Príncipe Cautivador – Capítulo 45: De regreso a la capital, la actitud poco clara del Emperador

Traducido por Akatsuki

Editado por Sakuya


El clima en la capital era particularmente bueno. El sol estaba en lo alto del cielo sin ninguna nube alrededor.

— ¿Es cierto que el Príncipe Heredero volverá hoy a la capital? ¿Por qué aún no lo hemos visto? —Dijo un hombre mientras los demás golpeaban sus zapatos de vez cuando.

—S-sí, ¿por qué no hemos visto al Príncipe Heredero? No lo sabía antes, pero… ¡Resulta que el Príncipe Heredero es muy capaz! —Dijo una mujer entre la multitud.

— ¿Cómo es el Príncipe Heredero? Anteriormente escuché a otras personas decir que era débil y cobarde, pero ahora sé que eso era solo un rumor. El Príncipe Heredero es muy atractivo… —Unas mujeres se encontraban hablando entre sí.

Los logros de Shang Wu Xin en la ciudad de Feng Zhou eran conocidos. Además, los ciudadanos escribieron un libro lleno de agradecimientos por su ayuda y la enviaron a la capital. La forma en que lo retrataban era como si fuese un salvador enviado por dios.

Antes, no importaba si era la hija de un oficial de la capital o de un comerciante, ninguna mujer estaba dispuesta a casarse con él. Pero ahora, después de escuchar cada rumor acerca de las capacidades y las habilidades del Príncipe Heredero y del cómo después del banquete de su cumpleaños, trabajó tan duro para ayudar a las demás personas. Tales noticias hicieron que las mujeres se interesarán en conocer al Príncipe Heredero, e incluso, había mujeres que deseaban casarse con él.

En el interior de la torre de la Capital, se encontraba sentado el Emperador. Mientras que los ministros estaban en el exterior, sabiendo de la conmoción que el Príncipe Heredero no solo fue en la capital.

El emperador personalmente había venido a recibir al Príncipe Heredero, un gesto que solo se hacía cuando los generales volvían victoriosos de una batalla, un privilegio que un Príncipe nunca recibiría. Sin embargo, este Príncipe Heredero fue el primero en recibirlo.

— ¿Por qué el Príncipe Heredero no se ha presentado? ¿No sabe qué, Padre Imperial lo está esperando? —Shang Chen Zhao se quejó, él se había quedado en la capital para divertirse en Xiao Cui, el burdel más grande de la capital. Sin embargo, recibió un mensaje del palacio que le obligaba recoger al Príncipe Heredero. Si no fuera por la presencia del Emperador, él ya se hubiese retirado.

Nadie se atrevía a responder las quejas de Shang Chen Zhao. Antes, ellos habían calumniado al Príncipe Heredero por su incompetencia frente al Emperador. Poco después, se enteraron que el Príncipe Heredero era un tigre que se encontraba dormido. Incluso si la actitud del Emperador hacia él era desconocido, el General Leng y el Joven Maestro Huan estaban a favor del Príncipe Heredero, con tal apoyo, ¿Quién se atrevería a subestimarlo?

Nadie se atrevía a mirar al Emperador, quien se encontraba sentado detrás de la cortina imperial. En ese momento, “¡El Príncipe Heredero!” No se sabía quién gritó aquellas palabras, pero luego vieron un grupo de soldados que se acercaban lentamente hacia la capital. No obstante, en aquel grupo no se encontraban el Príncipe Heredero, el famoso General Leng ni el Joven Maestro Huan de la ciudad de Zhejiang.

Varios soldados se acercaban lentamente hacia la entrada de la ciudad, y en medio de la formación, se encontraba un carruaje. Esto claramente significaba que el Príncipe Heredero se encontraba ahí. Aunque muchas personas no estaban satisfechas con la actitud del Príncipe Heredero, pero luego de ver como el General Leng y el Joven Maestro Huan lo acompañan, nadie se atrevía a quejarse delante ellos.

Cuando los soldados se detuvieron en la entrada de la ciudad, toda la atención se centró en el carruaje, cuando este se abrió y al ver salir un hombre vestido con una túnica azul, el rostro de muchas mujeres se tiñó de rojo. Este hombre era el Primer Joven Maestro de la capital, Huan Mo Che. Él tenía un hermoso rostro y la túnica azul que vestía, estaba bordada con hilos dorados que le daban un aspecto brillante, mientras que entre sus blancos dedos sostenía un abanico Jiang Zhuang.

Huan Mo Che sonrió suavemente mientras bajaba del carruaje. Y tras él salió otro hombre, esto hizo que los ministros se sorprendieran. Nadie esperaba que el General Leng acompañará al Príncipe Heredero dentro del carruaje. Parecía que la relación entre ellos era muy buena.

Leng Yu Feng llevaba un chaleco negro que se ajustaba a su cuerpo y mejoraba todas sus características faciales, con un temperamento frío, cada paso que daba traía una presión inexplicable que dificultaba respirar a muchas personas.

— ¡Es el General Leng! —Gritaron las personas.

— ¡Finalmente he visto al Joven Maestro Huan! —Se oyó a una mujer.

En ese momento, tanto Leng Yu Feng como Huan Mo Che, que se habían bajado, estaban parados a ambos lados de la puerta sujetando la cortina del carruaje. Normalmente esto lo haría uno de sus subordinados, pero que lo hicieran ellos, los sorprendió a todos. Entonces, una figura surgió del carruaje y todas las personas que lo vieron quedaron sorprendidos.

Su piel era blanca como la nieve, sus cejas estaban ligeramente levantadas al final, tenía una nariz refinada y sus labios estaban perfectamente formados. Especialmente sus ojos que brillaban como un par estrellas, revelando sabiduría y confianza, un aura perteneciente a un verdadero noble. Su larga cabellera estaba sujeta con una delicada corona de jade blanco en la parte superior de su cabeza. Sus rasgos eran tan hermosos que el vestir una túnica ordinaria no le afectaría en absoluto.

Dejando a la multitud detrás, caminó hacia la torre. Las mujeres que lo vieron se habían convertido en idiotas y estaban obsesionadas con su apariencia, ellas seguían ahí esperando verlo una vez más, solo para darse cuenta de que ya se había retirado.

Su misterio dejó a mucha gente obsesionada con él. Al mismo tiempo, un hombre vestido con una túnica roja, que se encontraba sentado en el segundo piso de una casa de té, también miró la apariencia del Príncipe Heredero, y sus ojos demostraban estar llenos de pensamientos.

—Wu Xin… Xin Er… —Una voz incomoda salió de los labios del hombre con túnica roja, él solo podía pronunciar este nombre a sus espaldas. Después de terminar sus asuntos, estaba listo para partir a la ciudad de Feng Zhou en busca de Wu Xin, pero, no fue, ya que necesitaba algo de tiempo para calmarse. Por lo que, en estos últimos días, había soportado y reprimido su afán por encontrar a Wu Xin.

Han Xuan Hao era una persona inteligente, pero aterradora. Nunca antes había experimentado el amor. Sin embargo, después de analizar sus sentimientos, sabía que no le gustaba el Príncipe Heredero ni estaba interesado en él. Pero esa sensación de amor, incluso si la otra parte era un hombre, incluso si es muy obvio, el Príncipe Heredero era de sangre fría. Él no podía enamorarse de un hombre tan joven.

—Xin Er, dime ¿qué debería hacer? —Susurró Han Xuan Hao mientras observaba una figura ingresar en el interior de la torre, solo esta figura podía hacer que su corazón se sintiera cálido.

Shang Wu Xin, Leng Yu Feng y Huan Mo Che caminaron hacia la torre, cuando llegaron, los tres se inclinaron en saludo:

— ¡Saludos al Padre Imperial! (SWX)

— ¡Saludos al Emperador! (LYF & HMC)

Nadie se atrevía a imaginar cómo era la expresión del Emperador dentro de la berlina imperial cuando los felicitó, todo lo que pudieron escuchar fue solo su fría voz: —Príncipe Heredero, lo has hecho muy bien. Estoy muy satisfecho. En el palacio vespertino se encuentra un banquete para el Príncipe Heredero, el General Leng y el Joven Maestro Huan.

Nadie pensó que después de haber logrado un logro tan grande, siguiera siendo tratado con la misma frialdad. Esto confirmó el hecho de que el Príncipe Heredero no era favorecido por él. Los demás príncipes lo miraron con regodeo, mientras que Leng Yu Feng y Huan Mo Che lo miraban con preocupación, pero el Príncipe Heredero seguía ahí conservando su orgullo. Parecía que la actitud del Emperador no le molestaba en absoluto.

Luego de esto, el Emperador se retiró de la torre. Muchos funcionarios que estuvieron presentes no sabían si felicitar al Príncipe Heredero o no. Aún no lo habían decidido, hasta que el Príncipe Heredero dejó la torre y regresó a su propia residencia.


*Er: Similar al ‘-chan’ en japonés para personas cercanas a uno o si el hablante se refiere a otra persona más joven que él/ella

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