Traducido por Shisai
Editado por Meli
Después de entrar en la instancia real del gran pavo, los jugadores se formaron en total cuatro veces.
La primera vez, no tenían ninguna pista y decidieron ir en el orden en que entraron en la partida. En el juego «El águila atrapa a los pollitos», el pavo persiguió con desesperación a Ningning y la hirió casi de muerte en el último segundo. Por eso Tang Mo dedujo las reglas del juego e identificó a la mujer como el último jugador en la fila.
—En ese momento, el señor Víctor y el capitán Xiao creyeron que Ningning estaba en último lugar —comentó la chica de pelo corto, que no era especialmente lista, pero se esforzaba—. Pero no fue así, ¿por qué la atacó? ¿Es que…? —Sus ojos se iluminaron—. ¿El gran pavo nos engañó de forma deliberada?
Hubo tres rondas de «El águila atrapa a los pollitos». El primer objetivo fue Ningning y los dos últimos Fu Wenduo. El monstruo se esforzó por atrapar a los polluelos, pero no mató a ninguno.
—El pavo nos engañó intentando atrapar a la hermana Ningning —concluyó la chica de pelo corto—. Pero al final no la mató. Solo lo hizo para hacernos pensar que ella estaba en último lugar.
—Tu suposición es un 20% probable —declaró Xiao Jitong y la mujer se quedó atónita—. Más de cien personas jugaron aquí y ninguna sobrevivió. Sin duda, la mayoría de los jugadores de Nanjing no conocían las reglas del juego «El águila atrapa a los pollitos».
Las dos niñas estaban confusas, Tang Mo lo miró.
—La Tierra lleva en línea más de cuatro meses. No conozco el nivel específico de los jugadores de otras ciudades, pero el nivel de los jugadores de Nanjing debe estar por debajo de la media en China. Existe el Grupo de Nanjing y el Grupo de Estrategia de Nanjing, así que los jugadores aquí no necesitan esforzarse tanto para sobrevivir. Tienen muy poca experiencia con los juegos. Si a más de cien personas se les ocurriera algo, nuestro Grupo de Estrategia no necesitaría existir.
Las dos estudiantes de secundaria bajaron la cabeza avergonzadas, se sentían especialmente cohibidas frente a Fu Wenduo y Tang Mo, que no eran de Nanjing.
El período de tres meses pronto terminaría y la torre negra las obligaría a atacarla y nadie podría salvarlas. Esa fue la razón por la que los dos estudiantes se unieron a un juego de torre negra. Querían hacerse más fuertes.
—Cuando el juego comenzó, el gran pavo no conocía nuestra fuerza y se comportó muy arrogante y por eso, en la primera ronda del juego «El águila atrapa a los pollitos», cayó con facilidad en las trampas del pequeño Qiao. No cayó en las trampas después de eso. Su desprecio significa que no creía que pudiéramos detectar la verdad de «El águila atrapa a los pollitos». Por lo tanto, hay un 70% de posibilidades de que quisiera atrapar a Ningning la primera vez.
—Es el 80% —aclaró Tang Mo que cocina con cuidado el jugoso pavo—. Creyó que no podíamos adivinar la verdad del juego. No solo despreció nuestras mentes, sino también nuestra fuerza. Realmente estaba tratando de matar a Ningning.
Xiao Jitong sonrió.
—Entonces debería haber atrapado al señor Tang Ji, no a la hermana Ningning —intervino la chica de pelo corto.
Tang Mo la miró. Los jugadores de Nanjing se refugiaban en un jugador fuerte, como si vivieran en un invernadero, experimentaban poco viento y lluvia, haciendo que su fuerza fuera débil. Sin embargo, las dos chicas no perdieron su espíritu de lucha ni suplicaron ser protegidas. Pese a ello, no podían compararse con muchas de las reservas de Shanghai y menos con los jugadores que podían matar a otros sin pestañear.
La chica de pelo corto quería saber la respuesta para poder mejorar su fuerza y compensar sus propias deficiencias.
Al menos, no estaba desahuciada.
—El juego original «El águila atrapa a los pollitos» debe tener al menos tres personajes para poder jugar —le explicó Tang Mo—. El primero es el águila, el segundo es el pollito y el último es la gallina. ¿Quién crees que era la gallina?
La chica de pelo largo pensó rápidamente.
—La persona que ocupa el primer lugar siempre es la gallina… ¿Entonces tú eras la gallina? —dijo la mujer y Tang Mo negó con la cabeza—. ¿El señor Tang Ji? El gran pavo lo atacó. La gallina quería proteger a los pollitos y lucharía contra el águila.
—Era el gran pavo —Tang Mo declaró.
—¿Qué?
—La torre negra siempre sugirió que era nuestra madre. El gran pavo se convirtió en águila a causa de la esquizofrenia. Pero era la gallina. Como águila, debe empezar a cazar desde el último polluelo. En nuestra primera ronda de alineación, nuestro orden fue: tú, ella, Xiao Jitong, el pequeño Qiao…
Fu Wenduo y Xiao Jitong ya entendían la verdad, pero el resto estaban confundidos y escuchaban con atención.
De hecho, las cosas eran muy sencillas. Al principio, pensaron que Ningning era el último polluelo porque fue el primer objetivo del gran pavo, pero se equivocaron al no considerar la presencia de la gallina en el juego.
El pavo se transformó en águila, pero seguía siendo la gallina que quería proteger a sus hijos, pero perdió el sentido común y quiso comérselos.
Como gallina, les pedía que se pusieran en fila para comer bichos. En su estado esquizofrénico, no atacaría al niño que se alineó bien. Solo a los pollitos equivocados porque «no podía reconocerlos» como sus hijos.
Esa era la regla subyacente del juego «El águila atrapa a los pollitos».
De atrás hacia delante, el primer polluelo en posición incorrecta era el que el águila atraparía.
La primera vez que se alinearon, Fu Wenduo era el último y Tang Mo el penúltimo. Fu Wenduo estaba en la posición correcta, pero Ningning no. Por lo tanto, el gran pavo no reconoció a su hijo y lo persiguió con locura. En las dos siguientes filas, Ningning se alineó en último lugar. En este punto, Fu Wenduo fue la primera persona en estar en la posición incorrecta por lo que terminó siendo perseguido por el pavo.
—Debimos haber pensado en ello después de que el gran pavo intentara matar a Tang Ji por segunda vez. Eso probó que había una laguna en nuestra especulación. No deberíamos haber dado por hecho que el orden para matar avanzaba en la fila. El gran pavo quería atrapar al primer polluelo que estaba en la posición incorrecta desde la retaguardia de la línea.
Jugadores oficiales, reservas y polizones.
La razón por la que la torre negra eligió ese orden fue para facilitar que el gran pavo se comiera a los polizones. Los menos propensos a morir eran los jugadores oficiales. A la torre negra no le gustaban los polizones. Cuando determinaron por primera vez el orden de la fila, Tang Mo y Xiao Jitong no lo dijeron pero se basaron en ese hecho. Ese método se ajustaba mucho a las preferencias y reglas de la torre negra.
Tang Mo ocupaba el primer lugar porque era un jugador oficial que había superado el segundo piso de la torre negra y era más fuerte que el niño. Xiao Jitong era el primero entre los reservas porque había superado el segundo piso de la torre negra y se había convertido en un jugador oficial. No estaban seguros de la ubicación de las dos chicas, pero su principal error era la posición de Ningning y Fu Wenduo, ambos habían despejado el segundo piso de la torre negra y eran polizones. Ningning era muy fuerte, pero Tang Mo creía que era más probable que la torre negra quisiera matar a Fu Wenduo, pero lo descartó dos veces.
—Espera, entonces durante nuestra tercera ronda de preguntas, el gran pavo dijo que yo estaba en segundo lugar y ella en quinto —argumentó el niño—. Ambas respuestas eran correctas. ¿El pavo estaba haciendo trampa?
En las dos primeras rondas de preguntas, el ave solo dio una respuesta correcta por eso dieron por sentado que el pavo mentiría en una de las preguntas y este los engañó para que colocaran a la chica de pelo corto en quinto lugar y a la de pelo largo en cuarto.
—Has explicado todas tus razones, pero todavía hay una cosa sobre la que tengo dudas —Xiao Jitong le sonrió a Tang Mo—. Señor Víctor, no hay pistas sobre el orden de estas dos chicas, ¿cómo supo sus posiciones?
Todos miraron a Tang Mo, querían saber cómo adivinó mágicamente sus posiciones. Expectantes, observaron como él se levantó y caminó hacia un montón de plumas esponjosas (que había arrancado del gran pavo). Se agachó y recogió del suelo al pequeño insecto que se retorció en sus manos. Volvió al fuego, colocó el bicho en el suelo y lo mató de un golpe.
Todos se quedaron atónitos.
—Dámelo —Fu Wenduo le sonrió y extendiendo la mano.
Le entregó el insecto y este lo molió hasta hacerlo polvo y luego lo esparció sobre el pavo. Sonaron los gritos horrorizados de las dos chicas y el niño.
—Tú… ¿qué estás haciendo? —inquirió Ningning.
—Solo podemos obtener la recompensa después de comer el insecto. ¿No quieren la recompensa? ¿O quieren comerse el bicho directamente? —preguntó Tang Mo.
Todos se quedaron callados, sin duda era mejor comer el pavo asado con sabor a bicho que hacerlo de forma directa.
Tang Mo cortó la pata del pavo con un cuchillo y se la comió. Fu Wenduo no tenía ningún interés en comérselo. Ayudó a matarlo porque su compañero quiso hacerlo. Una vez que el ex-bibliotecario comprobó que comer un trozo bastaba para mejorar la capacidad física, bajó el cuchillo y dejó de comer.
Los que más comieron fueron las dos chicas y el niño. En tres minutos, el enorme pavo fue devorado por completo y la clara voz de una niña sonó en sus oídos.
¡Ding, dong! Se ha obtenido la recompensa «Mi nido de pollitos».
La mano de Tang Mo giró y un pequeño nido de pollo apareció en su palma. Levantó la cabeza en silencio y miró a la persona más cercana: Xiao Jitong. Sus ojos brillaron cuando vio el nido en la mano de la otra persona.
Tang Mo guardó el nido en el bolsillo sin comprobar el efecto del accesorio.
Las niñas siguieron agradeciendo al grupo de Xiao Jitong. La de pelo corto no paraba de decir que mientras viviera, encontraría la forma de conseguir el vino de plátano y recompensarlos.
Antes de marcharse, las dos chicas volvieron a dar las gracias a Tang Mo y a Fu Wenduo. Sin embargo, había una pizca de vigilancia y miedo en sus ojos. El juego había terminado así como la alianza temporal con ellos. No las habían matado y ayudaron a todos a ganar el juego juntos.
Una vez terminado el agradecimiento, se marcharon sin volver atrás. El cielo estaba oscuro y necesitaban encontrar un lugar donde descansar.
Solo quedaron Tang Mo, Fu Wenduo y el trío del Grupo de Estrategia de Nanjing, las cinco personas salieron juntas del supermercado.
El sol se estaba poniendo. Podría ser el atardecer del día siguiente. La cálida brisa primaveral, soplaba contra sus rostros y el sol proyectaba largas sombras sobre ellos.
Tang Mo se guardó las manos en el bolsillo. Caminó junto a Fu Wenduo y se adelantaron para marcharse.
—Señor Víctor, señor Tang Ji… —los llamó Xiao Jitong con voz risueña—. No respondieron a mi pregunta. ¿Por qué estaban tan seguros de las posiciones de las dos chicas de la fila?
Tang Mo se detuvo, se dio la vuelta y lo miró con indiferencia.
Los ojos de Xiao Jitong no contenían malicia, pero había una profunda expresión en ellos. Quería saber: ¿por qué estaban las dos chicas en ese orden?, ¿por qué Tang Mo hizo esas dos preguntas al final? Y ¿por qué le dieron una respuesta tan definitiva?
Además de leer los labios, el oído de Ningning era asombroso. Escuchó un momento y se dio cuenta que Tang Mo golpeaba con el dedo el nido de pollos que estaba en su bolsillo.
—Capitán Xiao, soy como usted y también creo en la intuición.
Le respondió igual que él a Fu Wenduo cuando le preguntó por qué quería a la chica de pelo corto delante de la de pelo largo. Ellos tres sabían que lo habían dispuesto así porque pensaban que la chica de pelo corto era más fuerte que la de pelo largo.
Xiao Jitong cerró los labios y sacudió la cabeza con una sonrisa. Sabía que no se basaba en la intuición, pero no tenía forma de refutar. Nunca imaginó que en los bolsillos de Tang Mo y Fu Wenduo brillaba un huevo de pavo. Había estado parpadeando durante una hora entera, pero optaron por no cargar el archivo, haciendo que se acabara el tiempo de guardado.
Independientemente de las preguntas que le hiciera al pavo, Tang Mo sabía que no podía determinar el orden correcto de las dos chicas. El insidioso pavo no les diría la información más importante, así que después de la tercera ronda del juego de «El águila atrapa a los pollitos», Tang Mo y Fu Wenduo decidieron abrir el archivador.
Tenían la oportunidad de volver a hacerlo y no iban a perder. Las preguntas se volvieron intrascendentes. Tang Mo hizo las preguntas esencialmente iguales porque quería saber cómo respondería el gran pavo si un jugador le hacía dos preguntas idénticas.
La respuesta fue que los jugadores no podían hacer la misma pregunta y que el gran pavo les dejaría cambiar la pregunta.
La segunda vez, Tang Mo quería saber qué pasaría si solo quedaba un jugador vivo.
Ahí habían muerto más de ciento cincuenta personas y, sin duda, habría momentos en los que un jugador era el único que quedaba. El gran pavo le dio una respuesta ambigua, pero él adivinó vagamente la verdad.
Cuando un jugador vive hasta el final después de matar a sus compañeros, el gran pavo le decía en tono cariñoso y despiadado: «Niño, tienes que ponerte en fila para comerte el bicho».
Tenían que alinearse de principio a fin. No importaba cuántos compañeros de equipo murieran, tenían que alinearse. La persona tenía que ponerse en fila con los cadáveres. Solo había una manera de ganar: alinearse y comerse al bicho.
Esa fue la primera pregunta que Tang Mo le hizo al gran pavo y este no mintió. En ese mundo dominado por la torre negra, tener un compañero de confianza era la mayor fortuna. Tang Mo recordó el sangriento y violento gran pavo y comprendió que sin gente poderosa como Fu Wenduo y Ningning, sería difícil sobrevivir al juego.
Tang Mo y Fu Wenduo caminaron deprisa y estaban a punto de desaparecer al doblar la esquina cuando se oyó una voz detrás de ellos:
—Señor Fu.
El aludido se detuvo y se giró hacia Xiao Jitong. Tang Mo miró con recelo a los tres jugadores frente al supermercado. El niño parecía no entender lo que estaba pasando. La mano de Ningning estaba en su ballesta, lista para atacar.
—Capitán Xiao, ¿cuál es el problema? —dijo el polizón con una mueca.
—Creo que querías algo de nosotros. ¿Es un error mío? —Sonrió—. Saben, cuando decidieron no matar a nadie, deliberadamente revelaron sus identidades… —Hizo una pausa y agregó—: El señor Tang Ji es el polizón más fuerte de China: Fu Wenduo. Y tú eres el poderoso señor Tang Mo. Los dos aparecieron de repente en Nanjing. No deben estar de paso casualmente…
—¡¿Él es Fu Wenduo?! —gritó perplejo el niño.
—Sí —respondió Ningning.
—Entonces, ¿por qué no lo sabía? —preguntó el pequeño Qiao.
—Porque eres estúpido —dijo la mujer.
El niño se quedó sin palabras.
—Deben tener algo que hacer en Nanjing. Dínoslo y veremos si podemos ayudarte con la fuerza de nuestro Grupo de Estrategia de Nanjing o del Grupo de Nanjing —Xiao Jitong se tocó la barbilla y fingió pensar por un momento—. Yo creo que… ¿Están buscando a alguien?
Los ojos de Tang Mo se entrecerraron.
—¿De verdad están buscando a alguien?
—Ese chico siempre negó conocer a Fu Wenduo. —Ningning suspiró—. Dijo que era un bastardo y que si lo veía, lo cortará en cien pedazos. Lo odia por haberlo arrastrado al juego del ataque a la torre. No debería tener ninguna relación con Fu Wenduo, ¿cierto?
♦ ♦ ♦
Fu Wensheng estornudó al salir de una instancia. Se tocó la nariz y miró a sus compañeros.
—¿El clima no debería estarse calentando?
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La autora tiene algo que decir:
Pequeño Fu: Hermano mayor, escucha mi explicación, ¡por favor escucha mi explicación! Whoa, yo no le dije a otras personas que te golpearan. ¡Solo estaba descargando mi ira!
Viejo Fu: [Extiende la mano]
Tang Tang: [Le pasa un látigo]
Pequeño Fu: Wow. [Llora]. ¡¡¡¿Tengo un primo hermano así?!!! QAQ