Traducido por Shisai
Editado por Meli
El juego de limpieza de basura de la última persona fue una instancia que usó la torre negra para eliminar a los jugadores más débiles.
Solo los poderosos podían capturar y matar a las personas con cabeza de conejo, o asesinar jugadores para obtener las insignias. Quienes fueron muy inteligentes, usaron una estrategia para obtener insignias e incluso encontrar la verdadera «sorpresa» del juego.
En los últimos diez minutos, hubo alrededor de ochocientos jugadores cerca de la estación de eliminación de basura de Xinjiekou. Sin embargo, completaron con éxito el juego menos de doscientos. Cientos murieron y otros tantos se verían obligados a participar en el juego de ataque a la torre.
Tang Mo les anunció a todos el método para despejar la instancia, pero algunos no creyeron lograrlo en los últimos diez minutos.
Una vez que la torre negra anunció que el juego había terminado, los cuerpos de quienes fallaron fueron desapareciendo de forma gradual. Al igual que cuando la Tierra se conectó hace cinco meses: una línea invisible se elevó desde los pies y limpió sus cuerpos. Los jugadores, horrorizados, intentaron escapar pero no pudieron. Algunos tomaron sus armas con resentimiento y atacaron a los jugadores que habían pasado el juego.
La batalla nunca cesó.
Tan pronto como terminó, todos abandonaron el área caótica. Fu Wenduo fue solo al área residencial para encontrar a Fu Wensheng.
No había jugadores rondando las calles vacías de Nanjing. Chai Rong sufrió heridas graves en una pierna y la lesión en su pecho se abrió de nuevo. Apretó las manos con fuerza cuando vio a la gente desaparecer, con la roja por la ira, miró hacia la torre negra.
—No entiendo, ¿por qué el juego fue así? —Chai Rong goléo la pared de un callejón—. Para despejar el juego bastaba ingresar, decir algo relacionado con la palabra sorpresa o la palabra en sí. Entonces las doce horas que estuvimos cazando y obteniendo insignias… ¿Cuál fue el punto de todo lo que hicimos?
Él había completado muchos juegos, pero nunca había visto algo así, exasperado, gruñó:
—Claramente… ¡solo está tratando de matarnos!
—Solo quiere matarnos —afirmó Xiao Jitong.
Chai Rong volteó a verlo, tenía una profundo corte desde la esquina del ojo izquierdo hasta la comisura de la boca. Ya no sangraba, pero había un gran agujero en su rostro.
En el camino, los miembros del Grupo de Nanjing usaron agua mineral para tratar las heridas.
—Es un juego de limpieza de basura —siguió Xiao Jitong, ignorando la herida en su rostro—. Si no entiendes su significado, entonces has escapado de la muerte. Fue un método para filtrar y expulsar toda la basura no deseada. ¿Comprendes?
Chai Rong primero asintió antes de negar con la cabeza. Xiao Jitong se rió.
—No importa, tu fuerza es bastante alta. No eres basura, por eso completaste el juego.
—Viejo Xiao, tu cara… —expresó Chai Rong, no soportaba más verlo desfigurado.
—Si eres poderoso, puedes pasar la instancia a la fuerza. Pero si eres inteligente, pones trampas para obtener insignias o descubres la verdad. Solo debes ser bueno en algo para sobrevivir. La torre negra califica a las personas —Xiao Jitong habló, sin prestar atención al otro—. Así han sido los juegos que hemos completado en los últimos cinco meses. Pero esta vez, el señor Tang dijo que podíamos entrar y decir cualquier cosa relacionada con «sorpresa» para despejar el juego. Al final, todos trabajaron duro para ingresar a la estación de eliminación de basura con o sin insignias. Pero ¿está calificado alguien que escapó durante doce horas y solo entró a la estación?
Chai Rong sentía rabia y resentimiento. No sabía por qué estaba enojado, pero era como si una gran piedra bloqueara su pecho, dejándolo sin aliento.
—¿Quién dice que esos jugadores están calificados? —replicó el poderoso capitán—. ¿Qué pasaría con aquel débil o tonto que no espera al final del juego, entra en la estaciíon y despeja el juego por casualidad?
—¿Existe tal persona?
—¿Qué pasa si lo hay? —replicó con obstinación Chai Rong y Xiao Jitong se rió.
Tang Mo contempló en silencio a dos de los mejores jugadores de Nanjing. En los últimos tres meses, trabajaron juntos por la paz de la ciudad. Y ahora discutían aun cuando sus graves heridas no habían sido tratadas.
—¿Quién te dijo que la suerte no es un tipo de fuerza? —intervino Ningning y Chai Rong se volvió para mirarla—. Hace cinco meses, quienes ingresaron y completaron el juego de la torre negra se convirtieron en jugadores oficiales. Otros se convirtieron en jugadores de reserva. Y algunos con mejor suerte mataron gente en esos tres días y se convirtieron en polizones. Todos fueron afortunados, porque seis mil millones de personas que ni siquiera sabían la verdad fueron asesinados por la torre negra. ¿Por qué tuvieron ellos tan mala suerte?
—Correcto, la torre negra no es justa. El juego de esta vez es igual —concordó Chai Rong..
—A los ojos de la torre negra, los seis mil millones merecían esa desgracia —contradijo Ningning y Xiao Jitong abrió los ojos—. Todo por no tener suerte. ¿Por qué la torre negra debería considerar tu suerte? En este juego, si alguien, desde el inicio hubiera entrado a la estación y encontrado el método para despejar el juego, quizás todos los jugadores de la ciudad se habrían salvado. Pero no apareció tal persona. La suerte también es un tipo de fuerza. Capitán, quiero ir a ver la torre negra.
—Bueno —asintió Xiao Jitong.
Ningning parecía tranquila e impasible. Sin embargo, sus dedos estaban blancos por apretar el arco, además, su espalda parecía pequeña mientras caminaba hacia la torre negra.
—Chai Rong, tú eres el que crió basura —declaró Xiao Jitong.
Chai Rong lo miró perplejo, su sonrisa resplandecía bajo la luz del sol. Sin más, comenzó a alejarse.
—¡Capitán! —gritaron los miembros del Grupo de Nanjing mientras lo seguían.
—Yo sé lo que quieres decir —dijo Lin Rong antes de ir con el resto—. Capitán Xiao, creo que Chai Rong entiende pero necesita tiempo. No era su intención que Nanjing cayera. Además… capitán Xiao, debe lidiar con esa herida. Podría tomar medio mes para que sane por sí solo.
Xiao Jitong agitó su mano.
—Ve y consuela al idiota.
Los grupos se separaron, Tang Mo se quedó un rato con el Grupo de Estrategia, debía alcanzar a los otros porque Fu Wenduo llevaría a Fu Wensheng a la base del Grupo de Nanjing.
—¿Tienes algo que preguntarme?
—Sí. —Xiao Jitong sonrió—. Quiero preguntarte… ¿Por qué Fu Wenduo se atrevió a hacer este experimento?
—Tenía un conjunto de insignias que formaban la palabra «SORPRESA». Reunimos todas las letras —explicó Tang Mo.
—Eso lo tengo claro, pero… ¿y si no tuviera otra oportunidad? Si no colocaba las insignias primero, podría considerarse una falla del juego. Fu Wenduo o debería decir, Tang Mo. ¿Por qué se atrevieron a correr este riesgo?
Él no se atrevió a experimentar, aun cuando con Tang Mo tenían la duda de si la sorpresa era las insignias o se trataba de algo que todos los jugadores podían conseguir.
¿Por qué Fu Wenduo lo hizo? ¿Cómo podía Tang Mo estar tan tranquilo? Arriesgaron su vida, en la última hora del juego.
—Es porque Fu Wenduo es una buena persona —contestó Tang Mo después de un rato.
—¿Qué? —Estaba sorprendido.
—Fu Wenduo era un soldado. Lo adivinas con solo ver sus muchos hábitos. Tiene un sentido de justicia e integridad. Lo admiro por eso. En ese momento, las probabilidades de fallar eran inferiores al 1%. Él se sacrificó para encontrar la manera de que todos completaran el juego —mintió con descaro—. Fu Wenduo es una muy buena persona.
—Puedo ver tu maldad —declaró el niño rubio, ante el silencio de Xiao Jitong.
Tang Mo usó la sonrisa de Bai Ruoyao, para dar fin al asunto.
—Cada uno tiene sus propios secretos —Xiao Jitong se dio por vencido.
El capitán jamás se habría arriesgado de esa forma y Tang Mo y Fe Wenduo tampoco, pero ellos poseían algo que el otro no: el huevo de pavo.
En la última hora, abrieron el huevo de pavo. En la oportunidad que tuvieran, uno de ellos ingresaría a la estación de eliminación de basura y probaría otros métodos para despejar el juego. Si fallaban, cargarían el archivo y volverían de nuevo.
Cuando la ciudad se silenció por completo, el sol de la mañana se elevaba en el aire, emitiendo un cálido viento. Tang Mo miró hacia el cielo, recordó las palabras de Ningning y las repitió en su mente:
¿La suerte también es un tipo de fuerza? Sí, para la torre negra, la suerte era un tipo de fuerza.
Se dirigió a la base del Grupo de Nanjing donde Fu Wenduo ya estaba esperando con el niño. Fu Wensheng estaba sentado en silencio sobre una caja, cabizbajo. Los otros miembros del grupo no eran diferentes a él. Habían perdido a siete miembros. El joven que bromeó con Tang Mo el día anterior yacía en el fondo del lago helado. Su compañero abandonó la base en silencio y se dirigió al parque del lago Xuanwu, dispuesto a recuperar su cuerpo y enterrarlo.
Chai Rong y los miembros del Grupo de Nanjing estaban desmoralizados y de mal humor. Por la tarde, Xiao Jitong llegó a la base del Grupo de Nanjing con George Edward, la pequeña Wei y otros miembros del Grupo de Estrategia.
Tang Mo descubrió la razón del mal humor de Fu Wensheng. Durante el ataque en el parque del lago Xuanwu, reconoció a dos de los que los atacaron. Una semana antes, esos jugadores quisieron comprarles noticias sobre una instancia. No tenían ningún accesorio a mano, por lo que los miembros del Grupo de Nanjing les dijeron que trajeran los accesorios una vez que despejaran la instancia.
Al principio, Chai Rong no quería proteger a los jugadores de Nanjing. Él solo proporcionó un ambiente pacífico donde los polizones no se atrevían a matar porque serían castigados. Xiao Jitong fue quien propuso intercambiar accesorios por información, pero nadie estaba obligado a hacerlo. Luego, el Grupo de Nanjing instaló un tablón de anuncios en la plaza Xinjiekou para marcar todas las ubicaciones posibles de entrada a instancias. No ataron de manera directa las manos y los pies de los jugadores de la ciudad.
Fu Wensheng, era joven y no podía entender por qué quienes decían estar agradecidos, los traicionaron así.
Después de una noche de reorganización, Xiao Jitong tomó una decisión:
—De ahora en adelante, el Grupo de Estrategia y el Grupo de Nanjing se fusionarán. No ayudaremos a Nanjing, somos un equipo que existe solo para nosotros. No venderemos información ni publicaremos las ubicaciones de las entradas de las instancias. Chai Rong es el capitán y yo soy el vice capitán. Por supuesto, no tienen que preocuparse por las palabras del capitán. Solo escúchenme. Él es estúpido después de todo.
—¡Xiao Jitong! —replicó Chai Rong.
—Tenemos demasiada gente, así que ahora nos dividiremos en tres equipos —continuó el aludido, sin prestar atención a la protesta—. Yo, Chai Rong, el pequeño Qiao…
También nombró a Tang Mo y Fu Wenduo para que se acercarán, pero no tenían intención en quedarse. Dieron la vuelta para irse, pero se detuvieron cuando escucharon otra vez la voz masculina:
—Señor Tang, señor Fu, aún no he terminado un asunto… —Xiao Jitong sujetó a Fu Wensheng por el cuello y lo llevó hasta Fu Wenduo—. Ve tranquilamente con él.
—¡Capitán Xiao! —el niño abrió mucho los ojos.
—Es vice capitán —lo corrigió.
—Le dije a mi primo que quiero quedarme. Es muy fuerte y él y yo no nos hemos visto en mucho tiempo. Es mejor para mí quedarme ya que llevo aquí unos meses…
—Pero tu hermano es el que te salvó —El pequeño se quedó sin palabras—. Nuestro equipo no pudo luchar para salvarte. En mi caso, si tuviera que sacrificarte para salvar la vida de otros, te abandonaría. No eres solo tú. Si estoy en peligro, Chai Rong también me dejaría.
—¿Quién quiere salvarte? —murmuró Chai Rong.
—Capitán, lo abandonaré —Ningning dijo rotundamente.
—No tienes que ser tan positiva —Xiao Jitong tosió dos veces antes de continuar diciéndole al niño—: Pero tu primo es diferente. Si estás en peligro, él te salvará. Fue lo que pasó en el parque del lago Xuanwu. Así que por el bien de tu vida, ve con él. Si tuviera la oportunidad de que mis parientes aún estuvieran vivos, no dudaría en ir con ellos.
—Capitán Xiao, no tiene base para sus palabras. No tienes familia, así que, por supuesto, puedes decirlo casualmente —susurró el niño.
—Estoy seguro de que elegiría a mis seres queridos sobre el estúpido Chai Rong —Xiao Jitong respondió con calma.
—¡Tú…! —gritó Chai Rong.
—¡Capitán Xiao! ¡Hay alguien aquí que dice que es tu hermana!
La sonrisa en el rostro de Xiao Jitong se congeló de repente a Tang Mo le pareció graciosa su reacción, quiso no reír, pero no pudo resistirse ante las carcajadas de todos los presentes. La atmósfera de tristeza fue barrida en un instante.
Xiao Jitong se dirigió a la puerta. Quería ver cómo consiguió una hermana extra cuando era hijo único. Chai Rong y Ningning podrían dar testimonio de esto. El grupo lo siguió. Tang Mo también lo hizo, por aburrimiento, pero entonces…
—¿Quieres comprobar mi habilidad? —le susurró Fu Wenduo al oído, sonrió y extendió su mano derecha.
Se quedó atónito por un momento antes de comprender el significado. Se sentía un poco incómodo porque alguien los viera, pero para tener éxito, era mejor empezar temprano.
—Supongo que deberíamos saber tu habilidad por la noche —dijo luego de tomar la mano del polizón y caminaron juntos hacia la puerta.
—¡Primo! —exclamó una mujer.
—¡Hermano Xiao, realmente eres tú! —expresó un hombre.
—¿An Chu, Lu Xing? —Xiao Jitong estaba perplejo.
—El Circo Extraño —murmuró Fu Wenduo cuando notó a su compañero inquieto ante la mención de los nombres.
¡Qué mundo tan pequeño!, se dio la vuelta y tiró de Fu Wenduo.
Entre la multitud, Lu Xing alcanzó a ver una espalda familiar, era recta como un pino, era difícil olvidar una figura de un metro con noventa centímetros de altura.
—Oh, Dios mío, ¿señor A? —señaló con horror a Fu Wenduo.
El polizón se detuvo.
Los jugadores del Grupo de Nanjing, incluido Xiao Jitong, se volvieron para mirarlos.
—¡El señor B! —gritaron al unísono los recién llegados.
—Oh, Dios mío, ¿por qué el señor A y el señor B nos siguieron hasta aquí? —preguntó Lu Xing.
—Idiota, acabamos de llegar. Ellos ya estaban aquí —lo reprendió An Chu.
—Entonces, ¿quién es el maldito Fu Wenduo y quién es el maldito Tang Mo? —preguntó Lu Xing.
Tang Mo frunció el ceño, se preparó para explicarles la verdad, solo ocultaría el tema de la recompensa. Pero antes de que pudiera hablar, Fu Wensheng salió corriendo horrorizado.
—¿Qué Fu Wenduo? ¡Lo estás confundiendo con otra persona! Este es mi hermano. Se llama Fu Wenxian, no Fu Wenduo. ¡Él es Fu Wenxian!
—Ah, ¿él no es Fu Wenduo? La torre negra dijo que Fu Wenduo y Tang Mo fueron quienes completaron el juego —aclaró Lu Xing.
Fu Wensheng comenzó a sudar.
—¡Este es Fu Wenxian, Fu Wenxian! —chilló asustado el niño.
—Ja, ja, ja —se rieron los miembros del Grupo.
—Ya saben que tu hermano mayor es Fu Wenduo —explicó Xiao Jitong al ver la cara de desconcierto del pequeño—. ¿Olvidaste que en el parque del lago Xuanwu, Ningning gritó Fu Wenduo frente a todos?
Fu Wensheng se quedó sin palabras.
La mujer miró hacia un lado y fingió no saber nada.
An Chu no entendía por qué su primo y ese notorio polizón se llevaban tan bien. Contemplo a todos antes de posar ver a Tang Mo y Fu Wenduo. De repente, su mirada se posó en las manos apretadas de los dos hombres.
¿Qué es esto? ¿Una pareja gay?, pensó, incrédula.
Sentía como si hubiera aprendido algo impactante.
♦ ♦ ♦
La autora tiene algo que decir:
Mo Tang: Joder, es solo tomarse de la mano. ¿Los hombres no pueden tomarse de la mano sin ser homosexuales?
Hombres heterosexuales Xiao Jitong, Chai Rong, pequeño Fu, persona Yao y otros: ¡Sí, no!
Mo Tang: …
Amo al pequeño Fu negando todo