Reencarné en una mujer egoísta – Capítulo 20: La Unión de Cooperación es un lugar peligroso

Traducido por Devany

Editado por Sakuya


—Persona con la ficha número 52, por favor pasé al mostrador~ —Una alegre voz femenina resonó desde el interior.

¿Un banco…?

Cuando crucé la puerta de la Unión de Cooperación, noté que el interior de este había cambiado por completo.

Umm… no habré entrado al edificio equivocado, ¿verdad?

Miré a mi alrededor, buscando alguna señal que dijera que estaba en otro edificio, pero sorprendentemente, había entrado al correcto.

Ver su apariencia actual me hizo recordar la típica frase que dan las personas antes de tener un cambio radical, solo que aquí sería algo como “Chico, obsérvame atentamente, cuando nos volvamos a ver, durante estos tres días que estaré lejos, te sorprenderé” ¿se entiende?

Probablemente trabajaron muy duro. Podías ver los rastros del extraordinario esfuerzo y entusiasmo que habían puesto en ello ¿o tal vez se deba más al rencor que tenían todos sobre su forma pasada? Después de todo, no olvidemos que la señorita recepcionista estaba en su límite. Seguramente no solo ella guardaba esos sentimientos, tal vez fue eso lo que ocasionó este cambio tan drástico.

La apariencia desordenada y la larga fila que vi en mi visita anterior, habían desaparecido por completo. En su lugar, detrás de cada mostrador, se encontraban trabajando muchas recepcionistas con sonrisas en sus rostros. Como se esperaba, no consiguieron sofás de sala de descanso, pero si hicieron caso a la mesa con sillas donde uno puede llenar sus papeles antes de acudir a recepción. Si tuviera que describir la apariencia de esto, diría que es un banco. Aunque resultó de esta manera debido a mis sugerencias, no podía evitar estar impresionada del enorme cambio.

—…rita Ena.

De repente, mientras pensaba donde tenía que ir para conseguir una ficha, sentí como alguien se estrellaba contra mí y no pensaba soltarme. ¿¡Qué era esto!? ¿¡Una anaconda!? Podía sentir como presionaba todos mis huesos, rompiéndolos uno por uno. ¡Pensar que sería atacada en la Unión de Cooperación! ¡Era este el peligro del que Berta hablaba!

Ouch Ouch Ouch… Me rindo… mi espíritu, se libre.

—¡¿Eh?! ¡¿Señorita Ena?! ¿¡Estás bien!?

Cuando la presión fue desapareciendo, empecé a temblar en busca de aire. Ataques continuos sin dejarme respirar… la Unión de Cooperación era un lugar en el que había que tener cuidado, después de todo…

—¡Qué estás haciendo! ¿Estás tratando de matar a nuestra benefactora!

—¡No lo hago! ¡Solo la abracé un poquito por gratitud!

La mujer y el hombre comenzaron a pelear frente a la agotada yo.

El hombre era el jefe de la Unión de Cooperación. Y la mujer era, naturalmente, la recepcionista, Clara. O debería decir, la aterradora encarnación de una serpiente, ¿probablemente?

Dieter se acercó a mí con ansiedad, soltando varios gruñidos. Quizás no pensó que la mujer frente a nosotros, frágil en apariencia, podría causarme tanto daño, por lo que se estaba disculpando.

—Estoy bien. Mis huesos no parecen estar rotos.

—¡Qué cruel eres señorita Ena! ¡Un abrazo tan ligero con estos delgados brazos no puede romper huesos!

Clara protestó mientras mostraba sus brazos. Fijé mi mirada en ellos, el brazo de Clara era ciertamente delicado, lo que me hacía preguntarme dónde se escondía esa inmensa fuerza de serpiente. Tendré especial cuidado con ella, no quisiera tenerla de enemiga.

—Clara, si quieres, come esto con todos.

En primer lugar, la soborné con un rollo suizo. Era algo que traje para todas las hermanas recepcionistas que trabajaban bajo tanto estrés. Ah, pero ¿no se acostumbraba a dar licor a las serpientes? ¿Mi error?

—¡Maa, muchas gracias! ¿Es comida?

—Sí, es un pastel. Lo siento, debería haber traído licor…

—¿Licor? Nada de eso. ¡Por supuesto que estoy más feliz con el pastel! Los dulces son artículos de lujo, así que no todos los días podemos comerlos.

Me alegro. No pude complacer a la “encarnación de una serpiente” que se esconde dentro de Clara, pero al menos obtuve puntos con su yo de ahora, como se esperaba, las mujeres son débiles ante lo dulce.

—¿Estás realmente bien? Para recibir algo tan precioso. Aunque nosotros, la Unión de Cooperación, deberíamos devolver el favor que hemos recibido de usted.

—¡Cierto! Estábamos pensando en mostrar nuestra gratitud, pero recibimos un regalo como este… Además, lamento haber puesto demasiada fuerza hace un momento…

Clara bajó la cabeza en tono de disculpa.

—No, no hice mucho. Solo señalé una idea que tuve.

—No, ¡no ves cuánto has ayudado a todos gracias a esa idea! Si la situación con la multitud continuaba, eventualmente se convertiría en un gran problema. Incluso podría haber influido en el orden público de la Capital Real. Estoy muy agradecido.

—Señorita Ena, en nombre de las recepcionistas de la Unión de Cooperación, le agradezco. ¡De verdad muchas gracias! A medida que las mejoras que realizamos sean conocidas alrededor del país, ¡tal vez incluso pueda recibir una carta de agradecimiento del Rey!

¿Eh? ¿Una carta de agradecimiento del rey? ¡Eso sería malo! Hay muchas personas que me conocen en el palacio real, estaría en problemas si me descubren.

Antes del matrimonio, mi abuela era una de las hermanas pequeñas del ex rey, y la esposa del rey a menudo me invitaba, así que frecuentaba mucho el palacio real. Aquel lugar fue como un pequeño refugio para la pequeña Amalie que buscaba alejarse de su madre.

—¡¿Eh?! ¿Acaso informaste sobre mí?

—No, por lo general, la Unión de Cooperación es una organización independiente no relacionada con el país. En realidad, no tenemos ninguna obligación de informar, pero debido a que esto afecta el orden público, hemos informado sobre los problemas y cómo mejorarlos. No, parece que el propio país se sorprendió, así que es probable que quieran saber a detalle sobre nuestras propuestas y el cómo llegamos a estas.

¡Bueno! ¡Parece que todavía no informaron sobre mí!

—Sobre eso, ¿podrías no mencionar que fui yo quien lo sugirió? No me gusta destacar tanto…

¿Qué estoy diciendo con una máscara con orejas de conejo? Podrá parecer extraño, ¡pero es mejor prohibirles de una vez hablar sobre mí! En el palacio real se encuentra el señor Christhard… mi padre también está ahí.

—Fumu, si quieres que nos quedemos callados lo haremos, pero ¿estás bien con eso? Ellos podrían recompensarte ¿sabes?

—¡Es cierto, es un desperdicio!

—No, por favor, es lo único que les pido.

Los dos quedaron desconcertados por mi firme rechazo, pero de alguna manera estuvieron de acuerdo. Terminado el tema, pasamos a hablar del que de verdad me interesaba, el lugar en donde se llevaría a cabo el curso corto de magia.

—Es aquí.

El lugar al que me condujeron era un típico salón de clases con escritorios y sillas alineados. Varios participantes ya estaban en el aula, así que decidí tomar asiento también.

—Sentimos la demora, ¡en este momento comenzaremos el curso corto de magia para principiantes! La mayoría de las personas aquí ya pueden usar algo de magia básica, ¡pero en este curso les enseñaremos todo desde el principio!

Primero, el jefe de la Unión de Cooperación nos dijo lo habitual: 『Para usar la magia tienes que…』como repaso.

Los estudiantes parecían aburridos, verlos así solo aumentaba mis ganas de querer gritarles, ¡esto era sumamente importante! ¡Será peligroso si no escuchas! ¡De hecho, ya lo era!

Y luego, después del breve repaso sobre el uso de la magia y su historia, pasamos a hablar sobre magia básica. La magia no tenía una forma fija, su apariencia y poder varía dentro de cada uno de nosotros, puesto que se manifestaba de la nada, alterando la física frente a nuestros ojos.

Algo de la nada… ¿era realmente así? Aunque no podamos verlo, no era como si el fuego o el agua no estuvieran aquí. Después de todo, ¿no se supone que hay componentes en el aire? ¿No sería que tomamos estos para producir poder mágico? Aunque, pensándolo bien, sería un grave problema si todas las personas tomaran a la vez demasiada cantidad de fuego y agua del aire, no sobreviviríamos… así que, tal vez, si estábamos creando poder mágico de la nada.

De verdad, ¡la magia era increíble!

Pero, entonces, ¿qué sucede cuando queremos que algo deje de existir? Cosas como apagar el fuego o secar el agua. En esos casos, ¿a dónde van las cosas que desaparecen?

No parece que vuelvan al poder mágico. Por el contrario, probablemente desaparecerlas solo consume más poder mágico.

U~n, ya veo, ¿no sería borrar algo, sino “Cambiar algo frente a mí con poder mágico”? ¡Cuanto más lo pienso, más misteriosa se vuelve la magia! ¡Espero aprender mucho de ahora en adelante!

Una respuesta en “Reencarné en una mujer egoísta – Capítulo 20: La Unión de Cooperación es un lugar peligroso”

  1. Muchas gracias 🤩🤩🤩🤩🤩ya quiero saber que van a pensarlo todos cuando sepan que uso la magia de barrera dimensional 🤩🤩🤩🤩🤩

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

 

error: Contenido protegido