—Garantizo el compromiso de los dos con la bendición de los nueve dioses en nombre de la 35º Cardenal de Aslan, la Suma Sacerdotisa de Roshan, Helena.
Helena sonrió amorosamente y finalizó el servicio de compromiso. Coincidiendo con su declaración, el patrón grabado en la frente de Renato y sus ojos dorados, que brillaban como un espejo de los dioses, resplandecieron como joyas. Seguí leyendo “Prometida peligrosa – Capítulo 100”
Helena posó sus manos sobre las antiguas escrituras y se santiguó lentamente, tocando su frente y pecho. Eckart y Marianne se persignaron lentamente detrás de ella.
—Me gustaría bendecirles bajo la protección de los nueve dioses.
Al terminar Helena, dos sacerdotes que estaban arrodillados junto al pilar más cercano al altar se pusieron de pie. Bajaron la capucha de sus túnicas blancas y so Seguí leyendo “Prometida peligrosa – Capítulo 99”
Emilia se encontraba visiblemente impactada ante la intensidad tanto de la mirada como de la voz de Stephania. Su postura, reminiscente de un conejo acorralado, probablemente se debía al enérgico abordaje de Stephania. Sin embargo, dadas las circunstancias, Emilia ocupaba una posición social significativamente superior, minimizando cualquier motivo de preocupación real.
Retrocedí un paso, capturando instantáneamente la atención de ambas hacia mí. Ese simple gesto pareció bastar para que Emilia captara el mensaje. Seguí leyendo “Villana en un otome, ¿cómo acabaron las cosas así? – Capítulo 248: Concurso de acompañantes (2)”
Cedric se retiró después de tomar una taza de té con el emperador y fue al palacio de la marquesa Rosan según lo planeado.
El mayordomo quedó extremadamente sorprendido por la visita del Gran Duque Evron.
Y quedó aún más sorprendido al descubrir que la persona que había venido a visitar no era Lawrence ni Miraila, sino a Artisea. Seguí leyendo “La villana vive dos veces – Capítulo 13”
Ishakan escuchó en silencio y luego sacudió su tabaco, tirando las cenizas en la bandeja en la mesita de noche.
—Le mencioné ese tema recientemente —dijo en voz baja—. Tuvo una reacción intensa. Su pequeño cuerpo se estremeció de dolor, ni siquiera podía gritar…
Ishakan guardó silencio, abrazando a la princesa. Reprimió sus emociones, habló de nuevo, con voz tranquila y serena: Seguí leyendo “Matrimonio depredador – Capítulo 74: Divulgación”
Lo que Pollyanna no sabía era el hecho de que Lucius I le pidió al jardinero previamente que aprendiera el significado detrás de todas las flores en el invernadero. Pollyanna tampoco se dio cuenta de que, aunque parecía que el emperador estaba recogiendo las flores al azar, en realidad estaba seleccionando las flores que representaban lo que quería decirle. Seguí leyendo “El emperador y la mujer caballero – Capítulo 339”
Después de que Zhao Lingfeng se marchó, varias personas llamaron a la puerta de Zhou Yunsheng, pero él se mantuvo en silencio sosteniendo su arma. Eran curiosos comunes o espías de otras bases. Estos últimos querían contactarlo para persuadirlo de que les uniera y se fuera con ellos.
Para Lei Chuan y Guo Zerui, el doctor Bai era más que prescindible, pero para otros era un tesoro invaluable; la persona con más posibilidades de desarrollar una vacuna contra el virus zombi. Seguí leyendo “Pronto, utiliza el rostro del demonio – Arco 9: Capítulo 6 (1)”
Con una expresión demacrada, Lucas pensaba mientras se sentaba en el alféizar de la ventana, sonriendo al hombre frente a él.
Bien, muere de una vez, muere.
El hombre, que se había convertido en cenizas en la parte superior de la torre donde la luz de la mañana se había desvanecido, volvió a la vida sosteniendo a un recién nacido en brazos. Seguí leyendo “Un día me convertí en una princesa – Epílogo – Capítulo 17”
—La cabeza… duele… —Tang Feng respiró hondo, sintiendo que la presión de su pecho se liberaba por fin, pero sentía la cabeza como si la hubiera atropellado un tanque.
Con los ojos aún cerrados, se acurrucó en la cama, incómodo. Anoche, parecía haber bebido bastante con el director y el equipo por excitación. Recordaba vagamente a Xiao Yu y al pequeño demonio que le llevaban de vuelta, pero nada más allá de eso. Seguí leyendo “Una Verdadera Estrella – Volumen 3 – Capítulo 63: El final perfecto”
Eckart frunció el ceño y la miró.
—Marianne, nunca dije que no me gustara.
—Bueno, cuando me miraste así, pensé que no te gustaba. Me preguntaba por qué tú… —Agarrando su brazo, bajó las escaleras, pateando la parte delantera de su falda con sus zapatos, como si se quejara. Hizo pucheros con los ojos fuertemente cerrados. Seguí leyendo “Prometida peligrosa – Capítulo 98”
La señora Chester, que estaba arreglando las flores en la mesa, esbozó una sonrisa voluptuosa.
—El ramo también combinaría bien con su vestido…
Béatrice señaló la mesa con los ojos. El ramo era rústico y elegante, compuesto por nueve peonías mezcladas con ramas de jazmín blanco que simbolizaban a la diosa Astrid. Se utilizaron muchas hojas verdes y flores de colores claros para transmitir una sensación de frescura. Seguí leyendo “Prometida peligrosa – Capítulo 97”
La curiosidad humana sobre los pensamientos ajenos es insaciable, pero a menudo es mejor permanecer en la ignorancia.
Sentir el ardiente sol de verano sobre mi piel era insoportablemente incómodo. Sin embargo, debía preservar las apariencias y no permitir que otros percibieran mi malestar.
El primer día en la academia marcó el inicio de una nueva etapa. Las miradas curiosas y evaluadoras de los demás se clavaban en mí, tan punzantes como una corona de espinas, mientras cruzaba el umbral hacia la fiesta de bienvenida para los nuevos estudiantes. Seguí leyendo “Villana en un otome, ¿cómo acabaron las cosas así? – Capítulo 247: Un día cualquiera (2)”
—¿Veinte? —repetí, sin poder ocultar mi asombro.
—Sí, veinte —confirmó Shael con una sonrisa, como si no fuera gran cosa.
Por alguna razón, no pude evitar sentir una pizca de lástima.
No, en primer lugar, ¿cómo diablos lograste darle veinte pastillas sin que lo notara? ¿Y quién es esa criada que sobornaste? Seguí leyendo “Rehabilitando a la villana – Capítulo 22: La villana sonríe”
—¿Vas a preguntarle a Ishakan cuál es su signo zodiacal?
—No digas tonterías, Haban.
Haban se cubrió la boca con una mano ante la reprimenda de Morga, ocultando su sonrisa. Morga lo ignoró y se secó el sudor frío con el dorso de la mano. Normalmente lo habría atormentado con varios hechizos, pero en ese momento estaba demasiado tenso y preocupado por otra cosa. Con cuidado, recogió su largo cabello antes de entrar en el dormitorio del rey. Seguí leyendo “Matrimonio depredador – Capítulo 73: Devoción a Estia”