Lady Rose – Capítulo 7

Traducido por Nebbia

Editado por Ayanami

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Tras lo que pasó, Nika no tardó ni una semana en visitarme.

Nika, el hermano mayor del futuro Rey y la persona destinada a servirle, siempre me apoyaba a mí, la prometida de su hermano menor, a pesar de todos los problemas que tuve con el príncipe. Yo, en cambio, me dediqué única y exclusivamente a fortalecer mi posición en vez de forjar amistades con mis “compañeros” aristócratas o los personajes capturables. Pensándolo bien, era con quien mejor me llevaba más que con nadie en este mundo. Pero es bastante obvio que, desde la perspectiva de Nika, todo era distinto.

Por eso, puedo afirmar con total seguridad, que Nika no solo es un objetivo de captura, sino que, es una persona con un carácter fuerte e infinitamente bondadoso, quien siempre cuidó de mí. Aunque esté halagándolo, soy totalmente consciente que mi opinión se debe, en gran parte, a lo que decían sus admiradoras.

Y, pese a todo lo bueno que tiene Nika, su simple presencia puede poner en grave peligro mi vida como plebeya.

Eres parte de la familia real y tienes muchas ocupaciones. Y es que, no es solo eso, sobre todo hay un largo camino desde el castillo o la academia hasta aquí. No quiero que vuelvas a venir bajo ningún concepto…

—Ese noble aristócrata de pelo plateado que siempre te visita se ha enamorado de tí, Fii. Créeme, después de todo, eres una joven muy bella. —La propietaria de la panadería en la que trabajo, Michelle, malentendió la situación.

—Te equivocas, —Sentí un peligro inminente flotando en el aire y decidí arreglarlo antes de que fuera tarde. —El señor Nika viene solo por…obligación.

Nika siempre fue muy amable conmigo, pero solo porque era la prometida de su hermano menor…e incluso ahora, actúa solo por un sentimiento de culpa, pues vivo como plebeya por haber roto mi compromiso con el príncipe. También hay entremedio un sentimiento de justicia y uno de desagrado dirigido hacia Lily, este último es el que, probablemente, le hizo llegar tan lejos.

Aquí no hay sentimientos de amor, además de que me preocuparía de haberlos. Aunque no sea un tipo narcisista, como mi antiguo prometido, y tuve, de primeras, una buena impresión, el resto de las condiciones son absolutamente iguales. Si me decido a ir por su ruta, puedo despedirme para siempre de mi feliz vida de ciudadana.

—Creo que es más una preocupación de las que tendría una persona hacia su hermana menor. Lamento decepcionarte, pero, no hay una emocionante historia de amor de por medio.

—No es como si realmente me importara, pero, ¿Estás segura? —Michelle me sonrió con una pizca de superioridad, como queriendo decir que tengo muy poca experiencia en temas amorosos, como para realmente poder opinar.

Yo le devolví una sonrisa irónica. Lo siento mucho, porque no se cumplieran tus expectativas acerca de una apasionada historia de amor, pero no es más que la verdad.

— ¡Oh! Nika apareció nada más empezamos a hablar de él. Me agrada ese joven, incluso siendo noble, no es nada engreído y se preocupa mucho por los demás; siempre viene por las últimas horas y compra todo el pan que no conseguimos vender e, incluso, te manda a casa. Es obvio que tiene una gran multitud de puntos buenos.

Heh, es cierto, después de todo, Nika se presentó como un extraño aristócrata, no como parte de la familia real. Siempre se pone a un lado y trata de dejar a parte todos los modales propios de la nobleza, para no molestar ni a Michelle ni a los clientes. Solo por ese hecho, ya me era difícil pedirle que dejara de venir aquí.

En frente de la panadería, después de salir de un carruaje que no pegaba nada con este lugar, se paró una persona bastante familiar. No me queda otra que rendirme y esperar las consecuencias.

—Lo siento, no te estoy molestando, ¿Cierto? —Como siempre, nos miró a Michelle y a mí y, a pesar de que era un noble, nos hizo la pregunta con una voz preocupada.

¿Cuántos nobles son capaces de pedirles perdón a unos plebeyos con tanta facilidad? Personalmente, no creo que a los nobles haya que prestarles especial atención, me gustan las personas que se preocupan por otras sin tener en cuenta su estatus social ni otras posibles diferencias. Es una idea completamente normal que se viene a la cabeza de cualquier persona si uno, por un único segundo lo compara con el príncipe egoísta.

—Al contrario, justo estábamos hablando de lo respetuoso que eras. —Michelle, tampoco te lo niego pero, por Dios, ¡Ojalá no lo hubieras dicho! Es más, por la forma en la que lo dijiste, da la sensación de que Nika realmente es bienvenido aquí.

—Estoy honrado. —Al escuchar la típica respuesta de Nika me sentí muy aliviada.

Probablemente tenga que agradecerle a Dios de que fuera Nika y no un personaje de esos, que tienen la personalidad de un perro fiel, como Evan o algún otro personaje. De ser así ya no habría motivo alguno para risas.

De ser el tipo de jugador que se enamora perdidamente de los personajes de un otome y de no amar tanto el mundo del videojuego. Dejaría de lado esta situación de plebeya y le diría algo tipo —Señor Nika, ¡Quiero casarme con usted inmediatamente! —Pero no soy ese tipo de persona. Me gustan, absolutamente todos los personajes del juego, excepto el príncipe ese, pero, no andaré por ahí diciendo lo guapos y maravillosos que son. Al fin y al cabo, la realidad y el juego son muy distintas.

—Bueno, como tu novio vino hasta aquí solo para recogerte, deberías irte ya Fii.

—No, no tenemos ese tipo de relación y, además, mi jornada no ha acabado todavía.

—No te preocupes por eso, ya justo era la hora de cerrar y, encima, un apuesto aristócrata nos ha comprado todo el pan restante. Venga, que quedan solo diez minutos hasta el fin de tu jornada, vete ya. —Mientras me lo decía no dejaba de sonreír con pillería. Literalmente, me estaba echando de la tienda.

Detrás de mí iba Nika y sus escoltas que llevaban las bolsas con el pan que ha comprado. Un noble y sus escoltas llevando pan de una simple panadera, qué irónico parece todo, ¿No?

— ¿Ocurre algo?

—No realmente, es solo que…me estaba preguntando ¿Qué haces con todo ese pan?

—Jaja, el pan se hace para ser comido, ¿No es así?

—Sí, ¿Verdad? Como ese pan lo hicieron unos plebeyos es completamente normal tirarlo a la bas…espera, ¿Qué?

— ¿Qué me acaba de decir este noble?

A pesar de que pagará dinero por él, pensaba que lo tiraba. Estaba totalmente preparada para oír una respuesta totalmente decepcionante. Pero no.

— ¿Significa eso que se lo das a tus guardias y sirvientes?

—No. Les permito comprobar si hay veneno porque, al fin y al cabo, es su deber pero, soy el único quien se lo come. Me encanta ese pan plano de queso.

— ¡Ay! Esa nobleza…

Me había olvidado por completo de mi maravillosa actuación, me giré hacia los guardias pensando en decir algo tipo: — ¡Hey! ¿Qué es lo que se supone que estáis haciendo? ¡Paradlo ya! —Ambos movieron su cabeza en gesto de negación con una cara que, de por sí, decía que se habían rendido.

Por el amor de Dios, me podéis explicar ¿por qué os rendís? Eso es incumplir vuestro trabajo, ¡Vergüenza debería daros!

¡Oye! Venir cada semana a verme es extremadamente peligroso, así que para ¡Detente, por favor!

— ¿Pasa algo, Fii?

—…No es nada. Me alegra mucho que te guste la comida de nuestra panadería.

Tenía muchísimas ganas de decirle un “¡Debería de ser yo quien te preguntase eso!” pero, decir algo así en frente de la persona misma a la que va dirigido es demasiado, por ello me tocó tragarme mis propias palabras y sonreír gentilmente.

—Me pregunto si en un futuro también aprenderá a preparar pan, ¿Eh, Señorita Fii? Estaré esperando con ansias ese momento.

Le sonreí, hasta notar un leve dolor de tanto esfuerzo, hacía todo lo posible para ignorar tanta esperanza.

Nika, de repente, tu personaje habitual se desdibujo ¿Estás bien? El carácter del perrito le pertenece a Evan y la del imbécil a Su Alteza Egoísta. No tienes por qué simularlos. Con esa apariencia de fría belleza y una alucinante aura caballeresca, ¿Por qué intentas parecer tan suave y dulce? ¿No será que actúas así por el estrés?

Dejando de lado mis preocupaciones, el segundo príncipe comenzó una conversación sobre pan. Me pregunto, ¿Qué es lo que intenta conseguir realmente?

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