los aires arrastrado con las riendas del caballo. El asiento del jinete se levantó y se rompió, e incluso el cuerpo del carro se salió de la pista y giró oblicuamente. Seguí leyendo “Prometida peligrosa – Capítulo 66”
Marianne se olvidó de todo por un momento y se concentró en comer. Ayer se saltó la cena, así que vació todos los platos llenos de comida uno por uno. Especialmente el dulce y suave pudín de leche. De repente pensó en un rostro familiar: Rane.
Quería que Rane probara este pudín. A ella le gustaban los postres dulces, seguro abriría los ojos y gritaría de admiración como lo hizo la última vez, charlando sin parar sobre la necesidad de encontrar un nuevo chef. Marianne se dejó llevar por la agradable recreación imaginaria tanto que incluso se echó a reír. Seguí leyendo “Prometida peligrosa – Capítulo 65”
El duque Kling miró por encima de la alfombra desordenada durante un rato, pero no dijo nada.
—¿Está bien, señor? ¿Se hizo daño?
—Oh… no, estoy bien. ¿No te lastimaste? Seguí leyendo “Prometida peligrosa – Capítulo 64”
¿Es porque era una rehén demasiado preciosa para rendirse o porque mordía cuando se ofendía? ¿O era porque no sintió la necesidad de molestarse y responder a este tipo de contacto físico menor?
Por supuesto que no. Él no quería que ella se disculpara por ese tipo de tonterías. No quería confirmar la sensación de distancia entre ellos. Tampoco quería que pidiera perdón cada vez que ponía las mejillas en sus hombros, le tomaba las manos y se apoyaba en sus brazos. Seguí leyendo “Prometida peligrosa – Capítulo 63”
Al final, Eckart anunció la decisión en voz baja. Incluso antes de que la marquesa lo refutara de nuevo, llamó al gran duque Christopher, quien se encontraba de pie a la distancia.
—Oye, déjame montar a caballo con Marianne. ¡Deja que veinte caballeros, incluido Curtis, me sigan y encárgate del resto de la procesión, Gran Duque Christopher!
—¡Sí, su majestad! Seguí leyendo “Prometida peligrosa – Capítulo 62”
—¿Cuál es tu nombre?
—Mi nombre es Barton —respondió, con las manos temblando violentamente.
—Ajá, Barton. Bueno. Saliste a este viaje para un evento feliz, por lo que el emperador te perdonará esta vez, pero no deberías cometer el mismo error. Seguí leyendo “Prometida peligrosa – Capítulo 61”
Traducido por Maru
Editado por Tanuki
Cerró los ojos con fuerza y se juró a sí misma como si tratara de borrar sus terribles recuerdos. Cubierto por sus párpados, no podía ver nada. Sin embargo, un día del invierno pasado estaba vivo en su memoria. El funeral de su padre. Ese día de nieve, se hundió en la desesperación mientras abrazaba el ataúd de su padre, que estaba tan frío como la nieve.
¡Cuánto se arrepintió después de detectar el astuto truco de Ober! Seguí leyendo “Prometida peligrosa – Capítulo 60”
Traducido por Maru
Editado por Tanuki
Marianne, que había estado al frente, miró hacia arriba cuando la llamó. Cayó por la mano que tocaba su collar de diamantes rojos.
—Va a ser un viaje bastante largo, así que no dudes en decirme cuando te sientas incómoda en cualquier momento. Nada es más importante que tu comodidad.
Traducido por Maru
Editado por Tanuki
De hecho, eso era lo que él quería de ella: buen juicio y coraje a costa del sacrificio, buena voluntad constante y determinación audaz, comportarse astutamente, conocer su lugar, como para mostrar las condiciones que mejorarían su utilidad.
¿Qué era más deseable en su relación basada en intereses políticos?
—Si esa es tu decisión, no te forzaré más. Seguí leyendo “Prometida peligrosa – Capítulo 58”
Traducido por Maru
Editado por Tanuki
Una criada se encogió de miedo, casi gateando por el suelo. Cuando la miraron, vieron una larga serpiente deslizándose lentamente sobre la hierba.
—¡Oh! ¡¿Qué es eso?! ¡Oh, Dios mío!
—¿No es una víbora? ¡Cógela ahora!
—¡Ahhh! ¡Es tan asqueroso! Seguí leyendo “Prometida peligrosa – Capítulo 57”