Apaga las Luces – Capítulo 15 (II)

Traducido por Shiro

Editado por Sakuya


Mason estaba sentado sobre su cama con semblante inexpresivo. Fuera de la ventana los pájaros cantaban. Era de mañana.

Con una expresión vacía miró su parte inferior, la cual no estaba húmeda sino empapada. Pasando una mano por su rostro, no se lograba decidir entre si odiar más al sueño o la realidad. Este ya era el segundo sueño húmedo que tenía con Noah.

—¿Por qué tiene que ser ese sujeto? —murmuró y pronto continuó—: Bueno, no es del todo descabellado.

La noche anterior, el comportamiento de Noah fue extremadamente lujurioso. Esto le hizo preguntarse qué había estado haciendo ese hombre durante estos últimos años, ya que, con sus besos y hábiles caricias, había conseguido que él, un tipo normal y heterosexual, temblara.

Ya es bastante deshonesto de mi parte imaginar ese hermoso rostro en la cama.

Mason, quien trató de excusarse con «no es mi culpa», pronto se encontró preguntándose:

Pero ¿por qué, Noah?

Cerró su boca y miró la parte inferior de su cuerpo. Había pensado que se despertaría de inmediato si llegara a eyacular durante un sueño húmedo, pero esto… esto realmente…

Durante un tiempo, Mason permaneció ensimismado, reflexionando acerca de los deseos humanos, el cuerpo y el alma. Aunque llegó un momento en el que ni siquiera sabía en qué estaba pensando. Se puso de pie con lentitud.

Ya no le quedaba tiempo de poner a remojar las sábanas en agua antes de que Tony llegara.

Hoy era el primer día de filmación de la película Real.

♦ ♦ ♦

—Lo siento. —Phil se disculpó mientras inclinaba la cabeza.

—Twitter, ¿cierto? Hoy en día usan eso —murmuró con suavidad mientras leía por encima un montón de periódicos matutinos junto con algunos artículos digitales que se encontraban sobre su escritorio.

Habían publicado un total de cinco fotografías, las cuales habían sido tomadas en sucesión. Las fotos eran de Haley tomando su mano y abriendo con urgencia la puerta de la habitación, luego empujándolo al interior, y por último, este último entrando y cerrando la puerta detrás de él. Incluso en una foto habían hecho un acercamiento de ambos, la cual iba acompañada de titulares reprobatorios y signos de exclamación:

¡HALEY LO HIZO DE NUEVO! 

¡HALEY LUSK DEBERÍA DISCULPARSE CON NOAH! 

 LA PEOR PERRA, ¿CÓMO SE ATREVIÓ? 

¡VERDADERAMENTE, INCONTROLABLE! ¿ABANDONARÁ LA PELÍCULA «REAL» DESPUÉS DE HABER PARTICIPADO EN LA CELEBRACIÓN EL DÍA ANTERIOR?

Noah rió por lo bajo al leer los provocativos titulares acerca de Haley. Se veía que se habían recatado un poco por temor a Noah, estando su vida privada también involucrada, pero no habían llegado al punto de ignorar una foto explícita en Twitter. Debido a esto, Haley se había convertido en el blanco de todos los artículos.

—Estoy algo decepcionado. ¿No pudiste bloquear ni siquiera esto?

—Me disculpo.

En lugar de excusarse, Phil inclinó su cabeza de forma más pronunciada mientras Noah se sentaba y golpeaba su dedo contra la superficie de la mesa.

—Bueno, esto podría ser beneficioso… —murmuró para sí, y Phil alzó la cabeza al escuchar que decía algo—. Hmm… ¿Cuál es nuestro horario de hoy? —preguntó, haciendo los periódicos a un lado y tomando la agenda que se encontraba bajo ellos. Su pregunta no estaba relacionada con los compromisos que tenían durante el día, siendo él mismo quien manejaba su horario de manera profesional, no estaba interesado en información, sino con la posibilidad de cancelar todo.

—No hay nada especialmente importante para el día de hoy.

—¿De verdad? Entonces cancela todo hasta hoy por la noche.

Phil había pensado que Noah solo cancelaría los compromisos de las siguientes dos horas, y aunque esto era inesperado, igual asintió.

—¿Adónde piensa ir?

Al escuchar su pregunta, Noah le dedicó una radiante sonrisa, indicando con esto que anticipaba su interrogante.

—¿A atrapar una mariposa?

—¿Perdón? ¿Qué dijo? —Phil pensó que había escuchado mal, por lo que repitió la pregunta.

—Es una metáfora. —Apoyó la agenda sobre la mesa—. Primero pienso traerlo a mi lado para poder hablar. Luego puedo confirmar mis sospechas con calma —dijo algo sin sentido y le dedicó una segunda deslumbrante sonrisa.

Phil, quien recién le había informado de la muerte de Mason el día anterior, se quedó mirando a Noah, quien, extrañamente, se veía mucho más animado.

Sospechoso…

Había pensado que hoy sus ánimos estarían por el suelo, como si fuera incapaz de continuar viviendo, y que su sonrisa no sería más que una sombra de la original. Sin embargo, contrario a sus expectativas, no lucía diferente de lo habitual.

No, a decir verdad, se ve mejor que de costumbre.

Noah, quien en ese momento volvió a dirigir su mirada a la foto de Haley, giró su silla y miró por la ventana.

—Oh, parece que hoy disfrutaremos de un buen clima. ¿Deberíamos poner un yate a flote?

♦ ♦ ♦

Mason dejó escapar un largo bostezo, y parpadeó varias veces mientras observaba la vía atascada en tráfico, Tony preguntó:

—¿Bebiste mucho ayer?

—Si tan solo hubiese consumido alcohol… —le contestó, rascándose la mejilla.

Si pudiera atribuir el comportamiento de ambos a la influencia del alcohol, no habría problema. No obstante, los dos estuvieron sobrios en todo momento, lo que hacía que lo ocurrido fuera más vergonzoso.

Aunque trataba de convencerse diciéndose: Puede ocurrir, somos humanos.

Sentía que de ver de nuevo el rostro de Noah le sería imposible no pensar en lo ocurrido la noche anterior.

—Podríamos no volver a vernos.

Bueno, al menos no tenían que preocuparse de encontrarse en un futuro cercano.

—¿Qué dijiste? —le preguntó Tony al escucharlo murmurar.

—Nada. —Sacudió la cabeza—. Ah, ¿no se nos hizo tarde? Escuché que la filmación comenzaba a las nueve de la mañana —comentó Mason mirando su reloj, el cual indicaba que faltaban ocho minutos para la hora pautada.

—Pienso que llegaremos unos minutos tarde… —respondió su agente, dirigiéndole una mirada al embotellamiento en el que se encontraban—. No sé si alguien llegue hoy a la hora. ¿No se emborracharon todos anoche? ¿Tan siquiera se despertó el director? —le preguntó, incrédulo.

Mason no pudo evitar preocuparse una vez lo escuchó.

¿Habrá llegado Vick a salvo a su casa anoche? Aunque no es una chica bonita, estará bien aun pasando una noche fuera.

Sin embargo, ayer lo había arrojado en el elevador y presionado un botón aleatorio, deshaciéndose de él, solo por rescatar a Noah.

—Oh, bueno, un inversionista es más importante que el director —murmuró Mason para sí, excusándose, y justo en ese momento, en sincronía perfecta, pitó su móvil. Era Vick, una de las pocas personas agendadas en el dispositivo que Tony le había comprado la semana pasada.

[¿En dónde estoy?] 8:53 AM

Mason tipeó una respuesta:

[¿Cómo puedo saberlo?] 8:53 AM

Pronto se escuchó el pitido del móvil, indicando que la respuesta había llegado.

[Ayer me abandonaste, ¿no es así?] 8:55 AM

[Pienso que estás soñando.] 8:56 AM

Ante la respuesta hipócrita de Mason, el otro lado permaneció en silencio durante un rato, pero al final otro mensaje llegó.

[Anoche soñé que me abofeteaste las mejillas

diciendo que no podía orinar ahí.] 9:05 AM

Mason mantuvo su boca cerrada por un breve momento mientras miraba el mensaje. Luego apagó la pantalla y guardó el dispositivo en su bolsillo. Más pitidos se escucharon desde donde ahora se encontraba resguardado el aparato, pero fingió no escucharlo.

—¿Qué ocurre? ¿Pasó algo?

—No, nada. Bueno, ocurrió algo que podría hacer que me despidan de la película.

No había manera de que lo despidieran solo por eso, pero como no estaba seguro, prefirió decirle a Tony.

—¿Qué? ¿Ocasionaste problemas? —Tembló.

—De verdad, no es nada. No le llamas «ocasionar problemas» a que haya arrojado al director a un elevador, ¿cierto? —le preguntó, murmurando más para sí mismo que para que otros lo escucharan—: ¿Cómo le llamarán a eso por acá? —Reflexionaba acerca de la vida de Hollywood, de la que nunca había estado al tanto.

—¿Arrojaste al director a un elevador? ¿A Vick? ¿Por qué harías algo así, Liz?

—Pues… estaba tratando de orinar en público —le respondió de manera breve.

—Uh… —Fue el comentario de Tony, y cerró la boca. La expresión de su rostro vívidamente decía: «¿En serio? Entonces no hay mucho que pudieras haber hecho». Pero al final dijo—: Aun así… —Chasqueó la lengua.

Alrededor de las nueve veinte, después de atravesar las vías cargadas de tráfico, finalmente alcanzaron a ver la entrada del set de filmación.

—Uh… ¿Por qué hay tantas personas? —Tony giró ligeramente el volante, su expresión facial diciendo: «Debe haber alguna clase de error». El grupo que clamaba de pie a la entrada del set de filmación fijaron sus miradas en ellos en ese momento, y de pronto, todas y cada una de las cámaras comenzaron a destellar con frenesí.

—¡Haley! ¡Haley!

—¡Dinos algo! ¿Haley? ¡Haley!

—¿En qué pensabas al hacer eso? ¿Estabas ebrio? ¿O consumiste cocaína?

La gente apuntaba las cámaras hacia sus rostros, todas destellando fuera de control, empujando los micrófonos en su dirección. Mason buscó a tientas un par de lentes de sol en la guantera del auto y se los puso. Pero, aun así, las luces seguían siendo demasiado brillantes, dejando rastros en sus ojos.

—Liz, Liz, ¿qué hiciste ayer? —preguntó Tony con voz trémula.

Mason frunció el ceño con levedad. Incluso si Hollywood era un lugar extraño, esto no parecía estar ocurriendo solo porque abandonó al director en un elevador.

Bueno, quizás orinar en público es algo que la gente aquí crítica. ¿Se me habrá ido la mano?

—¿Podemos llegar al interior del set? —inquirió Mason, apuntando a Chase y al resto del personal, quienes agitaban sus manos.

—Con lo determinados que lucen los reporteros, movernos un centímetro será imposible. —Su expresión era sombría—. Parece que cubrirán la noticia incluso si son arrollados por el auto.

Mason chasqueó la lengua. Justo en ese momento, su móvil repicó y él, quien iba a ignorar la llamada, vio a Gloria haciéndole señas y terminó contestando.

¿Haley? ¿Qué está pasando?

—Contesté tu llamada porque también me gustaría saberlo.

Oh, Dios mío. ¿Estás ahí sin saber nada? ¿Acaso tienes un móvil en el que no funciona el internet? ¡Rápido, revisa!

Mason colgó y comenzó a navegar en internet con su móvil. Cuando tipeó «Haley Lusk» en Google, surgieron una gran cantidad de artículos. Incluso habían subido fotos de él navegando en internet en ese preciso instante.

—Ahhh —susurró—. Esto es —dijo al ver la mayoría de los títulos y fotos.

—¿Q-Qué? ¿Qué es esto? —inquirió Tony, sorprendido, y Mason se rascó la mejilla—. Esta es una fotografía compuesta, ¿cierto? No me digas que arrastraste a Noah a la fuerza a una habitación de hotel.

—Ah… Pues… no es una fotografía compuesta —le contestó, intentando evadir su mirada.

—Dime que saliste inmediatamente después. Puede que eso de verdad haya ocurrido, pero seguro entraste porque algo sucedió y saliste inmediatamente después sin que nada ocurriera.

En lugar de contestarle, Mason se rascó la mejilla de nuevo. Debía admitir que las fotografías eran exquisitas. Si las mirabas, de verdad parecía que estuviera arrastrando a Noah a la fuerza y empujándolo al interior de la habitación.

Se imaginaba quién las había publicado en las redes sociales. Joy lo estuvo siguiendo toda la noche. Lo sabía, pero… Lo había recordado hasta cuando estaba escoltando a Vick a la habitación del hotel, pero luego vio a Aaron y no tuvo tiempo de pensar en nada más. Después, lo que ocurrió con Noah lo volvió aún más loco.

Aun así, no es como si se hubiese olvidado por completo del asunto. Pero honestamente, no pensó que estallaría a tal magnitud.

—Bueno, entramos a la habitación de un hotel, ¿por qué están haciendo tanto alboroto?

—¡El problema es que lo hiciste a la fuerza!

—¿Tienes idea de la fuerza con la que golpea ese hombre? —lo que quería decir con esto, es que pudo haberlo arrastrado a la fuerza, pero no lo violó ni le hizo nada.

—¿Noah te golpeó? ¿Qué rayos hiciste para que te golpeara? —le preguntó con ojos desorbitados—. Ese hombre es como un ángel, ¿qué hiciste que ameritara que te golpeara? —Tony temblaba, y Mason decidió cerrar su boca.

Sin embargo, la atmósfera que ahora los envolvía era demasiado seria.

Noah no es un joven virtuoso de veinte años. Y aunque pareciera que lo estuviera arrastrando a la fuerza, no llevaba en mis manos un arma ni un cuchillo. Además, quien fue atacado fui yo.

Mientras Mason reflexionaba acerca de esto y se frotaba el cuello aún palpitante, los flash de las cámaras repentinamente disminuyeron. Cuando se giró, vio al director, Vick, salir de un taxi luciendo resacoso frente al set de filmación.

El hombre, quien parecía estar a punto de salir corriendo en dirección a Mason para quejarse por haberlo abandonado, ahora se veía desconcertado al encontrarse con la multitud de reporteros. Entonces se acercó a Mason luciendo mortificado, finalmente creyendo que se había orinado la noche anterior, tras lo que los reporteros le abrieron paso, dejando un pequeño espacio para Tony.

Al ver esta oportunidad, pisó el acelerador para llegar al set de filmación, pero el auto no pudo llegar muy lejos antes de verse nuevamente rodeado y por ello tener que frenar. Los reporteros posiblemente pensaron que era mejor conseguir una declaración de Mason en lugar de Vick.

Mason suspiró y miró a su alrededor, y en ese momento, la única persona que podía hacer que esta gente se fuera, apareció.

Desde lejos, un Mercedes-Benz blanco SLR McLaren, avanzaba en su dirección.

—¡Es Noah! —gritó alguien entre los reporteros que bloqueaban la vía, los cuales de pronto retrocedieron como el reflujo de la marea.

Tony pensó que este era el momento y pisó el acelerador, cosa que hizo que el auto avanzara con una sacudida, pero tuvo que detenerse inmediatamente después al ver que era imposible no arrollar a los transeúntes. Ya casi eran las diez de la mañana.

—Si esto continúa, el sol se ocultará antes de que podamos llegar al set de filmación. —Mason suspiró, pensó con rapidez y salió del vehículo.

—¡Liz! —gritó Tony en pánico, pero el aludido cerró la puerta y gesticuló en su dirección con la mano, haciéndole saber que estaría bien.

Le parecía que era un poco injusto, pero no podía dejar de filmar simplemente por el problema que había ocasionado. Por supuesto, sentía pena por Noah, ya que desviaría la atención de todos esos reporteros diabólicos hacia él.

—Haley, ¿por qué diablos estás molestando a Noah?

—¡Haley! ¿Haley?

—¿Te das cuenta de que lo que hiciste mancilló a Noah?

Mason pensó en contestarle: «No fue tan grave como para mancillarlo», pero solo se rascó la mejilla y miró en dirección a los reporteros que rodeaban el auto de Noah.

La puerta se abrió y Phil, quien se apeó primero, mantuvo abierta la puerta trasera.

Mientras los destellos continuaban con frenesí, Noah permaneció sentado en el interior con una expresión indescifrable.

No, definitivamente se veía molesto.

Como permaneció sentado durante un largo rato, en un punto los flash comenzaron a disminuir, calmando ligeramente.

Justo en ese momento, Noah salió del auto, y como se quedó mirando fijamente a Mason, los reporteros le abrieron paso. Era como si el Mar Rojo se hubiese separado entre ambos.

—Sr. Raycarlton, ¿finalmente le dirá algo a Haley?

—¿Podría decir unas palabras acerca de lo que ocurrió ayer para saciar al público curioso?

—¿Cómo se siente? ¿No cree que quien publicó las fotografías fue Haley?

—¿Qué piensa decirle primero? Como era de esperar, ¿vino molesto por la situación?

Todos pensaban que Noah se enojaría con Haley o que lo avergonzaría públicamente. No importaba que solo hiciera comentarios pacíficos, los reporteros estaban preparados para convertir cualquier declaración en una escena provocativa, incluso si tenían que añadir palabras para conseguirlo.

Un artículo candente estaba por desarrollarse. Los reporteros estaban organizando la historia en sus cabezas, comenzando con: «Noah, quien apareció en el set de filmación, se veía molesto desde que arribó…». Y aunque lo plagaron con preguntas, Noah suspiró levemente y contestó:

—Lo siento. Este es un asunto personal. —Declinó todos los micrófonos que se acercaron en su dirección y caminó hacia Mason.

—Mmm —murmuró, perplejo, mirando al hombre parado frente a él.

Primero, debería disculparse, ya que la persona que tomó las fotografías y las publicó, fue su prima. Físicamente, seguía siendo su prima, y Haley no tenía fama alguna desde el inicio. Sin embargo, esto parecía haber afectado bastante a Noah. Además de que también había sido él quien lo había metido en una habitación en el hotel. Aunque la razón fuese para salvar su vida, tomó una decisión que no le correspondía, por lo que no había nadie a quien culpar.

De todos modos, ¿me sacarán de la película? No me arrepiento de mi trabajo como actor, pero perder 1.1 millones de dólares por algo como esto, sería demasiado lamentable.

—Uh… —Intentaba disculparse con Noah, quien seguía de pie frente a él, pero este sonrió de manera tan brillante que sus ojos se cerraron, luciendo como dos lunas crecientes.

—Haley —llamó su nombre con gentileza mientras tiraba de su mano—. Vine a recogerte.

—¿Eh? —Mason parpadeó varias veces al escuchar sus palabras. Como los presentes pensaron que se le estaba acercando para maldecirlo, guardaron silencio, lo que permitió que escucharan con claridad lo que le dijo.

¿Vino a buscarlo? ¿A Haley? ¿Piensa llevarlo a la corte o a la estación de policía? 

Todos parecían pensar lo mismo, Mason incluido.

En medio de todo el alboroto, Noah, quien seguía sonriendo, se giró hacia Vick, el cual había sido olvidado por la multitud.

—Parece que no será posible filmar hoy. Por lo que me lo puedo llevar, ¿cierto, Vick? —le preguntó, alzando la mano que había agarrado a Mason.

—¿Eh? ¿Ehh? ¿Por qué a Haley? —preguntó, desconcertado, después de observar toda la situación con detenimiento.

—El viento es agradable y puse mi yate a flote.

¿Y?

—¿Y? —Vick expresó los pensamientos de los presentes.

La expresión de Noah parecía preguntar: «¿Qué quieres decir con “y”? ¿Por qué preguntas lo obvio?». Sin embargo, su respuesta fue:

—Porque quiero almorzar con Haley en el yate. ¿Qué hay de ti, Haley? Quizás no te gustan los yates. También hice una reservación en un restaurante, pero con un clima tan agradable…

Me refiero a que: ¿Por qué quieres almorzar con Haley? ¿Por qué te esfuerzas? No solo un yate, también hiciste una reservación en un restaurante, ¿acaso buscas agradarle a Haley?

Todos le dirigieron miradas perplejas, como si en lugar de un hombre se tratara de un abominable problema matemático que nadie podía solventar.

Vick dejó escapar una risa incómoda y preguntó de nuevo:

—Comer en un yate… ¿Es eso como una… cita?

Noah rió.

—Qué cosas dices. —Todos se relajaron cuando lo escucharon decir eso. Pensaron que quizás se habían dejado llevar un poco al escucharlo hablar de yates y restaurantes con un tono tan dulce, pero Noah continuó—: Por supuesto que es una cita.

«No es “como una cita” sino “es una cita”».

Noah agarró con firmeza la mano de Mason y sonrió.

Una cita con Haley…

Los presentes necesitaban procesar la información que acababan de recibir. No obstante, la persona que menos comprendía la situación era Mason.

Noah entonces se giró en su dirección y le sonrió con tanta dulzura que parecía que rezumaría miel. Mason frunció el ceño con levedad, mirándolo a los ojos, encontrándose con una visión más deslumbrante que la de los flash de las cámaras.

—Parece estar todo resuelto. ¿Nos vamos?

¿Eh? ¿Qué está resuelto? ¿Adónde van?

Un sinfín de preguntas se multiplicaban en su interiores, pero nadie conseguía hablar.

Con Noah agarrándole la mano, Mason fue arrastrado al interior del Mercedes.

Incluso los reporteros profesionales y paparazzi que nunca olvidaban presionar los botones de sus cámaras, permanecieron congelados una vez ambos abandonaron el set de filmación.

4 respuestas a “Apaga las Luces – Capítulo 15 (II)”

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