Burikko – Capítulo 77: ¿Recuperándose? – Q de Corazones (4)

Traducido por Maru

Editado por Ayanami


El silencio total, reinó en el interior de la base extremista.

En el camino nos encontramos a la niña con la muñeca de pólvora, pero eso fue una coincidencia, y no significa que el enemigo nos hubiera descubierto.

Uno de nuestros magos se llevó a la chica a un lugar seguro.

Estaba volando dentro del escondite enemigo, mientras buscaba, cuidadosamente, trampas como las de la mansión del conde Tito. Como parecía que iba a terminar pisando algo de nuevo, tenía demasiado miedo de andar por la zona…

—Me pregunto dónde acechan los extremistas.

Dentro del edificio que servía como sede extremista, nos dividimos en dos grupos. Para que los enemigos no pudieran escapar, ambos grupos ingresaron simultáneamente desde la parte delantera y trasera del edificio.

Me forzaron a formar parte del grupo de Achille. Los únicos que podían disipar la magia prohibida éramos nosotros dos, así que creía que sería mejor si nos movíamos por separado, pero…Achille no me soltó.

Nuestro grupo estaba entrando desde el frente.

Hice que todos los miembros del grupo de atrás, se hicieran tatuajes mágicos para repeler las artes prohibidas. Los hice de forma improvisada, por lo que solo podían anular un hechizo prohibido, una vez.

Justo después de que entramos en una pequeña habitación cerca de la entrada, salieron unos hombres que parecían magos.

— ¡Están aquí!

Todos tenían moretones negros en el cuello.

—Es el mismo patrón que en la niña… —dije.

Achille comenzó a congelar a los magos.

—Si deshacemos la magia prohibida en este momento, el consumo de maná será muy alto. Los congelaré por ahora.

—Buena idea. También haré eso.

Nuestros magos aliados comenzaron a congelar al resto. Cualquiera dudaría en lastimar a personas que podrían estar controladas por las artes prohibidas, ¿no?

Los magos del castillo eran muy talentosos, por lo que los magos “malditos” terminaron con sus movimientos sellados, rápidamente.

—Me pregunto si el líder de los enemigos, esta vez, es la heroína…

—Todavía no lo sabemos, pero si es ella, o alguien que puede usar artes prohibidas como ella, las cosas se pondrán problemáticas, ¿verdad?

—Tenemos que detenerlos…después de todo, es por eso que fuimos enviados en esta misión.

Para usar la magia para disipar las artes prohibidas, necesitabas conocimiento de dichas artes. Después de todo, disiparlos requería que siguieras los pasos del hechizo prohibido a la inversa y desentrañarlo.

Incluso si quisiéramos aumentar la cantidad de personal que pueda disipar las artes prohibidas, esta parte se convertía en un cuello de botella, por lo que, en este momento, no era posible.

Después de todo, se corría el riesgo de aumentar descuidadamente el número de personas que podían usar artes prohibidas.

Es por eso que Achille y yo, que podíamos hacerlo, estábamos acompañando a los soldados aquí.

Los que lanzaban los hechizos prohibidos usaban una gran cantidad de poder mágico, al igual que los que la disipaban, por lo que no era algo que pudieran lanzar tan fácilmente a muchas personas.

Pero…

La heroína vino a mi mente, y terminé en este estado de ánimo indescriptible.

¿Cuánto poder mágico tiene esa chica…? ¿A cuántas personas puede lanzar un hechizo prohibido a la vez…?

A diferencia de nosotros, la heroína tiene suficiente maná para que pudieras decir que se trataba de una trampa del juego.

—Camille, algo viene de nuevo…

Detuve mi pluma al escuchar la voz de Achille.

—Yo…como que tengo un mal presentimiento.

Podía escuchar los ruidosos pasos de varias personas que venían.

— ¡Caigan muertos, perros de los nobles!

Un número de hombres, que corrían más allá en el pasadizo, dispararon magia a la vez. Más magos enemigos. Parecía que los enemigos, esta vez, no tenían hechizos prohibidos. No había moretones en el cuello.

Incluyendo a estos tipos, ¿sumaban aproximadamente diez personas…? Eso coincidía con la cantidad de extremistas que se escondían en este edificio.

— ¡Escoria! ¡Déjanos atraparte en silencio!

— ¡Cierto! ¡Hacerle algo así a un niño! ¡Definitivamente no te perdonáremos!

Nuestros magos aliados se defendieron contra la magia enemiga, mientras enviaban réplicas. Debido al incidente un poco antes, su ira hacia los extremistas parecía haberse disparado también.

— ¡Tan descarados, malditos cerdos!

— ¡Cállate, basura! Ah, ¿qué tal si tú y Achille se dirigen primero? Haremos algo sobre estos tipos. Creo que, éstos, son básicamente todos ellos, pero aún podría quedar alguien dentro.

—Ah…sí… ¡Lo tengo, Achille!

—No puede ser que estés pensando que solo nosotros dos deberíamos ir, ¿verdad? Aunque no tenemos idea de lo que podría estar acechando allí.

— ¿Mmmmm…?

—Vámonos, después de que nos encontremos con los magos que vienen de atrás.

—Achille, eres demasiado cauteloso, lo sabes —repliqué.

—Eres demasiado despreocupada. Hay posibilidades de que los enemigos estén esperando para llevarnos a una trampa.

Fui empujada hacia un lado y Achille me abrazó con fuerza.

¡Hey, los otros magos nos verán, sabes!

— ¿A-Achille?

—Por supuesto que seré cauteloso…después de todo, tú también estás aquí.

Mientras decía eso, Achille disparó hábilmente un hechizo de comunicación.

En poco tiempo, algunos de los magos que habían dado la vuelta se reunieron con nosotros.

Parecía que en este momento había varios soldados corriendo por la entrada trasera para reunirse ahí. Tal parece que la recuperación de la ciudad está más o menos hecha.

Con esto, ya no teníamos que preocuparnos por los enemigos que podrían escapar, ¿verdad?

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

 

error: Contenido protegido