Joven esposa del Capitán (de 62 años) – Capítulo 6: Confesión


Mi compromiso con Su Alteza Reyford fue decidido, y después de que tuvimos una ceremonia oficial el otro día, mi estilo de vida cambió completamente.

En primer lugar, al cumplir los 10 años, fui admitida en la Academia Real. Sabía que desde el principio seria matriculada, así que no estaba particularmente abrumada. Pero debido a que debía convertirme en la futura Reina, me obligaron a hacer varios estudios.

Concretamente hablando, siempre tenía que mantener las mejores calificaciones en la academia. Además recibí entrenamiento directamente de la Reina. El contenido era modales y decoro, etiqueta introductoria, ley y comprensión de los territorios nobles, y encima de eso, incluso aprendí sobre los funcionarios de países extranjeros. Era algo que tenía que aprender.

Si estos eran tiempos de paz, entonces estaría bien, pero en lo que respecta a los tiempos de guerra, el Rey se dirigía a menudo personalmente al campo de batalla, y durante ese tiempo, la Reina actuaría como su representante, haciendo las cosas en su lugar.

Pero si tuviera que suspirar por esas cosas, no podría sostener a Su Alteza en el futuro. Mi amor estaba dedicado a Wilhelm-sama, pero como ese amor no dio fruto, pensé que debía esforzarme para convertirme en una esposa que pudiera sostener a otros y depender de ello.

Reyford-sama era en gran parte frío hacia mí, pero no cambió el hecho de que yo era su prometida. Es por eso que estudié con todas mis fuerzas y me esforcé en comportarme de una manera que no me avergonzara como la futura Reina.

Bueno, todo salió mal.

Al final nuestro compromiso fue roto, y el que estaría tomando entrenamiento de la reina a partir de ahora sería Lady Mary. Me demore 6 años para recordar de algún modo la información crucial. Teniendo que tener esos estudios desde el principio de ahora en adelante, simpatizo con Lady Mary.

Debido a que era de la Casa de un Barón, probablemente tampoco se ha comportado como una noble. La Reina era generalmente una persona amable, pero cuando se trataba de estudios, era implacable.

Al igual que…

¡Finalmente soy libre!

—Wilhelm Aibringer-sama, te amo. Por favor, tome a Carol como su esposa.

—…… ¿Hah?

—…… ¿Hah?

Su Majestad y Wilhelm-sama se quedaron boquiabiertos.

¿Dije algo extraño?

Bueno, ciertamente, aparte de mí misma, no había oído hablar de alguien que estuviera enamorada de un hombre 46 años mayor, por lo que podría haber sido un poco extraño.

Sin embargo, no miento sobre estos sentimientos. Amo mucho a Wilhelm-sama, y desde que mi relación con Su Alteza ha cesado, no me reprimiré más.

—L-Lady Carol….. ¿Qu-qué estás diciendo?

Pero las primeras palabras que dijo Wilhelm-sama fueron, increíblemente, palabras que dudaban de mi cordura. Pensé que me había expresado lo bastante bien, pero ¿no se transmitió?

Mi corazón seguía latiendo. Para hacerme hablar aún más palabras de amor, como era de esperar Wilhelm-sama es duro.

Pero mientras Wilhelm-sama lo pidiera, yo respondería.

—Wilhelm-sama, te amo. Desde que era joven, siempre he estado enamorada de ti. Por favor, concédeme tu afecto. Soy una persona incompetente, pero me convertiré en una dama que será una esposa apropiada para ti

—¡E-espera, un momento, Lady Carol!

Por alguna razón, Wilhelm-sama miró inquieto alrededor y luego me detuvo. ¿Por qué en el mundo está tan nervioso?

Y entonces, por alguna razón, él se tomó su cabeza.

—Wilhelm-sama, por favor llámame Carol.

—N-no, eso es…

—Entonces, no me importaría que me dijeras “Cariño”

—¡Eso es aún peor!

Ahora bien, ¿qué tiene de malo?

Incliné la cabeza. Yo amaba a Wilhelm-sama, y mi relación con Su Alteza había desaparecido. La edad de Wilhelm-sama avanzaba a los 62 años, pero aún no había un solo trivial rumor de él y era soltero.

No había ningún problema en absoluto.

—Um…

Quizás.

Pensando en esa posibilidad, mis piernas se sacudieron por reflejo. Mi corazón saltó en un mal sentido, y el sudor fluyó. Si es posible, no quería pensar en algo así.

No podría ser.

Wilhelm-sama, hacia mí…

—Wilhelm-sama… ¿Odias a Carol?

—¡Urk……!

—Carol ama a Wilhelm-sama. Wilhelm-sama… ¿Detesta a Carol?

—N-No es que te odie…

*DOKI*

Mi corazón estaba a punto de ser aplastado por la ansiedad, pero la luz lo atravesó.

Pensé que tal vez, a él le disgustaba. Tratándome bien cuando era niña, tal vez había sido porque era amigo de mi abuelo, y en realidad él odiaba eso. Pero, parece que de ninguna manera Wilhelm-sama me odia.

—Entonces, Wilhelm-sama, ¿te gusta Carol?

—N-no, eso es…. Bueno…

—Si no me detestas, por favor, déjame estar a tu lado. Sólo eso me hará feliz. Si dices que no soy adecuado para ser tu esposa, entonces gastaré un gran esfuerzo para convertirme en alguien que si lo sea.

No podía haber nada más alegre que pasar mi vida con Wilhelm-sama. Aunque había recibido entrenamiento para convertirme en Reina, probablemente con eso podría apoyar a Wilhelm-sama.

Aun así, si él decía que no era suficiente, entonces yo persistiría aún más. Si fuera por Wilhelm-sama, entonces no habría nada doloroso.

—Wilhelm.

—… Si su Majestad.

—Parece que a Lady Carol… es decir, ella parece querer casarse contigo.

—Pero…

Por alguna razón, Wilhelm-sama soltó un gran suspiro.

¿Quizá pensó que era la obstinación de un niña y estaba preocupado?

Como era de esperar, diciendo por favor, hazme tu esposa tan de repente, tal vez fue demasiado apresurada. Pero, estos sentimientos que siempre estaban escondidos en mi corazón, no podía soportar no transmitirlos.

—Giliam-dono.

—Respeto la voluntad de Carol. Parece que a Carol realmente le gustas.

—… No pero…

Cosas como “pero”, o “sin embargo,” de alguna manera Wilhelm-sama estaba siendo incapaz de expresarse.

Fue reconocido por mi padre, y también fue reconocido por Su Majestad. Aun así, sólo Wilhelm-sama parecía algo preocupado.

Que mi padre lo haya aprobado, fue decir que la casa Ducal lo aprobó. Lo que significa que mi familia también lo acepta. Se dice que el matrimonio es una conexión entre dos casas, y mi casa ya lo ha permitido. Al mismo tiempo, que Su Majestad lo haya aprobado significaba que el país también lo aprobaría.

Yo quería mucho a Wilhelm-sama, y a Wilhelm-sama no le disgustaba.

No había ningún problema que encontrar.

—Eso es… Lady Carol

—Si.

Pero Wilhelm-sama todavía me trataba como a una niña.

¿Está bien que me enoje un poco?

—Soy… El abuelo de lady Carol, lo conocía bien.

—Sí, estoy consciente.

—Es decir, no estoy diciendo que Lady Carol es insuficiente. Sólo… Para mí, Lady Carol es más como una nieta… Es más, como un miembro de la familia. Para que alguien así de repente proponga matrimonio…

—Wilhelm-sama.

Lo sé, ya que Wilhelm-sama siempre me trata como a una niña, tengamos una pequeña venganza.

Probablemente, la razón por la que Wilhelm-sama se acercó a discutir de cerca, fue debido a los otros caballeros. Estaban mirando por aquí con preocupación. Probable de esta manera, nuestras voces no los alcanzarían.

—¿Puedes inclinarte un poco hacia delante?

—… ¿Mm?

—Hay una hoja en tu cabello. La sacare por ti.

—Mm, ¿es así…?

A mis palabras, Wilhelm-sama se inclinó. Donde mis manos podían llegar, poco a poco.

Esa fue la posición perfecta para mí.

*Chu*

A esa mejilla de la que brotaba una barba, di un pequeño beso.

—¡?¡?¡?¡?¡?

—La hoja era una mentira. Wilhelm-sama

*Fufu*

Me reí mientras miraba a Wilhelm-sama, cuya cara se había puesto roja.

Sin duda, mi rostro también se había vuelto de un color rojo brillante. Esto es embarazoso. Dar un beso mientras somos observados por la gente…. He hecho algo inmodesto.

Mi primer beso, su barba era un poco espinosa.

18 respuestas a “Joven esposa del Capitán (de 62 años) – Capítulo 6: Confesión”

  1. JAJAJa no me canso de leer esta novela. Aunque si bien me molesta un poco que hablen en tercera persona….haaaa bueno creo que es común en Japón hablar así.

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