Traducido por BeeMiracle
Editado por Ayanami
El día anterior a la administración oficial de la medicación, Lian Jun fue ingresado en la sala situada debajo del laboratorio por disposición del tío Long, y Shi Jin lo acompañó para que se quedara allí.
Al organizar la cama, Shi Jin se dio cuenta de que, desde que conoció a Lian Jun, había dormido en la misma cama varias veces para cuidar de él, pero ni una sola vez había cuidado de Lian Jun, sino al revés.
Era obvio que Lian Jun era el que estaba en peor estado de salud…
【Jinjin, esto es algo bueno, demuestra que después de conocerte, Darling fue bien cuidado por ti, ¡y no volvió a enfermar!】Xiao Si se apresuró a consolar, tratando de aliviar la tensión en el corazón de Shi Jin en la medida de lo posible.
Puso la manta doblada sobre la cama, volvió a mirar la cama hecha, se frotó la cara para animarse y dijo: —¡Ánimo!
Esperaba que esa fuera la primera y última vez que viera a Lian Jun tumbado en una cama de hospital.
♦ ♦ ♦
Esa noche, Shi Jin no durmió bien, mantuvo los ojos abiertos y miró a Lian Jun que dormía bajo la influencia de las drogas, su mente estaba hecha un desastre y demasiado confusa, por lo que no sabía lo que estaba pensando.
El reloj daba vueltas y vueltas, y el día poco a poco se volvía más brillante.
A las seis de la mañana, Lian Jun abrió los ojos, y Shi Jin cerró los suyos instintivamente, tapándose el rostro disimuladamente con la cobija, haciéndose el dormido.
Se escuchó el sonido de algo que se levantaba de la cama, y entonces Shi Jin sintió como una sombra caía sobre él, seguida de una caricia en su cabello y le retiraba la cobija de su rostro.
Shi Jin se obligó a no moverse y quedarse quieto.
—Dormí demasiado. —Un suspiro bajo de impotencia sonó de Lian Jun, luego su cabello fue acariciado de nuevo, antes de que el aroma familiar se fuera y los pasos sonaran y se desvanecieran.
Se escuchó un clic y el sonido de la puerta del baño al cerrarse.
Shi Jin abrió los ojos, miró la puerta del baño y la cama vacía del hospital.
Había querido ser más maduro y fuerte para acompañar a Lian Jun en su tratamiento, pero cuanto más llegaba a este punto, más tímido se volvía. ¿De qué tenía miedo? El tío Long y los demás lo habían preparado todo y también habían hecho hincapié en que este tratamiento no sería muy peligroso, además para tranquilizarlo, Li Jiuzheng incluso le había explicado todos los síntomas que podrían presentarse durante el tratamiento, para que estuviera mentalmente preparado, pero…
—¿De qué demonios tienes miedo? —Se golpeó la cabeza, odiándose en secreto por su indiscreción y, finalmente, incapaz de seguir acostado, simplemente se levantó de la cama y se metió en la cama de hospital de Lian Jun.
La cama del hospital todavía tenía el calor del cuerpo y el aroma de Lian Jun, mientras estaba tumbado en ella, se sentía como si estuviera abrazando a Lian Jun.
Para ser más maduro, no podía dejar que Lian Jun lo calmara otra vez… Enterró su cabeza en la manta con que Lian Jun se había cubierto, oliendo el aroma de Lian Jun, su cerebro se calmó lentamente después de estar despierto toda la noche, y se quedó dormido sin darse cuenta.
La puerta del baño se abrió con un clic.
Lian Jun se acercó a un lado de la cama del hospital, tocó el cabello de Shi Jin que quedaba al descubierto en la parte exterior de la manta, retiró suavemente la manta, miró las ojeras de Shi Jin, se inclinó hacia él y lo abrazó.
♦ ♦ ♦
Cuando se despertó con su corazón en calma, miró instintivamente alrededor de la sala y no vio a Lian Jun. Sin pensarlo dos veces, inmediatamente miró la barra de progreso de Lian Jun en su cabeza. Después de que el valor bajara a 200 en algún momento, se sorprendió y apresuró a salir de la cama.
En la puerta de la sala de aislamiento estéril, al final del pasillo, había un grupo de personas con el ceño fruncido mientras miraban por la ventana de observación.
Al ver esto, el corazón de Shi Jin se estremeció, rápidamente se acercó y tiró de Gua Dos, que estaba de pie en el extremo de la habitación, preguntando ansiosamente:
—¿Cómo está? ¿Tomó la medicina? ¿Cómo reaccionó? —Mientras preguntaba, sus ojos se volvieron hacia la sala, y luego casi se cayeron al suelo al ver la situación en el interior.
En el interior de la sala, Lian Jun, que se había puesto una bata de hospital, estaba tumbado en una cama especial, con la cabeza inclinada, obviamente inconsciente, el tío Long y Shao Jianping estaban de pie junto a la cama, diciendo algo mientras le administraban la medicación.
Li Jiuzheng también estaba en la sala, con un traje estéril y la cabeza baja mientras ajustaba varios instrumentos médicos. Rápidamente vio a Shi Jin de pie fuera de la multitud, con el rostro pálido y una mirada aterrada. Con el ceño fruncido, se acercó a la ventana e hizo un gesto hacia Shi Jin con las manos: —Está bien. —Luego levantó la mano para correr la cortina, bloqueando la vista de la multitud que miraba hacia adentro.
—No cierres… —Shi Jin no podía hablar, su mente era un completo desastre.
Gua Dos tiró de él y le dijo: —Cálmate, Jun Shao sólo está dormido, la droga acaba de ser inyectada, la situación de seguimiento necesita ser observada de cerca, no te asustes.
Respiró profundamente y trató de ajustar sus emociones, pero su corazón seguía latiendo rápido y dijo de forma confusa: —Lo sé, lo sé… su barra de progreso ha bajado*, es algo bueno, no debería haberme precipitado… está bien, definitivamente está bien…
Gua Dos le oyó empezar a decir tonterías, frunció el ceño y, con Gua Uno, cruzaron miradas, simplemente tomó a Shi Jin y volvió a la sala, lo mandó al baño, mojó una toalla y se la pegó directamente en la cara.
El agua fría estimuló su cerebro, se quedó mudo por un momento, levantó su propia mano y se quitó la toalla.
Gua Dos preguntó: —¿Mejor?
Asintiendo con la cabeza, Shi Jin agachó repentinamente la cabeza hacia el fregadero y desenroscó el grifo.
El agua fría cayó con fuerza, mojando su cabeza.
—Estúpido o tal vez no. —Gua Dos habló con disgusto, pero su mano se acercó y cogió un poco del agua fría y se la llevó a la cara.
Todos estaban igual, cómo no iban a entrar en pánico cuando Lian Jun, que había sido tan poderosamente protector con todos, estaba tumbado en la cama con los ojos muy cerrados y a merced de los demás.
Shi Jin por fin vió que tan terrible y problemáticas eran las neurotoxinas, tan rebuscadas que podían causar tantas enfermedades, que era casi completamente aleatorio los síntomas que experimentará el cuerpo y en qué momento, el más mínimo descuido puede dejar el cuerpo del paciente con enormes daños irreparables.
♦ ♦ ♦
El primer día de la medicación, Lian Jun lo pasó en coma, esa noche comenzó la batalla de las drogas y las toxinas, más tarde Shi Jin se despertó con el sonido de un grito de Xiao Si, horrorizado al comprobar que la barra de progreso de Lian Jun, que había bajado a 200, había subido de repente a 800.
Corrió casi tres pasos a la vez hasta la sala de aislamiento y la encontró sumida en el caos, con Lian Jun tumbado en su cama, azul y morado, en trance como si se hubiera convertido en un cadáver.
—¡Es una reacción hemolítica[1]! Prepárense para resucitar.
Las palabras que se escaparon del interior de la puerta de la sala al abrirse y cerrarse casi hicieron caer al suelo a Shi Jin, conmocionado. De repente recordó la muerte de sus padres adoptivos y sintió que su cuerpo empezaba a enfriarse poco a poco.
—¡Xiao Jin!
Un par de grandes manos le cubrieron de repente los ojos desde atrás, tras lo cual su cuerpo fue volteado y atrapado en un grueso pecho.
—No pienses, no mires, estará bien. —Fei Yujing apretó a Shi Jin contra su hombro y levantó una mano para taparle los oídos.
No podía ver las imágenes ni oír los sonidos, sólo el calor del cuerpo humano que lo calentaba a su alrededor. Shi Jin intentó respirar profundamente para obligarse a calmarse, pero descubrió que era inútil. Levantó la mano y agarró la ropa de Fei Yujing a toda prisa, golpeándose ligeramente su cabeza contra el hombro, intentando aprovechar el dolor para recuperar el sentido.
—¿Qué estás haciendo? —Fei Yujing le retorció la oreja, impidiéndole esta acción autoinfligida e hiriente, frunciendo el ceño y amonestando: —¡Cálmate, esta es una situación normal, ¿no has leído los informes de tratamiento? ¡Todo esto es normal!
Por supuesto, Shi Jin sabía que se trataba de situaciones normales y posibles, pero… respiró profundamente y se mordió la muñeca de repente.
El dolor lo inundó y, finalmente se calmó, apartando a Fei Yujing y volviéndose para mirar sin expresión a la sala, levantando la mano y presionándola contra el cristal de la ventana de observación, acariciando débilmente el rostro de Lian Jun a través de las siluetas de los médicos que iban y venían.
—Todo va a estar bien. —Susurró, con un tono firme, no estaba seguro de si se estaba tranquilizando a sí mismo o trataba de transmitir sus pensamientos a través del cristal a quien lo escuchara. —Todo va a salir bien, vamos.
Fei Yujing miró las marcas de los dientes que rezumaban sangre de su muñeca y frunció el ceño.
♦ ♦ ♦
La barra de progreso de Lian Jun bajó rápidamente una vez terminada la reanimación, permaneciendo en 300 sin moverse. Shi Jin se metió en el cuarto de baño durante un buen rato, salió y se acercó con mucha calma al tío Long para preguntarle por el estado actual de Lian Jun, luego tomó la iniciativa de saludar a la gente que había llegado por las noticias y se fue a descansar, él mismo volvió obedientemente a la habitación.
Todos miraron su repentina calma, sus ojos mostrando preocupación.
Después de eso, tuvieron dos días de paz y tranquilidad, con Lian Jun despierto, pero sin poder hablar, sólo mirándolo a través del cristal por un momento, sus ojos eran gentiles y tranquilizadores. Shi Jin le sonrió a Lian como si no pasara nada, lo saludó como un tonto contra el cristal y lo animó con la boca.
Aquel día, a la hora de la cena, Lian Jun repentinamente tuvo náuseas y vómitos, y se tumbó de lado en la cama del hospital frente a la bolsa de basura que había a un lado de la cama, sabiendo que no le quedaba nada en el estómago, pero sin poder evitar seguir vomitando.
Las náuseas y los vómitos eran una de las varias afecciones que el tío Long había mencionado de antemano, y era una relativamente leve e inofensiva, todos lo sabían, pero cuando lo vieron realmente en ese estado de angustia, no pudieron evitar poner una expresión de incomodidad y preocupación.
—Está bien, el tío Long le ha dado una medicina, estos síntomas desaparecerán pronto. —Shi Jin tranquilizó a todos a su vez, haciendo un gesto hacia Li Jiuzheng en la sala para que cerrara las cortinas, ocultando el miserable aspecto de Lian Jun en ese momento.
—Todos, vayan a descansar, tenemos que trabajar en los preparativos para la reunión de mañana, recuerden dormir temprano. —Le dio una palmadita en el hombro a Gua Dos e hizo un gesto para que todos se dispersaran.
—Pero… —Gua Dos intentó decir algo más, pero fue presionado por Gua Uno.
—Está bien, tenemos al tío Long aquí. —Gua Uno interrumpió a Gua Dos y miró a Shi Jin, preguntando: —¿Qué más tiene que decir el Shi Shao*?
Shi Jin se congeló por un momento al escuchar su nueva posición, luego reaccionó rápidamente, dirigiendo una mirada a Gua Tres, Gua Cinco y a los demás detrás de Gua Uno que tenían el ceño fruncido y permanecían en silencio, dijo: —Resuman el progreso de los preparativos de la reunión actual e informenme mañana con un resumen, eso es todo por ahora, dispersémonos todos.
—Sí, Shi Shao. —Gua Uno respondió, y le dio una palmadita a Gua Dos.
Gua Dos entendió el significado de Gua Uno y siguió su ejemplo, declarando Shi Shao al mismo tiempo, pero al final, no pudo contenerse e instruyó de nuevo: —Tú también debes descansar bien, no te preocupes demasiado.
Shi Jin sonrió y asintió, devolviendo: —Lo sé.
Gua Uno y los demás se marcharon, llevándose la primera orden dada por Shi Jin en su calidad de jefe adjunto. Shi Jin esperó a que se marcharan y se quedó paralizado un momento, luego se dio la vuelta y se sentó en el banco del exterior de la sala, levantando la mano para presionarse la frente. Dentro de la habitación, Lian Jun se recostó en la cama del hospital, miró las cortinas corridas de la sala y frunció el ceño mientras cerraba los ojos.
♦ ♦ ♦
Al día siguiente, Gua Uno envió un informe sobre el progreso de los preparativos para la reunión: los barcos para el viaje ya estaban en su sitio, se estaban entregando diversos suministros, uno tras otro, y se estaba reuniendo a los hombres, por lo que todo estaría definitivamente listo antes de la llegada de abril.
Shi Jin leyó detenidamente el informe, en seguida llamó a Zhang Zhuo Yang y le preguntó si ya se había fijado la fecha de la reunión de este año.
Era la primera vez que Shi Jin se ponía en contacto con los funcionarios en calidad de subjefe de Annihilation, Zhang Zhuo Yang se sintió un poco incómodo y lo despreció en privado. El año pasado, Shi Jin no era más que un pequeño lacayo que empujaba la silla de ruedas de Lian Jun, además con el estatus de Zhang Zhuo Yang, ni siquiera tenía que mirarlo, pero ahora, Shi Jin había aprovechado la enfermedad de Lian Jun para convertirse en el portavoz de Annihilation cual demonio, y todos debían tratarlo con respeto.
¿Qué demonios, si Lian Jun no tiene tiempo de hacer este tipo de cosas, por qué no dejar que Gua Uno lo haga? Este era solo un niñato que debería estar haciendo tareas obedientemente. No se merecía el puesto de subjefe.
Zhang Zhuo Yang pensó esto en su corazón, de modo que sus palabras fueron inevitablemente un poco pretenciosas y arrogantes.
Shi Jin no estaba de humor para jugar a la guerra psicológica con él, entonces cuando vio su actitud, colgó el teléfono.
Cuando Gua Uno vio esto, levantó las cejas y las comisuras de sus labios.
Unos minutos más tarde, Zhang Zuo Yang volvió a marcar al teléfono e inició la conversación con un largo discurso, Shi Jin volvió a colgar, sin darle un ápice de respeto.
Después de estas dos veces, Zhang Zhuo Yang, aunque fuera estúpido, comprendió que Shi Jin no quería que fuera demasiado “pretencioso”, y quiso ignorarlo, pero pensando en las instrucciones de Lian Jun, volvió a marcar.
—Fecha. —Shi Jin fue directo al punto.
Zhang Zhuo Yang se atragantó, se tragó las ganas de dar un sermón, aguantó la respiración y volvió a decir: —El Año Nuevo de este año ha terminado antes, por lo que se tiene la intención de que la reunión se celebre antes, la fecha concreta aún no se ha fijado, pero básicamente se ha concretado para principios de abril, su lado estará listo para zarpar a finales de marzo.
—Gracias por la información. —Shi Jin le agradeció cortésmente, después sus palabras cambiaron y dijo fríamente: —Director Zhang, no me pueden importar menos sus comentarios superficiales de hoy, pero hay algo que quiero recordarle, en caso de que algo realmente le suceda a Lian Jun, el próximo jefe de Annihilation sólo seré yo, si me trata así ahora, no me culpe por ser descortés después. Ni se le ocurra tratarme como un joven e intentar que cumpla sus órdenes, no soy tan “educado” como Lian Jun.
Zhang Zhuo Yang estaba tan sorprendido que las palabras… ¿Qué has hecho con Lian Jun? —Casi salieron de su boca, y dijo con rigidez: —Señor Shi, es usted demasiado bueno bromeando, el Señor Lian sabe que usted…
Shi Jin volvió a colgar el teléfono, decidido a hacérselo pasar mal hoy. Este tipo de vejestorio en el poder es el más molesto, si no lo pone en su lugar en el primer encuentro, en el futuro, aunque coopere, se estima que no obtendrá la máxima ayuda y honestidad de la otra parte.
—Hay que ver la clase de bastardos a los que hay que tratar con clase. —Murmuró con el ceño fruncido, cuando vio que Gua Uno lo miraba, su expresión se congeló y, en silencio, volvió a recoger sus emociones y dijo con una expresión seria: —Prepárate para zarpar a finales de marzo, la reunión empezará un poco antes este año.
Gua Uno reprimió su risa y respondió afirmativamente.
Una vez resuelto el asunto de la fecha de la reunión, Shi Jin reflexionó en silencio sobre su falta de estabilidad, luego miró la montaña de documentos que tenía sobre su mesa, se recompuso y estiró la mano para tomar uno.
Aunque Lian Jun había dispuesto de antemano que Gua Uno y los demás se repartieran el trabajo, tenían otras cosas que hacer y él, como único “hombre libre”, tenía que hacer lo que pudiera.
Media hora más tarde, estaba atascado en un documento acerca de una decisión que estaba claramente más allá de sus conocimientos, y quería pedirle su opinión a Lian Jun. Shi Jin se congeló por un momento.
Pensando en su incomodidad actual, suprimió en silencio su impulso, dudó, y optó por hacer una llamada telefónica a Weichong, diciendo avergonzado después de que la llamada se conectó: —Hermano mayor, tengo algo que preguntarte. En cuanto a la integración de los negocios fuera de la Ciudad A, yo…
Shi Weicong, que estaba muy lejos, al otro lado del mundo, se quedó atónito. Con el teléfono en la mano, tardó más de diez segundos en darse cuenta de que Shi Jin le había llamado y seguía pidiéndole ayuda. Cuando recuperó el sentido común, se levantó de la silla casi sin fuerzas y dijo mientras se dirigía a su estudio:
—¿Se trata del comercio exterior? Esto está específicamente explicado en las notas que te di… espera, voy a buscar un bolígrafo y un papel, tómate tu tiempo, estoy libre todo el día, puedes hacer cualquier pregunta que tengas.
Ese día, Shi Jin se dedicó a aprobar documentos – pedir consejo a Shi Weichong – aprobar el siguiente documento – seguir pidiendo consejo a Shi Weichong -. Ambos eran completamente inconscientes de que era la primera vez que se comunicaban desde hacía mucho tiempo sin ninguna emoción negativa desde el accidente de Xu Jie, no, desde la muerte de Shi Xingrui.
Tras un ajetreado día de trabajo, Shi Jin cenó en compañía de Fei Yujing, luego fue al edificio del laboratorio, se puso un traje estéril con la ayuda de Li Jiuzheng y entró en la sala de aislamiento para visitar a Lian Jun.
Lian Jun estaba despierto y se apoyaba en la cama del hospital viendo las noticias en la televisión. En realidad, prefería ocuparse de su trabajo, pero el tío Long no se lo permitía, ni siquiera podía tocar sus libros. Cuando vio llegar a Shi Jin, apagó el televisor, extendió la mano hacia él y le preguntó: —¿Has cenado?
Shi Jin asintió, sin darle la mano, y se inclinó hacia él para abrazarlo.
Lian Jun se quedó paralizado un momento, luego le devolvió el abrazo con suavidad y le preguntó: —¿Te asustaste el otro día?*
Shi Jin negó con la cabeza y lo abrazó en silencio durante un rato, hasta que estuvo seguro de que todas las emociones de su corazón, como las de echar de menos y preocuparse, se habían calmado, entonces se sentó y le devolvió la sonrisa: —No, sólo te echaba de menos, por cierto, hoy me puse en contacto con Zhang Zhuo Yang y le pedí la fecha de la reunión, e incluso te ayudé con la mitad del papeleo.
—Muy impresionante, ¿Zhang Zhuo Yang te hizo pasar un mal rato? ¿Qué pasa con los documentos, hay algo que no entiendas? —Preguntó Lian Jun junto a él, con el rostro sonriente, pero sin mucha felicidad en sus ojos.
—Zhang Zhuo Yang es fácil de tratar, pero hay algo que no entiendo de los documentos, he escrito lo que no entiendo, puedes enseñarme. —Shi Jin sacó un pequeño cuaderno y un bolígrafo, como si quisiera pedirle consejo a su maestro.
Lian Jun lo miró mientras intentaba poner su aspecto habitual, bajó los ojos y tomó su mano, la apretó suavemente y respondió: —Bien.
Los dos hablaron de su trabajo durante más de una hora, y el ambiente era bastante relajado. Shi Jin se contuvo y recogió sus cosas antes de las nueve, listo para partir.
—Intentaré recuperarme antes para estar contigo. —Lian Jun no pudo evitar llamar a Shi Jin antes de marcharse, prometiendo suavemente.
Los pasos de Shi Jin al irse se detuvieron y se volvió para darle otro abrazo.
♦ ♦ ♦
El tiempo pasó desapercibido, pasó febrero, llegó marzo, Lian Jun no consiguió salir del pabellón de aislamiento antes como lo había prometido, los síntomas que aparecían en su cuerpo se hacían cada vez más graves, las náuseas y los vómitos se hacían cada vez más frecuentes, a menudo no podía comer ni un bocado al día, y su cuerpo se debilitaba cada día más.
Todos los días, Shi Jin iba a hacerle compañía, a tratar de ayudarlo a relajar su mente e intentar que comiera de cualquier forma posible. En el proceso, Shi Jin se fue estabilizando poco a poco, dando órdenes a Gua Uno y a los demás de forma menos casual y más natural, aprobando cada vez mejor los documentos, además su relación con Shi Weichong quedó fijada.
Todos vieron los cambios en él y suspiraron en sus corazones: cuando las cosas se ponían difíciles, Shi Jin era realmente quien crecía más rápido, pero por desgracia, este tipo de crecimiento era, probablemente, lo último que Lian Jun quería ver.
A principios de marzo, Fei Yujing voló fuera de la isla para trabajar en los últimos retoques relativos a las empresas de la sección de energía; a mediados de marzo, llegó el cumpleaños de Lian Jun y Shi Jin le hizo un regalo de cumpleaños mientras estaba en un coma constante; a finales de marzo, Li Jiuzheng se quitó su bata blanca de laboratorio y empezó a preparar la conferencia a la que acudiría junto con Shi Jin.
♦ ♦ ♦
El día del viaje, Shi Jin fue solo a la sala de Lian Jun.
Había pasado más de un mes, y Lian Jun ya había experimentado todos los síntomas que pueden causar las neurotoxinas. Su cuerpo, que se había mantenido bastante bien, había empeorado aún más que cuando se conocieron.
Los ojos de Shi Jin estaban un poco apagados, y su corazón estaba hueco por el dolor. No es de extrañar que el tío Long hubiera instado a Lian Jun a restaurar su cuerpo lo suficiente, antes de comenzar el tratamiento, si no se hubiera recuperado de antemano, Lian Jun podría no haber sido capaz de sobrevivir a esta aparentemente interminable tortura de toxinas desde hace mucho tiempo.
Cuándo mejorará, ¿realmente tardará tres meses, seis meses o incluso más?…
—El periodo más activo de la toxina se ha superado. —El tío Long apareció detrás de él en algún momento y le dijo de forma tranquilizadora: —No lo veas así, de hecho esta es una situación relativamente buena, no puede evitar adelgazar, las náuseas, los vómitos y la pérdida de apetito causados por las toxinas son de larga duración, estos necesitan estabilizarse lentamente después de que el período activo de las toxinas haya pasado. También está el tema de la incapacidad de mover las piernas, esto tampoco es algo para preocuparse, sin que las toxinas lo afecten, se recuperará muy rápidamente.
—Lo sé. —Shi Jin volvió a mirar al tío Long y le preguntó: —¿Puedo entrar a verlo? Sólo por un momento, sé que está débil ahora, pero…
—Entra, sólo desinféctate bien, no puede permitirse enfermar de nuevo. —El tío Long le contestó, dándole una palmadita en el hombro: —Para cuando regreses de la reunión, quizás pueda levantarse de la cama, así que no te preocupes demasiado.
Shi Jin miró la barra de progreso de Lian Jun en su cabeza que había subido a 500 y dio una respuesta baja.
Tras cambiarse de ropa y esterilizarla, Shi Jin entró en la sala y se sentó junto a la cama.
Lian Jun estaba tumbado de espaldas con la cara hacia arriba, tenía una vía intravenosa en el brazo y se había quitado la mascarilla de oxígeno, por fin parecía menos un enfermo grave. Shi Jin miró el rostro de Lian Jun, bajó la mirada y tomó su mano en la cama, sacó un anillo de su bolsillo y lo puso suavemente en el dedo anular de Lian Jun.
El anillo era un poco grande, Shi Jin tocó el dedo de Lian Jun, frunciendo los labios.
Este anillo fue preparado en secreto por el contacto de Gua Dos hace mucho tiempo. El anillo tenía la misma forma que el anillo de compromiso que le había regalado Lian Jun, pero estaba engarzado con diamantes azules, que tenían un aspecto elegante y lujoso, a juego con el temperamento de Lian Jun.
Había planeado sorprenderlo con el anillo en su cumpleaños, pero para su sorpresa, Lian Jun experimentó una recaída ese día y cayó en coma después de que se le administrara el medicamento. Aunque después le puso el anillo a Lian Jun, siempre sintió que le faltaba algo.
—Tendrás que engordar rápidamente, —dijo, en voz baja. —No lo pierdas de nuevo esta vez.
El anillo estaba hecho a la medida del dedo de Lian Jun antes de ser tratado, y era un poco demasiado grande para llevarlo ahora. El día después del cumpleaños de Lian Jun, cuando fue a verlo, se encontró con que el anillo que le había puesto el día anterior había rodado de alguna manera hasta el suelo. Cuando lo vio, recogió el anillo enseguida y lo volvió a guardar en su bolsillo, pensando si debía ir a ajustarlo de nuevo.
Pero ahora, no quería hacerlo.
—Si no puedes engordar lo suficiente para entrar en este anillo, entonces hemos terminado. —Dijo, quitándole el anillo de nuevo, buscando a tientas un fino hilo rojo y envolviéndolo con cuidado. —Esto servirá por ahora.
Una y otra vez, la luz del diamante fue oscurecida por el hilo rojo hasta que desapareció por completo.
Envolvió cuidadosamente el hilo rojo con fuerza, deshaciéndose del exceso, y luego tomó la mano de Lian Jun y le colocó el anillo con cuidado.
—En realidad, está bien. —Tocó la mano de Lian Jun y entrelazó sus dedos con los suyos: —Recupérate pronto, dijiste que vendrías a recogerme cuando terminara la reunión, no faltes a tu palabra.
[1]Una reacción transfusional hemolítica es un problema grave que ocurre después de una transfusión de sangre. La reacción se presenta cuando el sistema inmunitario de la persona destruye los glóbulos rojos que se recibieron durante la transfusión.
Estos últimos capítulos me tienen muy sentimental, lloro a cada rato🤧🤧, pobrecito jun shao 😭💖 tu puedes!
Shi jin demuestra quien manda en esa reunion!! 🤧💖💖
Nooooo ! Por qué siempre acaba en lo más interesante !! Maldición t.t
PD: ay dios cuánto sufrimiento en este cap t.t
PD2: muchas gracias por los capítulos !! 😀