Barra de Progreso de la Muerte – Capítulo 41: Perro faldero

Traducido por BeeMiracle

Editado por Ayanami


Después de cambiarse de ropa, Shi Jin empujó a Lian Jun al comedor más cercano a su villa.

Es grande, con áreas interiores y exteriores, y se encuentra decorado al estilo de la isla. Había un ramo de flores frescas en cada mesa. Sombrillas simples pero hermosas sombrean las mesas al aire libre. Todo era agradable a la vista.

La gente en uniformes de camareros se movía de un lado a otro. Se detuvieron cuando vieron a Lian Jun y lo saludaron, uno tras otro, con una disciplina bien practicada.

Lian Jun les indicó que lo ignoraran. Regresaron a sus deberes, charlando y riendo juntos en un ambiente relajado.

Shi Jin los miró con curiosidad, un poco sorprendido. Si no fuera por los movimientos entrenados de estos camareros, él pensaría que este es un restaurante ordinario en una isla turística, y no el comedor de una organización del inframundo.

Lian Jun señaló una mesa al aire libre, indicando a Shi Jin que lo empujara allí. Se acomodó en la mesa y recogió un menú. Se lo entregó al adolescente, diciendo: —El pastel de frutas aquí es bueno, ¿te gustaría probarlo?

Shi Jin dejó de estudiar patrones en la sombra sobre su cabeza y observó la larga lista de platos en el menú. Preguntó, sorprendido:

—¿Cuántos chefs contrataste?

—Ninguno, todos los chefs aquí son nuestra propia gente —respondió Lian Jun, pidiendo que se enviaran dos vasos de jugo.

Shi Jin estaba incrédulo. —¿Tenemos un departamento de chefs?

Lian Jun, satisfecho con el uso de Shi Jin de “nosotros”, se reclinó en su silla de ruedas y respondió:

—No, no existe tal cosa: establecimos todo tipo de escuelas e instituciones de capacitación y las administran ellos mismos. Tarde o temprano, mi gente estará libre de esta vida manchada de sangre. Por lo tanto, quiero que puedan mantenerse en el mundo ordinario.

Esta fue la primera vez que Shi Jin escuchó a Lian Jun hablar sobre los asuntos internos de Annihilation. En el pasado, simplemente, entrenaba y hacía tareas sin saber de qué se trataban. No se atrevió a hacer demasiadas preguntas ni a buscar información, temeroso de que no se tomara bien. Ahora que Lian Jun tomó la iniciativa de plantear el tema, Shi Jin no pudo evitar preguntar:

—Jun-shao, ¿estás planeando transformar toda Annihilation?

Lian Jun asintió y empujó uno de los vasos traídos por un camarero frente a Shi Jin. Una vez que se dio cuenta de que el joven no iba a elegir la comida para sí mismo, ordenó un pastel de frutas y gachas de mariscos del comedor, junto con algunos refrigerios ligeros adecuados para el desayuno. El camarero se fue y él respondió:

—Mi gente me siguió al infierno y más allá. Quiero dejar las sombras y, naturalmente, voy a llevar a todos conmigo. La gente del inframundo no abandona a sus hermanos.

Esas fueron las palabras más clandestinas de estilo jefe que Shi Jin escuchó decir a Lian Jun. En ese instante, obtuvo una nueva comprensión de él.

Annihilation es la organización más grande del inframundo en China. Tiene un poder considerable en países de todo el mundo, y el valor de sus conexiones es casi astronómico. Era aterrador incluso imaginar asumir la responsabilidad de todas estas personas y su futuro.

Aunque Lian Jun es joven y tiene mala salud, tiene todas las características de un gran líder.

Shi Jin tomó un sorbo de jugo. Miró a Lian Jun con los ojos llenos de admiración y continuó:

—¿Cuántas de estas escuelas tenemos? ¿Para apoyar a tanta gente se necesita muchos trabajos, por lo que no solo tendrías que deshacerte de tu identidad como jefe del inframundo sino también convertirte en una clase de CEO de una empresa internacional?

Esta pregunta podría tomarse como un sondeo de la situación actual de Annihilation y el progreso de su transformación. Lian Jun sabía que Shi Jin, simplemente, tenía curiosidad y respondió directamente:

—Hay muchos centros, y otros más continúan abriéndose. Nuestra red de negocios también se está extendiendo gradualmente. Sin embargo, esas no son cosas que necesitas saber. Como estas a mi lado, no solo es el lugar más peligroso, sino que también existe la posibilidad de que te capturen. Los detalles son altamente confidenciales. De modo que, para evitar fugas de información no debes preguntar al respecto, especialmente aquí.

Shi Jin recogió las rodajas de fruta que decoraban el vaso de jugo y las masticó. Recordó los documentos interminables que Lian Jun tenía que aprobar personalmente, y cómo Gua Uno y los demás rara vez mencionaban los asuntos internos de Annihilation. Asintiendo en comprensión, dijo:

—La compartimentación de la información, entiendo. De ese modo incluso si hay un traidor o un espía, solo pueden obtener una cantidad limitada de información.

Esto era lo que más apreciaba Lian Jun sobre Shi Jin: aunque el joven podía ser temperamental, actuaba de manera adecuada en lo que respecta a sus obligaciones y asuntos críticos. Era sensato, sabía hasta dónde podía llegar, no hacía preguntas que no debía ni se preguntaba sobre cosas de las que no tenía nada que preguntarse. Podía ver la imagen más grande y tenía la piel lo suficientemente gruesa para ello.

Esa persona era una excelente elección como subordinado, como amigo, y como…

—¿Jun-shao? ¿Jun-shao? Nuestro desayuno está aquí. Come rápido o se enfriará.

Una mano se agitó ante sus ojos y despertó a Lian Jun de sus reflexiones. En realidad, se relajó lo suficiente como para estar distraído frente a Shi Jin. Se congeló por un segundo, aturdido, luego, le dio al adolescente una mirada profunda. Se sentó, tomó una cuchara y agitó las gachas de mariscos que Shi Jin empujó. Después de un rato, dijo abruptamente:

—Shi Jin, creo que hay algunas cosas que tienes derecho a saber, a elegir. La transformación consta de dos partes. Una es la transformación de los ingresos y las estructuras empresariales. Esto no es difícil de llevar a cabo, es solo cuestión de tiempo: el gobierno nos apoya lo suficiente como para no mirar demasiado de cerca muchas cosas, y tenemos mucho capital. Lo que es realmente difícil es la otra parte.

Shi Jin preguntó, con la boca llena de pastel de frutas.

—¿Cúal es?

Lian Jun se encontró divertido con el joven tratando de parecer solemne mientras se atiborraba de fruta. Su tono de voz grave, hace solo un momento, se relajó.

—Es cambiar nuestra “identidad”. ¿Cómo describirías la Annihilation?

Shi Jin se tragó su bocado de tarta de frutas y frunció el ceño.

—¿La organización criminal más grande del país? Aunque, también coopera con el gobierno… ¿me equivoco?

—Más o menos. —Lian Jun volvió a revolver sus gachas de mariscos. —Pero la historia nos enseñó que, si la sociedad quiere desarrollarse constantemente, las organizaciones prósperas del inframundo, incluso legitimadas, no son libres. Somos una existencia destinada a ser eliminada; necesitamos luchar por la supervivencia con todas nuestras fuerzas si no queremos perecer. La segunda parte de la transformación es cambiar la “percepción” de las personas. Lo que queremos es que la organización llamada Annihilation ya no exista en la mente de los funcionarios del gobierno y el público. Solo entonces, estaremos verdaderamente seguros y la transformación se considerará exitosa.

Al comprender el significado subyacente, Shi Jin dijo:

—¿El gobierno planea deshacerse de las organizaciones legales del inframundo?

Lian Jun miró sus ojos bien abiertos y, por alguna razón inexplicable, las cosas que solía sentir pesadas parecían ligeras en este momento. El asintió.

—Ya comenzaron: Black Rose fue la primera. Hace unos años, Annihilation y Black Rose tenían la misma fuerza y ​​estatus: también éramos una de las grandes organizaciones que el gobierno temía. Afortunadamente para nosotros, acumulamos mucho capital, teníamos respaldo del gobierno y nuestro poder era estable. Como tal, el enfoque que adoptaron fue “amnistía y alistamiento” en lugar de “exterminio”.

El corazón de Shi Jin se hundió cuando escuchó sus palabras.

Entonces, la situación actual era que la Annihilation se convirtió en un cuchillo en manos de los funcionarios, en una campaña para deshacerse de otras organizaciones del inframundo. Como recompensa para Annihilation “entendieron en qué dirección sopla el viento”, el gobierno comenzó a ayudar con entusiasmo a cambiar la forma en que ganaba dinero, es decir, a ayudar a lavar las manchas de los negocios criminales.

Pero si ese fuera el caso, entonces Annihilation era un traidor y renegado del inframundo, y un objetivo para todas las demás organizaciones, y eso ni siquiera era lo más peligroso. Después de que todo hubiera terminado y el polvo se hubiera asentado, ¿cuál sería el final para Annihilation? La última organización criminal legal que podría amenazar al gobierno y conocer sus acciones encubiertas.

Digamos que la mayoría de los miembros y negocios negros sean desmantelados, ¿se les permitiría vivir a Lian Jun, Gua Uno y los otros miembros principales?

La respuesta era obvia: “Una vez que todas las aves mueren, los arcos se hacen a un lado. Una vez que los conejos son atrapados, los sabuesos también se comen”.

La transformación de la Annihilation no era una transformación ordinaria, sino un cambio interno y externo completo. Para algunas personas, no había una ruta de retirada, y el camino por delante no era necesariamente brillante.

La tarta de frutas ya no era sabrosa, el jugo no era dulce e incluso la brisa marina se volvió irritante. Un profundo surco apareció entre las cejas de Shi Jin. Él dijo:

—Jun-shao, históricamente, ¿conoces el resultado más común para las bandas de bandidos reclutados por la corte imperial en tiempos de necesidad? Una vez que ha pasado la emergencia, los miembros ordinarios o de poco valor para la organización pueden ser perdonados y se les puede permitir regresar a sus aldeas para arar los campos y vivir sus vidas, pero los líderes de los bandidos, generalmente, son decapitados. Es solo que algunos de ellos caen temprano y otros tarde. ¿Te ha pasado por la cabeza esa idea?

La dirección de los pensamientos de Shi Jin sorprendió a Lian Jun: al adolescente no le importó que, desafortunadamente, abordó un barco pirata, sino que se preocupó por la seguridad del “líder de los bandidos”. Su mirada se enterneció. Tomó una pajita y tocó el ceño de Shi Jin, respondiendo:

—Sí. ¿Y no recuerdas que no solo los líderes no tendrán un buen final, sino también sus compañeros? Hace un momento te dije que tienes derecho a elegir. Bueno, esta es tu última oportunidad: ¿preferirías ser un ciudadano recto o el seguidor de un jefe de bandidos que, probablemente, sea ejecutado?

Ahora que Lian Jun se sentía lo suficientemente relajado como para bromear con él, Shi Jin agarró la pajita que lo empujaba y la metió en su vaso. Frunciendo el ceño, drenó la mayor parte del jugo de un solo trago, y luego dijo ferozmente:

—Mi jefe es inteligente, ya debe haber pensado en una salida. Si puedo ser su perro faldero, ¡seré feliz! ¡Al menos, siguiéndote, puedo comer deliciosa comida picante!

Los labios de Lian Jun se curvaron, su humor era bastante bueno. Se recostó en la silla de ruedas y apoyó la barbilla en su mano.

—No, sólo puedes comer conmigo y yo no puedo comer cosas picantes. Solo los subordinados de bajo rango pueden disfrutar de la comida picante.

Shi Jin se atrevió a poner los ojos en blanco y señaló la papilla.

—Entonces, date prisa y mejora. Me encanta la comida picante, no puedes privarme de ella.

Lian Jun no pudo evitar reírse. Su corazón, que siempre había estado lleno de incertidumbre, lentamente, se asentó en su pecho. Echó un vistazo a Shi Jin, miró la papilla de mariscos, luego la apartó y tomó la tarta de frutas a medio comer del adolescente.

—Estoy cansado de gachas, quiero esto.

Shi Jin estaba aturdido por su risa, y le tomó un momento volver a sus sentidos. Con una expresión de “qué voy a hacer contigo”, entregó su tarta de frutas.

Después de esa conversación en el desayuno, la distancia entre los dos se redujo mucho. Shi Jin se volvió más audaz y casual frente a Lian Jun, y Lian Jun lo consintió tácitamente.

Esa tarde, todos se reunieron para discutir la licencia de R&R. Gua Uno y los demás notaron el cambio sutil pero no dijeron nada. Después de la reunión, Gua Dos agarró al asombrado Gua Seis y lo arrastró a un lado para una larga conversación.

Entonces, cuando Shi Jin fue a ver a Gua Seis por su tarjeta de pase, descubrió que su nuevo colega lo miraba un poco extraño.

Gua Seis era gentil y honesto. Era un poco mayor que Gua Uno, y de igual manera había visto a Lian Jun crecer: lo adoraba como lo haría un abuelo familiar con un joven al que le tenía mucho cariño. Ahora que este preciado joven de repente encontró a alguien especial, todo tipo de sentimientos se apoderaban del corazón del anciano.

—Xiao Jin, ¿verdad? ¿Qué edad tienes? —Gua Seis preguntó.

Shi Jin pensó que la extraña expresión del hombre se debía a que parecía demasiado joven y mintió descaradamente:

—Casi veinte.

¿Veinte? La diferencia de edad no es tan grande como para ser inaceptable.

Gua Seis asintió y sacó una tarjeta de pase en blanco. Extendió su mano hacia Shi Jin:

—Por favor, dame tu tarjeta de identificación, necesito ingresar la información.

Shi Jin la entregó obedientemente. Después de que dejó su mano, recordó que su fecha de nacimiento está en ella y su expresión se puso rígida. Maldita sea, el gato está fuera de la bolsa.

Gua Seis notó la fecha de nacimiento en la tarjeta de identificación. Hizo una pausa y luego miró a Shi Jin, sorprendido.

—¿No lo redondeaste demasiado? Te convertiste en adulto hace solo unos meses.

—Es mi edad mental. —Shi Jin se negó a admitir la derrota.

Gua Seis ingresó la información relevante y preguntó, con el corazón temblando un poco. —Acerca de Jun-shao… ¿Crees que es viejo?

Shi Jin estaba confundido. —¿Viejo? Jun-shao cumplirá veintiséis este mes, eso no es viejo.

Tenía la misma edad cuando murió en su vida anterior.

Los ojos de Gua Seis se iluminaron y habló más rápido.

—¿Recuerdas el cumpleaños de Jun-shao?

—Calor que sí. ¿Por qué me miras así, es difícil de recordar? —Su reacción asustó un poco a Shi Jin.

Gua Seis se controló, sonrió y sacudió su mano para mostrar que no era nada. Dijo alegremente:

—No es difícil recordar sino querer recordar. Oh, bien, bien, esta es tu tarjeta de pase, te di el más alto nivel de privilegio. Ve a jugar y diviértete.

Shi Jin se alejó, desconcertado.

Gua Seis sonrió con satisfacción.

—Recordaba el cumpleaños de Jun-shao de improviso, parece que realmente tiene a Jun-shao en su corazón. Muy bien, muy bien.

♦ ♦ ♦

Lian Jun no quería ir al comedor a cenar, y Shi Jin tampoco estaba dispuesto a moverse. Entonces, el adolescente llamó a la cocina y les pidió que enviaran comida y pusieran la mesa en la terraza.

Lian Jun no tenía objeciones a su elección y estaba feliz de tomar su asiento.

Comieron en agradable armonía. Después, Shi Jin vio que Lian Jun no se fue de inmediato para ocuparse de los documentos, y su mente se movió. Aprovechó la oportunidad para decir:

—Jun-shao, ya estamos en la isla. Ese masaje… ¿Te gustaría intentarlo?

Lian Jun lo miró y no respondió, pero su expresión aún era tranquila.

—Vamos, pruébalo. Aposté y perdí, no deberías dejarme ir, o nunca aprenderé.

Las palabras de autorreflexión de Shi Jin sonaron forzadas.

Las cejas de Lian Jun se arquearon. Apoyó la barbilla en su mano y preguntó con voz perezosa, como si estuviera intoxicado por la brisa del mar:

—¿Por qué eres tan insistente en ese masaje, Shi Jin?

La conversación matutina cambió un poco las cosas entre ellos. Esta vez, Shi Jin no evadió y respondió honestamente:

—Quiero echar un vistazo a tus piernas. Los músculos que no se usan se atrofiarán. El tío Long dijo que te niegas a cuidar tus piernas, así que estoy un poco preocupado.

La expresión de Lian Jun cambió un poco. Miró hacia otro lado y dijo:

—Preocuparse por eso es inútil. Siempre tengo en cuenta la condición de mi cuerpo.

—Lo que estás haciendo no es “tenerlo en cuenta” sino “resignarse a ello”. —reprendió Shi Jin, con una rara expresión seria en su rostro. —Tus piernas no están muertas. Después de acondicionar tu cuerpo, los nervios no serán tan sensibles y los efectos secundarios desaparecerán, si reconstruyes los músculos de las piernas, podrás caminar como una persona normal. No puedes decidir rendirte desde el principio.

—Nací así, fue lo que Dios decidió, no yo —respondió Lian Jun, como si hubiera aceptado su destino.

—Lian Jun, no puedes pensar así. —Shi Jin frunció el ceño, sintiendo un dolor de cabeza inminente.

Como era de esperar, Lian Jun era el epítome de un mal paciente, los gruñidos ocasionales del tío Long ya lo insinuaban.

No comía bien, y antes de que llegara Shi Jin, incluso bebía alcohol, a pesar de saber que su estómago no podía soportarlo. También odiaba la medicina. Intentar curar a alguien así era francamente frustrante.

Después de su conversación anterior, sin embargo, Shi Jin pensó que podía adivinar por qué Lian Jun tenía este tipo de actitud.

La transformación de Annihilation era rápida y peligrosa como el rafting: no se permitía el más mínimo error. No había tiempo para que Lian Jun se preocupara por su condición física, probablemente, también estaba disgustado con su cuerpo actual e inútil. Era probable que tuviera la intención de esperar hasta que sus hermanos estuvieran a salvo, y luego ofrecer su cabeza a los funcionarios para llegar a una conclusión completa. ¿Por qué el hombre que ya había planeado su propia muerte cuidaría su cuerpo?

Lian Jun vio la expresión preocupada de Shi Jin, como si el joven quisiera decir algo, pero no estaba seguro de qué. Inesperadamente, él sonrió.

—Te preocupas más por mi salud que yo, Shi Jin. ¿Puedes decirme por qué?

Esta sonrisa se veía muy bonita, pero frustraba a Shi Jin.

—¿Qué quieres decir con ‘por qué’? —Shi Jin frunció el ceño. Echó un vistazo a las barras de progreso en su mente y luego echó otro vistazo a la apariencia, aparentemente indiferente de Lian Jun, y dijo: —Quiero que estés saludable y tengas una vida larga. En mi posición e identidad actuales, ¿no es este un deseo obvio de tener?

Lian Jun lo miró en silencio, asimilando su respuesta.

Shi Jin tampoco habló. Estaba pensando en formas de mejorar la perspectiva y el espíritu de Lian Jun.

—Esta bien. —De repente, Lian Jun bajó la mano que sostenía su barbilla, la rara apariencia relajada fue reemplazada por su habitual mirada reservada. Movió su silla de ruedas hacia el pequeño salón conectado a la terraza y preguntó, girando la cabeza: —¿No querías masajearme las piernas? Tienes todas las herramientas contigo, ¿verdad?

Shi Jin se emocionó, y sus ojos se iluminaron. Se apresuró a empujar la silla de ruedas y dijo entusiasmado:

—¡Ahora estamos hablando! Donde hay vida hay esperanza. Ten la seguridad de que tengo todo conmigo y haré todo lo posible para que el masaje sea cómodo.

♦ ♦ ♦

Las herramientas que Shi Jin mencionó consistían en tres cosas: aparatos de masaje traídos solo para la apariencia, aceite de masaje médico provisto por el tío Long y un pequeño altavoz inalámbrico para música.

El lugar del masaje se instaló en la habitación de Lian Jun. Shi Jin primero preparó un baño caliente para que Lian Jun se sumergiera. Luego, siguiendo la información que había recopilado, pidió una mesa de masaje más suave de lo habitual.

Cuando todo estuvo listo, conectó el altavoz con su teléfono, encontró la lista de reproducción con la música instrumental relajante que había descargado antes y tocó reproducir.

Al segundo siguiente, música suave y etérea llenó la habitación. Combinado con las olas distantes, disminuyó el estrés general.

Shi Jin estaba bastante satisfecho. Habló con Xiao Si en su mente.

—Gua Dos me consiguió este altavoz. Con lo buena que es la calidad del sonido, debe haber sido costosa.

Xiao Si no respondió.

Un poco incómodo, el adolescente dejó de tocar el altavoz.

—¿Qué pasa, Xiao Si? El éxito de este masaje depende de ti, no puedes tener los pies fríos[1] en este momento.

Xiao Si: 【Ah —Hipo.】

¿Qué era este sonido extraño?

Shi Jin frunció el ceño y preguntó con ansiedad:

—¿Qué te pasa? ¿Hay algún problema?

【No.】 La voz de Xiao Si se calmó de repente y se volvió un poco seria. Luego, soltó el doble de la velocidad habitual: 【JinJinmiradetrásdetiahora】.

Shi Jin escuchó reflexivamente y se estrelló contra un pecho ligeramente húmedo. El suave aroma a flores y jabón de baño le llenó la nariz.

—Esta música es agradable. —Lian Jun tomó el altavoz de la mano de Shi Jin, lo examinó brevemente y lo colocó en un gabinete. Luego, se inclinó hacia delante para mirar la mesa de masaje detrás del joven, casi abrazándolo, y preguntó con una mirada de reojo: —¿Debería acostarme directamente?

Shi Jin contuvo el aliento, sus ojos se movieron de la clavícula de Lian Jun todavía con gotas de agua a la manzana de Adán, luego hacia su pecho, envuelto en una bata de seda negra. Se movieron aún más hacia los pies del hombre sobre la lujosa alfombra. Finalmente, volvió a mirar la cara de Lian Jun, recogiendo su cabello húmedo y despeinado, y respiró hondo.

Maldición, ¿es realmente Lian Jun? Simplemente se bañó y se desordenó el cabello, entonces, ¿cómo es que parecía otra persona? ¿Estar de pie o sentado y un peinado realmente marca una gran diferencia?

Un movimiento en la frente despertó a Shi Jin y lo hizo mirar a la única otra persona en la habitación.

Lian Jun bajó la mano y pasó por alto a Shi Jin para acostarse en la mesa de masaje. El dobladillo suelto de la bata de baño se extendió, dejando al descubierto un par de piernas largas y delgadas.

—Empecemos.

Tanto su expresión como su voz eran tranquilas y naturales, a años luz de sus acciones de hace un momento.

Los ojos de Shi Jin estaban pegados a él mientras se movía. El impacto de su apariencia fue demasiado grande porque, aunque era la primera vez que Lian Jun le dejaba ver sus piernas, el adolescente no les estaba prestado atención. En cambio, miró el dobladillo de la bata de baño de Lian Jun y preguntó:

—Tú… no vas de comando[2], ¿verdad?

Lian Jun lo miró y dijo a la ligera:

—Shi Jin, estoy realmente asombrado por la forma en que funciona tu cerebro.

Shi Jin se sonrojó de vergüenza.


[1] Dejarlo plantado o abandonarlo

[2] Desnudo debajo

3 respuestas a “Barra de Progreso de la Muerte – Capítulo 41: Perro faldero”

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

 

error: Contenido protegido